2. Contenido
I.- El Nuevo Testamento
II.- La Encarnación de Cristo
III.- El Reino de Dios
IV.- Jesucristo: el modelo
VI.- El hombre del Reino
3. I. El Nuevo Testamento
Al hablar de salvación, más que
una palabra o un hecho, hay que
hablar de una Persona: Jesucristo.
El Antiguo Testamento narra
la preparación de la venida del
Hijo de Dios al mundo.
El Mesías esperado, Dios hecho
hombre es Jesús de Nazaret.
4. I. El Nuevo Testamento
Encarnación:
Acontecimiento por el
cual el Hijo de Dios
se hace hombre,
naciendo de una
mujer virgen, María, por
obra del Espíritu Santo,
la Tercera Persona de la
Santísima Trinidad.
5. I. El Nuevo Testamento
1.- ¿Dónde se puede
conocer a Jesús:
vida, obras y enseñanza?
En el Nuevo Testamento,
segunda parte de la
Biblia, formada por
27 libros, que son:
6. I. El Nuevo Testamento
4 Evangelios:
que recogen los hechos y
enseñanzas de Jesucristo.
Se dividen en :
+ Sinópticos ( Mateo,
Marcos y Lucas ): los que
tienen un esquema común
y contenido parecido,
aunque un estilo y
enfoque diferente cada uno.
Mateo
Lucas
Marcos
7. I. El Nuevo Testamento
+ Juan: con esquema y contenido
diferente, aunque tiene partes en común
con los sinópticos.
8. I. El Nuevo Testamento
Hechos de los Apóstoles:
libro escrito por Lucas,
que narra los acontecimientos
de la Iglesia primitiva,
desde Pentecostés hasta el
cautiverio de Pablo en Roma.
9. I. El Nuevo Testamento
13 Cartas de Pablo:
dirigidas a las comunidades
cristianas fundadas por Pablo
a lo largo de sus viajes
( Romanos, Corintios 1 y 2,
Gálatas, Efesios, Filipenses,
Colosenses, Tesalonicenses 1
y 2, Timoteo 1 y 2, Tito,
Filemón ).
10. I. El Nuevo Testamento
Carta a los Hebreos:
de autor desconocido,
describe la superioridad
del cristianismo respecto
al judaísmo y avisa sobre
el peligro de los judíos
cristianos de dejar la fe
en Cristo.
11. I. El Nuevo Testamento
7 Cartas “Católicas”:
o dirigidas a la Iglesia
universal, y escritas
por los Apóstoles
Pedro ( 2 ), Juan
( 3 ), Judas
(1 ) y Santiago ( 1 ).
12. I. El Nuevo Testamento
Apocalipsis:
libro profético escrito
por Juan Evangelista,
que trata, en lenguaje
simbólico, sobre el
sentido de la historia del
mundo y de la Iglesia.
13. I. El Nuevo Testamento
2.- Los Evangelios son los libros más
significativos del Nuevo Testamento.
“Los Evangelios son el corazón de todas las
Escrituras, por ser el testimonio principal de la
vida y doctrina de la Palabra hecha carne,
nuestro Salvador” ( CIC 125 ).
14. I. El Nuevo Testamento
No pretende ser una biografía de Jesús,
sino una exposición de los hechos y
enseñanzas más importantes de su
vida, y que fueron los temas más
significativos en la enseñanza de los
Apóstoles en el principio de la Iglesia.
En ellos se narra la vida de
Cristo, desde su concepción
hasta su ascensión al cielo.
15. I. El Nuevo Testamento
Recogen parte de la Tradición que se formó
durante los años posteriores a la muerte y
resurrección de Jesús, y sobre todo desde
Pentecostés.
16. I. El Nuevo Testamento
3.- ¿Qué relación hay entre el
Antiguo y Nuevo Testamento?
El Nuevo Testamento cita
constantemente el Antiguo
Testamento, porque en el AT
se profetizaron y se prepararon
los acontecimientos del NT,
la culminación de toda la
historia de la salvación.
