1. Nº 70, Diciembre 2015 -Elabora: Familia Franciscana - Edita: O.F.S. Andalucía - Colabora: Dibujos religiosos para niños Fano
Buenagente
San Francisco de Asís
El
Publicación sin ánimo de lucro
2. Sois los dueños de la Sonrisa
La vida es para hacer cosas lindas, cosas grandes. A la vida le podés mirar la parte buena o la parte mala. Si le ves
las cosas buenas, y ves la posibilidad de ir adelante, vas a ser feliz. Si te encerrás, te quedás solo, no jugás con tus
compañeros, no te reís, la vida va a ser muy difícil. Ustedes son los dueños de la sonrisa. Los grandes ya tenemos la
sonrisa con cicatrices. Ustedes tienen la sonrisa limpia, con ella vayan adelante y enséñennos a reír de nuevo, a ser
hombres y mujeres con alma de chicos”.
Papa Francisco
3. Inés
Grupo de San Francisco
Acabamos de empezar el Adviento, esas cuatro semanas que vivimos antes de la Navidad.
Pero, ¿qué significa el Adviento para nosotros? Esta palabra quiere decir “venida”, lo que nos recuerda que Jesús está a
punto de venir de nuevo al mundo y a nuestros corazones. Para los cristianos, acoger a Jesús en Navidad es muy
importante, no podemos hacerlo de cualquier manera, y por eso necesitamos prepararnos. Eso es lo que significa el
Adviento: es el tiempo que dedicamos a preparar nuestro corazón, a cambiar lo que sabemos que no hacemos del todo bien
con los demás y que Jesús nos pide que hagamos a su manera: amando a los demás y transmitiendo su alegría.
Para recordarnos todas estas actitudes que queremos trabajar durante el Adviento, los cristianos tenemos un símbolo, que
se utiliza desde hace mucho tiempo, la Corona de Adviento.
La llamamos corona porque tiene forma circular: no tiene ni principio ni fin, como el amor de Dios hacia todos los hombres.
Dios nos quiere siempre, seamos como seamos. Y eso mismo estamos llamados a hacer nosotros con las personas a las
que convivimos: a quererlas de corazón, sin importarnos que seamos diferentes, pues todos somos hermanos.
Y en esta corona se van encendiendo 4 velas, una cada domingo hasta llegar al día de Navidad. Las velas nos gustan,
porque son cálidas, nos dan luz, igual que hace Jesús en nuestra vida. Y esas velas son de distintos colores, que no se han
elegido al azar. Cada uno nos recuerda una actitud importante en este tiempo. La primera vela que se enciende es azul o
morada, lo que simboliza que durante estas 4 semanas estamos esperando, vigilantes y con ganas de cambiar; la segunda
vela es verde, color que representa la esperanza; la tercera es de color rosa, símbolo de la alegría porque sabemos que
Jesús pronto estará con nosotros; la última, que se enciende el último domingo, justo antes de Navidad, es blanca y es el
símbolo de la presencia de Jesús en el mundo.
Ahora, cada vez que encendamos una de la velas de la corona, sabremos que no es un signo vacío, sino que queremos ir
avanzando en cada una de estas semanas, comprometiéndonos a cambiar, a esperar con alegría para que Jesús nazca en
un mundo mejor, que empezamos a construir nosotros.
4. Pedro o.f.s.
Grupo de San Francisco
Fraternidad de Málaga
Mis pequeños amigos del Buenagente...
Un fuerte y esperanzador abrazo para vosotros.
El Adviento es un tiempo litúrgico que comenzamos a celebrar estos días y en el que la Iglesia nos invita a preparar la
venida del niño Jesús a nuestro mundo, a nuestras vidas, y a ser conscientes de muchas cosas. Os cuento:
-Es tiempo de conversión, de cambio. Hay que mejorar, crecer y sacar la mejor versión de nosotros mismos. Todo lo
bueno que tenemos dentro hay que dejarlo salir, para que los demás lo aprovechen. Porque los dones que Dios nos ha
dado no debemos esconderlos.
-Si cambiamos para mejor, estaremos más alegres. Estad alegres y abrid vuestro corazón a la esperanza. Tenemos que
prepararnos para la gran fiesta de la Navidad y por ello la tristeza ha de quedarse en la basura. Que sea la esperanza la
que inunde nuestro comportamiento.
-Y que sea María nuestro ejemplo de fe, de esperanza y de confianza. Como lo fue junto a Jesús durante toda su vida.
María aceptó con alegría los planes que Dios tenía para ella, y eso mismo es lo que tenemos que hacer nosotros.
Tenemos que descubrir lo que Dios quiere de nuestra vida y llevarlo a cabo con valentía, constancia y esfuerzo. ¿Que
cómo se descubre eso?... sacando lo mejor de nosotros mismos… y así volvemos otra vez al punto primero. Hablad con
vuestros padres y con vuestros catequistas para que os ayuden a prepararos para el Adviento.
-Preparad su camino, el camino de Jesús niño, vuestro camino, nuestro camino.
Un fuerte abrazo de Paz y Bien.
