El rey tenía un hermoso jardín con un árbol y animales, pero cortó el árbol y puso una fuente. El jardín se volvió solitario. La gente dejó de visitarlo. Una joven le explicó que el árbol atraía polillas cuyas heces hacían crecer flores y atraían animales. Ella tenía ese árbol en su jardín. El rey construyó un castillo junto a la casa de la joven para que ambos disfrutaran del jardín.