Este documento presenta varias escalas de valoración utilizadas en medicina. Describe brevemente cada escala, incluyendo su propósito, los factores que evalúa y cómo se calcula la puntuación. Las escalas cubren diversas especialidades como neumología, cardiología, hematología y neurología. El documento proporciona una guía concisa sobre las herramientas de evaluación clínica disponibles para diferentes condiciones médicas.
2. 1. INTRODUCCION
• Son herramientas que nos permiten evaluar el estado del paciente de forma objetiva y nos ayudan a
tomar decisiones tanto en el diagnóstico como en el tratamiento. Son precisas, sencillas de aplicar y
suponen un recurso necesario para los profesionales de la salud.
• Las razones que impulsan al uso clínico de escalas, pueden ser diversas, como son la ayuda al
diagnóstico, el apoyo al umbral de tratamiento, la comunicación con otros profesionales, y el
establecimiento de un referente poblacional.
• Las propiedades fundamentales que se le exigen a una escala de medida son la validez y la fiabilidad.
3. Para ser aplicados en la Atención primaria, idealmente debieran reunir una serie de
características:
• Que sean breves y compatibles con la actividad clínica habitual.
• Que hayan sido adecuadamente construidas y/o adaptadas a nuestro medio.
• Que sean válidas y fiables. Validación en un medio (por ejemplo el medio especializado
geriátrico) no garantiza la validez en otro (Atención Primaria).
4. ¿Cuándo utilizarlas?
• Ayuda al diagnóstico. El diagnóstico clínico no queda determinado por la prueba, sino que advierte
del riesgo de padecer el problema, siendo el profesional el que confirma o no su presencia, junto a otros
datos clínicos valorados. No se debe olvidar que el criterio profesional es siempre necesario para
tomar una decisión clínica, y que no sea la escala la que decida por el profesional.
• Apoyo al umbral de tratamiento. Si el fin último de la administración de una escala es determinar una
actitud terapéutica, será necesario definir de antemano un umbral de tratamiento, es decir, una
probabilidad de padecer el problema de salud previa a la administración de la escala a partir de la cuál se
decidirá tratar al paciente. Esta probabilidad umbral depende del beneficio de tratar personas con el
problema y del coste de tratar personas sin el problema. Si el beneficio de intervenir es alto y los costes
son pequeños, el umbral de tratamiento será bajo, y viceversa.
5. • Comunicación con otros profesionales. El valor obtenido fruto de la administración de una escala
permite una comunicación sintetizada y objetiva, evitando equívocos por parte del receptor. Esta
utilidad es de gran aceptación para la comunicación entre niveles asistenciales.
• Establecimiento de un referente poblacional. Un punto de corte establecido en la escala puede
servir como criterio de distribución de recursos o bien de derivación a otro profesional.
• Otra utilidad importante se encuentra en la investigación clínica. Al encontrar valores objetivos
cuantificables y con un referente poblacional, la escala se convierte en uno de los métodos de
recogida de datos más utilizados en la investigación cuantitativa.
6. Finalmente, es preciso recordar que el uso indiscriminado de instrumentos clinimétricos
nunca podrá suplir las imprescindibles habilidades en entrevista clínica y el conocimiento
cualitativo de las respuestas humanas a la hora de emitir juicios. Es en sinergia con estas
habilidades y conocimientos, como aumenta y se enriquece la deliberación clínica.
9. BODE Y BODEx.
• Índice que nos da una aproximación
pronostica a la enfermedad pulmonar
obstructiva crónica (EPOC).
10. CAT.
• El cuestionario CAT refleja los efectos de
la enfermedad sobre la salud del paciente.
Es un cuestionario específico de calidad de
vida para EPOC, que evalúa hasta un total
de 8 ítems que permiten obtener una
puntuación entre 0 y 40.
• No es una herramienta de diagnóstico i
de pronóstico, y su función es
complementar la información obtenida de
la medición de la función pulmonar.
11. CURB-65.
• Es una escala que permite evaluar la
severidad de la neumonía adquirida en la
comunidad.
• Por cada uno de los factores clínicos que
se presenten se suma un punto. La
calificación más baja es 0 y la más alta es de
5. La mortalidad es proporcional a la
calificación obtenida, y orienta el momento
de decidir si es conveniente hospitalizar a
un paciente o no.
12. FINE.
• Esta clasificación asigna una puntuación en
función de 20 parámetros; con esa puntuación se
clasifica en uno de los 5 estratos, diferenciados
por su mortalidad. La estrategia de este sistema
de clasificación se basa en que la mortalidad a
los 30 días es distinta para cada grupo.
14. GINA.
• La Global Initiative for Asthma (GINA)
estableció un sistema práctico de
clasificación, considerando aspectos clínicos
y funcionales como frecuencia de los
síntomas respiratorios diurnos y nocturnos,
así como la función pulmonar.
16. GOLD.
• Para el tratamiento de inicio se debe utilizar la
clasificación GOLD ABCD, tras el diagnóstico en
pacientes que no han sido tratados previamente:
17. mMRC.
• La escala de disnea mMRC es un
instrumento que establece la gravedad de
la disnea en relación con diversas tareas
físicas. Consta de 5 ítems y su valor se
establece en un rango de 0 (no disnea o
solo con grandes esfuerzos) a 4 (disnea de
reposo).
18. • Escala PESI (tabla 1) se categorizó en 5 grupos de riesgo: (I)
muy bajo riesgo, (II) bajo riesgo, (III) riesgo intermedio, (IV)
alto riesgo y (V) muy alto riesgo; estas categorías se
establecen teniendo encuentra las siguientes variables: edad,
sexo; comorbilidades: cáncer, falla cardiaca, EPOC; y estado
clínico: alteración del estado mental, FC mayor o igual a 100
lPM, PAS menor de 100 mmHg, FR mayor o igual a 30 rpm, T
menor de 36 oC, saturación arterial de oxígeno menor de 90.
PESI.
• El Índice de Severidad para el Embolismo Pulmonar, fue
concebido como un instrumento de evaluación rápida para
Servicios de Urgencias y Emergencias, con el fin principal de
poder seleccionar aquellos pacientes que inicialmente podrían
tener un bajo riesgo. Este instrumento medía la mortalidad
prevista a los 30 días basándose en hallazgos clínicos
fácilmente determinables.
22. CHA2DS2 VASc.
• El CHADS2-VASc Score es la evolución de un instrumento muy utilizado con el fin de estimar, de una forma
relativamente sencilla el riesgo de sufrir un Accidente Cerebrovascular en el caso de los enfermos con Fibrilación
Auricular de origen no reumático, el CHADS2. Fundamentalmente se utilizan ambos para decidir cuáles de estos
enfermos deberían tener tratamiento anticoagulante o antiagregante. Su resultado es una puntuación, que
indica el porcentaje de riesgo de sufrir un ACV por el enfermo en los siguientes doce meses.
