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Tu revista digitalNÚMERO 26 • MAYO DE 2013
Silvestrismo y
competición
Perrosdecaza:
cadacosaasutiempo
Esperas
enverano
alosconejos...
yaloscochinos
Quenoteengañen
con los daños
en los cultivos
sí tiene quien
le quiera
El arruí
sumario2dejuniode2013
En tablets y otros dispositivos móviles,
se recomienda la orientación horizontal
para la óptima visualización de
10
Esperas a los conejos en verano
22
Daños en los cultivos:
¡que no te engañen!
número26
32
Con los perros, cada cosa a su tiempo…
Foto portada: SHUTTERSTOCK
44
El arruí sí tiene quien le quiera
Producto:
Bresser Game Camera
66
Claves para los aguardos
cochineros estivales
56
74
XIX Campeonato de España de Silvestrismo
LAIMAGENDELASEMANA
fotos:shutterstock
Negras perspectivas
en nuestros campos
Uno de los grandes expertos en gestión
de las especies cinegéticas no duda en
asegurar que ya es “hora de poner un
poco de cordura en nuestro campo,
y restringir determinadas prácticas
devastadoras también, y en aquellos
lugares donde se resistan a pensar en el
mañana, o sean insensibles a reconocer
que determinadas faenas hay que
cambiarlas en sus horarios, será mejor
optar por marcharse de allí y dejarles en lo
suyo, que ya el tiempo les dará o quitará
razón. Lo triste es que sigan cobrando
unas subvenciones por acabar con todo y
nadie les supervise sus efectos”.
Estas son unas semanas decisivas para
el devenir de nuestros cotos. Es tiempo de
reproducción de perdices, liebres, conejos,
torcaces y aves migratorias como tórtolas
y codornices. La naturaleza necesita
tranquilidad, es mejor estarse quietos
e ir observando el campo y cómo va su
desarrollo. Ahora bien, debemos estar
preparados para unos días intensos en
cuanto a trabajo, el primero y tal vez más
relevante es dotar de cobertura aquellos
lugares donde sabemos que se quedarán
totalmente al descubierto. Luego, además
de refugio, sumar puntos de agua y de
comida tratada. Pero lo principal sería
recuperar nuestros hábitats, los arroyos,
las linderas, los perdidos, los árboles, las
zarzas, las retamas, los carrizos. Estamos
acabando con todo y preferimos mirar
para otro lado. Y así nos va.
Esperasa
losconejos
enveranoEn el número anterior hablábamos de las salidas a los
conejos en las próximas semanas, centrándonos en recechos
y caza en mano. Pero hay otra modalidad que da muy
buenos resultados allí donde los conejos son abundantes
y cuentan con grandes vivares: la caza en espera.
POR Miguel Soler
Fotos: Alberto Aníbal-Á.
cazamenor
S
i bien no es la modalidad
más dinámica ni la que
depara más satisfacciones
a quienes buscan lances suce-
sivos ante conejos que saltan a
corta o media distancia, la espe-
ra es la que de forma tradicio-
nal más se ha practicado des-
de hace décadas en nuestros
campos, siendo la mejor opción
para quienes por edad o movili-
dad no pueden trastear mucho
y deciden apostarse ante lindes
Es una buena modalidad para seleccionar
conejos adultos y clarear algunos vivares, así
como para reducir daños significativamente
de monte, vivares o pedrizas
para tirar tres o cuatro conejos,
y a la par, la que de forma más
frecuente permite a los pri-
merizos en esta afición tomar
contacto con los conejos en las
primeras cacerías de verano.
Con apasionados y detracto-
res, la espera sigue siendo una
buena modalidad para seleccio-
nar ejemplares adultos y cla-
rear algunos vivares, así como
para reducir de forma significa-
tiva los daños en determinadas
parcelas de cultivo.
Tiene su encanto, eso es in-
cuestionable; la espera de co-
nejos, sobre todo si se realiza
al amanecer, tiene el añadido
del momento, del despunte del
amanecer en el campo con los
olores y sonidos que tan sólo
en esta época se sienten en
nuestros cazaderos, y con ese
frescor que se agradece, con
la luz del día arrancando y el
espectáculo de estar presente
cuando el campo se enciende
y la vida arranca de nuevo. Y
como añadido, la ilusión por
poner a tiro a dos o tres coneje-
tes degustando el lance,
con calma y volcados a tope
en cada instante.
