2. Los hombres hasta los 20 años: Son como los aviones de papel Son lentos, inestables, de corto alcance y duración
3. El hombre de los 20 a los 30 años: Es equiparable a un caza militar Siempre esta a punto, 7 días por semana. Ataca cualquier objetivo. Es capaz de ejecutar varias misiones separadas por cortos intervalos de tiempo.
4. De los 30 a los 40 años: Es como una aeronave comercial de vuelos internacionales. Opera en horario regular. Destinos de alto nivel. Vuelos largos, con raros sobresaltos. La clientela tiene grandes expectativas y al final llega cansada pero satisfecha.
5. De los 40 a los 50 años: Es como una aeronave comercial de vuelos regionales Mantiene horarios regulares. Destinos bastante conocidos y rutinarios. Pero no siempre sale en el horario previsto, o tiene fallas técnicas que irritan a la clientela.
6. De los 50 a los 60 años: Es como una aeronave de carga Necesita mucha preparación y atención antes del despegue. Una vez en el aire, maniobra lentamente, proporcionando poco confort durante el viaje. La clientela esta compuesta por paquetes y fardos diversos.
7. De los 60 a los 70 años: Es como el Ala Delta Exige excelentes condiciones externas para volar. Da mucho trabajo conseguir el despegue y una vez en el aire evita las maniobras bruscas para no caer antes de tiempo. Después del aterrizaje conviene guardar cuidadosamente el equipamiento.
8. De los 70 a los 80 años: Es como un planeador. Solo vuela muy eventualmente y con ayuda para levantar el vuelo. El repertorio de maniobras es extremamente limitado. Una vez aterriza, necesita ayuda para volver al hangar.
9. Después de los 80 años: Es como un modelo a escala. Una antigüedad inservible que a duras penas se usa de adorno