• CHADS2-VASc responde a la crítica que se hizo a su antecesor, de que no incluía algunos factores que
también podrían influir en la aparición de ACV, aunque es ligeramente más complejo. Su utilización es
recomendada por las Sociedades Europea y Canadiense de Cardiología.
23. CRUSADE.
• La escala de riesgo CRUSADE cuantifica el
riesgo de sangrado mayor intrahospitalario
independientemente del tipo de tratamiento
empleado, lo que nos ayuda a establecer el
riesgo de sangrado basal de aquellos pacientes
con síndrome coronario agudo sin elevación del
segmento ST.
24. GRACE. Predice la probabilidad de muerte
intrahospitalaria, y a los 6 meses después del
alta hospitalaria tras un evento coronario agudo
25. HAS-BLED. Riesgo de hemorragia en
anticoagulación para F. Auricular
• El HAS-BLED score fue diseñado tras la evaluación de
3978 pacientes anticoagulados a causa de padecer una
Fibrilación Auricular. Este sistema de evaluación mide el
riesgo de padecer en un año una hemorragia
importante. Clasifica solamente en tres niveles, pero ha
sido recomendada por la European Society of Cardiology
(ESC), y por la Sociedad Canadiense de Cardiología. Un
score igual o mayor de 3 puntos, no siempre significa la
no administración de anticoagulación o detener esta,
sino que es un indicativo de una estrecha supervisión
periódica del paciente.
0: Riesgo Bajo. 1-2: Riesgo Intermedio. >3: Riesgo Alto.
*INR LÁBIL: que esté más del 60% fuera de rango.
26. KILLIP.
• En 1967, Killip y Kimball describieron la evolución de 250
pacientes con IAM en función de la presencia o ausencia de
hallazgos físicos que sugirieran disfunción ventricular,
diferenciando 4 clases (I, II, III y IV) para las cuales la
mortalidad intrahospitalaria fue del 6, 17, 38 y 81 %,
respectivamente.
• Una mayor clase de Killip se asocia con mayor mortalidad
intrahospitalaria, a los 6 meses y al año. Similares resultados
se han obtenido para pacientes con síndrome coronario
agudo sin elevación del ST en los que la clasificación de Killip
es también un poderoso predictor independiente de
mortalidad por todas las causas a los 30 días y 6 meses
(siendo el más poderoso el presentar un Killip III/IV).
27. NYHA.
• Comúnmente utilizada como método para la
clasificación funcional de pacientes con
insuficiencia cardíaca, fue propuesta en 1928 y
revisada en varias ocasiones, la última en 1994.
Designa 4 clases (I, II, III y IV), basándose en las
limitaciones en la actividad física del paciente
ocasionadas por los síntomas cardíacos.
28. PRETEMED 2007.
• La presente versión de la guía PRETEMED 2007 constituye una
actualización revisada y ampliada de su primera edición, sobre factores
de riesgo y profilaxis de la enfermedad tromboembólica venosa (ETV) en
pacientes con procesos médicos. Su finalidad es ayudar en la toma de
decisiones sobre actuaciones preventivas para la ETV a los
profesionales sanitarios que atienden a pacientes con procesos médicos,
tanto en el ámbito hospitalario como en el ambulatorio. En concreto, su
objetivo es facilitar una valoración del riesgo en sujetos con patologías
médicas de sufrir una ETV y ofrecer las recomendaciones de
prevención. Por tanto, va dirigida a los profesionales sanitarios de
cualquier especialidad que en régimen ambulatorio, urgencias médicas u
hospitalización atienden a este tipo de pacientes con patología no
quirúrgica.
• En esta guía de 2007 se presentan 48 recomendaciones que aclaran
y ayudan a especificar la necesidad o no necesidad de tromboprofilaxis
según las condiciones dadas en cada supuesto.
29. SCORE 2019.
• El riesgo (absoluto) cardiovascular es la probabilidad de que ocurra un
determinado episodio vascular en un determinado periodo de tiempo en base a
los FRCV que tiene el paciente que pertenece a un determinado grupo
poblacional. Por lo tanto, no hay un sistema universal de cálculo del RCV. Las
guías europeas de prevención cardiovascular y las de control de la dislipemia, a
las que se adhiere la SEA a través del CEIPC, recomiendan el uso del sistema
SCORE para valorar el RCV en su versión para países de bajo RCV en situación
de prevención primaria, es decir, para individuos que aún no han tenido
episodios cardiovasculares. Este sistema calcula el riesgo de muerte
cardiovascular de causa aterosclerótica en un plazo de 10 años considerando
los siguientes factores de riesgo: sexo, edad, tabaquismo, PAS y CT.
• El primer algoritmo que se propuso para la estimación del riesgo
cardiovascular surgió en 1991, con el estudio de Framingham, este estudio
consideró varios factores de riesgo como: edad, sexo, colesterol total, colesterol
HDL, presión arterial y tabaquismo. Este algoritmo predice el riesgo absoluto de
padecer una enfermedad cardiovascular a 10 años entre las que destacan
infarto agudo al miocardio, accidente cerebrovascular, enfermedad arterial
coronaria y muerte por enfermedad cardiovascular.
● Bajo riesgo: RCV a 10 años según SCORE <1%.
● Riesgo moderado: RCV a 10 años según SCORE >1% y <5%.
● Riesgo alto: RCV a 10 años según SCORE ≥5% y <10%.
● Riesgo muy alto: RCV a 10 años según SCORE ≥10%.
32. ABCD2.
• La escala ABCD² es el resultado de una puntuación clínica para
determinar el riesgo de accidente cerebrovascular dentro de los
primeros dos días después de un accidente isquémico
transitorio (AIT), un trastorno en la cual la escasez de oxígeno
en el cerebro produce disfunción cerebral temporal.
Recientemente se ha demostrado su utilidad en predecir el
riesgo de accidente cerebrovascular recurrente en las siguientes
horas seguidas de un AIT o de un accidente cerebrovascular
leve.
• La escala ABCD2 se basa en cinco parámetros (por sus siglas en
inglés): edad (Age), presión arterial (Blood pressure), las
características Clínicas, y la Duración de la AIT, y la presencia de
la Diabetes. Cada parámetro recibe una calificación y los
resultados se añaden a un resultado que oscila entre cero y
siete. El resultado de la escala ABCD es una versión modificada
de la antigua escala ABCD, que abarcaba los mismos
parámetros, menos la diabetes.
33.
34. GDS-FAST.
• La escala de FAST es una escala
funcional diseñada para evaluar a los
pacientes en las etapas moderadas a
severas de la demencia.
35. GLASGOW.
• La Escala de Coma de Glasgow (en Inglés Glasgow Coma Scale
(GCS)) es una escala de aplicación neurológica que permite medir
el nivel de conciencia de una persona. Una exploración neurológica de
un paciente con traumatismo craneoencefálico debe ser simple,
objetiva y rápida. La evaluación del nivel de conciencia es el parámetro
más importante que debe tenerse en cuenta. Han de evitarse términos
ambiguos como estuporoso, somnoliento, inconsciente o comatoso, que
son subjetivos y no permiten tener la certeza del curso clínico del
paciente. Por ello se ha universalizado el empleo de la GCS.
