1. ANEXO
U2
“La
buena
arquitectura
es
un
matrimonio
entre
el
arte
y
tecnología.
Si
miras
la
historia,
la
tecnología
es
solo
un
vehículo
para
la
expresión
artística:
las
pirámides,
las
catedrales,
la
torre
Eiffel...
Yo
asocio
mi
trabajo
a
la
voluntad
de
explorar
nuevas
soluciones
y
de
traspasar
límites,
lo
que
llamo
un
proceso
de
‘reinvención’.
Pero
la
tecnología
es
solo
el
medio
para
llegar
a
un
fin:
la
arquitectura
se
genera
para
cubrir
las
necesidades
de
la
gente,
tanto
a
nivel
material
como
espiritual.”…
Norman
Foster
Juan
Herreros:
“Dialogue
architecture”
(Arquitectura
de
diálogo)
Revista
DOMUS
–
16/10/2012
Entrevista
/
Gonzalo
Herrero
Delicado,
María
José
Marcos
(….)La
arquitectura
ha
utilizado
desde
siempre
la
técnica
como
un
poderoso
instrumento
de
diálogo
y
anclaje
de
las
ideas
a
su
tiempo.
La
técnica
es
una
cultura,
también
es
un
sistema
de
referencia
y
un
vehículo
para
entender
el
pasado
y
visitar
el
futuro.
No
nos
interesa
la
fascinación
por
la
tecnología
ni
la
excitación
ante
la
complejidad
innecesaria.
En
su
lugar,
queremos
proponer
un
Pensar
Técnico
para
el
proyecto
arquitectónico
que
nos
permita
tomar
decisiones
y
reconocer
su
oportunidad,
identificar
lo
superfluo
y
dar
valor
a
lo
que
nos
emociona.
No
es
de
construcción,
ni
de
eficiencia
ni
de
rigor
positivista
de
lo
que
estamos
hablando
sino
de
una
sensibilidad
según
la
cual
cada
proyecto
pueda
ser
a
la
vez
la
exploración
de
un
caso
particular
con
sus
contingencias
y
la
aportación
de
una
nueva
línea
a
la
conversación
que
la
arquitectura
tiene
abierta
con
el
mundo.
Esta
superposición
de
especificidad
y
universalidad
es
lo
que
anima
el
pensamiento
y
las
inquietudes
de
una
comunidad
en
la
que
las
aportaciones
de
unos
pueden
ser
retomadas
por
otros
para
avanzar
el
paso
siguiente.
Con
ello,
el
Pensar
Técnico
convierte
el
proyecto
contemporáneo
en
lugar
de
encuentro
de
conocimientos
dispares
que
actualiza
la
vieja
idea
del
trabajo
en
equipo
para
convertir
el
proceso
de
diseño
cada
día
más
en
un
programa
de
investigación.
El
diálogo
entre
colegas,
especialistas
y
consultores
es
lo
que
nos
permite
afirmar
que
la
cultura
técnica
es
hoy
un
common
ground
cuyo
potencial
aún
no
podemos
decir
que
haya
sido
explotado
como
recurso
crítico
con
el
que
leer,
interpretar,
describir
y
actuar
responsablemente
sobre
una
realidad
convulsa
y
desbordada.
La
construcción
del
futuro
inmediato
reclama
la
convivencia
de
las
iniciativas
individuales
con
las
de
esa
comunidad
que
ya
no
estará
formada
solo
por
arquitectos
diseñadores
imbuidos
de
una
autoría
protagonista
sino
enriquecida
con
aportaciones
que
cada
día
ocupan
y
comparten
más
espacio.
La
primera
consecuencia
de
asumir
esta
expansión
e
infiltración
de
la
arquitectura
en
otras
disciplinas
será
la
recuperación
de
su
papel
como
práctica
social
implicada
en
los
cambios
que
cuentan
de
verdad.
(…)
Happold,
Edmund.
“Design
towards
convergence”.
Citado
por:
Alejandro
Bernabeu
Larena
en
“Estrategias
de
diseño
estructural
en
la
arquitectura
contemporánea.
El
trabajo
de
Cecil
Balmond”.
Tesis
doctoral.
Madrid
2007
La
elección
final
de
una
forma
estructural,
sistema
constructivo,
materiales
y
detalles,
resulta
de
la
interacción
de
numerosos
parámetros.
Algunos
de
estos
parámetros
son
los
requisitos
espaciales,
el
grado
de
control
ambiental,
la
disponibilidad
de
materiales,
el
planning
de
fabricación,
la
existencia
de
sistemas
específicos
de
definición
de
la
forma,
la
idoneidad
y
precisión
de
los
sistemas
de
análisis
estructural
en
función
del
planning,
etc.
Algunos
de
estos
parámetros
entrarán
2. inevitablemente
en
conflicto
con
otros,
y
por
lo
tanto
su
importancia
debe
ser
ponderada
en
función
de
un
específico
proceso
de
diseño.