La espera es mucho más que
apostarse delante de un vivar para
disparar a todo conejo que se asome,
acerque, mueva o salga
La espera es mucho más que
apostarse delante de un vivar
para disparar a todo conejo que
se asome, acerque, mueva o
salga, eso es otra cosa; el buen
cazador en espera no esquilma
vivares fáciles ni arriesga con
sus disparos, pues en este esce-
nario uno mal tirado -a destiem-
po o fuera de su sitio- es conejo
que se emboca malherido y es
irrecuperable. Tampoco dispara
a todos por sistema, es cazador
selectivo que observa, decide y
abate con soltura a los conejos
“que hay que quitar”. Por todo
ello, y porque aunque nos gusta
cazar ahora al salto o en mano,
siempre tenemos la llamada de
ir a tal o cual esquina del coto a
hacer una espera de amanecida
o de tarde -que también tiene
su encanto aunque pasemos
más calor y tiremos menos-.
AVANCE DE LAS FECHAS
HÁBILES PARA LA CAZA
DEL CONEJO EN VERANO
Dañosen
loscultivos:
¡Queno
teengañen!
Todosobrelaperitación
Conestesegundoartículocerramoslaserieiniciada
enelnúmeroanteriorsobreperitaciónpordaños
producidosencultivosagrícolasporconejos.Enestaocasión
noscentraremosencómollevaracabolavaloración
delosdestrozosocasionadosporlosanimales.
Por Mariano López Peñuelo (Ingeniero Técnico Agrícola)
Fotos: Shutterstock, Alberto Aníbal-Á. y Archivo
gestión
como en plano, así como de
las parcelas que se encuentran
anejas a estas infraestructuras,
y negociar la indemnización
a efectuar a la baja, porque
en esas zonas no se puede ca-
zar. Una medida más drástica
sería excluirlas del coto, pero
esto puede repercutir en otras
parcelas del mismo propietario.
La picaresca
El otro factor es la picaresca
del agricultor, que existe y en
ocasiones con dotes de abuso.
El agricultor visita más veces el
campo que el cazador y sabe
perfectamente por dónde y
cómo van a evolucionar los
daños: en aquella esquina de
la parcela que remata en un
E
mpezamos con un factor
que no depende ni del
agricultor ni del cazador,
las obras de infraestructura civil
como medianas, rotondas, vías
de servicio de autovías o líneas
de ferrocarril. Son auténticos
fortines para los conejos, en los
que se protegen de los preda-
dores y en los que el cazador no
puede cazar con arma de fuego
y, en ocasiones, tampoco hu-
ronear o bichear. Esas infraes-
tructuras alojan, como decimos,
infinidad de conejos que atravie-
san las malla metálicas y pastan
en las parcelas contiguas.
En este caso se recomienda a
los cazadores efectuar un regis-
tro de parcelas y delimitación
de las mismas, tanto en campo
Las obras de infraestructura civil son
fortines para los conejos, ahí se protegen de
los depredadores y de la presión cinegética,
pues en ellas no se puede cazar
Titularidad del aprovechamiento
En los contratos de aprovechamiento de los recursos
cinegéticos y del arrendamiento de los mismos hay
modalidades y combinaciones de todos los tipos: titularidad
del coto a nombre de la agrupación de propietarios o de
los cazadores; cesión de terrenos de los ayuntamientos a
las sociedades de cazadores; cotitularidad del coto entre
propietarios y cazadores… Dependiendo de quién sea el
titular y la legislación vigente en cada comunidad autónoma
la situación puede ser más o menos llevadera desde el punto
de vista legal y jurídico.
barranco o donde se levanta
la ladera y bajan del cerro, etc.
¿Qué puede hacer el agricultor?
Reducir las condiciones técnicas
del cultivo en las zonas que pre-
suntamente serán afectadas.
¿Cómo? No dando el laboreo
que debiera o disminuyendo
la dosis de siembra y abonado.