• La Escala de Coma de Glasgow utiliza tres parámetros que han
demostrado ser muy replicables en su apreciación entre los distintos
observadores: la respuesta verbal, la respuesta ocular y la respuesta
motora. El puntaje más bajo es 3 puntos, mientras que el valor más alto
es 15puntos. Debe desglosarse en cada apartado, y siempre se puntuará
la mejor respuesta. La aplicación sistemática a intervalos regulares de
esta escala permite obtener un perfil clínico de la evolución del
paciente. TCE GRAVE 3-8
TCE MODERADO 9-12
TCE LEVE 13-15
36. HUNT & HESS.
• La escala de HUNT y HESS en una manera de clasificar la
gravedad de una hemorragia subaracnoidea no traumática,
muestra una correlación específica con el resultado del
tratamiento quirúrgico.
ESTADIAJE MORTALIDAD
PREOPERATORIA
SUPERVIVENCIA
GRADO I 0-5% 70%
GRADO II 2-10% 60%
GRADO III 10-15% 50%
GRADO IV 60-70% 20%
GRADO V 70-100% 10%
37. NIHSS.
• Se trata de una escala para evaluación cuantitativa del déficit neurológico tras un
accidente vascular cerebral agudo. Empleada inicialmente como una herramienta de
investigación para evaluar los datos de referencia en pacientes con accidente
cerebrovascular agudo, pasó a ser ampliamente empleada para medir el deterioro de
los pacientes con ACV, determinar las exploraciones y tratamiento más adecuados, y
predecir la evolución del paciente, como herramienta de pronóstico a corto y largo
plazo, así como instrumento de comunicación entre los profesionales que atienden a
este tipo de enfermos.
• La escala NIHSS puntúa de forma numérica la gravedad del ictus. Se debe aplicar
al inicio y durante la evolución del ictus. Puntuación mínima 0, puntuación máxima
42.
• Determina la gravedad del ictus: Leve < 4, Moderado < 16, Grave < 25, Muy
grave ≥ 25 2).
• Indica la necesidad de tratamiento revascularizador: NIHSS entre 4 y 25.
• Tiene valor pronóstico.
• Limitaciones: puntúa más alto en los territorios de la ACM izquierda que en los
de la derecha (mayor afectación de las funciones corticales) y no valora
adecuadamente la afectación del territorio vértebro-basilar.
38. RANKIN MODIFICADA.
• La escala de Rankin modificada se utiliza para
medir el resultado funcional tras un ictus y es una de
las escalas más usadas. En la práctica clínica no es
infrecuente encontrar discrepancias entre los
médicos a la hora de evaluar con esta escala a un
mismo paciente. Para evitar esta variabilidad se ha
sugerido que el uso de una entrevista estructurada
(con una lista de actividades de la vida diaria) podría
mejorar la validez entre los evaluadores.
• Propuesta publicada en la revista Stroke en 2002
para mejorar el uso de la Escala de Rankin
modificada: En el Código Ictus es de suma importancia dado que uno de los criterios de aplicabilidad es cuando el Rankin del paciente es menor/igual a 3.
40. IMC.
• Esta fórmula matemática fue ideada por el
estadístico belga Adolphe Quetelet, por lo que
también se conoce como índice de Quetelet o
Body Mass Index (BMI).
• Actualmente, esta fórmula está cayendo en
desuso porque se está viendo que el IMC no
hace diferencia entre la grasa corporal y la
muscular, lo que hace que no sea muy exacto.
La Sociedad Española de Obesidad propone en su página web otra clasificación que atiende a un desglose de las categorías de Sobrepeso y Obesidad.
41. MNA.
• La versión larga del MNA es una herramienta de cribado validada que identifica personas ancianas
desnutridas o en riesgo de desnutrición. La versión larga del MNA requiere entre 10 y 15 minutos para
completarse. La versión revisada del MNA-SF, es una versión reducida del MNA que toma menos de 5
minutos en ser completada. Conserva la precisión y validez de la versión larga del MNA. Actualmente,
el MNA-SF es la versión preferida del MNA en la práctica clínica habitual en el ámbito comunitario,
hospitalario y en centros de larga estancia (residencias geriátricas, centros socio-sanitarios), debido a su
facilidad de uso y practicidad.
• Se recomienda repetir el MNA con una periodicidad anual en pacientes ambulatorios, cada tres
meses en pacientes institucionalizados o en aquellos que han sido identificados como desnutridos o en
riesgo de malnutrición, y cuando ocurra cualquier cambio en la situación clínica del paciente.
• El MNA fue desarrollado por Nestlé y geriatras de liderazgo internacional. Suficientemente
validado en estudios internacionales en varios escenarios clínicos, el MNA correlaciona con morbilidad
y mortalidad.
42. 6. NEFROLOGÍA.
• ESTADIAJE DE LA INSUFICIENCIA
RENAL CRÓNICA.
• Se define enfermedad renal crónica (ERC)
como la presencia durante de tres o más
meses de:
• Un filtrado glomerular estimado de < 60
ml/min/1.73m^2.
• Lesión renal: alteraciones morfológicas
observadas por pruebas de imagen,
biopsia o la presencia de proteinuria.
44. ECOG.
• La escala ECOG es una forma práctica de medir la
calidad de vida de un paciente exclusivamente con
cáncer u oncológico, cuyas expectativas de vida cambian
en el transcurso de meses, semanas e incluso días.
• La principal función de esta escala es la de objetivar
la calidad de vida del paciente o "performance status".
45. KARNOFSKY.
• El índice de Karnofsky es una escala de valoración de la capacidad
funcional de los pacientes en el ámbitos de las tareas rutinarias que este
puede realizar, está validad tanto en pacientes oncológicos como no
oncológicos. Presenta una serie de características:
• Permite conocer la capacidad que tiene el paciente para las
actividades de la vida cotidiana.
• Es un elemento predictor independiente de mortalidad, en
enfermedades oncológicas y no oncológicas.
• Sirve para la toma de decisiones clínicas y para valorar el impacto
del tratamiento y progresión de la enfermedad.
• Karnofsky ≤50 indica alto riesgo de muerte en los 6 meses
siguientes.
46. KHORANA.
• El modelo predictivo de Khorana se desarrolló para
estratificar el riesgo de enfermedad tromboembólica en
pacientes con cáncer y en tratamiento con quimioterapia
y, por tanto, identificar a aquellos que podrían
beneficiarse de tromboprofilaxis. Este score es el único
modelo predictivo validado de ETV sintomática en
pacientes oncológicos que reciben quimioterapia.
