El proceso de fabricación del whisky consta de 6 pasos: 1) Seleccionar cebada con alto contenido de almidón, 2) Germinar la cebada y secarla, 3) Moler la malta germinada, 4) Fermentar la malta molida con agua y levadura para producir mosto, 5) Destilar el mosto fermentado dos veces para concentrar el alcohol, 6) Madurar el destilado en barriles de roble durante al menos 3 años.