1. ADECUACIONES PARA EL TDAH
Teniendo como base las áreas de mayor dificultad en el niño, tenga en
cuenta las siguientes adecuaciones para el acompañamiento del alumno.
1. ATENCIÓN.
Adaptar la exigencia de la tarea a su capacidad de atención, dividir el
mismo trabajo que se le asigna a los demás en partes y verificar el
cumplimiento de cada una de éstas hasta que finalice.
Trabajar de manera individual en los momentos que requiera mayor
concentración.
Hacerle participe en la explicación, haciéndole preguntas fáciles para que se
anime al ver que conoce las respuestas, no son preguntas para “corchar”.
Acercarse a su silla y continuar desde allí la explicación cuando veamos que
está perdiendo el hilo.
Apoyar nuestra mano en su hombro mientras explicamos a todos.
Dar un ejemplo o modelo de trabajo y guiar luego al estudiante para que él
también de uno.
Solicite que repita la instrucción después de que usted la ha dado.
Procure no enojarse cuando el estudiante no entiende o no sigue la
instrucción, repítasela en forma más sencilla y clara.
Durante las actividades o las explicaciones haga contacto visual con el
estudiante.
Revise que tenga en el pupitre solo lo necesario para la actividad que está
desarrollando.
Siente al estudiante en un área donde existan menos estímulos distractores.
Siente al estudiante cerca de un buen modelo o cerca de usted.
Incremente la distancia entre su escritorio y la de los compañeros que le
rodean.
Permítale tiempo extra para complementar sus trabajos.
Combine instrucciones orales y escritas.
Hágale énfasis en lo que debe realizar de cada tarea específica.
Utilice señales privadas, previamente establecidas con el estudiante, para
que continué en la actividad.
Evite llamarlo por el nombre delante del grupo o desde la distancia,
desplácese junto a él e indíquele que debe continuar en la actividad.
2. 2. IMPULSIVIDAD.
Cuando se altere por alguna situación permita que el estudiante tome un
período de descanso para poder calmarse y recuperar el control de sí
mismo. Evite al máximo hacer un llamado de atención o una anotación en
estos momentos.
El niño suele ser impulsivo en sus respuestas y acciones, pocas veces analiza
las consecuencias, por lo tanto con él es necesario trabajar en tareas de
resolución de problemas, en donde deba generar ideas y alternativas válidas
de solución.
Ignore la conducta inadecuada.
Use el procedimiento de tiempo fuera o aislamiento para conductas
inadecuadas.
Supervíselo directamente en tiempos de transición como son hacer una fila
para ir a un acto en el patio o a la capilla o una actividad fuera del salón.
Procure corregir en privado conductas inadecuadas.
Elogie las conductas positivas que tenga el estudiante o su aproximación a
ellas.
Frente al deseo de participación en clase, nómbrelo sólo cuando tenga la
mano levantada y conserve las reglas dadas en el salón.
Déle la oportunidad de caminar alrededor del salón o envíelo a realizar una
actividad por fuera como llevar algo a otro salón.
3. ACTIVIDAD MOTORA.
Permítale en algunos momentos trabajar de pie, siempre y cuando no
perturbe el trabajo de otros compañeros.
Evite al máximo utilizar la hora del descanso para que complete la tarea.
Recuerde que él necesita de ese espacio para moverse y relajarse.
Déle tiempo extra para completar las actividades.
Cuando se atrasa frente a la copia permítale que copie a partir de un
cuaderno de un compañero.
Enséñele a dejar espacios en blanco y continuar con el dictado o la copia así
se borre el tablero y que luego complete lo que le falta.
Permita que en algunos momentos un compañero más habilidoso le dicte en
privado en lo que está atrasado.
Facilite que un compañero le preste sus cuadernos o tome fotocopia de
alguno.
3. Más que la copia al pie de la letra lo importante es que el estudiante
entienda la temática o el concepto trabajado, sea flexible frente a esto
permitiendo que el niño haga resúmenes o copie palabras claves y que luego
complemente en casa.
Motívelo para que se aprenda la tarea cuando tiene problemas para
copiarla.
Facilite que cuando en la tarea deba realizar actividades en el libro pueda
anotar directamente en éste las páginas sobre las cuales debe trabajar
encerrándolas en un círculo de un color llamativo.
4. ORGANIZACIÓN Y PLANEACIÓN.
Ayude al estudiante a mantener su escritorio limpio y organizado.
Haga un listado con el estudiante sobre las tareas que tiene pendientes y
debe realizar para el día siguiente.
Cuando dé una instrucción oral, haga que lo escriba en su cuaderno,
recuerde que ellos suelen ser olvidadizos.
Ayúdelo a manejar el cuaderno del deber, revíselo con frecuencia o delegue
que un compañero lo haga para garantizar que ha copiado.
Dé reglas para incrementar la organización del estudiante.
Supervise que lleva a casa el material que requiere para realizar las
actividades del día siguiente o preparar las evaluaciones.
Haga un acuerdo con el padre de manera que lleve a casa diariamente todos
los libros y cuadernos.
Ayúdelo a priorizar las tareas que debe cumplir dentro del salón de clases.
Revise las tareas al menos una vez por semana.
5. DESEMPEÑO ACADÉMICO
· Motivar al estudiante para que relea sus escritos y pueda identificar sus
errores.
· Monitorear la comprensión de la instrucción.
· Reducir la cantidad de tareas.
· Exigir menos respuestas correctas.
· Reducir la cantidad de ejercicios o tareas específicas, sin disminuir el
grado de complejidad.
· Permitir en algunos casos y según el área, el uso de material concreto para
favorecer la resolución de algunas situaciones de aprendizaje.
4. · Acompañar los conceptos que son desconocidos para el estudiante,
escribiendo a continuación y entre paréntesis sinónimos o explicaciones
breves.
· En las evaluaciones tenga encuentra que los resultados de éstas deben
reflejar su conocimiento de la información o sus destrezas y no sus
deficiencias. Utilice métodos alternos de evaluar, por ejemplo, pruebas
orales en vez de escritas, exámenes sin límites de tiempo, o leer el examen
a los niños con problemas de lectura.
6. AUTOESTIMA.
· Haga comentarios positivos frecuentes e inmediatamente después que
haga algo adecuado.
· Dé al estudiante todas las oportunidades posibles de manera que pueda
sentir la satisfacción de haber logrado algo; luego, proporciónele
comentarios positivos.
· Promueva situaciones en las cuales el estudiante pueda demostrar su
sentido de responsabilidad. Asígnele alguna responsabilidad en el salón de
clase.
· Aún cuando el estudiante no muestre ser totalmente responsable,
responda de manera positiva y entusiasta para apoyar los esfuerzos y
promover la satisfacción de lograr éxito.
· Nunca avergüence ni mortifique a un niño por su comportamiento y mucho
menos en público, haga las correcciones de manera personal y teniendo en
cuenta el comportamiento inadecuado no rotulando al niño.
· Ayúdele al niño a expresar sus sentimientos así sean negativos y evite
juzgarlos por éstos.
· Cuando el estudiante esté demasiado frustrado para completar una tarea,
asígnale otra actividad menos complicada para que pueda experimentar algo
de éxito antes de volver a la tarea original.
· Préstele atención cuando esté sentado trabajando. Levántese de vez en
cuando y hágale una señal de aprobación, dígale” vas bien” o “así esOtras
adecuaciones:_________________________________________