• Clasificando según la puntuación obtenida en: riesgo
bajo (0 puntos), riesgo intermedio (1-2 puntos) y riesgo
alto (mayor o igual a 3 puntos).
47. MASCC.
• Se trata de un modelo simple basado en el modelo
predictivo de la Multinational Association for supportive
Care in Cancer, que permite evaluar con cierta confianza el
riesgo de complicaciones y la mortalidad esperada en
enfermos con neoplasia que presentan neutropenia febril.
Cada uno de los factores solicitados disminuye el riesgo.
• Las variables pronósticas que demostraron poseer un
peor pronóstico fueron la edad superior a 60 años, los
antecedentes de EPOC, la presencia de hipotensión, el grado
de afectación general durante el episodio febril, el estado de
deshidratación y presentar un tumor sólido o una neoplasia
hematológica con antecedentes de infección fúngica
invasiva, así como la condición de ingresado.
49. CAGE.
• El cuestionario CAGE fue originalmente desarrollado por
Ewing y Rouse en 1968 para detectar bebedores
rutinarios. En 1974, Mayfield publicó el primer estudio
de validación y posteriormente su fiabilidad y validez ha
sido bien documentada en diferentes medios (hospital,
otras áreas clínicas...) y poblaciones. Representa, por
tanto, un método eficaz de screening en el abuso de
alcohol. -Ha sido también modificado para el screening
de abuso de drogas (CAGE-AID) y puede ser incorporado
en la historia clínica rutinaria ya que su mayor ventaja
es la brevedad.
50. CDAI.
• Necesitando un índice de medición del grado de actividad
de la EC, el National Cooperative Crohn ́Disease Study Group
elaboró en Septiembre de 1975, a partir de 18 variables
predictoras, y mediante una ecuacion de regresión múltiple,
numéricamente simplificada en 8 variables, el CDAI,
intrumento medidor de la actividad de la EC más
comunmente utilizado.
• Para calcular el CDAI la escala es multiplicada por el factor
de corrección de cada variable, tal y como se muestra en la
tabla previa, y posteriormente las 8 variables son sumadas. El
score tiene un rango aproximado entre 0 y 600, tomando
como remisión un CDAI < 150 hablando de enfermedad
severa si CDAI > 450.
51. Ventajas.
• Es el índice clínico más frecuentemente usado, constituyendo el patrón oro.
• Ha sido rigurosamente desarrollado y validado, no sólo para valorar el grado de severidad de
enfermedad, sino también para valorar la eficacia de numerosos tratamientos (corticoides,
infliximab...).
Desventajas.
• La necesidad de realizar exploraciones físicas y obtener datos de laboratorio para su cálculo
implica un difícil y engorroso manejo.
• Pacientes cuyos síntomas primarios son secundarios a enfermedad perianal, suelen tener scores
relativamente bajos, probablemente porque la presencia de fístulas en CDAI tan solo constituyen
20 puntos.
52. CHILD-PUGH.
• La clasificación modificada Child-Pugh de severidad de enfermedad
hepática se realiza de acuerdo al grado de ascitis, las concentraciones
plasmáticas de bilirrubina y albúmina, el tiempo de protrombina, y el
grado de encefalopatía.
• Una puntuación total de 5-6 es considerada grado A (enfermedad
bien compensada); 7-9 es grado B (compromiso funcional significativo);
y 10-15 es grado C (enfermedad descompensada). Estos grados se
correlacionan con una sobrevida del paciente al año y a los 2 años.
• Objetivo de estratificar el riesgo quirúrgico en pacientes con
descompensación portal.
53. METAVIR.
• La escala METAVIR estratifica la
hepatopatía por VHC según el grado de
fibrosis que se obtiene a través de métodos
invasivos como la biopsia hepática o no
invasivos como el fibroscan.
54. RANSON.
• Esta escala está basada en la medición de 11
factores. 5 controlados en la admisión y 6
revisados a las 48 horas. La presencia de 3 o más
de los siguientes factores predicen un mayor
riesgo de muerte o la gravedad de la
enfermedad con una sensibilidad del 60-80%.
• Se diferencian los valores del origen (biliar o
no biliar) de la pancreatitis para determinar el
valor pronóstico de la escala
Existen otros criterios pronósticos
(Balthazar-Ranson) de la pancreatitis
en función de los hallazgos radiológicos
en el TC con y sin contraste.
55. TREY.
• La encefalopatía hepática (EH) es una condición
grave, progresiva pero potencialmente reversible
caracterizada por un espectro de anormalidades
neuropsiquiátricas y desórdenes motores que se
observan en pacientes con disfunción hepática de
diferentes grados, después de la exclusión de otras
causas conocidas de enfermedad cerebral.
• Según la anormalidad hepática, la EH se puede dividir
en tipo A (asociada con enfermedad hepática aguda),
tipo B (asociada con bypass portosistémicos sin
enfermedad hepatocelular intrínseca) y tipo C (asociada
con cirrosis e hipertensión portal y/o cortocircuitos
portosistémicos).
56. TRUELOVE-WITTS o MONTREL.
• La valoración de la actividad de la
enfermedad en la CU es importante tanto
para el pronóstico como para la decisión
terapéutica a tomar, al igual que en el EC.
57. Ventajas:
• Se trata de una clasificación fiable y simple para utilizar en la práctica clínica.
• Mayor validez si se aplica a pacientes afectos de colitis extensa.
Desventajas.
• No ha sido formalmente validado.
• Menos fiable en pacientes con colitis limitada.
• Es un instrumento de medida cualitativo.
• No tiene en cuenta hallazgos endoscópicos.
• El estadio de moderada actividad comprende un amplio rango de actividad de enfermedad.
59. BARTHEL.
• El índice de Barthel o escala de Barthel es un instrumento utilizado
por profesionales sociosanitarios para la valoración funcional de un
paciente y realizar un seguimiento de su evolución. En el caso de los
Trabajadores Sociales, valoran la independencia o dependencia de la
persona en cada una de las actividades de la vida diaria (AVD),
obteniéndose como resultado el nivel de desempeño de la persona y
realizando una intervención rehabilitadora/compensadora y/o de
mantenimiento acorde a los resultados obtenidos. Promocionando
y/o manteniendo la independencia de la persona.
• La escala mide la capacidad de una persona para realizar 10
actividades de la vida diaria, que se consideran básicas, de esta forma
se obtiene una estimación cuantitativa de su grado de independencia.
60. CHARLSON.
• En inglés, Charlson Comorbidity Index, es un sistema
de evaluación de la esperanza de vida a los diez años, en
dependencia de la edad en que se evalúa, y de las
comorbilidades del sujeto. Además de la edad, consta
de 19 items, que, si están presentes, se ha comprobado
que influyen de una forma concreta en la esperanza de
vida del sujeto. Inicialmente adaptado para evaluar la
supervivencia al año, se adaptó finalmente en su forma
definitiva para supervivencia a los 10 años.
• Existe una versión abreviada cuya utilidad está
validada a corto plazo con menos ítems.
