Relato de mi viaje al Tepuy Roraima, Venezuela

1. “Paso Por el Mundo Perdido.”
Escalada Al Tepuy Roraima.
Escrito por: Víctor José Hernández y Carmen Piña
(victorjher@gmail.com)
Grupo: Venelands Expeditions
(Travesía del 15 al 20 de Agosto de 2011.)
Víctor José, Carmen, Víctor Javier
José, Luís, Marcos
Eugenio, Mariana,
Michael, Joel, Jarri
San Diego, Septiembre de 2011
Estado Carabobo – Venezuela
+58-0426-5462966
victorjher@gmail.com

2. INTRODUCCIÓN.
El siguiente relato constituye la experiencia vivida
durante nuestro paso por el mundo perdido, El Tepuy
Roraima, en el Parque Nacional Canaima, al sur del
Canaima,
Estado Bolívar-
Estado Bolívar-Venezuela.
tanto,
Es curioso que pudimos escribir tanto, pero realmente
fuimos tocados por la magia del Roraima y no quisimos
compartirla otros,
pasar por alto toda esa vivencia sin compartirla con otros, a
mucho,
los que sabemos le puede servir de mucho, pues es un
informativo
material informativo que se une a muchos tantos que se
encuentran en el Internet, pero visto desde nuestra óptica
particular,
particular, en donde mencionamos algunos detalles
importantes del viaje que son útiles en la preparación y
desarrollo del mismo.
Nos planteamos la necesidad de vivir unas vacaciones de
necesidad
Roraima,
aventura y subir los 2.810 metros del Cerro Roraima, así
que con unos cuatro meses de anticipación comenzamos a
travesía,
preparar la travesía, para lo cual, iniciamos por nuestra
preparación física y mental.
seis
El viaje total duró seis días, tres para subir, uno para
disfrutar del paisaje en la cima y dos para bajar : en el
primer día la Caminata comienza en el campamento de

3. llegar
Paraitepuy hasta llegar al Campamento de Rio Tek o Rio
Kukenan dependiendo de las condiciones climáticas para
atravesar los rios y del volumen de personas en transito en
zona. Base,
la zona. El segundo día se llega al Campamento Base, el
tercer día de sube a la cima del Roraima, el cuarto día se
disfruta del paisaje en la cima , el quinto día comienza el
descenso,
retorno y descenso, haciendo dos estaciones hasta llegar a
Rio Tek, por último, el sexto día se regresa al puesto de
Tek,
nuevamente.
Paraitepuy nuevamente.
En conjunto la caminata es de casi 25 Km de ida y algo
cima;
mas de regreso pues se debe incluir la caminata en la cima;
deciden
si en la cima deciden ir al punto triple son unos 24 km
adicionales, para un total de unos 70 km. Como pueden
adicionales, km.
apreciar todo este esfuerzo amerita estar en buenas
condiciones físicas, lo cual, ratifica el hecho y la
conveniencia de prepararse física y mentalmente antes de de
realizar el viaje.
Esperamos les guste y sirva de ayuda nuestro relato, es
les relato,
una aventura que todos deberíamos realizar porque les
deberíamos
aseguro que después de subir al Roraima, somos una
persona diferente…..

4. Contenido.
Parte I.
Capitulo I. La Aventura Comienza…
Comienza…
Capítulo II. Sabana…
En Medio de la Gran Sabana…
Capítulo III. El Gran Reto, Llegar a la Cima del Roraima,
Enfrentar la Energía de la Montaña…
II.
Parte II.
Capítulo IV. En la Cima de la Montaña…
Descenso
Capítulo V. El retorno, Descenso de la Montaña…
Capítulo VI. El Final de la Aventura…
Anexos…
• Equipos y Materiales útiles para el viaje
• Mapas y Coordenadas Geográficas

5. PARTE I
C a p í tu l o I
La Aventura Comienza…

6. Lunes 15 de Agosto de 2011. Primer Día.
Comienza la aventura al Tepuy Roraima (Cerro en forma de meseta o tronco de
árbol), nos levantamos temprano en San Francisco de Yuruani, aldea Indígena Pemón
que está ubicada en la Troncal 10, vía Santa Elena de Uairén, km 250, somos un grupo
de once personas: Dos guías, Michael y Joel, Un porteador, Jarri, dos Españoles José
y Luís, Marcos de Caracas, Eugenio de Valencia, Mariana de Maracaibo y por supuesto
nosotros tres: Víctor Javier, Carmen y mi persona Víctor José desde Valencia; llegamos
el domingo 14 de agosto en el día, al igual que José y Luís, Marcos llegó el mismo
domingo en la noche pasadas las diez pm. y Mariana con Eugenio llegaron en la
mañana del mismo lunes 15.
Michael nos indica que debemos esperar hasta las 9:00 am. para que llegue el
Transporte que nos trasladará al puesto de Imparques en PARAITEPUY, mientras
tanto decidimos ir a desayunar. Es así como nos dirigimos a uno de los puestos de
venta de comida atendidos por los Indígenas en la zona, el cual ofrecía unas ricas
empanadas que Víctor Javier disfrutó hasta más no poder….
Ya desayunados y listos esperamos hasta casi las 10:00 am hora en que llega el
transporte y empezamos a subir todos los morrales para emprender el viaje.
Luego de 40 minutos por una carretera de tierra y en regulares condiciones, llegamos a
Paraitepuy, asentamiento indígena Pemón en donde procedimos a identificarnos en la

7. oficina de Imparques. Cada persona debe anotar todos sus datos antes de salir al
Roraima pues es un punto de control de acceso y retorno.
Bajamos los morrales y los guías prepararon un refrigerio ligero antes de comenzar la
caminata, el primer tramo es de 13,4 km aproximadamente por un único sendero que
nos llevaría hasta el Campamento Rio Tek o Rio Kukenan y la estrategia indicada fue
caminar al ritmo que cada quien pudiera, un guía iba al principio con los más veloces e
impulsivos y otro al final con los rezagados, siempre acompañando al grupo. Cada
persona lleva un morral con lo necesario para el viaje, según lo recomendado en este
caso particular que incluye un aislante, el saco de dormir, la ropa bien empacada y todo
lo que cada quien podía o quería llevar, pero que no excediera el peso de 15 kg
restringido en Imparques. Lo recomendado es que el morral pese entre el 15% y 20%
de la masa corporal de la persona, sin embargo lo óptimo es llevar un morral de peso
que no exceda el 10 % de la masa corporal.
Yo, como siempre llevaba mi Super Cámara Kodak y tres juegos de baterías, la brújula
manual, una brújula digital, un altímetro, un barómetro, termómetro, Binoculares y un
Podómetro. Algunos de los equipos no funcionaron debido a que fueron afectados por
la humedad y se convirtieron en peso muerto que debía cargar. Debo mencionar que
también tuve que cargar con la otra Super Cámara Canon de Carmen, pues se le hizo
algo pesada e incómoda para caminar.

