La Política Agrícola Común (PAC) determina las políticas agrícolas de los países miembros de la Unión Europea y se creó hace 50 años para solucionar problemas en las políticas agrarias de cada país. La PAC tiene como objetivos incrementar la productividad agrícola, asegurar la supervivencia de la comunidad agrícola, estabilizar los mercados agrícolas, asegurar el suministro de alimentos y proveer alimentos a precios razonables.