61.
62. DOWNTON.
• La escala de Downton, que se utiliza para evaluar el
riesgo que presenta una persona de sufrir una caída
con el fin de, en caso necesario, poder implementar
medidas preventivas encaminadas a evitar nuevas
caídas.
• Esta escala tiene en cuenta si ha habido o no caídas
previas, las causas que la han producido o los factores
de riesgo que presenta en este sentido cada paciente
y la edad, asignando a cada punto un valor de 0 ó 1.
Cuando el resultado de la escala es de tres o más
puntos se considera que el paciente tiene un alto
riesgo de sufrir una caída.
63. EMINA.
• Se trata de un cuestionario con 5
ítems. Cada ítem responde a una
escala tipo Likert de 0 a 3, con un rango
total que oscila entre 0 y 15.
64. LAWTON-BRODY.
• Publicada en 1969 , fue desarrollada en el Centro Geriátrico de
Filadelfia, para población anciana, institucionalizada o no, con objeto de
evaluar autonomía física y AIVD. La escala de Lawton es uno de los
instrumentos de medición de AIVD más utilizado internacionalmente y
la más utilizada en las unidades de geriatría de España, sobre todo a
nivel de consulta y hospital de día.
• Valora 8 items (capacidad para utilizar el teléfono, hacer compras,
preparación de la comida, cuidado de la casa, lavado de la ropa, uso de
medios de transporte, responsabilidad respecto a la medicación y
administración de su economía)y les asigna un valor numérico 1
(independiente) o 0 (dependiente) . La puntuación final es la suma del
valor de todas las respuestas. Oscila entre 0 (máxima dependencia) y 8
(independencia total).
65. Ventajas.
• Una gran ventaja de esta escala es que permite estudiar y analizar no sólo su puntuación global sino también cada uno
de los ítems.
• Ha demostrado utilidad como método de valoración objetivo y breve que permite implantar y evaluar un plan terapéutico
tanto a nivel de los cuidados diarios de los paciente como a nivel docente e investigador.
• Detecta las primeras señales de deterioro del anciano.
• Tiene coeficiente de reproducibilidad inter e intra observador alto (0.94). No se han comunicado datos de fiabilidad. En
general es una escala sensible pero poco específica.
Desventajas.
• Las variables que se estudian están influidas por aspectos culturales y del entorno, por lo que es necesario adaptarlas al
nivel cultural de la persona; algunas actividades requieren ser aprendidas o requieren la presencia de elementos externos
para su realización.
• Se considera una escala más apropiada para las mujeres ( muchas de las actividades que mide la escala han sido
realizadas tradicionalmente por ellas) pero también se recomienda su aplicación a los hombres aunque todavía están
pendientes de identificar aquellas actividades instrumentales realizadas por ellos según los patrones sociales.
66. MINIMENTAL.
• El mini-mental test es una prueba sencilla que permite
detectar la presencia de deterioro cognitivo, es decir, de
una demencia. Puede ser normal en personas con
deterioro cognitivo leve o con formas incipientes de
Alzheimer refiriéndose, en estos casos, a estudios con
pruebas más sofisticadas. El mini-mental mide diferentes
áreas del conocimiento, como la memoria, la
comprensión verbal, la orientación y otra serie de
habilidades.
• Existe una versión adaptada al castellano por Lobo et
al. El MEC de Lobo es la versión adaptada y validada en
España del MMSE (Mini-Mental State Examination) de
Folstein. Se trata de un test de cribaje de demencias, útil
también en el seguimiento evolutivo de las mismas.
67. • Clasificación según puntuación en el test:
• Puntuación normal: 24 puntos o más.
• Deterioro leve: entre 19 y 23 puntos.
• Deterioro moderado: entre 14 y 18 puntos.
• Deterioro grave: <14 puntos.
• Existen unas normas de aplicación según edad y nivel educativo.
• Lobo y Col proponen unos puntos de corte según la edad:
• Pacientes geriátricos (>65 años): punto de corte 23/24.
• Pacientes no geriátricos: punto de corte 27/28.
68. MOCA.
• El Montreal Cognitive Assessment (MoCA) es un test de tamizaje
breve, diseñado para ayudar en la detección del deterioro cognitivo
leve (DCL) y la demencia. Sus características psicométricas describen un
alto nivel de confiabilidad y validez con una sensibilidad de 87% y una
especificidad en un rango de 90% para DCL con un punto de corte <26 y
una sensibilidad del 87% para la demencia de tipo Alzheimer con una
especificidad del 100%, teniendo un punto de corte <18.
• El MOCA es una herramienta de cribado, de uso libre, desarrollada
originalmente en 2005 precisamente como respuesta a la dificultad
para identificar la presencia de deterioro cognitivo con el MMSE.
Constituye una batería de pruebas breves, de fácil administración, con
una duración aproximada de 10 minutos, cuyo propósito es detectar la
presencia de DCL y diferenciarlo de alteraciones cognitivas
consecuentes al envejecimiento normal. Evalúa las funciones
ejecutivas, la capacidad visuoespacial, la memoria, la atención, la
concentración y la memoria de trabajo, el lenguaje y la orientación, y
la puntuación máxima es de 30 puntos
69. NORTON.
• Según el Departamento de Salud y Servicios
Humanos de Estados Unidos, la Escala de Norton se
desarrolló en la década de 1960 y se utiliza para
evaluar el riesgo de que un paciente desarrolle
úlceras por presión. Su principal objetivo es prevenir
la aparición de este tipo de úlceras. Así, se utiliza,
generalmente, en geriatría para pacientes
encamados, tanto crónicos como en pacientes
ingresados en unidades en los hospitales.
• Además, la sensibilidad y la especificidad del
sistema de puntuación de Norton para predecir las
úlceras por presión son del 63 y del 70%,
respectivamente.
70. • Una vez hemos evaluado cada uno de los criterios y
hemos realizado la suma, es importante saber que,
cuanto menor sea el puntaje de una persona, mayor
será el riesgo de que desarrolle una úlcera por presión.
En general, se considera que las personas que
obtienen una puntuación de 14 o menos están en
riesgo.
• Puntuación de 5 a 9 → Riesgo muy alto.
• Puntuación de 10 a 12 → Riesgo alto.
• Puntuación de 13 a 14 → Riesgo medio.
• Puntuación mayor de 14 → Riesgo mínimo o sin
riesgo.
71. OLLERO.
• El concepto de pluripatología ha surgido de la necesidad
de un abordaje más integral a una población de pacientes
con dos o más enfermedades crónicas sintomáticas, en las
que resulta difícil establecer los protagonismos, pues en
general presentan un grado equivalente de complejidad, con
similar potencial de desestabilización, dificultades de
manejo e interrelaciones. Se trata, por tanto, de un
concepto que se centra en el paciente desde un punto de
vista global, y no en una enfermedad ni en el profesional
que lo atiende.
