1. LOS MUNDIALES
El primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la
idea de del francés Robert Guérin y del holandés C. A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario
general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la
presentación del reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos
distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta
iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de CristEl primer antecedente en la creación de un torneo
internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C.
A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de
Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del reglamento de un torneo que
incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como
sede de la fase final del torneo con los ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún
país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de Cristiana (Oslo) la posibilidad de que la FIFA organice el
campeonato tan ansiado. Nuevamente la falta de apoyo y la Primera Guerra Mundial frustraron esos
esfuerzos. Pese a ello, los Juegos Olímpicos celebrados en la cuidad belga de Amberes, seis años
después, comprobarían la gran afición al fútbol y la predisposición favorable de las asociaciones a
colaborar con sus selecciones.
Los Juegos Olímpicos de Paris en 1924 fueron un éxito rotundo. La participación de la selección
uruguaya fue espectacular, ganando la medalla de oro de forma impecable por sobre veintiún
representaciones nacionales. La final disputada entre Uruguay y Suiza en el estadio de Colombes,
registró una entrada de 50.000 espectadores.
Nace el Mundial
En 1926, Jules Rimet como presidente de la FIFA presidió el nombramiento de una comisión que
estudiaría la posible realización de una Copa del Mundo. La propuesta no sería expuesta hasta la
realización de las olimpiadas de Amsterdam dos años después, pero la decisión final tendría que esperar
al congreso realizado en Barcelona el 18 de mayo de 1929. A diferencia de los Juegos Olímpicos, en
donde sólo pueden participar jugadores amateurs, esta nueva competición estaría abierta a todos los
jugadores sin distinción: amateurs y profesionales; de forma que las naciones participantes podrán
contar con todo su potencial futbolístico disponible.
La medalla de oro lograda por Uruguay en 1928 en Amsterdam confirmaría su supremacía en el fútbol
mundial, y lo haría merecedor de ser el elegido por el congreso de Barcelona en ser sede del primer
Campeonato Mundial de fútbol. Los uruguayos se comprometieron con la construcción de un estadio que
albergue a 108.000 espectadores, que llevaría el nombre de Estadio Centenario por coincidir con la
celebración del centenario de su organización constitucional.
La primera Copa del Mundo se celebró en Uruguay en 1930, y el escultor francés Abel Lafleur fue
designado para la elaboración del trofeo, que a partir de 1950 fue denominado Copa Jules Rimet en
honor al gran precursor de esta competición. Esta estatua, hecha de plata fina y oro puro, pesaba 3.8
kilogramos y media 35 centímetros de altura, y representaba a la Diosa de la Victoria extendiendo
ambos brazos para sostener una copa de borde octagonal en una base de piedras preciosas (lapis lazuli)
que tenía una placa de oro en cada uno de sus cuatro lados, en donde estaba grabado el nombre del
trofeo y de cada uno de los ganadores de los Mundiales disputados entre 1930 y 1970. La Copa Jules
2. LOS MUNDIALES
El primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C. A. W.
Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del
reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912
demostraron que la celebración de un campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri Delaunay expusieron en el
congreso de CristEl primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C.
A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del
reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912
demostraron que la celebración de un campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri Delaunay expusieron en el
congreso de Cristiana (Oslo) la posibilidad de que la FIFA organice el campeonato tan ansiado. Nuevamente la falta de apoyo y la Primera Guerra Mundial frustraron esos
esfuerzos. Pese a ello, los Juegos Olímpicos celebrados en la cuidad belga de Amberes, seis años después, comprobarían la gran afición al fútbol y la predisposición
favorable de las asociaciones a colaborar con sus selecciones.
Los Juegos Olímpicos de Paris en 1924 fueron un éxito rotundo. La participación de la selección uruguaya fue espectacular, ganando la medalla de oro de forma impecable
por sobre veintiún representaciones nacionales. La final disputada entre Uruguay y Suiza en el estadio de Colombes, registró una entrada de 50.000 espectadores.
Nace el Mundial
En 1926, Jules Rimet como presidente de la FIFA presidió el nombramiento de una comisión que estudiaría la posible realización de una Copa del Mundo. La propuesta no
sería expuesta hasta la realización de las olimpiadas de Amsterdam dos años después, pero la decisión final tendría que esperar al congreso realizado en Barcelona el 18 de
mayo de 1929. A diferencia de los Juegos Olímpicos, en donde sólo pueden participar jugadores amateurs, esta nueva competición estaría abierta a todos los jugadores sin
distinción: amateurs y profesionales; de forma que las naciones participantes podrán contar con todo su potencial futbolístico disponible.