8. En el horizonte, desde lejos, podemos apreciar al Gran Tepuy Roraima, 2.810 metros
de altura, en su parte mas alta que es un cerro en forma del vehículo, llamado
Maverick, acompañado a su izquierda del Tepuy Kukenan, 2.650 metros de altura, el
cual nos llama mucho la atención por las caídas de aguas, que sólo se forman en
tiempo de lluvias; la cascada principal cae de unos 600 metros de altura o mas, siendo
la segunda caída de agua mas alta del mundo y que a lo lejos se parece mucho al
Salto Angel, la más alta del mundo. Como de películas tal y como se aprecia en la
filmación de Disney llamada “UP”, realizada hace pocos años.
Maverick-2810
m

9. Tepuy
Tepuy Kukenan

10. Tepuy Kukenan
Comenzamos a caminar a eso de las 11:30 am. La primera etapa es una etapa de
retos ya que es la etapa de prueba; subiendo el primer cerro que es algo fuerte, de
unos 200 m de altura y de 1 km de trayectoria. Los guías dicen que si las personas
suben este cerro subirán los demás y llegarán a la cima del Roraima. Particularmente
creo que este cerro no tiene nada que ver con el resto del trayecto, aunque es bien
importante como primera meta y empieza a calibrarnos referente a nuestras
expectativas. En esta etapa se debe subir y bajar aproximadamente ocho o nueve
cerros o lomas de variada altura, puede ser un trayecto exigente, pero no difícil,
excluyendo los cerros, es el tramo con senderos más rectos y cómodos para caminar.
A pesar de que amenaza la lluvia, el camino es agradable y fresco en el cuál tenemos
que atravesar varios riachuelos a través de las piedras o puentes improvisados y de
donde podemos tomar agua fresca y llenar los envases.

11. La amenaza de lluvia se concreta y tuvimos que usar los ponchos o impermeables y
seguir caminando bajo la lluvia, es tan agradable la sensación que llegaron a mí,
recuerdos de la infancia cuando me bañaba bajo la lluvia…. Este hecho tan simple,
pero no menos importante me animaba a seguir caminando y llenar mi espíritu de
momentos agradables.
En el trayecto el peso de los morrales se hizo sentir, Carmen empezó a mostrar
señales de cansancio y molestia por el peso, mi morral pesaba mas de10 kg y también
iba algo incomodo, lo cual hizo que lleváramos un paso más lento de lo que estábamos
acostumbrados durante el entrenamiento previo al viaje, realmente no se le puede
comparar pues al final nunca llegamos a caminar un trayecto largo con más de 8 kg en
el morral; Sin embargo, el entrenamiento previo nos ayudó mucho, nos sentimos con
fuerzas y preparados mentalmente para seguir adelante muy contentos y cada vez más
ansiosos y decididos. En varias oportunidades nos quedábamos de último, para
admirar el paisaje, tomar fotos y recobrar fuerzas para seguir, impulsados por una
energía extraordinaria que la sabana nos brindaba, un estado de silencio y quietud en
donde sólo el viento y el paisaje eran los grandes protagonistas, brindando su
hermosura, enfocando la meta en la distancia: El Tepuy Roraima, que nos invitaba a
subir en sus laderas como si nos acomodara un manto o alfombra para que nosotros
llegáramos hasta él.
Después de casi cinco horas llegamos al Campamento del Rio Tek, nos quedamos en
este campamento y no seguimos al siguiente del Rio Kukenan porque ya era tarde y

12. realmente estábamos cansados, Michael y Joel decidieron que era más conveniente
cruzar el rio Kukenan en la mañana. Descansamos en el portal de una acogedora casa
Indígena en donde encontramos a otros Turistas Extranjeros que venían de regreso.
Michael comenzó a armar las carpas y yo me dispuse ayudarlo.
Al finalizar el trabajo tuvimos la
recompensa de un extraordinario baño en
el Rio Tek…..a las seis de la tarde con el
agua fría, pero muy fría ……
Luego del baño, que fue muy reconfortante,
nos acomodamos para ir a cenar. Michael,
Joel y Jarry tenían preparada la cena, una
suculenta pasta con salsa que sabía a
gloria, no sé si por el hambre o el
cansancio pero los muchachos la cocinaron
con un toque especial, muy rica, pues nadie dejó ni rastros de la pasta. Compartimos
como en familia, charlamos un rato conociendo al grupo esperando aclarara la noche
para observar el cielo con gran expectativa de poder apreciar las estrellas.
Desafortunadamente la noche se mantuvo nublada y sólo se podía apreciar unas luces
en lo profundo de la sabana que correspondían a otro grupo de turistas que acampó
mas adelante en Rio Kukenan, no quedó mas remedio que irnos temprano a dormir.
Seleccionamos la carpa, Carmen y yo nos acomodamos, caímos como piedras y a
media noche comenzó a llover creando un ambiente muy agradable, fresco y sobre
todo sin Puripuris que temprano estaban nutriéndose del grupo. La verdad que dormir
en la carpa con tan sólo un aislante y el saco de dormir, en las condiciones ambientales
en que estábamos, fue una experiencia muy rica de aventura y para nada nos afectó
pues descansamos muy bien.

13. C a p í tu l o I I
En Medio de la Gran Sabana…

14. Martes 16 de Agosto de 2011. Segundo Día.
El segundo día de recorrido comenzó levantándonos temprano y recogiendo todo,
fuimos al río y nos lavamos, las necesidades se realizaban en ambiente controlado
pues no se puede dejar excrementos en la sabana, para lo cual se coloca en bolsa
plástica que luego es procesado sin dañar el ambiente.
Nos dirigimos a tomar el desayuno que prepararon los muchachos, esta mañana
comimos huevos revueltos con arepa de trigo, muy sabroso y ligero pero suficiente.
Luego de comer nos dispusimos a emprender la segunda caminata de 9,7 km
aproximadamente por un sendero único que nos llevaría hacia el Campamento Base.
En esta etapa seguimos subiendo y bajando como seis cerros o lomas de menor altura
que en el primer tramo, pero con cierta dificultad pues el sendero era más intrincado y
por supuesto íbamos en ascenso y más cansados. Después de subir la primera loma
nos encontramos la Iglesia de la Misión de los capuchinos Misioneros, usada para
retiros espirituales. Al pasar la Iglesia podemos observar la única huella de un mundo
perdido, la Huella o restos de una Pezuña de lo que pudo haber sido un gran
animal….…. También encontramos una vasija de barro que según Joel y sus
anécdotas, tenía alrededor de 120 años, toda una reliquia en la sabana, que
inadvertidamente saludaba al paso de los turistas que día a día iban por el lugar.
La Misión, 15 de Agosto de 2011, 8:47 am.

15. La Vasija.
La Pezuña.
Luego de la huella nos apuramos entusiasmados para llegar al Rio Kukenan, en donde
se había programado tomar un buen baño frio, El Rio Kukenan es caudaloso con
piedras de diferentes tamaños y en época de mucha lluvia es problemático para
cruzarlo, sin embargo, tuvimos la suerte de encontrarlo limpio, claro y no muy crecido,
en buenas condiciones para pasar. Nos quitamos los zapatos y pasamos en media,
que nos ayudó a no resvalar en las piedras, aunque no es ciento por ciento eficiente,
ayuda mucho y se debe tener cuidado con la fuerza del rio ya que la corriente puede
tumbar a la persona y arrastrarlo, mojando el morral.