• El conjunto de enfermedades que definen a un paciente
como pluripatologico no está bien definido. En España, la
clasificación que goza de mayor aceptación es la del
Servicio Andaluz de Salud.
72. PFEIFFER.
• Es una prueba desarrollada por Pfeiffer en el
año 1975, con 10 items que valoran varias
funciones: orientación, memoria de evocación,
concentración y cálculo. Muy breve pero con una
aceptable capacidad discriminatoria.
73. PROFUND.
• El Índice PROFUND es un índice
pronóstico específico para pacientes
pluripatológicos que ha sido diseñado y
validado en población hospitalaria y de
Atención Primaria española. Las
dimensiones del índice PROFUND se
valoran de forma dicotómica.
74. • El índice estratifica de forma precisa a los
pacientes pluripatológicos en cuatro grupos
de riesgo en función de puntuación
obtenida en las dimensiones:
75. • Los 36 ítems del instrumento cubren las siguientes escalas: Función física, Rol físico,
Dolor corporal, Salud general, Vitalidad, Función social, Rol emocional y Salud
mental. Adicionalmente, el SF-36 incluye un ítem de transición que pregunta sobre el
cambio en el estado de salud general respecto al año anterior. Este ítem no se utiliza para
el cálculo de ninguna de las escalas pero proporciona información útil sobre el cambio
percibido en el estado de salud durante el año previo a la administración del cuestionario.
• Los estudios publicados sobre las características métricas de la versión española del SF-
36 aportan suficiente evidencia sobre su fiabilidad, validez y sensibilidad. Estos
resultados son consistentes con el instrumento original, lo que demuestra que la versión
española es equivalente y puede ser utilizada en estudios nacionales e internacionales.
• En 1996 se desarrolló la versión 2.0 del cuestionario original SF-36, con el principal
objetivo de mejorar las características métricas de las 2 escalas Rol emocional y Rol físico.
• Aunque el cuestionario SF-36 puede ser cumplimentado en un período que oscila entre 5 y
10 min, en determinados contextos puede representar demasiado tiempo. La obtención de
las 2 medidas sumario del SF-36 motivó el desarrollo de un cuestionario más corto que
fuera capaz de reproducirlas con un número menor de ítems, el SF-12 y SF-8.
SF-36.
• El cuestionario de salud SF-36 fue desarrollado a
principios de los noventa, en Estados Unidos, para su
uso en el Estudio de los Resultados Médicos
(Medical Outcomes Study, MOS). Es una escala
genérica que proporciona un perfil del estado de
salud y es aplicable tanto a los pacientes como a la
población general. Ha resultado útil para evaluar la
calidad de vida relacionada con la salud (CVRS)
en la población general y en subgrupos específicos,
comparar la carga de muy diversas enfermedades,
detectar los beneficios en la salud producidos por un
amplio rango de tratamientos diferentes y valorar el
estado de salud de pacientes individuales. Sus
buenas propiedades psicométricas, que han sido
evaluadas en más de 400 artículos, y la multitud de
estudios ya realizados, que permiten la comparación
de resultados, lo convierten en uno de los
instrumentos con mayor potencial en el campo de la
CVRS.
76.
77. WHOQOL-100 y WHOQOL-BREF.
• Proporciona un perfil de calidad de vida percibida por la persona.
Fue diseñado para ser usado tanto en población general como en
pacientes. La WHOQOL-BREF proporciona una manera rápida de
puntuar los perfiles de las áreas que explora, sin embargo no
permite la evaluación de las facetas individuales de las áreas. Se
recomienda utilizarla en epidemiología y en clínica cuando la calidad
de vida es de interés, pero no es el objetivo principal del estudio o
intervención.
• Existen dos versiones la WHOQOL-100 y la WHOQOL-BREF ambas
con estudios de validación en español (que aún continúan
completándose). La versión aquí recogida, la WHOQOL-BREF (26
ítems) produce un perfil de 4 dimensiones: Salud física, Salud
psicológica. Relaciones sociales, Ambiente.
78. 10. ANESTESIA Y REANIMACIÓN.
• RASS O RICHMOND.
• SOFA y qSOFA.
79. RASS o RICHMOND.
• La escala Richmond Agitation Sedation Scale más
conocida como escala RASS, mide el estado de
sedación de los pacientes y es altamente utilizada en
las Unidades de Cuidados Intensivos con pacientes
bajo sedación médica. Esta escala fue diseñada en
1999 en el Hospital de Richmond en el estado de
Virginia, Estados Unidos. En varios estudios
posteriores se demostró su validez a la hora de
mostrar cambios en la sedación del paciente y
detectar estado de agitación o delirio. Es una escala
validada en España.
80. SOFA.
• Sistema de evaluación de la aparición y evolución del Fallo
Multiorgánico en enfermos de UCI. Se emplean valoraciones de
la situación de seis órganos o sistemas, y de algunos esquemas
de tratamiento (vasoactivos). Cada uno de los órganos es
puntuado de 0 a 4. La puntuación es la suma de todas las
evaluaciones aisladas de los órganos. Una puntuación diferente
de cero y menor de 3 se evalúa como disfunción orgánica,
mientras que puntuaciones superiores indican fallo orgánico.
Distintos trabajos han indicado su utilidad en el pronóstico. Un
incremento de la puntuación SOFA durante las primeras 48 horas
tras el ingreso, predice una mortalidad superior al 49%, fuere cual
fuere la puntuación inicial. En SOFA mayores de 15 puntos, la
mortalidad esperada es mayor del 90%. También se ha mostrado
útil en decidir la continuación o no del esfuerzo terapéutico.
81. • Se ha desarrollado una nueva escala, denominada qSOFA (quick SOFA), que incluye exclusivamente criterios
clínicos fácil y rápidamente mensurables a pie de cama. Los criterios del qSOFA son:
• Alteración del nivel de conciencia, definido como una puntuación en la escala de Glasgow ≤ 13.
• Tensión arterial sistólica ≤ 100 mmHg.
• Frecuencia respiratoria ≥ 22 rpm.
• Cuando al menos 2 de los 3 criterios están presentes presenta una validez predictiva similar al SOFA para la
detección de aquellos pacientes con sospecha de infección y probabilidad de presentar una evolución
desfavorable. Por lo tanto, resultaría útil en la identificación de pacientes que pudieran precisar de un nivel de
vigilancia más estrecho y un estudio más específico en busca de la posibilidad de presentar disfunción orgánica.
83. BASDAI.
• El BASDAI (Bath Ankylosing Spondylitis Disease
Activity Index) es el instrumento sintético más
utilizado para valorar la actividad clínica de la
Espondilitis Anquilosante. Abarca los dominios de
fatiga o cansancio, dolor vertebral, dolor o
tumefacción en las articulaciones periféricas, dolor
entesopático, y la gravedad y duración de la rigidez
matinal. El BASDAI ha demostrado ser un
instrumento válido, fiable, sensible y factible para
aplicar tanto en la práctica clínica diaria como en los
estudios de investigación.