3. LOS MUNDIALES
La medalla de oro lograda por Uruguay en 1928 en Amsterdam confirmaría su supremacía en el fútbol mundial, y lo haría merecedor de ser el elegido por el congreso de
Barcelona en ser sede del primer Campeonato Mundial de fútbol. Los uruguayos se comprometieron con la construcción de un estadio que albergue a 108.000 espectadores,
que llevaría el nombre de Estadio Centenario por coincidir con la celebración del centenario de su organización constitucional.
La primera Copa del Mundo se celebró en Uruguay en 1930, y el escultor francés Abel Lafleur fue designado para la elaboración del trofeo, que a partir de 1950 fue
denominado Copa Jules Rimet en honor al gran precursor de esta competición. Esta estatua, hecha de plata fina y oro puro, pesaba 3.8 kilogramos y media 35 centímetros
de altura, y representaba a la Diosa de la Victoria extendiendo ambos brazos para sostener una copa de borde octagonal en una base de piedras preciosas (lapis lazuli) que
tenía una placa de oro en cada uno de sus cuatro lados, en donde estaba grabado el nombre del trofeo y de cada uno de los ganadores de los Mundiales disputados entre
1930 y 1970. La Copa Jules
4. LOS MUNDIALES
El primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la
idea de del francés Robert Guérin y del holandés C. A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario
general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la
presentación del reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos
distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta
iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de CristEl primer antecedente en la creación de un torneo
internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C.
A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de
Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del reglamento de un torneo que
incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como
sede de la fase final del torneo con los ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún
país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de Cristiana (Oslo) la posibilidad de que la FIFA organice el
campeonato tan ansiado. Nuevamente la falta de apoyo y la Primera Guerra Mundial frustraron esos
esfuerzos. Pese a ello, los Juegos Olímpicos celebrados en la cuidad belga de Amberes, seis años
después, comprobarían la gran afición al fútbol y la predisposición favorable de las asociaciones a
colaborar con sus selecciones.
Los Juegos Olímpicos de Paris en 1924 fueron un éxito rotundo. La participación de la selección
uruguaya fue espectacular, ganando la medalla de oro de forma impecable por sobre veintiún
representaciones nacionales. La final disputada entre Uruguay y Suiza en el estadio de Colombes,
registró una entrada de 50.000 espectadores.
Nace el Mundial
En 1926, Jules Rimet como presidente de la FIFA presidió el nombramiento de una comisión que
estudiaría la posible realización de una Copa del Mundo. La propuesta no sería expuesta hasta la
realización de las olimpiadas de Amsterdam dos años después, pero la decisión final tendría que esperar
al congreso realizado en Barcelona el 18 de mayo de 1929. A diferencia de los Juegos Olímpicos, en
donde sólo pueden participar jugadores amateurs, esta nueva competición estaría abierta a todos los
jugadores sin distinción: amateurs y profesionales; de forma que las naciones participantes podrán
contar con todo su potencial futbolístico disponible.
La medalla de oro lograda por Uruguay en 1928 en Amsterdam confirmaría su supremacía en el fútbol
mundial, y lo haría merecedor de ser el elegido por el congreso de Barcelona en ser sede del primer
Campeonato Mundial de fútbol. Los uruguayos se comprometieron con la construcción de un estadio que
albergue a 108.000 espectadores, que llevaría el nombre de Estadio Centenario por coincidir con la
celebración del centenario de su organización constitucional.
La primera Copa del Mundo se celebró en Uruguay en 1930, y el escultor francés Abel Lafleur fue
designado para la elaboración del trofeo, que a partir de 1950 fue denominado Copa Jules Rimet en
honor al gran precursor de esta competición. Esta estatua, hecha de plata fina y oro puro, pesaba 3.8
kilogramos y media 35 centímetros de altura, y representaba a la Diosa de la Victoria extendiendo
ambos brazos para sostener una copa de borde octagonal en una base de piedras preciosas (lapis lazuli)
5. LOS MUNDIALES
El primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la
idea de del francés Robert Guérin y del holandés C. A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario
general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la
presentación del reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos
distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta
iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de CristEl primer antecedente en la creación de un torneo
internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C.