¿Para qué? Para acusar la no
nascencia de las plantas o la
disminución del rendimiento
agrícola a daños de las espe-
cies cinegéticas, cuando esto se
puede deber en cambio al no
cumplimiento de las condicio-
nes técnicas mínimas de cultivo
o a una sequía en la primavera,
por ejemplo.
Cómo se debe hacer
la tasación
La tasación busca dar un núme-
ro lo más preciso y exacto de
la producción que existe en el
campo después de los daños, la
Producción Real Final (PRF), fren-
te a la Producción Real Esperada
La tasación busca dar un número lo más
preciso y exacto de la producción que
existe en el campo tras los daños
frente a la que hubiera habido sin ellos
(PRE), la que hubiera existido si
no se hubieran producido da-
ños. La debe realizar un ingenie-
ro técnico agrícola que domine
la materia y conozca el cultivo a
tasar, pues tendrá que analizar la
calidad agrológica de los suelos,
los índices pluviométricos, si se
ha producido un “golpe de calor”
o ha habido plagas y/o enferme-
dades, la fertilidad del suelo, el
cultivo anterior, las labores reali-
zadas por el agricultor y los pro-
ductos fitosanitarios usados, los
rendimientos de los diferentes
cultivos y/o variedades, observar
cómo está de “granado” y denso
el cultivo, etc.
Para todo ello realizará un segui-
miento y posteriores muestreos
de las parcelas afectadas con un
par de visitas o más por cultivo,
una inspección previa en prima-
vera y otra lo más cercana posi-
ble a la recolección del cultivo.
Por otra parte, a la hora de calcu-
lar los pagos indemnizatorios se
deben considerar tanto el precio
del producto en el momento de
la fecha de indemnización como
el descuento de las labores de no
siega y acarreo en parcelas daña-
das al cien por cien.
PERROSDECAZA
Conlosperros,
cadacosa
asutiempo...
Algunas veces, cuanto más leo sobre técnicas de adiestramiento
y los recursos que podemos utilizar para alcanzar nuestro
objetivo, pienso que a muchos cazadores lo único que se
consigue es abrumarlos con ejercicios, normas, correcciones...
POR Pepe Durán
Fotos: Alberto Aníbal, M. Moreno y Archivo
I
ncluso creo que a algunos to-
das estas circunstancias pue-
den llevarles a sentirse frus-
trados, porque llegan a pensar
que lo que otros consiguen con
aparente facilidad, a ellos les
parece imposible de lograr. Es
por ello que me gustaría dar
mi humilde opinión sobre este
tema para tranquilizar un poco
a todos aquellos aficionados
que puedan sentirse reflejados.
Personas con habilidades
y profesionales
Durante muchos años he cono-
cido a algunos aficionados que
tenían una rara habilidad para
hacerse entender por los perros,
consiguiendo cosas de la forma
más natural y casi sin proponér-
selo que para otros suponían
ejercicios, repeticiones y más re-
peticiones. También es de justicia
reconocer que hay profesionales
con una carga enorme de prepa-
ración y conocimientos. Sin em-
bargo, no es menos cierto que
algunas veces queremos lograr
algunos objetivos que solamente
el tiempo y la madurez de nues-
Algunos aficionados tienen una rara habilidad para
hacerse entender por los perros, consiguiendo
cosas de forma natural y casi sin proponérselo
tros perros nos irán dando en
cada momento.
Lo más natural posible
No soy muy partidario de los
artificios, porque creo que no
están al alcance de cualquier
aficionado que quiera adiestrar
a su único perro, amén de no
saber siempre acertar con el uso
correcto de todos los artilugios
que se han puesto tan de moda.
Se recomienda insistente-
mente por parte de los profe-
sionales que se realice todo el
trabajo de la forma más natural
posible, enfrentando al cacho-
rro con un escenario lo más
parecido a la realidad. Por todo
ello, entiendo que lo más pare-
cido a la realidad es la propia
realidad. Considero que el cam-
po y las sucesivas temporadas
de caza irán poco a poco forjan-
do a nuestros compañeros.