16. Una vez que cruzamos el rio tomamos el baño mas gratificante que en mi vida habia
tomado, el agua estaba fria y la sensación fue extraordinaria.
Les comento que no sé como expresar la satisfacción
que recibí en ese momento, pero si sé que fue un
momento inolvidable, y puedo clasificarlo, en mi
experiencia, como el mas placentero del viaje, la
corriente ayudó a relajar los musculos y la energia que
me proporcionó fue clave para el futuro próximo.
El Rio KUKENAN brinda una excelente oportunidad
para practicarse un buen hidromasaje que aquí en la
sabana no tiene precio y no se puede dejar pasar por
alto.
Una vez bañaditos retomamos la caminata, son casi las diez de la mañana y como
siempre nos quedamos atrás del grupo, Michael, José, Luís, Marcos, Eugenio y Víctor
van como almas que lleva el viento, a su ritmo muy superior al nuestro, que además
nos detenemos para tomar fotografías, disfrutando de cada paso que damos, vamos
charlando, hidratándonos, comiendo caramelitos etc. Todo esto nos toma tiempo,
simplemente es un momento muy bonito en donde se combina la ansiedad, expectativa
y deseos del corazón por hacer el recorrido. Gracias a Joel, el guía de retaguardia, nos
sentimos seguros y bien atendidos; Además Mariana, va más lento que nosotros y Joel

17. parece convertirse en su bastón pues para él nadie se queda en el camino. En fin
vamos cuatro personas más o menos parejas.
El paso por los cerros siguientes se dificulta un poco por la humedad de la lluvia que
nuevamente se hizo presente y debemos colocarnos el poncho para seguir caminando.
Después de cuatro horas de camino, en medio de la gran sabana, llegamos a eso de
las 2:00 pm, a un campamento improvisado, cerca del Campamento Base que según
Joel era un antiguo Campamento Militar, en donde estaban descansando los punteros
del grupo; aquí Jarri tenía listo el almuerzo, una suculenta ensalada de atún muy buena
y bien preparada. Detrás de nosotros venia Joel con Mariana uniéndose al grupo.
Comimos y descansamos para luego retomar la caminata, ya próximo al Campamento Base, El
Roraima se veía cada vez más imponente, una enorme pared se posaba en frente de nosotros
y parecía que nos iba a caer encima, El Kukenan a la izquierda también se veía imponente
mostrando todos sus atributos como vestidos y preparados a recibirnos en un alarde de colores
y festejos.

18. Aproximadamente a las cuatro de la tarde por fin llegamos al Campamento Base, la caminata
fue de unas siete horas desde Rio Tek sin contar el tiempo del baño en el Rio Kukenan. En el
Campamento Base ya estaban listas las carpas, organizadas en el espacio disponible; pues el
lugar estaba muy concurrido por turistas que habían llegado primero, y acampaban para subir
el Roraima al día siguiente como nosotros. A pesar de ser un campamento muy concurrido, de
descanso obligatorio por todos los grupos, se mantiene muy natural, poco afectado por la
acción de las personas. Nos ubicamos en la carpa disponible, en el área mas virgen del
campamento, en general, se debe tener cuidado de posibles alimañas en arbustos y rocas. El
resto del grupo ya estaba descansando y solo faltaba Mariana con Joel quienes venían a media
hora detrás de nosotros. En este momento mientras yo acomodaba los morrales y me disponía
a descansar, Carmen tomó la cámara y comenzó a captar los diversos paisajes.

19. El reto en el Campamento Base fue bañarse en la quebrada, en donde el agua es
mucho más fría que en el Rio Kukenan, Víctor Javier, José y Luís asumieron el reto, yo
me conformé con el baño de la mañana, estaba muy cansado. Ya en la noche salimos
a cenar haciéndonos lugar en una choza en donde estaban todas las cocinas de los
diferentes grupos que se disponían a subir el Roraima. Había turistas Franceses,
Españoles y Holandeses compartiendo con nosotros los Venezolanos y algunos
Colombianos, en una mezcla de diferentes idiomas que incluía el Pemón de los guías
y porteadores. Diferentes culturas pero con el mismo objetivo, mañana temprano
dirigirnos a la cima del Roraima.
Como siempre después de cenar, nos dispusimos a ir a dormir, la noche estaba fría y
Lluviosa y al día siguiente nos esperaba la tercera caminata. La estrategia de Michael
y Joel era enviar a un porteador adelante en la madrugada, para que ocupara uno de
los Hoteles disponibles, a fin de instalar el campamento y esperar por el grupo.

20. Campamento Base.

21. Los Hoteles del Roraima son cuevas formadas en el tiempo por la erosión, que los
lugareños clasificaron eficientemente dándole un toque modernista, así encontramos El
Hotel Principal, El Hotel Basilio, El hotel Jacuzzi, Hotel El Indio, Hotel San francisco,
hotel Coati, Hotel Guacharo, etc. etc…

22. C a p í tu l o I I I
El Gran Reto, Llegar a la Cima
del Roraima, Enfrentar la
Energía de la Montaña…

23. Miércoles 17 de Agosto de 2011. Tercer Día.
Llegó el momento, el día de subir a la cima del Roraima, hasta el Campamento
Base habíamos recorrido un trayecto de 23,1 km en dos días de larga caminata y
esfuerzos por senderos que, en mi opinión, juntos constituyen la verdadera prueba a
nuestras capacidades; una vez en el Campamento Base ya no hay paso atrás, la
energía de la sabana nos impulsa a seguir adelante llenos de expectativas para
disfrutar de la naturaleza y la aventura de formar parte de esta montaña, en el mundo
perdido de Arthur Conan Doyle quien desde hace casi un siglo reta la curiosidad de las
personas para resolver el enigma de una de las formaciones geológicas más antiguas
de la Tierra.
Por delante nos espera un camino de aventura, llegar a la cima del Roraima, es el
gran reto y la razón de toda la travesía. El paisaje no tiene comparación y no se hable
de la gran energía que se siente frente a esa gran pared de la montaña, las vivencias
del trayecto único en nuestro país que despierta tantas emociones e interés en los
turistas Europeos y Asiáticos. Hasta el campamento base hemos llegado a una altura
de unos 1800 metros sobre el nivel del mar, la cima está a unos 2740 metros, se debe
subir aproximadamente 1000 metros, por una rampa única, en una distancia a recorrer
de 3200 metros o 3,2 km hasta la cima.
En este tercer día de recorrido, nos levantamos temprano y comenzamos a preparar
todo, acomodé los morrales para aliviar la carga de Carmen y pueda subir con mayor
comodidad, aunque yo llevaré mayor peso que incluye alguna ropa mojada de los
primeros días del recorrido; dejamos las carpas limpias y cerradas, listas para llevarlas
al nuevo campamento en la cima.
La mañana está fresca y clara,
hay un sol muy hermoso y
mientras esperamos el desayuno
aprovechamos para seguir
tomando fotos; fue impresionante
observar como la montaña
posaba para nosotros y
mostraba, en la distancia, el
paisaje del sendero a recorrer y
por donde pasaríamos a su
alrededor.
Nos dispusimos a desayunar con
el grupo completo, es uno de los

24. pocos momentos en que podemos compartir juntos antes de ir a caminar pues el grupo
siempre se divide entre los más veloces y los más lentos en el avance.
Michael recomienda que salgamos nosotros primero para ir avanzando; y es así que
comenzamos a salir del Campamento Base. Primero debemos llenar los recipientes
con agua fresca para el camino y luego cruzar la quebrada de agua fría.
Al comenzar a subir sentimos una gran impresión pues nunca pudimos imaginar lo
hermoso y complicado del sendero, uno se plantea muchas estrategias y opciones para
subir y disfrutar de la vegetación que poco a poco se va abriendo al paso de las
personas; es una selva y se siente la humedad, a veces no penetra el sol y en otras
ocasiones el viento te arropa completamente. El sendero es más vertical de lo normal,
con tramos que se funden con el drenaje de la montaña y es mas difícil subir y aunque
los bastones ayudan mucho, tenemos que agarrarnos de cualquier cosa como ramas,
raíces, troncos y piedras que nos ayude a escalar los tramos, es increíble.
Subimos concentrados en la actividad, cuidando cada paso que damos, por ahora
vamos juntos Víctor Javier, Carmen y yo, ayudándonos mutuamente; parte del grupo
ha ido pasándonos como siempre pues llevan un paso que definitivamente nosotros no
podemos llevar. Eventualmente nos encontramos con turistas que vienen bajando de
regreso de la cima, nos saludamos y nos miran sonriendo con cierta picardía, en aviso
silencioso de todo el trayecto que nos falta por recorrer.