A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de
Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del reglamento de un torneo que
incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como
sede de la fase final del torneo con los ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún
país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de Cristiana (Oslo) la posibilidad de que la FIFA organice el
campeonato tan ansiado. Nuevamente la falta de apoyo y la Primera Guerra Mundial frustraron esos
esfuerzos. Pese a ello, los Juegos Olímpicos celebrados en la cuidad belga de Amberes, seis años
después, comprobarían la gran afición al fútbol y la predisposición favorable de las asociaciones a
colaborar con sus selecciones.
Los Juegos Olímpicos de Paris en 1924 fueron un éxito rotundo. La participación de la selección
uruguaya fue espectacular, ganando la medalla de oro de forma impecable por sobre veintiún
representaciones nacionales. La final disputada entre Uruguay y Suiza en el estadio de Colombes,
registró una entrada de 50.000 espectadores.
Nace el Mundial
En 1926, Jules Rimet como presidente de la FIFA presidió el nombramiento de una comisión que
estudiaría la posible realización de una Copa del Mundo. La propuesta no sería expuesta hasta la
realización de las olimpiadas de Amsterdam dos años después, pero la decisión final tendría que esperar
al congreso realizado en Barcelona el 18 de mayo de 1929. A diferencia de los Juegos Olímpicos, en
donde sólo pueden participar jugadores amateurs, esta nueva competición estaría abierta a todos los
jugadores sin distinción: amateurs y profesionales; de forma que las naciones participantes podrán
contar con todo su potencial futbolístico disponible.
La medalla de oro lograda por Uruguay en 1928 en Amsterdam confirmaría su supremacía en el fútbol
mundial, y lo haría merecedor de ser el elegido por el congreso de Barcelona en ser sede del primer
Campeonato Mundial de fútbol. Los uruguayos se comprometieron con la construcción de un estadio que
albergue a 108.000 espectadores, que llevaría el nombre de Estadio Centenario por coincidir con la
celebración del centenario de su organización constitucional.
La primera Copa del Mundo se celebró en Uruguay en 1930, y el escultor francés Abel Lafleur fue
designado para la elaboración del trofeo, que a partir de 1950 fue denominado Copa Jules Rimet en
honor al gran precursor de esta competición. Esta estatua, hecha de plata fina y oro puro, pesaba 3.8
kilogramos y media 35 centímetros de altura, y representaba a la Diosa de la Victoria extendiendo
ambos brazos para sostener una copa de borde octagonal en una base de piedras preciosas (lapis lazuli)
6. LOS MUNDIALES
El primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la
idea de del francés Robert Guérin y del holandés C. A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario
general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la
presentación del reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos
distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta
iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de CristEl primer antecedente en la creación de un torneo
internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C.
A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de
Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del reglamento de un torneo que
incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como
sede de la fase final del torneo con los ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún
país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de Cristiana (Oslo) la posibilidad de que la FIFA organice el
campeonato tan ansiado. Nuevamente la falta de apoyo y la Primera Guerra Mundial frustraron esos
esfuerzos. Pese a ello, los Juegos Olímpicos celebrados en la cuidad belga de Amberes, seis años
después, comprobarían la gran afición al fútbol y la predisposición favorable de las asociaciones a
colaborar con sus selecciones.
Los Juegos Olímpicos de Paris en 1924 fueron un éxito rotundo. La participación de la selección
uruguaya fue espectacular, ganando la medalla de oro de forma impecable por sobre veintiún
representaciones nacionales. La final disputada entre Uruguay y Suiza en el estadio de Colombes,
registró una entrada de 50.000 espectadores.
Nace el Mundial
En 1926, Jules Rimet como presidente de la FIFA presidió el nombramiento de una comisión que
estudiaría la posible realización de una Copa del Mundo. La propuesta no sería expuesta hasta la
realización de las olimpiadas de Amsterdam dos años después, pero la decisión final tendría que esperar
al congreso realizado en Barcelona el 18 de mayo de 1929. A diferencia de los Juegos Olímpicos, en
donde sólo pueden participar jugadores amateurs, esta nueva competición estaría abierta a todos los
jugadores sin distinción: amateurs y profesionales; de forma que las naciones participantes podrán
contar con todo su potencial futbolístico disponible.