Ya lo decía el refrán…
Bastaría con tirar del refranero
para darnos cuenta de que cada
cosa tiene su tiempo. Podemos
recordar un refrán que, hacien-
do referencia a las edades de los
perros de caza, decía: “Los pri-
meros cuatro años para mi ene-
migo, los cuatro siguientes para
mí, y los cuatro últimos para un
buen amigo”; o aquel otro refrán
que señalaba que el primer año
el perro caza con una pata, el
segundo, con dos, el tercero, con
Algunas veces queremos lograr algunos objetivos
que solo el tiempo y la madurez de nuestros
perros nos irán dando en cada momento
tres, y al cuarto año caza con las
cuatro patas, o lo que es lo mis-
mo, que hasta la cuarta tempora-
da el perro no estaba completo.
Y si estos refranes pertenecen
a tiempos pasados, en los cuales
la caza menor era mucho más
abundante que ahora -y además
no existían tantos impedimentos
para que los perros estuvieran
en el campo y en contacto con la
caza real- y ya entonces se con-
sideraba que a los perros había
que darles tres o cuatro tempo-
radas para que su rendimiento
fuese el adecuado, con mucha
más razón si los trasladamos a
los tiempos actuales, siendo lógi-
co que este proceso se alargase.
¡Pues no!, justamente queremos
lo contrario, acortarlo.
Adiós al desánimo
Así las cosas, empezamos a ha-
blar de frustración y fracaso
Lo más parecido a la realidad es la propia realidad.
El campo y las sucesivas temporadas de caza irán
poco a poco forjando a nuestros compañeros
PARA SABER MÁS
Este artículo completo, así como
otros dedicados al perro de caza, su
adiestramiento y las competiciones
cinófilas podrán encontrarlo en el
número de junio de Perros de Caza.
cuando solamente ha pasado
una temporada de caza, en la
que seguramente, y con suerte,
nuestro perro habrá mordido
una docena de perdices, unos
conejos y alguna liebre, justo lo
mismo que ese cachorro habría
mordido en tiempos pasados en
un par de jornadas. Es por ello
que les aconsejo que no se crean
todas las milongas que escuchen;
nuestras perdices han sido, son
y serán muy difíciles de mostrar.
Si ya antes eran difíciles de tirar a
perro puesto, imagínense ahora.
Les recomiendo que no se
desanimen ni desesperen; posi-
blemente sus perros no son tan
malos como ustedes piensan
o como otros quieren hacerles
ver. Tengan paciencia, dedí-
quenles todo el tiempo posible
y aprovechen cualquier ocasión
para trabajar con ellos. Todo lo
demás, si el perro tiene condi-
ciones y el campo le da las sufi-
cientes oportunidades, vendrá
con el tiempo. Después de todo,
quién no ha escuchado aquello
de “cada cosa a su tiempo”.
Tengan paciencia, dediquen todo el
tiempo posible y aprovechen toda
ocasión para trabajar con los perros
CAZAMAYOR
Esunaespecienoautóctonadenuestrapenínsula,peroqueha
cobradocartadenaturalezaenmuchaszonasynoentendemos
eseafánporhacerladesaparecer.Nosreferimosauntrofeo
espectacularyaunacazaquedeparalancesmuyexclusivos.Elarruí
llevayatiempoconnosotrosydebieraseguir:sítienequienlequiera.
Escribe: J. M. RISUEÑO VILLANUEVA
Fotos A.A.-Á. y Shutterstock
Elarruísí
tienequien
lequiera
cazamayor
S
on varias las décadas
transcurridas desde que
se introdujo el arruí en
territorio español, hoy consi-
derada por muchos cazadores
como autóctona del sudeste
ibérico. Su aclimatación en
los terrenos públicos de Sie-
rra Espuña, en la provincia de
Murcia, fue un éxito, para pa-
sar con posterioridad a fincas
privadas.
El carnero del Atlas o arruí
tiene como área de dispersión
natural todo el norte de África,
siendo las zonas más áridas y
montañosas de Mauritania, Su-
dán, Egipto, Libia, Argelia, Túnez
La localización encierra un grado
de dificultad añadida si los terrenos
tienen masas forestales, ya que el arruí
las aprovecha para ocultarse
y Marruecos donde podemos
verlo en su entorno original.
Al avistarlo por primera vez
observamos que es un animal
fuerte en su parte delantera,
con mucho pelo o barba que le
nace bajo el cuello, formando
un cordón hacia las extremida-
des y abriéndose en el pecho
con forma de “y” invertida has-
ta llegar a las rodillas,
de tal forma que parece
que lleva una antipara.