17. I. El Nuevo Testamento
Para comprender el NT,
hay que leer el AT
a la luz del Nuevo:
“La unidad de los dos
Testamentos, se deriva
de la unidad del plan
de Dios y de su
Revelación” ( CIC 140 ).
18. II. La Encarnación de Cristo
1.- Es el misterio más grande
y amoroso de Dios ( Mt 1,
18-25; Lc 1, 26-38; 1-20 ).
La Encarnación rebasa y
supera toda obra anterior
de Dios, como la creación
del universo y del hombre.
Manifiesta el amor divino
y su inmensa misericordia.
19. II. La Encarnación de Cristo
¿Por qué el Hijo de Dios se hizo hombre?
+ “Para salvarnos reconciliándonos con Dios”
(CIC 457 ).
+ “Para que nosotros conociésemos así
el amor de Dios” ( CIC 458 ).
+ “Para ser nuestro modelo de santidad”
( CIC 459 ).
+ Para hacernos partícipes de la naturaleza
divina” ( 2 Pe 1, 41; CIC 460 ).
20. II. La Encarnación de Cristo
¿Qué significa la Encarnación?
El más grande misterio de nuestra fe.
“Tened entre vosotros los mismos sentimientos
de Cristo, el cual, siendo de condición divina,
no retuvo ávidamente ser igual a Dios, sino
que se despojó de sí mismo tomando
condición de siervo haciéndose semejante
a los hombres y apareciendo en su porte
como hombre; y se humilló a sí
mismo” ( Fil 2, 5-8 ).
21. II. La Encarnación de Cristo
2.- El acontecimiento más grande
y decisivo de la historia humana,
se realiza de forma humilde en
cuatro momentos:
+ La Anunciación.
La Virgen María aceptó la
Voluntad de Dios, aunque
no entendía cómo se
realizaría el plan divino.
22. II. La Encarnación de Cristo
“La anunciación a María inaugura
la plenitud de los tiempos ( Ga 4, 4
), es decir, el cumplimiento de
las promesas y de los preparativos”
( CIC 484 ).
23. II. La Encarnación de Cristo
+ El nacimiento de Jesús.
En Belén, una pequeña aldea
a la afueras de Jerusalén,
la Virgen da a luz en un
establo y el Hijo de Dios es
reclinado en un pesebre.
Los ángeles lo anuncian y
le dan gloria, y los pastores
lo adoran ( Lc 2, 7-
20 ).
24. II. La Encarnación de Cristo
+ La huida a Egipto.
“Toda la vida de Cristo
estará bajo el signo de la
persecución” ( CIC 530 ).
Inicia su persecución
después de su nacimiento,
con el rey Herodes,
del que escapan
huyendo a Egipto hasta la
muerte del persecutor
( Mt 2, 16-
18 ).
25. II. La Encarnación de Cristo
+ La vida oculta.
Se sabe muy poco de los
treinta primeros años de
Jesús. Lucas los describe
sencillas.
A los doce años, Jesús se
pierde entre los doctores
de la ley del Templo.
26. II. La Encarnación de Cristo
Después de encontrarlo
sus padres,
“bajó con ellos y vino a
Nazaret, y vivía sujeto
a ellos (...).
Jesús crecía en estatura y en
gracia ante Dios y ante los
hombres ( Lc 2, 51-52 ).
27. II. La Encarnación de Cristo
El crecimiento, educación
y preparación en la
familia y en la comunidad,
es la experiencia de todo
hombre y también de Jesús.
Su preparación fue la gran
tarea que Dios encomendó
a María y a José
( CIC 533; 564 ).
28. II. La Encarnación de Cristo
“ Y no olviden poner todo su esfuerzo
bajo la protección de la Santísima
Virgen, la gran educadora de Cristo y
la gran educadora de todos aquellos
que se esfuerzan por asimilarse a Él “
( P. Marcial Maciel,
Carta del 31 de marzo de 1978 ).
29. III. El Reino de Dios
“Tu reino, un reino por los siglos todos,
tu dominio, por todas las edades.
Yahvé es fiel en todas sus palabras,
en todas sus obras amoroso"
(Salmo 145, 13).
