1. Hola, les quiero contar una historia, es mi historia, y hoy la quiero compartir con ustedes... Hace más o menos 12 años, conocí a una “niña”, muy simpática y alegre, de la cual, con el paso del tiempo y sin saber como ni por que, me enamoré.
2. Ella jugaba Voleibol, al igual que yo, así nos conocimos y en Junio de 1997, comenzamos a pololear. Era un hombre muy feliz...
3. No puedo decir que todo fue color de rosa, pero pudimos salir adelante. Nos reímos y lloramos juntos... El tiempo pasó y en Octubre de 2001 llego el momento de unir nuestras vidas...
4. Fruto del amor que nos unió, llego a nuestras vidas el 25 de Junio de 2003 nuestra primera hija: Antonia Fernanda Guerra Rojas
5. Luego, el 23 de Marzo de 2006, nos llenó de dicha nuestra segunda hija: Constanza Estefanía Guerra Rojas
7. Pero no todo es para siempre, o por lo menos eso parece. Hace unos días, de común acuerdo, hemos decidido darnos un tiempo y con Nena, nos vamos a separar y ver si es que con el paso del tiempo todo se puede reiniciar o se da un punto final definitivo a nuestra relación.
8. No quiero compasión, ni tampoco culpar a nadie. En una relación de pareja, siempre hay dos culpables. Yo no supe ver sus señales y darle lo que necesitaba, y ella, a lo mejor no supo entender mis problemas y complicaciones
9. Solo quiero pedir su comprensión y apoyo en estos momentos que son difíciles, pero que ya hemos conversado y la decisión es de ambos. Esto se los cuento, por que son mi familia y las personas que considero mis amigos.
10. Les pido disculpas a todos, muy especialmente a ella, por no haber podido poner mas de mi parte y poder mantener viva la llama en nuestro matrimonio. Siempre la amaré a ella y a mis hijas, quienes fueron, son y serán mi razón de vivir.