25. Después de casi hora y media de escalar, seguimos en una zona con mucha
vegetación y el sendero está bastante erosionado por las lluvias; nos dirigimos hacia
una pequeña quebrada que viene desde lo alto en donde comienza la pared del Tepuy.
Subimos y subimos, poco a poco, perdón ya no puedo decir subir porque la palabra
correcta es escalar….. Bueno, escalamos y escalamos lentamente y descansamos
cuando lo necesitamos, casi no nos detenemos y el avance es continuo interrumpido
religiosamente para hidratarnos constantemente y aprovechar para tomar algunas
fotografías.
De alguna manera Víctor Javier también se adelantó con Joel y Mariana, nosotros nos
quedamos algo atrasados afectados por el peso de los morrales haciendo trayectos
cortos y seguros para evitar una lesión. Cualquier equivocación significaría perder la
excursión, que en este punto sería todo un problema ya que la única forma de salir de
aquí es a través de un Helicóptero desde el campamento base, que sin mencionar la
dificultad para contactarlos, está la cruda realidad de tener que pagar un precio de unos
1800 Dólares por viaje.
El Roraima es un sitio que desde el punto de vista religioso es muy importante para la
etnia Pemón, en donde descansa la energía universal custodiada por sus Dioses
originarios. Michael y Joel, nos indicaron que según las creencias de su pueblo era
recomendable hablar con los Dioses de la montaña y pedirles permiso para subir en
paz y armonía. Esto puede parecer muy cursi pero forma parte de una cultura milenaria
que en cierta forma ha ido permitiendo el acceso de las personas conservando la
esencia de sus raíces. Nosotros inmediatamente captamos su sugerencia pues sólo
cuando se sube con el sentimiento del corazón, se puede entender y establecer una
comunicación con algo que está muy por encima de todos, la naturaleza misma,
nuestro gran Dios que siempre nos acompaña. Les confieso que particularmente y no
decir de Carmen que iba muy calladita, en cada paso que daba establecía una
comunicación indescriptible, era una sensación de pura energía que llenaba todo
nuestro cuerpo.

26. Usted puede venir y escalar la montaña como quiera y por las razones que quiera, pero
algo le diré, es mejor si lo hacemos en comunicación con Dios, con la Naturaleza y
poco a poco empezará a ver y sentir lo que otros no podrían….
Hay una cita Bíblica, Juan 20: 24 – 29, Jesús responde a su discipulo Tomás,
“Porque me has visto, Tomás, creiste; Bienaventurados los que no han visto y han
creído.”
Finalmente llegamos a la quebrada como a las once de la mañana, encontramos a Joel
con Mariana descansando y Joel nos mencionó que era el momento de pedir un deseo
a la montaña, habíamos llegado a la pared y desde luego no perdimos la oportunidad
de sentir el frío de la piedra, era indescriptible, la energía se sentía en una gran
vibración como si la montaña nos estuviera hablando.
El lugar estaba muy silencioso y ya Jarri y Joel nos habían mencionado que se debía
guardar silencio, era la forma en que la montaña nos permitiría subir sin problemas.
Mencionaron que si gritábamos o formábamos alborotos inmediatamente se desataban
las lluvias copiosas que hacían más dificultoso el avance, sobre todo en el Paso de las
Lágrimas.
Hacia arriba uno miraba y sólo
se veía la pared vertical en lo
alto, nosotros seguíamos en
silencio el sendero en la falda de
la montaña, que cambió de tener
menos vegetación y ser menos
empinado por tener más piedras
sueltas, marcando el rumbo
hacia nuestra próxima meta que
era el primer mirador.

27. Ya a medio día llegamos al primer mirador en donde aprovechamos para descansar y
almorzar; gracias a que el clima estaba a nuestro favor se podía apreciar muy bien el
paisaje en la distancia, tomamos algunas fotos increíbles de los senderos dejados atrás
que conducen al campamento base.

28. Campamento Base
Saliendo del primer mirador rumbo al “Paso de las Lágrimas”, experimentamos
una gran experiencia. Esta es una zona bien difícil, mucho más difícil de lo que se
comenta y se menciona en todas las informaciones que proporcionan los operadores
turísticos.
El Paso de las Lágrimas es parte del sendero por la falda de la montaña,
constituido de piedras sueltas de diferentes tamaños, en donde cae agua desde lo alto
de la montaña formando una gran cascada, cuya abundancia depende de las
condiciones climáticas o del humor de los Dioses de la montaña, pues según dicen los
lugareños, si los Dioses no están a nuestro favor, la fuerza del agua que cae, puede ser
un gran problema. El sendero tiene forma de “V” y antes de llegar a la cascada, se
baja unos 60 metros para luego comenzar a escalar de nuevo; las personas deben
atravesarlo con sumo cuidado de las piedras resbaladizas que de acuerdo al tamaño,
se requiere escalar con ayuda.
Por supuesto que nosotros esperábamos que nos favorecieran las condiciones,
todo se sentía y se veía muy bien, despejado y a lo lejos se podía apreciar la caída de
poca agua. En este momento antes de comenzar a bajar vimos a lo lejos que iba Víctor
Javier, como un pequeño grano de arena en la playa, se veía un sendero muy
empinado y de repente, sentimos una sensación de ansiedad y angustia al verlo
escalando tan solo y por un camino que se apreciaba muy difícil. Empezamos a
llamarlo, rompiendo un poco el voto de silencio, y le deciamos que nos esperara para
escalar juntos, no nos escuchaba, pero gracias a Dios nos esperó y nosotros pudimos
calmarnos pues la situación no se presentó fácil. Antes de seguir descansamos un
momento y tomamos algunas fotografías.

29. Aquí se observa
a Víctor Javier
Después de bajar y subir de nuevo para alcanzar a Víctor Javier, ya estábamos
más equilibrados y nos unimos en un solo grupo con Joel y Mariana para completar el
trayecto y atravesar completamente el paso. En la parte más arriba en donde el agua
se sentía caer sobre nosotros, anduvimos en zigzag esquivando los chorros fuertes,
todos íbamos con mucho cuidado y dejé pasar al grupo quedándome de último; las
piedras eran de diversos tamaños y había que escalarlas en vertical, en varias
ocasiones resbalé subiendo, sin consecuencia alguna, pero con gran temor pues hubo
momentos en donde no hallaba en donde agarrarme y tuve la sensación de caer.

