Salí del Padre y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo y voy al Padre. Pero confiad, yo he vencido al mundo. No os dejaré huérfanos. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; voy, pues a preparar lugar para vosotros. (Jn 16, 28,33; Jn 14, 18, 2)