Las hembras y los machos
se diferencian por las cuernas
y las barbas, puesto que los
machos tienen el grosor de las
cuernas mayor y la longitud
superior, pudiéndose confun-
dir fácilmente una vieja hem-
Los dos sexos se diferencian por las
cuernas y las barbas, puesto que los machos
tienen el grosor de las cuernas mayor
y la longitud superior que las hembras
bra con un macho de mediana
edad por la fisonomía de éste
en ese momento de su vida.
Las astas de los machos llegan
a medir más de 30 centímetros
en su base, con una longitud de
unos 85 centímetros, mientras
que las hembras difícilmente pa-
san de 45 centímetros de longi-
tud, y el perímetro de la base
es más reducido.
SU CAZA
Los grandes machos adultos
(diez años) se apartan del grupo
y viven en soledad o a lo sumo
acompañados de una hembra.
La localización de la pieza en-
cierra un grado de dificultad
añadida si los terrenos donde
practicamos su caza contienen
masas forestales, ya que el
arruí las aprovecha para ocul-
tarse. El macho adulto, cuando
se siente acosado, permane-
ce alejado de sus congéneres,
ocultándose durante horas en
cuevas y ramblas estrechas que
imposibilitan divisarlo y aproxi-
marse a él, haciendo gala de
una astucia inusual en otros
caprinos. Su gran vista le ayuda
a ponerse en fuga cuando pre-
siente el peligro, adoptando dis-
tintas reacciones si se encuen-
tra acompañado de machos,
de hembras o solo. El rececho
Una vez que el arruí se ve acosado, su rececho
se convierte en un calvario hasta tenerlo a tiro,
por lo que muchas veces deberemos abandonar
Los prácticos en el rececho de
arruí manifiestan que para llegar
a cazar el ejemplar que desee-
mos, éste no debe sentirse obje-
to de persecución. Una vez que
el arruí se ve acosado, su rececho
se convierte en un calvario has-
ta tenerlo a tiro. Son, por tanto,
muchas más las veces en que se
desiste de cobrar un determina-
do ejemplar, por quedar nuestro
acecho burlado reiteradamente,
que aquéllas en las que logramos
un buen lance al abatirlo.
sobre la hembra tiene tanta
dificultad como la caza del ma-
cho. Las más adultas son, gene-
ralmente, las que tienen mejor
trofeo y, por supuesto, son
también más sabias y expertas
en zafarse de nosotros.
En la imagen, junto al satisfecho
cazador, Paco Yepes, guarda mayor de
Sierra Espuña, y los guardas Casimiro
y Borrascas, y Pedro Molina, guarda
de Puerto Ortiz.
cazamayor
Clavespara
losaguardos
cochinerosestivales
Esverano.Junio,julioyagostonosdepararánbuenas
oportunidadesparalasesperascochineras,enunaépocaenla
quelosjabalíessemuevenenbúsquedadecomidaybañasyenla
queademáslastemperaturasalcaerlatardenosontanrigurosas
comoenotrosmeses.Veamosaquíunaseriedeconsejosbásicos
paraestosaguardosresumidosporAlbertoAníbal-Álvarez.
Fotos: autor y Shutterstock
1
En la espera, antes de que
la luz desaparezca, debe-
mos hacer un estudio porme-
norizado del entorno, memori-
zando cada mata y cada árbol
y eligiendo el posible lugar
del disparo. La noche cambia
la percepción de las cosas
y el cálculo de las distancias
es sumamente complicado.
2
En los aguardos no hay
que adelantar nada, tan
sólo debemos colocar el tiro
en la caja torácica, siendo estos
disparos mortales de necesi-
dad. Poco se parece el tiro
a un jabalí que raudo atraviesa
el cortadero con el disparo a
un cochino parado, que es lo
habitual en las esperas; lo prin-
cipal es no ponerse nervioso a
la hora del tiro y hacerlo en las
mejores condiciones, sin estar
entumecido por el mucho tiem-
po de aguardo en condiciones
poco cómodas.
3
Agudizando el oído, el
aguardista espera a que el
viejo macareno entre en plaza,
lo deja cumplir, lenta y silencio-
samente levanta el rifle y...