“...La
acción
arquitectónica
está
situada
siempre
entre
la
libertad
de
imagen
y
el
dominio
sistemático
de
su
materialidad.
En
este
espacio
urbano
que
nos
obliga
a
llevar
una
vida
ambigua
como
la
de
hoy
en
día,
es
inevitable
que
la
arquitectura
también
tenga
la
misma
característica,
oscilando
entre
la
ilusión
hacia
la
libertad
y
las
limitaciones
de
la
realidad.”
Toyo
Ito
FERNÁNDEZ
MUÑOZ,
ÁNGEL
LUIS
NUEVOS
TERRITORIOS
Y
DIMENSIONES
EN
LA
INVESTIGACIÓN
ARQUITECTÓNICA.
SU
ARTICULACIÓN
EDUCATIVA.
Escuela
Superior
de
Arte
y
Arquitectura.
Universidad
Europea
de
Madrid
Proyecto
y
tecnología
Por
último
parece
cada
vez
más
imprescindible,
en
contra
de
los
postulados
de
la
mayoría
de
los
centros
de
enseñanza
internacionales
de
la
arquitectura
mantener
el
esfuerzo
en
la
aproximación
y
en
la
generación
de
sensibilidades
hacia
las
ciencias
y
técnicas
auxiliares
que
intervienen
en
el
desarrollo
del
objeto
arquitectónico
y
en
su
producción
final,
detectando
de
qué
modo
influyen
sobre
la
mecánica
proyectual
y
en
qué
momento
de
la
misma
intervienen.
La
también
acelerada
aparición
de
nuevos
materiales
y
de
figuraciones
vinculadas
a
ese
proceso
exige
probablemente
más
que
nunca
esa
atención,
ya
que
conceptos
como
“material
tradicional”
o
“sistemas
habituales”
poseen
una
relatividad
creciente
en
una
sociedad
a
la
búsqueda
de
una
constante
renovación
de
su
imagen.
En
este
sentido
debe
insistirse
en
el
entendimiento
de
la
relación
forma-‐construcción
y
de
su
valor
instrumental
en
el
proceso
del
proyecto,
aunque
considerando
las
nuevas
implicaciones
que
las
exigencias
de
“imagen”
o
el
empleo
alternativo
y
versátil
de
los
materiales
establecen.
Junto
a
la
elaboración
de
la
"idea"
o
incluido
en
ella
misma,
el
proyecto
debe
ofrecer
datos
que
sugieran
su
materialización
última,
pero
de
modo
que
sea
posible
lo
que
algunos
autores
han
denominado
"la
superación
de
las
relaciones
científicas
del
construir
por
las
relaciones
estéticas
del
construir".
Se
trata
en
última
instancia,
de
que
el
alumno
emplee
sus
conocimientos
sobre
la
tecnología,
de
modo
que
el
proyecto
se
convierta,
sí,
en
el
lugar
de
aplicación
de
las
demás
disciplinas
que
le
auxilian
en
el
objetivo
de
concretar
la
arquitectura,
pero
también
en
lugar
donde
esas
disciplinas
adquieren
la
condición
de
instrumentos
para
el
proyecto.
Deberá
establecer
las
necesarias
relaciones
entre
estructuras
formales
y
estructuras
tecnológicas,
de
modo
que
su
diseño
sea
producto
de
un
mismo
modo
de
enfrentar
el
proyecto.
Es
decir,
vincular
un
mismo
pensamiento
tanto
a
los
niveles
más
generales
como
a
los
elementos
más
precisos
del
proyecto.
Será
preciso
pues
interesar
al
alumno
en
los
sofisticados
y
cambiantes
procesos
tecnológicos
que
intervienen
en
la
construcción
de
la
arquitectura,
de
forma
que
el
desarrollo
de
la
idea
se
genere
a
partir
de
su
consideración,
cuestión
ésta
como
citábamos,
por
demás
imprescindible
desde
el
punto
de
vista
figurativo,
dadas
las
implicaciones
contemporáneas
de
la
mecánica
produción-‐proyecto.
El
objetivo
no
debe
ser,
en
ningún
caso
–
dada
la
tendencia
organizativa
del
mercado
de
trabajo
del
sector-‐
buscar
la
elaboración
de
un
sofisticado
documento
de
carácter
instrumental.
Es
la
conciencia
de
cuánto
el
pensamiento
de
lo
construido
es
parte
del
propio
proyecto
lo
que
se
trata
de
estimular.
Más
que
la
definición
última
de
lo
construido,
se
busca
la
evidenciación
de
una
materialidad
construida
y
la
explotación
de
los
recursos
técnicos
al
servicio
del
conjunto
de
esa
compleja
entidad
que
constituye
el
proyecto
de
arquitectura.