El saltar la cuerda se remonta a 1600 a.C. cuando los egipcios usaban lianas. En los 1940s, los niños usaban cuerdas mojadas de ropa para saltar. Saltar la cuerda mejora la salud cardiovascular, fuerza muscular y flexibilidad. También mejora el equilibrio, coordinación, velocidad y resistencia. Récord mundiales incluyen 1264 millas saltadas por un hombre en 1963 y 120,115 personas saltando juntas en Suecia en 1991.