El jabalí suele estar tranquilo
y parado, sin adrenalina y a una
distancia corta. Si el cazador
tiene experiencia, lo dejará cum-
plir, esperando a que le dé la
mejor oportunidad, no se preci-
pitará y permitirá que el animal
se confíe, que entre a la baña o
al comedero y le dé el costado.
4
Una cosa que siempre
debemos tener en cuenta
es que no debemos hacer el
más mínimo ruido cuando el
lance se aproxime, de modo
que tomaremos todas las medi-
das necesarias para que esto no
ocurra. Quitar la correa portafu-
sil -al estar sentados no nos va a
servir para nada-, evitar realizar
algún ruido cuando nos encare-
mos, elegir aquel rifle cuyo se-
guro sea más silencioso o cubrir
con cinta aislante las partes
metálicas que pueden rozar y
sonar, son pequeños trucos que
a buen seguro nos van ayudar,
pues no será la primera vez
que al encararnos el arma y
quitar el seguro el jabalí nos
oye y huye a toda velocidad
para no volver a verlo más.
5
En esta modalidad de caza
el uso de un buen visor es
también imprescindible. En con-
tadas ocasiones dispararemos a
un jabalí en medio de un rastro-
jo iluminado por la luna llena.
Lo normal es disparar en noches
oscuras sobre animales resabia-
dos que aprovechan la espesura
y las sombras para ocultarse.
Elegir visores con la máxima
apertura y luminosidad es lo
mejor, siendo los de 56 milíme-
tros de objetivo los que nos
depararán mejores resultados.
6
En cuanto a los aumentos,
lo idóneo es contar con
variables, siendo los más reco-
mendables aquéllos que se
mueven en un abanico de en-
tre los 2,5-3x y los 9x. Siempre
intentaremos disparar con los
mínimos aumentos, pues se-
gún se van añadiendo se va
perdiendo luminosidad. Una
buena opción es contar con
retículas iluminadas, ya que
nos permitirán realizar una
mejor puntería, pero siempre
con regulador de intensidad.
Unatrail-cam
pequeñaydiscreta
PRODUCTOS
Con las siembras ya crecidas llega uno de los periodos más
esperados por los cazadores. El boom que han experimentado
modalidades como el rececho del corzo o las esperas al jabalí
han hecho que, a día de hoy, sea en primavera y en verano
cuando muchos aficionados desempolvan su arsenal.
Texto y fotos: IA Sánchez
Bresser Game Camera
Y
tanto esperistas como
aficionados al rececho del
corzo cuentan desde hace
algunos años con un fiel com-
pañero de afición denominado
trail-cam, cámara de seguimiento
o scouting camera, discreto pero
eficaz dispositivo que, debida-
mente situado en lugares que-
renciosos para los animales, ya
sean naturales (encames, por-
tillos, rascaderos, trochas…) ya
sean artificiales (piedras de sal,
bañas, comederos…) nos propor-
cionan información fiel y deta-
llada de todo cuanto por allí se
mueve, en forma de fotografías o
vídeos, tanto de día como de no-
che. Las primeras eran enormesDurante la noche la Bresser Game Camera hace uso de una batería de 24 leds
infrarrojos para iluminar la zona de detección.
En la tapa inferior encontramos un pequeño
acceso para poder alimentar la cámara
con una batería o fuente de alimentación externa.
La parte trasera
de la Bresser Game
Camera es cóncava
y está dotada
de unos pequeños
pinchos que
facilitan su fijación
a la corteza
de cualquier árbol.
La calidad de sus fotografías
tanto de día como de noche es
ciertamente sorprendente
y no demasiado eficaces (había
que revelar el carrete, su flash
blanco asustaba a los animales,
consumían una barbaridad…),
pero a día de hoy tenemos trail-
cams como esta Bresser, que
podríamos hasta llevar en el
bolsillo de una camisa y que, con
cuatro pilas alcalinas AA, nos
proporcionará durante meses y
meses toda la información que
necesitemos sobre el lugar que
pretendamos “auditar”.
