El documento argumenta que la crisis es una bendición disfrazada porque impulsa la innovación, la creatividad y el progreso. Señala que durante la crisis surgen nuevas ideas y estrategias, y que superar la crisis personal permite superarse a uno mismo. También sugiere que atribuir los fracasos a la crisis en lugar de buscar soluciones es contraproducente, y que la verdadera crisis es la de la incompetencia y la pereza para encontrar salidas.
1. La crisis como un impulso para el progreso Presentacion realizada por Victor Tabares
2. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países porque la crisis trae progresos. Las cosas no saldrán bien si siempre se hace lo mismo. Cambiar es sinónimo de innovación.
3. La creatividad nace de la angustia como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar 'superado'. El rival más difícil a superar somos nosotros mismos. CREATIVIDAD
4. Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones. Debemos evitar ser parte del problema. La verdadera crisis es la crisis de la incompetencia. INNOVACION
5. El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Todos debemos trabajar para lograr la superación. Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. La rutina nos vuelve vagos mentalmente. Sin crisis no hay méritos.
6. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo.