El documento describe la investigación transdisciplinaria como un proceso de abrazar paradigmas complejos e integrar perspectivas diversas como la ciencia, el arte y la vida. Un postdoctor debe atreverse a ir más allá de enfoques tradicionales para generar conocimiento que promueva impactos significativos. Esto requiere reflexión profunda, rigor epistemológico y trabajo colaborativo en redes. La meta es construir un entendimiento que unifique aparentes dualidades, representado por la imagen poética de hacer un solo ramo con tres rosas distintas.
1. REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA EXPERIMENTAL LIBERTADOR
VICERRECTORADO DE INVESTIGACIÓN Y POSTGRADO
POSTDOCTORADO EN CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN
RED DE INVESTIGACIÓN Y TECNOLOGÍA DE LA CIENCIA
COHORTE SAN JUAN DE LOS MORROS - MACARO
ABRAZAR UN CABALLO SALVAJE O ATREVERSE A DESENTRAÑAR EL
SIGNIFICADO DE SER POSTDOCTOR
SEMINARIO: INVESTIGACIÓN TRANSCOMPLEJA
FACILITADOR: Dr. ANTONIO BALZA, PhD
AUTORES:
Dr. ALBERTO J. ROJAS G.
Dra. MARLEN J. GONZÁLEZ D.
SAN JUAN DE LOS MORROS; JULIO, 2013
2. La ciencia, el arte y la vida se encuentran en los caminos menos transitados
e imaginados; aunque vienen de distintos derroteros al entrar en contacto forman
un trans-sistema que se vuelve sobre sí mismo para poder transformarse y
transformar su entorno, como lo dibuja poéticamente el argentino Roberto Juarroz:
El universo se investiga a sí mismo.
Y la vida es la forma
que emplea el universo
para su investigación
En este mundo de vida y de distinciones diversas cada quien
paradigmáticamente “ve lo que ve; no ve lo que no ve; y no ve que no ve lo que no
ve” (Maturana); sin embargo, para transcender onto-antrópicamente la visión
disciplinaria, el hombre postmoderno necesita hacer uso de todos los recursos
disponibles en la integración del sistema hombre-realidad-pensamiento,
dimensionando sus haceres en lo biológico, lo psicológico, lo arteológico, lo social
y lo cultural.
Partiendo del hecho de que la realidad fenoménica tiene la posibilidad
cierta de ser compleja, aferrarse a visiones simplistas, dogmáticas o de
pensamiento único propone la paradoja de que, incluso, conociendo las
consecuencias epistemológicas de este hecho se presenta la difícil situación de no
poder abandonar tal postura paradigmática como quien se abraza a un caballo
salvaje para no ser derribado por éste; no deseo soltarme y tampoco deseo estar
en el lomo de un jamelgo revoltoso y bestial.
Sin lugar a dudas, tal circunstancia condena al hombre a pensar en
cautiverio desde la certeza y la monotonía; es decir, desde la nada, desde la
irracionalidad de saber que irremediablemente habrá que soltarse del caballo y
caer estrepitosamente al suelo. No importa cuántas veces montes al noble bruto,
la caída es inevitable. La certeza positiva sirve de marco a la metáfora señalada
supra.
3. En este contexto, surge la transcomplejidad como proyecto civilizatorio con
la construcción de conocimiento caótico como atractor matriz autopoiético donde
los respingos salvajes de un caballo se integran poéticamente con la ciencia, con
el arte y, por tanto, con la vida.
Ante esta disyuntiva relacionante y oximorónica, la acción postdoctoral
enfrenta la tensión cognitiva o hipercatálisis para generar espacios de relaciones y
confrontación dialéctica que promuevan la reflexión erotética dinámica, constante
y fractal desde una perspectiva heutagógica.
Las posibilidades heurísticas de un postdoctor en Ciencias de la Educación
apuntan a producir investigaciones inéditas que generen impactos significativos en
el ámbito educativo y social desde una perspectiva transcompleja. Tales
investigaciones tendrán como característica esencial la profundidad en la reflexión
y rigurosidad epistemológica, teórica y metodológica; en un contexto signado por
la autonomía, para investigar; la creatividad, para relacionar conocimientos y
atrevimiento intelectual, para soltar las riendas del caballo y, permitir, así, que éste
transite por caminos desconocidos.
Es imperativo, por tanto, que un postdoctor se atreva a superar los
enfoques tradicionales y propiciar nuevas formas de pensar lo ya pensado, de
conocer lo conocido y de actuar lo actuado. Para ello, es imprescindible fomentar
la discusión y productividad científica pertinente del más alto nivel, embebida tal
discusión en un ambiente de madurez intelectual que promueva el trabajo en
redes colaborativas de investigación.
Los estudios de doctorado y postdoctorado viven de la confrontación
dialéctica constante, de la apertura a la serendipia y de construir contextos
académicos para la actualización científica y apoyar, así, el proceso de formación
docente y de investigación en los programas postdoctorales con una visión
ontosistémica de la organización universitaria.
Por todo lo anterior, se puede afirmar que la articulación de realidades
trans-subjetivas está antrópicamente en la esencia del hombre como una visión
4. policromática en la construcción onto-epistemológica del conocimiento en el
ámbito académico desde una configuración transcompleja.
Nuevamente el poeta Roberto Juarroz devela el papel heurístico del
postdoctor como uno de los principios de la transcomplejidad a través de sus
versos que hermosamente trazan un espacio de unidad divergente ante la
serendipia:
Buscar una cosa
es siempre encontrar otra.
Así, para hallar algo,
hay que buscar lo que no es.
…
De aquí no se puede ir a ningún sitio.
A menos que encontremos un espacio
donde luz y sombra sean lo mismo
Al final, desistimos de nuestro empeño de soltarnos del caballo salvaje y
nos percatamos que ser postdoctor es igual a abrazar un caballo salvaje al mismo
tiempo que se reflexiona heutagógicamente y se interroga a la realidad sobre lo
que estamos haciendo, donde lo estamos haciendo, mientras lo estamos
haciendo; es decir, sobre el fundamento contextualizado de nuestros haceres que
no es otro que construir conocimiento para crear un mundo mejor donde los
espacios de luz y sombra se entrecrucen como una experiencia estética-axiológica
tal como la noche y el día.
A manera de epílogo, recurrimos nuevamente al bardo argentino Juarroz
quien plantea una visión transcompleja quizás sin conciencia de ello o a lo mejor
en pleno conocimiento de lo que esta visión paradigmática significa en el intento
de desentrañar el significado de ser doctor:
- -
Una rosa en el florero,
otra rosa en el cuadro
y otra más todavía en mi pensamiento.
5. Cada rosa expresa una visión en el mundo de distinciones donde ciencia,
arte y vida se encuentran en distintos niveles de realidad:
Una rosa en el florero (tal vez, la del mundo real). Otra rosa en el cuadro
(quizás, la visión de un artista). Y otra más todavía en mi pensamiento
(posiblemente, la versión del científico que al integrar las tres perspectivas da
nacimiento a la visión de la vida). Justo así es el significado de la investigación
doctoral y postdoctoral en el entramado de ciencia, arte y vida.
¿Cómo hacer un ramo
con esas tres rosas?
¿O cómo hacer una sola rosa
con las tres?
Una rosa en la vida.
Otra rosa en la muerte.
Y otra más todavía.