30. III. El Reino de Dios
El pueblo de Israel esperaba
nuevos tiempos, esperaba
una nueva era, nuevo reino
y un nuevo Rey, que fue
anunciado por los profetas
del AT.
Juan Bautista, en su
predicación que anunciaba
la inminente llegada del
Reino, pide a todos la
conversión interior (Mt 3, 2).
31. III. El Reino de Dios
Jesús no tarda en dar respuesta
a la esperanza de su
pueblo:
"Desde entonces comenzó
Jesús a predicar y a decir:
Convertíos, porque el Reino
de los cielos ha llegado”
(Mt 4, 17).
32. El Reino de los cielos o
Reino de Dios es el tema
central de la predicación
de Jesús.
Es el restablecimiento de la
presencia y amistad de Dios
en el corazón del hombre
y su gobierno soberano,
a través de Cristo, en el
nuevo pueblo de Dios, la
Iglesia.
III. El Reino de Dios
33. 1.- El objetivo de la venida de
Cristo es establecer el Reino
de Dios entre los
hombres.
a) Salvarse significa
"entrar en el Reino de Dios"
(Mt 10, 23-27).
III. El Reino de Dios
34. b) La buena nueva predicada
por Jesús, el Evangelio,
es el mensaje del Reino
de Dios:
"Recorría Jesús toda Galilea,
enseñando en sus sinagogas,
proclamando la Buena Nueva
del Reino" (Mt 4, 23).
III. El Reino de Dios
35. c) El destino final de todos
los hombres será el Reino
de los cielos
para los que hicieron el
bien y el infierno para
los que hicieron el mal
(Mt 22, 114).
III. El Reino de Dios
36. 2. Características del Reino.
Reino diferente a cualquier
reino humano, pero real y
al alcance de quien quiera
entrar en él.
a) Reino interior y trascendente.
Aunque se manifiesta
exteriormente en las obras de
los cristianos, sus raíces están
en la interioridad del hombre.
III. El Reino de Dios
37. Cuando vives en tus actos
externos la fe cristiana,
manifiestas la presencia de Dios
en tu alma. El Reino de Dios está
en ti (Mt 5, 1316).
Es un Reino trascendente porque
supera las barreras del tiempo,
pues no tendrá fin. Es un Reino
eterno, como eterno es Dios.
En él podrás vivir para siempre
(Jn 18,36).
III. El Reino de Dios
38. b) La condición para poder
pertenecer al Reino de Dios
es la conversión interior:
"Jesús llama a la conversión.
Esta llamada es una parte
esencial del anuncio del
Reino" (CJC 1427).
III. El Reino de Dios
39. Conversión: es el cambio
interior del hombre por el cual
escoge a Dios como valor
supremo y absoluto para su
vida, como el único tesoro
(Mt 6, 21) y el único Señor
(Mt 6, 24)
y subordina a éste todos los
demás valores. Es el uso de
todos los medios para lograr
este cambio.
III. El Reino de Dios
40. c) En el Reino de Dios,
Jesús es el Rey.
Él vino para vivir en el
corazón del hombre y
para ser cabeza y guía
del nuevo pueblo de
Dios, la Iglesia universal
(Mt 25, 34).
III. El Reino de Dios
41. d) La ley del Reino es la caridad,
el amor
sobrenatural que es entrega y
servicio; un amor total y regla de
oro para todos los cristianos (Jn
13, 34).
Un amor superior a cualquier
amor humano Cristo te pide
que ames también a tus
enemigos aquellos que buscan
hacerte daño (Mt 5, 3848).
III. El Reino de Dios
42. e) Todos los hombres están
llamados a, la salvación,
es decir, al Reino de Dios
(Mt 16, 15; CIC 543).
Pero es preciso colaborar
con Dios para entrar en él,
es necesario las enseñanzas
de Cristo, cumplir la Voluntad
de Dios, sus mandamientos
(Mt 7,21).
III. El Reino de Dios
43. IV. Jescucristo, el modelo
“Yo soy la puerta;
si uno entra por mí
esta`rá a asalvo”
( Jn 10, 9 ).