La medalla de oro lograda por Uruguay en 1928 en Amsterdam confirmaría su supremacía en el fútbol
mundial, y lo haría merecedor de ser el elegido por el congreso de Barcelona en ser sede del primer
Campeonato Mundial de fútbol. Los uruguayos se comprometieron con la construcción de un estadio que
7. LOS MUNDIALES
El primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C. A. W.
Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del
reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912
demostraron que la celebración de un campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri Delaunay expusieron en el
congreso de CristEl primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C.
A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del
reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912
demostraron que la celebración de un campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri Delaunay expusieron en el
congreso de Cristiana (Oslo) la posibilidad de que la FIFA organice el campeonato tan ansiado. Nuevamente la falta de apoyo y la Primera Guerra Mundial frustraron esos
esfuerzos. Pese a ello, los Juegos Olímpicos celebrados en la cuidad belga de Amberes, seis años después, comprobarían la gran afición al fútbol y la predisposición
favorable de las asociaciones a colaborar con sus selecciones.
Los Juegos Olímpicos de Paris en 1924 fueron un éxito rotundo. La participación de la selección uruguaya fue espectacular, ganando la medalla de oro de forma impecable
por sobre veintiún representaciones nacionales. La final disputada entre Uruguay y Suiza en el estadio de Colombes, registró una entrada de 50.000 espectadores.
Nace el Mundial
En 1926, Jules Rimet como presidente de la FIFA presidió el nombramiento de una comisión que estudiaría la posible realización de una Copa del Mundo. La propuesta no
sería expuesta hasta la realización de las olimpiadas de Amsterdam dos años después, pero la decisión final tendría que esperar al congreso realizado en Barcelona el 18 de
mayo de 1929. A diferencia de los Juegos Olímpicos, en donde sólo pueden participar jugadores amateurs, esta nueva competición estaría abierta a todos los jugadores sin
distinción: amateurs y profesionales; de forma que las naciones participantes podrán contar con todo su potencial futbolístico disponible.
8. LOS MUNDIALES
La medalla de oro lograda por Uruguay en 1928 en Amsterdam confirmaría su supremacía en el fútbol mundial, y lo haría merecedor de ser el elegido por el congreso de
Barcelona en ser sede del primer Campeonato Mundial de fútbol. Los uruguayos se comprometieron con la construcción de un estadio que albergue a 108.000 espectadores,
que llevaría el nombre de Estadio Centenario por coincidir con la celebración del centenario de su organización constitucional.
La primera Copa del Mundo se celebró en Uruguay en 1930, y el escultor francés Abel Lafleur fue designado para la elaboración del trofeo, que a partir de 1950 fue
denominado Copa Jules Rimet en honor al gran precursor de esta competición. Esta estatua, hecha de plata fina y oro puro, pesaba 3.8 kilogramos y media 35 centímetros
de altura, y representaba a la Diosa de la Victoria extendiendo ambos brazos para sostener una copa de borde octagonal en una base de piedras preciosas (lapis lazuli) que
tenía una placa de oro en cada uno de sus cuatro lados, en donde estaba grabado el nombre del trofeo y de cada uno de los ganadores de los Mundiales disputados entre
1930 y 1970. La Copa Jules
9. LOS MUNDIALES
El primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la
idea de del francés Robert Guérin y del holandés C. A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario
general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la
presentación del reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos
distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta
iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de CristEl primer antecedente en la creación de un torneo
internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C.
A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de
Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del reglamento de un torneo que
incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como
sede de la fase final del torneo con los ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún
país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de Cristiana (Oslo) la posibilidad de que la FIFA organice el
campeonato tan ansiado. Nuevamente la falta de apoyo y la Primera Guerra Mundial frustraron esos
esfuerzos. Pese a ello, los Juegos Olímpicos celebrados en la cuidad belga de Amberes, seis años
después, comprobarían la gran afición al fútbol y la predisposición favorable de las asociaciones a
colaborar con sus selecciones.
Los Juegos Olímpicos de Paris en 1924 fueron un éxito rotundo. La participación de la selección
uruguaya fue espectacular, ganando la medalla de oro de forma impecable por sobre veintiún
representaciones nacionales. La final disputada entre Uruguay y Suiza en el estadio de Colombes,
registró una entrada de 50.000 espectadores.