Parte de la clave de la reducción
de su tamaño radica en que el
control de sus funciones se reali-
za mediante un control externo,
un pequeño mando del tamaño
de un mp3/mp4 que nos permi-
te programar todas y cada una
de las funciones de esta peque-
ña cámara, como puede ser
la selección entre foto o vídeo,
la calidad de ambos, el número
de disparos por detección, el
intervalo entre detecciones, la
programación de fecha y hora,
la sensibilidad de detección et-
cétera. Cuesta un poco cogerle
el tranquillo al control remoto,
pero una vez hecho programar y
desprogramar es coser y cantar.
Acceso inferior
Al tener los controles externos
la cámara cuenta tan sólo con
una pequeña tapa en su parte
inferior que da acceso al depar-
tamento de las pilas, al slot para
la tarjeta SD (de hasta 8 gigas), al
interruptor de encendido/apaga-
do, a la salida de TV y al puerto
mini-usb en el que se conecta
el mando externo. La tapa tiene
igualmente un pequeño acceso
para poder alimentarla con una
batería o fuente externa de seis
voltios. La calidad de las fotogra-
fías tanto de día como de noche
es ciertamente sorprendente, y
más teniendo en cuenta que su
sensor es de tan sólo 3 mega-
pixels (hoy las encontramos de
8, de 12...), pero son más que de
sobra para cumplir holgadamen-
te el objetivo de fotografiar ani-
males y apreciar su calidad.
Bajo la tapa inferior encontramos los diferentes puertos
y el compartimento de las pilas.
PVP recomendado 139 euros
Precio en la Tienda de caza.com 99 euros
(unidades limitadas)
La Tienda de Caza: www.latiendadecaza.com
El mando externo de programación no lleva pilas,
se alimenta al enchufarlo a la cámara en el puerto mini-usb.
AlcáladeHenares
sellenadecantos
XIXCampeonato
deEspañadeSilvestrismo
ACTUALIDAD
Este próximo fin de semana la histórica localidad de Alcalá de Henares
se convertirá en capital mundial del silvestrismo, pues los mejores
pájaros fringílidos de las diversas plumas competirán en el Nacional de
Silvestrismo, que alcanza su decimonovena edición en este año 2013.
POR R.L.S.
Fotos: Shutterstock y RFEC
Madrid cuenta con grandes afi-
cionados a esta modalidad.
Este Campeonato de España
de Silvestrismo tendrá como
sede el campus universitario de
Alcalá de Henares, y más con-
cretamente el área conocida
como ‘Los Hangares’. Allí, a par-
tir de las nueve de la mañana
del domingo 2 de junio, los más
conocidos silvestristas y los me-
jores pájaros del país compe-
tirán en las diferentes plumas.
Tomarán parte en la compe-
tición un total de 193 pájaros,
repartidos en 36 jilgueros y 34
mixtos de jilguero, 36 pardillos
y 32 mixtos de esta especie, y
por último 29 verderones y 26
mixtos de verderones, tras ha-
ber superado las distintas prue-
bas provinciales y autonómicas.
N
o es de extrañar que la
Comunidad de Madrid
haya sido la elegida para
organizar esta prueba, pues es
una comunidad autónoma en
la que las actividades pajariles
ocupan un lugar importante en
la actividad anual de la Federa-
ción Madrileña de Caza, entidad
organizadora de este XIX Cam-
peonato de España. Además,
Este Campeonato de España
servirá, también, como un acto
de defensa de una actividad
que, pese a contar con no pocas
dificultades de todo tipo para
llevarse a cabo, “no puede ser
más respetuosa con las especies
con las que se concursa, y es
una verdadera pasión anclada
en la tradición de nuestro pue-
blo”, destacan desde la Federa-
ción Madrileña de Caza. El sil-
vestrismo es una actividad ética
y deportiva que tiene como base
primero la captura y luego el
cuidado de los pájaros -jilgueros,
pardillos, verderones y mixtos-
para el canto y su demostración
práctica. Desde la organización
se invita a todos aquellos que lo
deseen a acercarse a la localidad
complutense “y comprobar en
directo la gran pasión que rodea
a estos silvestristas”.
“El silvestrismo no puede ser más respetuoso
con las especies con las que se concursa”
PUNTOFINAL
Llegamos a junio, viene
el buen tiempo y se abren
múltiples opciones cinegéticas
para el cazador español.
