Pelayo, un señor cristiano durante la Reconquista, rescata a una mujer musulmana llamada Isabela de la muerte y huye con ella a caballo. En el camino se encuentran con una niña siendo atacada por un lobo y la rescatan. Más tarde, siguen el consejo de una voz misteriosa y toman un camino amarillo donde se encuentran con personajes extraños como un león, un espantapájaros y un hombre de hojalata. Al final del camino encuentran una casita abandonada donde deciden vivir juntos

1. “UN PELAYO DE CUENTO”
Érase una vez en Al-Andalus, entre los siglos IX-XII, en la época de la
Reconquista un señor, Pelayo, que inició el avance en tierras musulmanas.
En una de las guerras para conquistar territorio, conoció a una bella mujer
musulmana que intentaba escapar para no morir. Pelayo, aunque estaba en el
bando contrario, pensó en ayudarla ya que se había enamorado de ella.
La subió en su caballo blanco y huyó junto a ella a un lugar donde pudiese
estar segura. La mujer llamada Isabela le preguntó por qué hacía esto, que
no debería estar allí, sino luchando.
En el camino se encontraron cosas bastantes raras, como a un lobo
intentándose comer a una niñita que se dirigía a casa de su abuelita a
llevarle unos pasteles, estos la rescataron
y la subieron a su caballo.
Más tarde, se encontraron tres caminos
por donde podían seguir, mientras tanto
escucharon una voz que les decía:
"deberíais ir por el camino de baldosas amarillas”. Pelayo hizo caso a la voy y
se dirigió por ese camino. Se encontraron con un león, un espantapájaros y
un… ¡Un hombre de hojalata!, cosa muy extraña en aquellos tiempos.
Al final del camino se encontraron una casita en la que no habitaba nadie,
por lo cual se quedaron allí a vivir. Pasaron toda su vida juntos, se casaron,
tuvieron hijos y fueron felices.
IRENE ROSALES OCAÑA 2ºC