Este documento describe la experiencia del autor en Mistura 2015, una feria gastronómica peruana. Detalla cómo una cocinera de Arequipa, Beatriz de La Cau Cau, preparó el plato típico Chupe de Camarones para el público, explicando que la receta proviene de sus antepasados y el sabor se debe a los ingredientes locales. El autor reconoce que el corazón y la mente del peruano están con quienes preservan la sabiduría culinaria del país, como las cocineras y cocineros, más

1. ÁGOR@-i
M
iraba cada gesto, ellos
no se percaban que los
seguía. Finalmente me
convencí, que todos sentían ale-
gría, satisfacción , demostraban
orgullo, y una generalizada uni-
dad. ¡Qué logro increíble!. ¡Qué,
fuerza tan profunda imprime en
el peruano su gastronomía!. A las
14:30 horas, subió al auditorio
principal, la dueña del restauran-
te, La Cau Cau, de Arequipa, para
demostrar y conversar con la gen-
te, sobre los platos que ellas pro-
ducía. Arriba en el estrado sus
manos entrenadas y dulces prepa-
raban el plato estandarte characa-
to, el Chupe de Camarones, las
escenas se dejaban ver en total
dimensión en la pantalla gigante,
parecían pinceladas de Rubens,
Rafael o Velásquez, mientras lo
hacía, contaba que la receta prove-
nía desde sus tatarabuelos, pero el
sabor se debía a los insumos espe-
ciales que existen en esas tierras,
sea por su clima o por el agua que
las riega. Cuando terminó la obra
de arte, fue ovacionada por un
público enfervorizado que por su
intermedio reconocían a las muje-
res que como ella, son nuestras
insignias, nuestros estandartes,
nuestras campeonas permanentes
de peruanidad. En mis pensa-
mientos, corrieron inquietamente,
comparaciones con especialistas
peruanos en otras disciplinas, tal
vez un ingeniero, un físico, o un
abogado. ¿Con quién lo compara-
ríamos?, ¿A quiénes les podríamos
brindar similares pleitesías?. Casi,
no encontrando ejemplos, reco-
nocí que, nuestro corazón, nuestra
mente, está con las cocineras, los
cocineros, los productores, con
aquellos que luciendo poco, dis-
tantes de la prensa palaciega y
politiquera, guardaron la sabi-
duría de nuestros fogones, bata-
nes, chinchus y ajíes. Y que fue-
ron redescubiertos, para el mun-
do por APEGA , encabezados por
el “rey midas”, Gastón Acurio.
En la costa verde, mientras el
mar azul de Grau acariciaba a los
visitantes con refrescantes bri-
sas, el pisco y la cerveza elevaban
la temperatura, al son de cajones
criollos, huaynos y cumbias
amazónicas, me despedía de
Mistura 2015, rebosante de pe-
ruanidad y orgullo, y satisfecho
de haber estado casi en un sue-
ño, alejado de los pesimistas po-
líticos que son la peor cara del
Perú. AZG
UN ENCUENTRO A LA PERUANIDAD Y ORGULLO: MISTURA 2015
CON-CIENCIA PERÚ
Lima, setiembre de 2015Volumen 1, nº 1
“nuestro corazón,
nuestra mente,
está con las
cocineras, los
cocineros, los
productores”
Beatriz de La Cau Cau, de Arequipa,
se lució demostrando cómo se pre-
para el plato característico, el Chu-
pe de Camarones.