30. Este trayecto es una gran experiencia que puedo comparar con una montaña
rusa, todos sabemos y sentimos el peligro, sin embargo nos montamos en ella e
igualmente nos divertimos mucho. El paso de las lágrimas es difícil pero no imposible
de cruzar, sobre todo cuando se camina con Guías como Joel, que además de estar
bien entrenado y tener mucha experiencia, posee la buena voluntad para hacer que las
personas se sientan como todo un profesional escalando montañas.
Les cuento que si queríamos aventura, aquí se pagó el viaje, la adrenalina fluyó a su
máxima expresión y la ansiedad cada vez era mayor. Simplemente fue espectacular,
una verdadera montaña rusa; y para llegar a la cima, no había otro camino y tampoco
vuelta atrás, sólo avanzar con fe, disfrutando el momento con determinación y
confianza en nuestra fuerza interior.
La Cascada que
da lugar al
“Paso de Las
Lágrimas”.
Por fin pasamos El paso de Las Lágrimas y llegamos al segundo mirador en donde solo
estábamos Carmen y Yo, porque Víctor Javier se adelantó y Joel y Mariana vienen a unos 15
minutos detrás de nosotros. Aquí, por encima de los 2000 metros de altura la temperatura
indicaba 18°C, descansamos un rato y tomamos algunas fotos no menos impresionantes,
siempre con la pared del Roraima a mano derecha, vertical y firme, toda majestuosa.

31. Campamento Base visto en
zoom desde 2200 metros.
Seguimos avanzando en un sendero menos fuerte pero con grandes piedras, pasamos
a un lado del General, quien en pose marcial, nos daba la bienvenida.
El Soldado espera próximo a la cima….

32. A eso de las 3:00 pm llegamos a la cima, tardamos siete horas aproximadamente para
escalar el Roraima, el sueño deseado en los últimos cuatro meses. Jarri esperaba en la
entrada para conducirnos al Hotel Principal a una distancia de más o menos 1 km, una
media hora adicional. Nos reagrupamos Víctor Javier, Joel, Mariana, Carmen, Jarri y
Yo, y de nuevo comenzamos a caminar, muy cansados sacando un extra para llegar al
Hotel.
Estaba algo nublado y oscuro como próximo a anochecer, en el lugar se sentía mucha
paz, todo tranquilo como en un cuadro recién pintado, sólo las piedras y las figuras que
el tiempo formó en ellas, resaltaban por todos lados.
Impresiona las diversas formas de animales en las
piedras, la Tortuga voladora posa esperando a todos
los turistas que van llegando. La primera impresión en
la cima es impactante pues se debe caminar a través
de un sendero entre piedras grandes que conforman
un camino tipo laberinto, fácil para desorientarse y
perderse; la neblina en un clima lluvioso y el silencio
completan el escenario algo tenebroso como para no
separarse del grupo.

33. Llegamos al hotel, en donde ya estaban las carpas listas para nosotros y se
encontraba el resto del grupo; dejamos los morrales y nos acomodamos en las carpas
disponibles; sacamos la ropa mojada extendiéndola sobre arbustos y piedras para
secarla, nos cambiamos y salimos a caminar cerca de unos drenajes del Tepuy, que
forman pequeños riachuelos donde el nivel del agua a penas nos llegaba a los tobillos,
para bañarnos y refrescarnos. El agua también se sentía muy fría pero estábamos tan
cansados que no le paramos mucho.
Este Hotel, al igual que los otros, es un cerro de piedra de unos 30 metros de altura,
en donde la erosión formó una cavidad en la base, como una cueva, que permite
resguardarse de vientos y lluvias. En la noche nos reunimos en el área de la cocina en
el campamento, el clima estaba nublado, con la noche algo oscura y fría; nos
dispusimos a charlar con mucho frío mientras esperábamos la cena. Un roedor
hambriento comenzó a molestarnos hasta el punto de arañar a Luís y a Marcos, pero lo
ahuyentamos y seguimos con nuestra cena. Posteriormente cada quien se fue directo
a la carpa para descansar.

34. P A R TE I I
C a p í tu l o I V
En la Cima de la Montaña…

35. de
Jueves 18 de Agosto de 2011. Cuarto Día.
En este cuarto día, nos levantamos algo más tarde de lo normal y creo fue el resultado
del cansancio acumulado; la mañana estaba fría, algo nublada y con vientos, todos
amanecimos muy bien y soportando el frío de la noche. Joel y Michael ya tenían listo
el desayuno, una suculenta avena caliente, y cada uno se alistó para desayunar. El
plan del cuarto día era visitar el punto triple, a unos 13 km, Michael explicaba el alcance
del trayecto y preguntó si deseábamos ir, sin embargo, nadie en el grupo tuvo fuerzas
para animar emprender el recorrido, en silencio todos nos quedamos aprobando sólo la
visita a lugares cercanos, pues la realidad de estar cansados fue superior a los ánimos
para seguir explorando en rutas lejanas. Quizás Michael o Joel no fueron muy
convincentes en la invitación al nuevo recorrido, lo cierto fue que decidimos no ir para
no agotarnos, ya que iban a ser unas 8 o 10 horas de caminata ida y vuelta.
La alternativa para ese día fue visitar el mirador con su ventana, al borde del Roraima
en el lado este, los jacuzzis, pasar por el valle de cristales y regresar a medio día para
almorzar y descansar, luego dependiendo de las condiciones podríamos visitar la cima
del Maverick.
El día estaba parcialmente nublado con neblina variable; vía al mirador pudimos
apreciar mejor el relieve en la cima, caminando por senderos de arena fina como una
playa, con quebradas de agua, una superficie irregular con piedras de diversos
tamaños que se fueron desgastando en el tiempo por acción de los vientos y el agua.
El desgate de las piedras ha ido formando pequeñas cavidades con figuras diversas.
La vegetación era muy discreta y una vida animal bastante limitada representadas por
las plantas carnívoras y la pequeña ranita o sapito de la montaña, especies únicas.

36. Hasta los momentos, quien pudo tener expectativas de encontrar y ver algún
Dinosaurio, extraterrestre o descendientes de los personajes de Arthur Conan Doyle en
su Libro “ The Lost World ”, quizás se sienta algo desilusionado y tuvo que
conformarse con el rastro y figuras en las piedras. Sin embargo, a pesar de la
insensibilidad en algunas personas sea por ignorancia o por rebeldía, era difícil pasar
por alto sentir una gran energía en medio tanto silencio, sentir como que algo o alguien
nos observaba y dirigía nuestros pasos por los diferentes senderos, es parte de la
experiencia de estar en un lugar maravilloso y la razón de haber realizado el viaje.
Lamentablemente tanta neblina nos impidió apreciar completamente el abismo en el
Mirador. En la Ventana también había una vista reducida y sólo parcialmente se pudo
ver la inmensidad de la sabana desde los 2720 m de altura, sin embargo nos ubicamos
en los sitios emblemáticos del lugar tomando fotos en la gran piedra cabeza de
Dinosaurio, la ventana y el abismo.
La Ventana
Abismo…
El Abismo
En la Cabeza del
Dinosaurio…
Dinosaurio….