Nace el Mundial
En 1926, Jules Rimet como presidente de la FIFA presidió el nombramiento de una comisión que
estudiaría la posible realización de una Copa del Mundo. La propuesta no sería expuesta hasta la
realización de las olimpiadas de Amsterdam dos años después, pero la decisión final tendría que esperar
al congreso realizado en Barcelona el 18 de mayo de 1929. A diferencia de los Juegos Olímpicos, en
donde sólo pueden participar jugadores amateurs, esta nueva competición estaría abierta a todos los
jugadores sin distinción: amateurs y profesionales; de forma que las naciones participantes podrán
contar con todo su potencial futbolístico disponible.
La medalla de oro lograda por Uruguay en 1928 en Amsterdam confirmaría su supremacía en el fútbol
mundial, y lo haría merecedor de ser el elegido por el congreso de Barcelona en ser sede del primer
Campeonato Mundial de fútbol. Los uruguayos se comprometieron con la construcción de un estadio que
albergue a 108.000 espectadores, que llevaría el nombre de Estadio Centenario por coincidir con la
celebración del centenario de su organización constitucional.
La primera Copa del Mundo se celebró en Uruguay en 1930, y el escultor francés Abel Lafleur fue
designado para la elaboración del trofeo, que a partir de 1950 fue denominado Copa Jules Rimet en
honor al gran precursor de esta competición. Esta estatua, hecha de plata fina y oro puro, pesaba 3.8
kilogramos y media 35 centímetros de altura, y representaba a la Diosa de la Victoria extendiendo
ambos brazos para sostener una copa de borde octagonal en una base de piedras preciosas (lapis lazuli)
que tenía una placa de oro en cada uno de sus cuatro lados, en donde estaba grabado el nombre del
trofeo y de cada uno de los ganadores de los Mundiales disputados entre 1930 y 1970. La Copa Jules
10. LOS MUNDIALES
El primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C. A. W.
Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del
reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912
demostraron que la celebración de un campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri Delaunay expusieron en el
congreso de CristEl primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C.
A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del
reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912
demostraron que la celebración de un campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri Delaunay expusieron en el
congreso de Cristiana (Oslo) la posibilidad de que la FIFA organice el campeonato tan ansiado. Nuevamente la falta de apoyo y la Primera Guerra Mundial frustraron esos
esfuerzos. Pese a ello, los Juegos Olímpicos celebrados en la cuidad belga de Amberes, seis años después, comprobarían la gran afición al fútbol y la predisposición
favorable de las asociaciones a colaborar con sus selecciones.
Los Juegos Olímpicos de Paris en 1924 fueron un éxito rotundo. La participación de la selección uruguaya fue espectacular, ganando la medalla de oro de forma impecable
por sobre veintiún representaciones nacionales. La final disputada entre Uruguay y Suiza en el estadio de Colombes, registró una entrada de 50.000 espectadores.
Nace el Mundial
En 1926, Jules Rimet como presidente de la FIFA presidió el nombramiento de una comisión que estudiaría la posible realización de una Copa del Mundo. La propuesta no
sería expuesta hasta la realización de las olimpiadas de Amsterdam dos años después, pero la decisión final tendría que esperar al congreso realizado en Barcelona el 18 de
mayo de 1929. A diferencia de los Juegos Olímpicos, en donde sólo pueden participar jugadores amateurs, esta nueva competición estaría abierta a todos los jugadores sin
distinción: amateurs y profesionales; de forma que las naciones participantes podrán contar con todo su potencial futbolístico disponible.
11. LOS MUNDIALES
La medalla de oro lograda por Uruguay en 1928 en Amsterdam confirmaría su supremacía en el fútbol mundial, y lo haría merecedor de ser el elegido por el congreso de
Barcelona en ser sede del primer Campeonato Mundial de fútbol. Los uruguayos se comprometieron con la construcción de un estadio que albergue a 108.000 espectadores,
que llevaría el nombre de Estadio Centenario por coincidir con la celebración del centenario de su organización constitucional.