El cuestionario consta de 6 preguntas con una puntuación del 1
al 10. El resultado final se consigue con el sumatorio de
puntuación de los ítems 1, 2, 3, 4, (5+6)/2 entre 5. Se obtiene
una puntuación entre el 1 y el 10 que nos determina el grado de
actividad de la enfermedad.
84. DAS, DAS28.
• A principios de los años noventa, van der Heijde et al realizaron un estudio
con el fin de formular un índice compuesto, que cuantificara la actividad de la
enfermedad. Para ello, clasificó a una cohorte de pacientes con AR en 2 grupos,
según la decisión del médico de no modificar o reducir el tratamiento con
fármacos modificadores de la enfermedad (FAME). Se seleccionaron las variables
que diferenciaban mejor las 2 situaciones de actividad y se obtuvo una fórmula
matemática, que cuantificaba la actividad clínica, naciendo así el Disease Activity
Score(DAS).
• El DAS está compuesto por una medida de dolor articular (índice de Ritchie,
que oscila entre 0 y 78), un índice de inflamación en 44 articulaciones (que oscila
entre 0 y 44), la VSG y la valoración de la actividad por el paciente, en una escala
analógica (0-100 mm). Existe un DAS modificado, el DAS28, basado en los
recuentos de 28 articulaciones dolorosas (NAD) y tumefactas (NAT), que es
mucho más útil en la práctica clínica y es el recomendado por la EULAR. Existen
calculadoras del DAS28 con VSG o PCR.
85. FRAX.
• El FRAX se ha confeccionado a partir de los datos basales y
de seguimiento de 9 cohortes poblacionales prospectivas que
incluyeron 59.232 pacientes (el 74% eran mujeres) de entre
40–90 años de edad con un seguimiento total de 249.898
pacientes-año. Durante el seguimiento se recogieron un total
de 3.495 fracturas por fragilidad, 974 de ellas eran de la
cadera. Con estos datos se calculó la contribución al riesgo de
fractura de los diferentes factores de riesgo.
• FRAX es accesible on line en http://www.shef.ac.uk/FRAX y
permite el cálculo del riesgo absoluto de fractura
osteoporótica global y de la cadera en los próximos 10 años
en diferentes poblaciones, incluida la española, con edades
entre 40-90 años y que no reciben tratamiento para la
osteoporosis.
86. • Los datos que hay que introducir de forma obligatoria son la edad, el sexo, el peso (kg) y la talla (cm) del paciente. El resto, excepto la DMO,
son variables dicotómicas; en éstas, si no se completan, se asume una respuesta negativa. Estas variables son las siguientes:
• Antecedente de fractura por fragilidad en la edad adulta (incluye fractura vertebral radiográfica).
• Antecedente de fractura de la cadera en alguno de los progenitores.
• Tabaquismo activo.
• Antecedente de ingesta de glucocorticoides durante más de 3 meses en total en una dosis de 5mg/día o superior.
• Antecedente de artritis reumatoide.
• Antecedente de osteoporosis secundaria (que incluye cualquiera de las siguientes):
• Hipogonadismo no tratado.
• Osteogénesis imperfecta.
• Enfermedad inflamatoria intestinal.
• Inmovilidad prolongada.
• Trasplante de órgano.
• Diabetes tipo I.
• Hipertiroidismo no tratado.
• Ingesta de 3 o más unidades de alcohol al día (1 unidad: una caña de cerveza, una copa de licor, una copa de vino o una copa de aperitivo).
• Si se dispone de la DMO, se recomienda introducirla. Hay que seleccionar el tipo de densitómetro utilizado para determinar la DMO e
introducir la DMO del cuello femoral en valor absoluto (g/cm2). Cuando no se introduce la DMO, el modelo calcula el riesgo sustituyendola por
el índice de masa corporal.
87. • Como cualidades principales para destacar, el FRAX aporta un gran rigor metodológico, la
ventaja de proporcionar el riesgo de fractura en términos absolutos e interesantes posibilidades
de aplicación en la práctica clínica. Conocer el riesgo de fractura tiene diversas aplicaciones en
varios niveles de actuación:
• En la práctica clínica diaria, orientar a los pacientes sobre la actitud diagnóstica y
terapéutica para tomar en cada momento.
• Durante la realización de ensayos clínicos relacionados con osteoporosis o prevención de
fractura, seleccionar los sujetos según criterios de inclusión definidos por riesgo de fractura.
• En términos de economía de la salud, calcular el coste-efectividad de cada umbral de
intervención diagnóstica o terapéutica.
88. PASI.
• El índice de severidad del área de
psoriasis (PASI) es un elemento importante
para la evaluación de la psoriasis y tiene
buena correlación con la severidad de la
enfermedad; su puntuación varía entre 0 y
72 clasificándose como leve cuando se
encuentra entre 0 y 20, moderada entre 21
y 50 y severa entre 51 y 72.
89. SLEDAI.
• La determinación del grado o intensidad de la enfermedad,
en un momento dado, establece criterios terapéuticos y, a
largo plazo, identifica el grado de daño progresivo que ha
experimentado el paciente; por ende, es de gran ayuda para el
pronóstico a largo plazo y determinante para indicar el
tratamiento.
• El tratamiento es proporcional a la intensidad de la
actividad. Es fundamental cuantificar los cambios y las
respuestas clínicas de los pacientes (diferentes en cada uno),
ya que el tratamiento varía de uno a otro, según la actividad,
los órganos afectados y el daño acumulado. La actividad y el
daño acumulado son factores importantes para establecer el
pronóstico, pues influirán en la supervivencia.
90. • Dicha puntuación va de 0 a 105; no obstante, la manifestación de uno o dos signos en uno de los capítulos,
por ejemplo, uno de seis síntomas mayores, se catalogará automáticamente como actividad severa, aunque
esta puntuación sea baja y los síntomas restantes se ubiquen en categorías más bajas, ya que prima la
importancia de los signos mayores sobre la puntuación y demás signos menores presentes.
• Se considera actividad leve cuando se manifiestan uno de cinco signos catalogados como
menores/moderados.
92. ASCHWORTH.
• Utilizada en clínica para valorar
espasticidad muscular. Creada en 1964 por
el Aschworth y modificada por Bohannon y
Smith en 1987. La Escala Modificada de
Ashworth es un instrumento fiable, útil y
válido por que responde al movimiento
pasivo realizado por el evaluador a una
articulación específica, teniendo una
pertinencia más amplia de la medida clínica
del compromiso de espasticidad.
93. FAC.
• La Funtional Ambulatory Classification
(FAC) ha sido diseñada para valorar el
soporte físico que necesita un paciente
para caminar. Es válida y fiable.
94. • TINETTI.
