El documento describe el arte en el cristianismo, incluyendo la arquitectura de iglesias que inicialmente copiaron el modelo de la basílica romana pero luego evolucionaron para representar una cruz, así como ejemplos notables como Santa Sofía, Reims y San Pedro. También cubre la pintura cristiana en diferentes períodos como paleocristiana, bajo medieval y renacimiento, así como la escultura cristiana medieval, renacentista y moderna.