El documento describe diferentes tipos de grafitis, incluyendo los grafitis satánicos que se encuentran en Honduras. Estos grafitis satánicos se usan para amenazar e intimidar a través de mensajes amenazantes y para demarcar territorio. Aunque el graffiti es considerado un arte, en Honduras desde 2009 se ha convertido en un método de amenazas. La iglesia trata de ayudar pero se necesita más apoyo para combatir el miedo.