“Yo soy el camino,
la verdad y la vida.
Nadie va al Padre
sino por mì”
( Jn 14, 6 ).
44. IV. Jescucristo, el modelo
¿Qué debo hacer para entrar
en el Reino de Dios? Seguir
a Cristo. Él vino a este mundo:
para enseñarnos el camino,
para ser ejemplo y modelo
del cristiano.
En los Evangelios encontrarás
lo que Jesús dijo e hizo, su
programa de vida ( CIC 561 ).
45. IV. Jescucristo, el modelo
Jesucristo es:
1. Un Dios cercano al hombre.
Es verdadero Dios.
Su ser está por encima y
al mismo tiempo permea
todo el universo.
Conoce el presente y
el pasado. Por su poder
divino fue creado
el universo; por él
existimos (cf CIC 454).
46. IV. Jescucristo, el modelo
Tomó un cuerpo humano
para que lo pudieras ver y
escuchar. Sus palabras y
obras las escuchas y las ves
cuando lees los Evangelios.
Sigue presente en la
Eucaristía, sigue haciendo
prodigios y milagros en cada
uno de los sacramentos.
47. IV. Jescucristo, el modelo
2. Maestro y servidor.
Enseñó al hombre los misterios
de la vida divina, el camino a
Dios Padre. Explicó lo que
significa ser semejante a Dios;
habló del amor, del perdón, de
la comprensión. “Todo lo que
Jesús hizo, dijo y sufrió, tuvo
como finalidad restablecer al
hombre caído en su vocación
primera” ( CIC 518 ).
48. IV. Jescucristo, el modelo
Todo esto no lo hizo desde
un trono o cátedra, sino
con el ejemplo del más
humilde servidor, que
sabe escuchar y ayudar
en todo momento.
No busca el poder,
sino el servicio.
49. IV. Jescucristo, el modelo
3. Nombre de oración y acción.
Emplea todo el tiempo en la
misión que le encomendó su
Padre. Dedica larga horas a la
oración, dando a su Padre el
primer lugar. Enseña a sus
apóstoles a orar y les recomienda
que no dejen nunca la oraciòn.
El resto del tiempo lo dedica a
instaurar el Reino de Dios:
predicar, hacer milagros,
instruir a sus seguidores.
50. IV. Jescucristo, el modelo
4. Fiel y sincero.
No engaña a su Padre ni a los hombres y a Él
mismo. Odia la hipocresía, la mentira. Al hacerse
hombre le dijo “sí” a su Padre, y su vida es un sí
fiel y permanente en las cosas grandes y en las
pequeñas. Será sincero y fiel en su entrega al
Padre y a los hombres, hasta morir en la cruz.
51. IV. Jescucristo, el modelo
5. Amigo de todos.
Su corazón está abierto
para acoger a todos: a
los fariseos y a los
publicanos, a los niños
y a las adúlteras, a los
pobres y a los ricos.
Es delicado y sensible
en su amistad. Es el
amigo fiel.
52. IV. Jescucristo, el modelo
6.- Sencillo y sagaz.
Amable, sencillo y abierto con los
sencillos, con los que le tienen fe
y confianza, con los que buscan
conocerlo y seguirle.
En cambio es sagaz con los hipócritas,
con los que tratan de engañarlo y
confundirlo. Sabe desenmascarar
su hipocresía y demostrar
limpiamente la verdad.
53. 7.- Misericordioso con los
pecadores y enemigo del
pecado.
Nunca rechaza al
pecador, lo acoge y
lo perdona cuando en él
hay arrepentimiento;
pero no acepta el pecado,
lucha contra él y pide
al pecador que deje de
pecar (cf. Lc 23, 35).
IV. Jescucristo, el modelo
54. Jesús es el único modelo de vida
para cristiano.
"Toda su vida, Jesús se muestra con nuestro
modelo (cf. Rm. 15,5; Fil 2,5):
El es ti hombre perfecto' (GS 38) que nos
invita a ser discípulos y a seguirle con
su anonadamiento, no ha dado un ejemplo
que imitar (Cf. Jn 13, 15); con su oración atrae
a la oración (Cf. Lc 11,1); con su pobreza,
llama a aceptar libremente la privación las
persecuciones (cf. Mt 5, 11-12).
IV. Jescucristo, el modelo
55. Todo lo que Cristo vivió hace que podamos
vivirlo en Él y que Él viva en nosotros.
Estamos llamados a no ser más que una solo
cosa con Él; nos hace comulgar en cuanto a
miembros de su Cuerpo en lo que Él vivió en
su carne por nosotros y como modelo nuestro"
(CIC 520-521).
+ Lee el apéndice 5-1.
IV. Jescucristo, el modelo
56. V. El hombre del Reino
El perfil del hombre del
Reino lo puedes encontrar
resumido en las
Bienaventuranzas
( Mt 5, 3-12; Lc 6, 20-23 ).
Las Bienaventuranzas son las
declaraciones de Jesucristo
sobre el estado de auténtica
felicidad que puede alcanzar
el cristiano y las condiciones
para lograrlo.
57. V. El hombre del Reino
El hombre del Reino es:
1. Pobre de espíritu: tiene a Dios como único
tesoro y no se apega a los bienes terrenos, sino
que los usa únicamente para llegar a Dios. El
pobre de espíritu es generoso' con los que no
tienen y evita todo aquello que lo aparta de Dios.
58. V. El hombre del Reino
2. Manso y humilde:
que se irrita cuando es
contrariado; que no se
queja en las dificultades;
que mantiene un
constante equilibrio en
su vida. El manso irradia
calor, siempre es dueño
de sí mismo y no intenta
dominar a los demás.
59. V. El hombre del Reino
3. Hombre de sufrimiento:
que sobrelleva su vida
cargada de cruces y de
dificultades con serenidad
interior y profunda calma.
Aquel que sabe sentir
tristeza por los pecados
propios y de los demás.
60. 4. Buscador de justicia:
hambriento y sediento
de santidad cristiana, que
lucha por la perfección,
y se entrega a una vida
de caridad. Que
busca irradiar a Cristo.
Que cumple la Voluntad
de Dios por encima de
todas las tentaciones del
propio egoísmo.
V. El hombre del Reino
61. 5. Misericordioso:
que sabe perdonar
cualquier ofensa, como
Cristo supo acoger a los
pecadores.
Que no guarda rencor
ni busca la venganza,
superando todo
sentimiento de ira y
de orgullo.
V. El hombre del Reino
62. 6. Limpio de corazón: que
busca a Dios con sinceridad
y sencillez; es hombre de
una sola palabra, no se deja
enredar por los atractivos de
la vanidad, de las riquezas,
del placer egoísta. Busca la
verdad con honestidad y
sacrifica su egoísmo en aras
de la verdad.
V. El hombre del Reino
63. 7. Pacífico: que se dedica
a construir la paz, fruto
de la justicia y de la
caridad paz que hace
de la reconciliación con
Dios, de la lucha
permanente contra el
pecado y sus frutos.
El pacífico busca
siempre reestablecer el
orden roto por el mal.
V. El hombre del Reino
64. 8. Perseguido por la justicia: que sabe sufrir
la incomprensión, la burla y, si es necesario,
la persecución violenta por vivir su fe
cristiana. Aquel que soporta la mentira y
la calumnia por ser fiel a Cristo.
V. El hombre del Reino
65. “Las bienaventuranzas nos colocan ante
opciones decisivas con respecto a los bienes
terrenos; purifican nuestro corazón para
enseñarnos a amar a Dios sobre
todas las cosas” ( CIC 1728 )
V. El hombre del Reino
66. Todo esto no corresponde a las
enseñanzas del mundo profano
y anticristiano de hoy.
Sin embargo, Cristo sigue siendo
el Modelo a seguir,
Y si bien para las mentes ciegas
fracasó, para el hombre de
fe triunfó como nadie lo pudo
lograr en la historia humana.
V. El hombre del Reino
67. Piccolo, I. (2000) Grandes temas de la fe católica.
Garza García (México): Centro de Formación
Integral a Distancia (CEFID).
Bibliografía