• La escala de Tinetti para la marcha y el equilibrio
se utiliza para determinar precozmente el riesgo de
caída de un anciano durante el año siguiente a su
aplicación. Ha demostrado ser apropiada para
detectar riesgo de caídas:
• Inferior a 20 puntos: riesgo de caídas
extremadamente elevado.
• De 20 a 23 puntos: riesgo de caídas elevado.
• De 24 a 27 puntos: poco riesgo de caídas.
• 28 puntos: es considerado normal o poco riesgo
de caídas.
97. ASMA (PULMONARY SCORE).
• Aunque ninguna escala clínica está bien
validada a la hora de valorar la gravedad de un
episodio, el Pulmonary Score (PS) es sencillo y
aplicable a todas las edades.
Se puntúa de 0 a 3 en cada una de los apartados (mínimo
0 - máximo 9). En ausencia de sibilancias si la actividad
del ECM es máxima puntuar con 3. En caso de
discordancia entre la puntuación clínica y SO2 se utilizará
la de mayor gravedad.
98. BRONQUIOLITIS.
• Se trata de una escala de evaluación, utilizada
fundamentalmente en la valoración de la gravedad
de las bronquiolitis, aunque también se ha utilizado
para valoración del asma agudo, sobre todo en el
ámbito infantil. En el caso de las bronquiolitis, que
fundamentalmente aparecen en las Urgencias
Pediátricas, una valoración inicial permite, en
muchas ocasiones comenzar con una terapia
adecuada a la gravedad estimada, evitando en
muchas ocasiones ingresos innecesarios.
99. DOLOR.
• Existen diferentes escalas para cuantificar o categorizar el dolor en
los niños.
• Tenemos Metodos conductuales: También denominados
comportamentales, por estar basados, en la observación de la
variación de las respuestas del niño ante el dolor, en cuanto a su
comportamiento. Son útiles en la etapa preverbal del niño, es decir,
en los menores de 24 meses. Son la CHEOPS (Children ́s Hospital of
Eastern Pain Scale) diseñada para evaluar el dolor postoperatorio en
niños; o muy parecida la de FLACC aplicable a niños hasta 4 años o a
niños mayores que no colaboran, en la que se miden la expresión
facial, la posibilidad de consolar al niño, el llanto, la actividad y la
movilidad de las piernas.
100.
101. GORELICK.
• Para un adecuado diagnóstico del grado de
deshidratación se requiere no uno, sino varios
hallazgos clínicos, que en combinación
ofrecen mayor certeza diagnóstica. Dentro de
estos se hará énfasis en el estado de
conciencia, ojos hundidos o no, la presencia
de lágrimas y la hidratación de las mucosas.
También puede considerarse el llenado capilar
y el patrón respiratorio, aunque son datos
clínicos más tardíos.
102. LARINGITIS.
• El pilar fundamental de la valoración de
la laringitis es establecer el grado de
dificultad respiratoria, considerando los
siguientes parámetros: estridor, retracción,
entrada de aire, color y nivel de
consciencia. Todo esto se llevará a cabo
mediante la escala de Westley.
105. EN.
• La Escala Númerica del Dolor es una escala numerada del
1-10, donde 0 es la ausencia y 10 la mayor intensidad, el
paciente selecciona el número que mejor evalúa la intensidad
del síntoma. Es el más sencillo y el más usado.
EVA.
• La Escala Analogica Visual del Dolor permite medir la
intensidad del dolor con la máxima reproductibilidad entre los
observadores. Consiste en una línea horizontal de 10
centímetros, en cuyos extremos se encuentran las
expresiones extremas de un síntoma. En el izquierdo se ubica
la ausencia o menor intensidad y en el derecho la mayor
intensidad. Se pide al paciente que marque en la línea el punto
que indique la intensidad y se mide con una regla milimetrada.
La intensidad se expresa en centímetros o milímetros.
106. MC GUILL VERSIÓN CORTA.
• El Cuestionario del dolor de McGill evalúa
aspectos cuantitativos y cualitativos del
dolor, como son localización, cualidad,
propiedades temporales e intensidad.
108. GDS YESAVAGE.
• Una de las escalas más utilizadas en la actualidad en
población anciana es el cuestionario Geriatric Depression Scale de
Yesavage (GDS), escala también recomendada por la Sociedad
Española de Medicina Familiar y Comunitaria. Se trata de una
escala autoaplicable de 30 preguntas con respuestas dicotómicas
(sí/no) específicamente diseñada para la población anciana, con
una elevada sensibilidad y especificidad (S=84% y E=95%) y con
una buena correlación con otras escalas clásicas utilizadas para el
cribado de depresión. Existe una validación al castellano.
• Sheikh y Yesavage propusieron posteriormente una versión
abreviada de la GDS, formada por 15 preguntas (10 positivas y 5
negativas) que sólo requiere de 5 a 7 minutos para ser
completada, con el objeto de reducir los problemas de fatiga y
pérdida de atención que se suelen presentar en este grupo de
edad, y más en los casos en que existe algún grado de alteración
cognitiva.
Las respuestas correctas son afirmativas en los ítems 2, 3, 4, 6, 8, 9, 10,
12, 13 y 15, y negativas en los ítems 1, 5, 7, 11 y 14. Cada respuesta
errónea puntúa 1. Los puntos de corte son:
● 0-5: Normal.
● 6 - 10 : Depresión moderada.
● + 10 : Depresión severa.
109. GOLDBERG.
• Población general. Se trata de un cuestionario
heteroadministrado con dos subescalas, una de
ansiedad y otra de depresión. Cada una de las
subescalas se estructura en 4 items iniciales de
despistaje para determinar si es o no probable que
exista un trastorno mental, y un segundo grupo de 5
items que se formulan sólo si se obtienen respuestas
positivas a las preguntas de despistaje (2 o más en la
subescala de ansiedad, 1 o más en la subescala de
depresión).
• Los puntos de corte son mayor o igual a 4 para la
escala de ansiedad, y mayor o igual a 2 para la
depresión. En población geriátrica se ha propuesto su
uso como escala única, con un punto de corte ≥ 6.
110.
111. HAMILTON.
• La escala de valoración de Hamilton para la evaluación de la depresión (Hamilton depresión rating scale (HDRS))
es una escala, heteroaplicada, diseñada para ser utilizada en pacientes diagnosticados previamente de depresión,
con el objetivo de evaluar cuantitativamente la gravedad de los síntomas y valorar los cambios del paciente
deprimido. Se valora de acuerdo con la información obtenida en la entrevista clínica y acepta información
complementaria de otras fuentes secundarias.
• Si bien su versión original constaba de 21 ítems, posteriormente se realizó una versión reducida con 17 ítems,
que es la recomendada por el Instituto Nacional de Salud Mental de los Estados Unidos. La validación de la versión
castellana de esta escala se realizó en 1986 por Ramos-Brieva. Diferentes evaluaciones han permitido comprobar la
validez discriminante, la fiabilidad y la sensibilidad al cambio, tanto en poblaciones hospitalizadas como
ambulatorios.