La primera Copa del Mundo se celebró en Uruguay en 1930, y el escultor francés Abel Lafleur fue designado para la elaboración del trofeo, que a partir de 1950 fue
denominado Copa Jules Rimet en honor al gran precursor de esta competición. Esta estatua, hecha de plata fina y oro puro, pesaba 3.8 kilogramos y media 35 centímetros
de altura, y representaba a la Diosa de la Victoria extendiendo ambos brazos para sostener una copa de borde octagonal en una base de piedras preciosas (lapis lazuli) que
tenía una placa de oro en cada uno de sus cuatro lados, en donde estaba grabado el nombre del trofeo y de cada uno de los ganadores de los Mundiales disputados entre
1930 y 1970. La Copa Jules
12. LOS MUNDIALES
El primer antecedente en la creación de un torneo internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la
idea de del francés Robert Guérin y del holandés C. A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario
general de la FIFA (Federation Internationale de Football Association) respectivamente, y consistía en la
presentación del reglamento de un torneo que incluía la participación de 13 equipos europeos
distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como sede de la fase final del torneo con los
ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún país respondió con interés y esta
iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de CristEl primer antecedente en la creación de un torneo
internacional de fútbol surgió en 1905 a partir de la idea de del francés Robert Guérin y del holandés C.
A. W. Hirschmann, primer presidente y secretario general de la FIFA (Federation Internationale de
Football Association) respectivamente, y consistía en la presentación del reglamento de un torneo que
incluía la participación de 13 equipos europeos distribuidos en cuatro grupos, y designaba a Suiza como
sede de la fase final del torneo con los ganadores de los grupos participantes. Lamentablemente, ningún
país respondió con interés y esta iniciativa fracasó.
En 1908 el fútbol fue admitido en los Juegos Olímpicos. El éxito en la organización y el rol protagónico
del fútbol en las Olimpiadas de Londres 1908 y Estocolmo 1912 demostraron que la celebración de un
campeonato de fútbol a nivel internacional si era posible. En 1914, los franceses Jules Rimet y Henri
Delaunay expusieron en el congreso de Cristiana (Oslo) la posibilidad de que la FIFA organice el
campeonato tan ansiado. Nuevamente la falta de apoyo y la Primera Guerra Mundial frustraron esos
esfuerzos. Pese a ello, los Juegos Olímpicos celebrados en la cuidad belga de Amberes, seis años
después, comprobarían la gran afición al fútbol y la predisposición favorable de las asociaciones a
colaborar con sus selecciones.
Los Juegos Olímpicos de Paris en 1924 fueron un éxito rotundo. La participación de la selección
uruguaya fue espectacular, ganando la medalla de oro de forma impecable por sobre veintiún
representaciones nacionales. La final disputada entre Uruguay y Suiza en el estadio de Colombes,
registró una entrada de 50.000 espectadores.
Nace el Mundial
En 1926, Jules Rimet como presidente de la FIFA presidió el nombramiento de una comisión que
estudiaría la posible realización de una Copa del Mundo. La propuesta no sería expuesta hasta la
realización de las olimpiadas de Amsterdam dos años después, pero la decisión final tendría que esperar
al congreso realizado en Barcelona el 18 de mayo de 1929. A diferencia de los Juegos Olímpicos, en
donde sólo pueden participar jugadores amateurs, esta nueva competición estaría abierta a todos los
jugadores sin distinción: amateurs y profesionales; de forma que las naciones participantes podrán
contar con todo su potencial futbolístico disponible.
La medalla de oro lograda por Uruguay en 1928 en Amsterdam confirmaría su supremacía en el fútbol
mundial, y lo haría merecedor de ser el elegido por el congreso de Barcelona en ser sede del primer
Campeonato Mundial de fútbol. Los uruguayos se comprometieron con la construcción de un estadio que
albergue a 108.000 espectadores, que llevaría el nombre de Estadio Centenario por coincidir con la
celebración del centenario de su organización constitucional.
La primera Copa del Mundo se celebró en Uruguay en 1930, y el escultor francés Abel Lafleur fue
designado para la elaboración del trofeo, que a partir de 1950 fue denominado Copa Jules Rimet en
honor al gran precursor de esta competición. Esta estatua, hecha de plata fina y oro puro, pesaba 3.8
kilogramos y media 35 centímetros de altura, y representaba a la Diosa de la Victoria extendiendo
ambos brazos para sostener una copa de borde octagonal en una base de piedras preciosas (lapis lazuli)
que tenía una placa de oro en cada uno de sus cuatro lados, en donde estaba grabado el nombre del
trofeo y de cada uno de los ganadores de los Mundiales disputados entre 1930 y 1970. La Copa Jules