37. Posteriormente nos dirigimos a los Jacuzzis, que son formaciones huecas alargadas de
diferentes tamaños, como una bañera, con el fondo en piedras de cuarzo y por donde
corre agua fría, fría, menor a unos 7 °C. Sin embargo el frío no fue limitación para
tomar un buen baño fresco…
Continuamos nuestro camino bastante relajados y algo mojados, pero felices, y
llegamos al Valle de los Cristales, quizás no el mas grande pero bastante
representativo. En esta zona encontramos El Cuarzo aflorando en la superficie en
diferentes formas y tamaños, predominando el Cuarzo Blanco Lechoso y el Citrino.
El cuarzo, en estado puro y sin impurezas se denomina cristal de roca o "cuarzo
hialino". Cuando su tono varía al pardo o grisáceo se le llama cuarzo ahumado;
amatista si es violeta, citrino si es amarillo anaranjado.
El cuarzo es un mineral de la clase 4 (óxidos), según la clasificación de Strunz,
compuesto de dióxido de silicio (SiO2) que cristaliza formando prismas hexagonales.
Es un compuesto de gran utilidad para gran variedad de transductores, desde
encendedores o mecheros hasta micrófonos. También es usado en sistemas
electrónicos como relojes, microprocesadores y osciladores.
Se utiliza como abrasivo bajo el nombre de arena silícea, y se considera el abrasivo
más usado por su bajo precio. Se lo emplea en la fabricación de lijas, discos o bloques,
y, principalmente, en sistemas de abrasión por medio de un chorro de arena a presión.

38. Cuarzo rosa Cuarzo hematoideo Amatista Citrino
Ágata Cuarzo lechoso Jaspe Pulido Cuarzo ahumado
Se encuentra presente prácticamente en cada rincón del planeta, en forma pura o en
rocas junto a otros minerales. Denominado “piedra del poder”, ha formado parte de
rituales de todo tipo y se le han atribuido propiedades sanadoras. El cuarzo, el mineral
más abundante sobre la Tierra, tiene una historia para contarnos……
Para los estudiosos de diversas disciplinas, como la gemoterapia o la litomacia, el
cuarzo es portador de una fuerza energética inigualable; utilizado en curaciones de
todo tipo por sus aparentes propiedades terapéuticas. Entre otras cosas, se cree que
es efectivo contra la pérdida de vitalidad y que posee importantes beneficios como
potenciador de la concentración mental. Dado su valor energético, también se emplea
como protector personal y del hogar.
En el paso por el Roraima nos podemos llenar de toda esa energía de los cristales de
cuarzo, pero sólo de la energía pues los cristales se deben dejar en su sitio natural y
nunca sacarlos de ahí, en este lugar es donde lucen. Si se desea un recuerdo, puede
obtenerlo en la Casa de los Cristales en Santa Elena de Uairén.
Continuamos nuestro recorrido, ya casi medio día, pasamos por algunas formaciones
rocosas con figuras emblemáticas como la de Fidel Castro y el Valle de los Penes,
vía hacia el campamento en el Hotel Principal. Al llegar nos dispusimos a comer y
descansar.
Tomamos el almuerzo y el grupo corrió para las carpas a descansar, yo preferí bajar
del campamento hacia las piedras para calentarme con el sol que estaba haciéndose
presente.

39. Como a las tres de la tarde salieron Joel, José, Marcos y Eugenio y empezamos la
camina para subir al cerro del Maverick que estaba en frente de nosotros, en el punto
más alto del Roraima a 2.815 metros que indicaba el altímetro; fue un recorrido rápido
pues como siempre ellos siempre andaban a millón y sólo tuve que adaptarme a su
paso, aunque al llegar a la cima me sentí bastante agotado.
La cima del Maverick no fue diferente de lo que ya habíamos visto, sin embargo allí se
podía observar toda la sabana desde un gran mirador, con la mala suerte que se nubló
en poco tiempo y de nuevo todo estaba en gris. Aprovechamos para sacar fotografías y
desde luego tomar la foto en el hito improvisado, que se ha ido formando de cada
grupo que al subir al Maverick coloca una piedra.
Cima del
Maverick,
Maverick, Hito,

40. Bajamos del Maverick como a las 5:00 pm y volvimos al campamento, esta vez si me
dispuse a descansar un rato antes de la cena. Al llegar la noche todos estábamos mas
descansados y nos reunimos para cenar. Después de cenar casi en forma automática
cada uno de dirigió a la carpa para dormir, pero de repente se escuchó un alboroto, era
Marcos llamando la atención para que disfrutáramos de las estrellas, la noche estaba
muy despejada y la oportunidad era única. Así que salimos de las carpas, a soportar el
frio, pero disfrutar del espectáculo. Con las limitaciones tomamos muchas fotografías,
pero sólo pocas se pudieron observar, gracias a mi super cámara, en forma manual
pude obtener algunas mas o menos representativas….
La noche estaba muy despejada y clara brindando todo su esplendor, las estrellas se
podían tocar con las manos, la vía Láctea, las constelaciones: fue uno de esos pocos
momentos para admirar la grandeza del universo. Ese espectáculo desde hace tiempo
que no puede apreciarse en las ciudades, ni siquiera en mis últimos viajes a Mérida en
el Observatorio, pues la neblina y el mal tiempo han estado presentes impidiendo poder
observar las estrellas. Simplemente fue otro regalo del Roraima para nosotros, lo cual,
no tiene precio……
Después del espectáculo astronómico, nos fuimos a dormir, estaba haciendo mucho
frío; el termómetro llegó a indicar 3 °C y esa noche hubo que abrigarse bien para poder
dormir.

41. C a p í tu l o V
El Retorno, Descenso de la
Montaña…

42. Viernes 19 de Agosto de 2011. Quinto Día.
En este nuevo día nos levantamos todavía con mucho frío de la noche y rápido
comenzamos a preparar los morrales para comenzar el retorno. Esta etapa comprende
bajar hasta el Campamento Base, almorzar y seguir hasta el Campamento en Rio Tek,
aunque el recorrido era de unos 14 kilómetros, para nosotros representaba una
caminata de unas 10 horas, nos enfrentábamos a un nuevo reto, esta vez, bajar del
Roraima, que después de ver la ruta al subir, no dejábamos de tener muchas
expectativas sobre la dificultad en el descenso, que estimamos realizar en cinco horas.
Algunas personas en el grupo estaban sufriendo de molestias con dolores en la rodilla,
gracias a las vendas y rodilleras se pudo emprender el camino con menor sufrimiento.
El día estaba bastante claro y despejado, desayunamos y nos despedimos del Hotel
Principal en la cima del Roraima, llenamos los envases con agua fresca y comenzamos
a caminar, Joel nos propuso pasar por el mirador, lado sur del Roraima, para
aprovechar el buen tiempo y apreciar la hermosa vista en el horizonte.
Finalizamos de tomar las fotografías en el mirador y comenzamos el descenso,
observando el sendero en sentido
contrario, se podía sentir el vacío hacia
abajo por el sendero de pendiente
inclinada, ahora bajábamos las piedras
grandes, sólo me preocupaba mantener
un buen paso con cuidado de no molestar
rodillas o tobillos. Como siempre parte
del grupo se fue adelantando, otro grupo
de personas también venía bajando, era
un grupo de franceses y caminamos
juntos hasta llegar al paso de las lágrimas, luego se adelantaron y nos fuimos
quedando atrás Carmen, Mariana, Joel y mi persona.

