El documento describe el proceso de crianza de avestruces. Las aves ponen huevos que son recolectados rápidamente y almacenados a 18 grados centígrados. Luego los huevos son llevados a una incubadora donde permanecen 40 días antes de eclosionar. Los pollitos nacen a 37 grados y gradualmente se les baja la temperatura a 15 grados en 30 días. Para tener éxito en la cría de avestruces, es necesario capacitarse constantemente, trabajar de forma continua y consciente, y desarrollar una buena estrategia

1. Cómo funciona el negocio
1.- Una vez que se ha dado la puesta de huevos, el productor debe recolectar el huevo lo
más rápido posible y guardarlo en una bolsa de papel de estraza, para luego ser
almacenado a una temperatura de 18 grados promedio, sin movimiento y acostado.
2.- Posteriormente se lleva al centro de incubación, donde se establece un día para
ingresar huevos y el periodo de desarrollo es de 42 días.
La incubación se divide en dos estapas:
1er etapa: el huevo se incuba durante 40 días.
2da. estapa: posteriormente el huevo se traslada a la nacedora donde el pollo eclosiona y
puede permanecer de 12 horas o hasta tres días. Luego transita al área de crianza, zona
en la que comienza un periodo de mayor cuidado que va desde el primer día hasta los
dos meses, el pollo es entregado tan pronto como sale de la nacedora.
En la primera estapa de vida de las avestruces se debe evitar exponerlas a grados de
humedad altos, por ello es necesario controlar la temperatura.
Un pollito nace a 37 grados centígrados, por lo que gradualmente se le debe ir
descendiendo a razón de dos grados de forma sistemática, después de los 30 días pueden
soportar una temperatura de 15 grados.
El éxito en su negocio
La crianza de avestruces puede llegar a ser un negocio exitoso si exite:
-Capacitación constante del productor.
-Trabajo continuo y conciencia de explotación por parte del productor.
- Elaborar una adecuada estrategia de marketing, de tal manera que se pueda definir el
giro del negocio y la demanda que existe.
-Es importante también saber que además de la excelencia en el manejo de los animales,
es indispensable una promoción continua y permanente de los productos que de ellos se
obtienen.