Los beneficios de ser chileno incluyen la nacionalidad y ciudadanía. Se considera chileno a aquellos nacidos en Chile, hijos de padres chilenos nacidos en el extranjero, y extranjeros que obtienen la nacionalización. La ciudadanía otorga derechos políticos a los mayores de 18 años sin condenas. Ser chileno trae responsabilidades como cumplir las leyes y pagar impuestos que financian los gastos del estado.