43. El Paso de las Lágrimas estaba tranquilo con poca agua, así que lo pasamos sin
dificultad alguna, mucho más fácil que subirlo. Llegamos al mirador y hasta aquí el
trayecto se ha sentido sencillo sin mayor dificultad, nos detuvimos para sacar algunas
fotografías; vamos Carmen y yo y un poco mas atrás de nosotros venía Joel con
Mariana quien estaba algo lesionada y su paso era lento.
Cuando llegamos al siguiente mirador nos encontramos con un grupo de Ingleses que
venían subiendo, nos saludamos y conversamos un momento sobre el trayecto que les
faltaba recorrer y de los cuidados al subir, tomamos fotografías y luego seguimos
caminando entusiasmados porque llevábamos un buen ritmo; ya habían transcurrido
unas cuatro horas de caminata descendente desde que dejamos la cima.
Al llegar a la pared nos detuvimos a
descansar un rato y dar gracias a la montaña
por habernos permitido visitarla. Este sitio tiene
un encanto particular pues es el punto en donde
comienza el sendero a través de la selva y de
alguna manera se deja el sendero de piedras,
hay una pequeña cascada que forma una
quebrada de agua fresca en donde es imposible
dejar de detenerse a descansar y meditar, pues
como les mencioné antes, se siente una gran
energía desde la montaña.
El camino siguiente comenzó a ser algo incomodo pues había amenaza de lluvia
y el ambiente estaba muy húmedo, el suelo en este tramo es mas arcilloso con piedras
y es incomodo pues es fácil resbalarse, además que la erosión a socavado el suelo en
algunos puntos agrietando el sendero.

44. Por fin llegamos al Campamento
Base, alrededor de las 1:20 pm, lo
cual quiere decir que tardamos en
bajar unas cinco horas y media, mas
de lo estipulado pero dos horas menos
de lo que tardamos para subir. El
tramo final estuvo mas incomodo por
la llovizna que puso algo resbaloso el
suelo y por consiguiente debíamos
tener mas precaución para bajar. En el
campamento nos estaba esperando
Jarri con el almuerzo, Víctor Javier
había llegado antes que nosotros y
descansaba, nosotros estábamos cansados y ya la mayoría del grupo había pasado
para Rio Tek., detrás de nosotros venían Joel y Mariana mas o menos a una hora de
distancia.

45. Comimos y descansamos, sabíamos que era tarde y el trayecto era fuerte, sobre todo
porque estábamos cansados. Sugerimos que se modificara el esquema del trayecto
para no hacer los dos recorridos el mismo día, pero ya todo estaba preparado de esa
forma y era la manera tradicional de hacer este viaje. Así que sin pensarlo más nos
pusimos en camino, comenzamos la ruta a las 2:00 pm hacia Rio TeK, faltaba recorrer
unos 10 kilómetros aproximadamente. Víctor Javier, Carmen y Yo solos en este
trayecto, aunque Joel y Mariana venían atrás.
A pesar de todo la tarde estaba fresca, sin mucho sol pero no había señales de lluvia,
solo estaba nublado. Comenzamos el recorrido que en gran parte era en senderos
rectos y planos, tenia sus complicaciones y eventualmente encontrábamos cerros de
diferentes alturas que teníamos que subir y bajar. Les confieso que fue en este tramo
cuando comencé a contar los cerros y lomas que hasta Rio Tek eran como ocho de
diferentes tamaños; lo incomodo fue estar cansados del primer recorrido, al bajar el
Roraima y comenzar tan tarde a caminar. Calculamos que podríamos tardar unas seis
horas para llegar al próximo campamento, lo cual no se lo mencioné a carmen pues
íbamos a llegar como a las 8 de la noche.
El trayecto transcurrió sin muchas complicaciones, ya conocíamos el sendero y por
supuesto caminábamos concentrados y quizás algo preocupados por la hora; solo
hacíamos paradas cada 20 0 30 minutos para hidratarnos y continuábamos la
caminata, en este trayecto no tomamos muchas fotografías, era caminar y caminar. Ya
casi llegando a Rio Kukenan venía Jarri a nuestro encuentro para ayudarnos un poco
con la carga de los morrales y acompañarnos para llegar al campamento. Tomó el
morral de Carmen y Víctor Javier quienes venían mas agotados, Carmen por el peso y
Víctor por la rodilla que desde el día anterior le estaba molestando. La ayuda de Jarri
fue muy acertada, mas allá de ayudarnos con el peso, para nosotros fue un gesto de
solidaridad y ayuda moral, sentimos la camaradería y el sentido de responsabilidad de
ellos para con nosotros y eso no tiene precio…..
Joel venía acompañando a Mariana quien estaba lesionada, ella realmente realizó el
viaje gracias a Joel quien la ayudó todo el tiempo sin dejarla renunciar a la meta. De
aquí la importancia de seleccionar un buen operador turístico, realmente nuestra
selección de Venelands fue muy acertada. Gracias a Joel, Jarri y Michael guías
excepcionales y compañeros incondicionales, mis respetos y mejores deseos.
Aproximadamente a las 6:00 pm llegamos al Rio Kukenan, nos sentimos muy contentos
pues llevábamos buen tiempo, ya faltaba menos de dos kilómetros para llegar al
campamento de Rio Tek. Nos preparamos para cruzar el río, cosa por demás bastante
incomoda por la corriente y las piedras, había que quitarse los zapatos y pasar en
medias. Fue un momento algo difícil en donde tuve algunos contratiempos al golpear
los dedos de los pies contra las piedras.

46. Finalmente cruzamos el río y proseguimos nuestro camino hacia el campamento de Río
Tek, subimos el cerro, pasamos la loma frente a la Iglesia para llegar a Río Tek, en
donde de nuevo nos dispusimos a cruzar. Ibamos cansados y ya la noche se hizo
presente, sentía algún dolor en mis dedos pero igual tenía que pasar el río. Al llegar a
la otra orilla me encontré con la sorpresa de que Víctor se había llevado mis botas y
tuve que terminar los últimos 200 metros en condiciones no muy agradables, descalzo
y cansado, en un camino de piedras semi oscuro y con amenaza de lluvia.
Llegamos al campamento antes de la 7:00pm, nos tardamos menos de cinco horas
desde Campamento Base, lo cual, fue muy bueno, el recorrido total desde la cima del
Roraima fue unas 10,5 horas de caminata. Gracias a Dios llegamos bien, algo
agotados, pero bien.
Al llegar al Campamento nos esperaba el resto del grupo, seleccionamos la carpa y nos
cambiamos para ir al río a bañarnos; comenzó a llover y complicó algo nuestra
caminata ida de noche hacia el río, alumbrándonos con las linternas llegamos y
tomamos un buen baño con agua fría para relajar los músculos y decirle adiós al
cansancio. La cena estaba lista a nuestro regreso pero yo pasé directo a la carpa para
disponerme a dormir .

47. C a p í tu l o V I
El Final de la Aventura…

48. Sábado 20 de Agosto de 2011. Sexto Día.
Hoy es el fin de la aventura, han pasado cinco días enfrentando reto tras reto, y
falta cumplir la última etapa del viaje para llegar nuevamente al Campamento de
Paraitepuy. Nos levantamos bien temprano, pasamos una noche bien placentera y
fresca debido a que llovió en varias ocasiones; acomodamos rápidamente el morral y
salimos al río a lavarnos y luego fuimos a desayunar. Estamos animados para
emprender la caminata y aprovechar la mañana que está bastante clara, con mucho sol
y para hoy no se observa mal tiempo. Esperamos llegar a Paraitepuy en unas cinco
horas en un trayecto en donde debemos atravesar como ocho cerros y lomas de baja
dificultad con el cruce de cuatro riachuelos o quebradas. El mayor reto es al final
cuando lleguemos al cerro de prueba que es el más alto.
El campamento estuvo bastante
concurrido desde ayer pues coincidimos
varios grupos que íbamos de regreso con
otros que iban hacia el Roraima; algunos
han salido mas temprano y entre los
últimos se observa un grupo de franceses
que llevan a dos niños no mayores de diez
años. Nos llamó mucho la atención ver a
los niños y pensar en todo el camino que
deben recorrer para llegar a la cima, la
voluntad y fortaleza que deben tener para
vencer los diferentes obstáculos. No alcanzamos a saber si están en capacidad física
para hacer el viaje, pero lo mas seguro es que los padres deberán pagar a un
Porteador para que los lleven cargados. Particularmente considero que este viaje debe
ser para jóvenes de 14 años en adelante, concientes de la exigencia física y
limitaciones de la travesía. Es muy frecuente encontrar a muchos adultos lesionados o
extenuados por el recorrido que al final deben pagar para que los traigan en
Helicóptero, en Mulas o caballos debido a no estar en condiciones para seguir o
culminar los diferentes trayectos.
Comenzamos a caminar a las siete de la mañana Carmen, Víctor Javier y Yo, Eugenio
nos alcanza poco después y pasa rápidamente detrás de José, Luís y Marcos quienes
habían salido un poco antes con paso veloz tal y como era su ritmo, detrás de nosotros
venía Mariana. Michael, Joel y Jarri se quedaron levantando el campamento y
acomodando los enseres. Estas primeras horas de camino transcurrieron sin
novedades, ya conocíamos el camino y no nos detuvimos a tomar tantas fotografías,
pero si queríamos disfrutar un poco mas de los pasos en las quebradas, sobre todo
aquellas en que el agua corría con mayor caudal.

49. En el trayecto iba un grupo de turistas españoles y notamos con bastante desagrado
que llevaban una bolsa de piedras de cuarzo, realmente nos disgustó pues el guía
debía estar pendiente para evitar que las personas extraigan un mineral que pertenece
al Roraima y que mas allá de tener un recuerdo causan un daño por el abuso. Nosotros
solo alcanzamos a decirles que no debían llevar esas piedras y que el personal de
Imparques se las quitaría al revisarlos en Paraitepuy.

50. Una vez que pasamos por el cerro de la prueba, tomamos un merecido descanso en el
paso del río, en donde había un agradable ambiente lleno de la frescura vegetal y el
arrullo del agua a su paso por las piedras, cristalina y fría muy buena y oportuna para
nuestra hidratación y recobrar fuerzas para llegar al campamento.
Al retomar el camino comenzamos a subir la última pendiente del recorrido,
observamos el Jeep que esperaba para ayudar a Mariana que venía con Joel bastante
accidentada. Nosotros le pasamos de lado y
quisimos seguir sin ayuda, quizás por honor y
compromiso con nosotros mismos de poder decir
que hicimos todos los recorridos sin ayuda de
transporte alguno.

51. Al llegar a Paraitepuy el grupo nos esperaba como siempre, solo faltábamos nosotros,
nos dirigimos a las oficinas de Imparques para la revisión de los morrales. Ya la
travesía había terminado, el grupo estaba algo silencioso y observábamos el horizonte
como el primer día para admirar al Gran Roraima.
De alguna forma me sentía algo triste, eran muchos sentimientos encontrados al ver
tanta inmensidad, no podía creer que llegamos a la cima y regresamos con
entusiasmo, sanos y llenos de energías.
Ahora estamos listos para salir, tomamos la foto grupal y colocamos los morrales en el
Jeep para ir de regreso a San Francisco de Yuruaní.

52. Es así como culmina este relato, nuestra travesía al pasar por el Mundo Perdido,
en la Escalada al Monte Roraima. Aún en los momentos de mayor tensión o dificultad
disfrutamos de cada paso que dimos, de cada respiro de aire; nos sentimos muy
alegres, convencidos que después de este viaje éramos personas diferentes.

53. Cada uno se lleva un lindo recuerdo, un sentimiento particular por las metas logradas y
la experiencia común vivida que nos unirá para siempre……… RORAIMA.
.
Siempre para ustedes,
Víctor José Hernández
San Diego, Septiembre de 2011
Estado Carabobo – Venezuela
+58-0426-5462966
victorjher@gmail.com

55. Anexos.
Anexos
• Lista de Materiales y Equipos.
A continuación les ofrezco un listado de los materiales y equipos que pueden ser útiles
para el viaje:
Ropa Alimento y Equipos y Materiales Varios
Medicinas
1 Medias de Algodón Caramelos Cámara Fotográfica
2 Franelas manga Chocolates Bastón de Treeking
larga
3 Monos Galletas Morral ( 35 litros Preferiblemente)
4 Zapatos Deportivos Crema Zero Cubre Morral Impermeable
5 Botas de Montaña Crema o Spray Impermeable o Poncho
Dolor Muscular
6 Gorra Pastillas Dolor Saco de Dormir
Cabeza
7 Paño Pastillas Diarrea Aislante
8 Chaqueta Pastillas Dolores Cantimplora
9 Guantes Pastillas Gripe Linterna
10 Zapatos Pastilla Antialergico Baterías
Impermeables
11 Ropa Interior Rodilleras Tirro o cinta adhesiva
12 Tobilleras Lentes de Sol
13 Crema con
Vitamina B
- Es recomendable que la ropa a llevar sea de Licra, de secado rápido
preferiblemente, solo las medias de algodón.
- Los zapatos impermeables de playa son buenos para el cruce de ríos, pero puede
hacerlo en medias gruesas.
- Prepare la ropa de uso diario (Franela, pantalón, medias, ropa interior) en bolsas
plásticas bien selladas.
- El Tirro o la cinta adhesiva es muy útil para proteger las partes del cuerpo sometida
a roce como los dedos de los pies, talones, planta de pies etc y evitar ampollas..
- Lleve una chaqueta ligera pero que pueda abrigarlo bien del frío, la temperatura en
la cima puede bajar a 3°C. en las noches.

56. - Los dulces son el complemento para una buena hidratación, no lleve mas del que
pueda comerse.
• Coordenadas y Mapas.
Paraitepuy—Río Tek: 13.4 km.
Río Tek
5° 06’ 26.2 ‘’ N
60° 50’ 46.4’’ O
Paraitepuy
5° 03’ 23.1 ‘’ N
60° 56’ 04’’ O
Río Tek--- Campamento Base: 9.7 km. Campamento Base
5° 08’ 52 ‘’ N
60° 46’ 52.4’’ O
Río Tek
5° 06’ 26.2 ‘’ N
60° 50’ 46.4’’ O

57. Entrada Cima Roraima
5° 09’ 53.82 ‘’ N
60° 47’ 10.02’’ O
Mirador
5° 09’ 35.8 ‘’ N
60° 46’ 51.5’’ O
Campamento Base—Cima Roraima: 3.2 km.
Campamento Base
5° 08’ 52 ‘’ N
60° 46’ 52.4’’ O

58. Hotel Principal
5° 09’ 44.1 ‘’ N
60° 46’ 46.7’’ O
Mirador
5° 09’ 35.8 ‘’ N
60° 46’ 51.5’’ O