Por ello, en el número 27 de
El Coto de Caza, su revista
digital semanal, les tenemos
reservados los reportajes
más atractivos al hilo
de la actualidad venatoria.
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página, le da el relevo al
jabalí, ya que entramos en
una buena época para las
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También podrán encontrar
en nuestras páginas las
habituales secciones de perros
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con El Coto de Caza. Bájesela,
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y Alberto Aníbal-Álvarez | REDACTOR JEFE: Ramiro Lapeña | Redacción: Margarita Cavadas | COLABORAN:
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  • 1. Tu revista digitalNÚMERO 26 • MAYO DE 2013 Silvestrismo y competición Perrosdecaza: cadacosaasutiempo Esperas enverano alosconejos... yaloscochinos Quenoteengañen con los daños en los cultivos sí tiene quien le quiera El arruí
  • 2.
  • 3. sumario2dejuniode2013 En tablets y otros dispositivos móviles, se recomienda la orientación horizontal para la óptima visualización de 10 Esperas a los conejos en verano 22 Daños en los cultivos: ¡que no te engañen! número26 32 Con los perros, cada cosa a su tiempo… Foto portada: SHUTTERSTOCK 44 El arruí sí tiene quien le quiera Producto: Bresser Game Camera 66 Claves para los aguardos cochineros estivales 56 74 XIX Campeonato de España de Silvestrismo
  • 4. LAIMAGENDELASEMANA fotos:shutterstock Negras perspectivas en nuestros campos Uno de los grandes expertos en gestión de las especies cinegéticas no duda en asegurar que ya es “hora de poner un poco de cordura en nuestro campo, y restringir determinadas prácticas devastadoras también, y en aquellos lugares donde se resistan a pensar en el mañana, o sean insensibles a reconocer que determinadas faenas hay que cambiarlas en sus horarios, será mejor optar por marcharse de allí y dejarles en lo suyo, que ya el tiempo les dará o quitará razón. Lo triste es que sigan cobrando unas subvenciones por acabar con todo y nadie les supervise sus efectos”. Estas son unas semanas decisivas para el devenir de nuestros cotos. Es tiempo de reproducción de perdices, liebres, conejos, torcaces y aves migratorias como tórtolas y codornices. La naturaleza necesita tranquilidad, es mejor estarse quietos e ir observando el campo y cómo va su desarrollo. Ahora bien, debemos estar preparados para unos días intensos en cuanto a trabajo, el primero y tal vez más relevante es dotar de cobertura aquellos lugares donde sabemos que se quedarán totalmente al descubierto. Luego, además de refugio, sumar puntos de agua y de comida tratada. Pero lo principal sería recuperar nuestros hábitats, los arroyos, las linderas, los perdidos, los árboles, las zarzas, las retamas, los carrizos. Estamos acabando con todo y preferimos mirar para otro lado. Y así nos va.
  • 5.
  • 6. Esperasa losconejos enveranoEn el número anterior hablábamos de las salidas a los conejos en las próximas semanas, centrándonos en recechos y caza en mano. Pero hay otra modalidad que da muy buenos resultados allí donde los conejos son abundantes y cuentan con grandes vivares: la caza en espera. POR Miguel Soler Fotos: Alberto Aníbal-Á. cazamenor
  • 7. S i bien no es la modalidad más dinámica ni la que depara más satisfacciones a quienes buscan lances suce- sivos ante conejos que saltan a corta o media distancia, la espe- ra es la que de forma tradicio- nal más se ha practicado des- de hace décadas en nuestros campos, siendo la mejor opción para quienes por edad o movili- dad no pueden trastear mucho y deciden apostarse ante lindes Es una buena modalidad para seleccionar conejos adultos y clarear algunos vivares, así como para reducir daños significativamente
  • 8. de monte, vivares o pedrizas para tirar tres o cuatro conejos, y a la par, la que de forma más frecuente permite a los pri- merizos en esta afición tomar contacto con los conejos en las primeras cacerías de verano. Con apasionados y detracto- res, la espera sigue siendo una buena modalidad para seleccio- nar ejemplares adultos y cla- rear algunos vivares, así como para reducir de forma significa- tiva los daños en determinadas parcelas de cultivo. Tiene su encanto, eso es in- cuestionable; la espera de co- nejos, sobre todo si se realiza al amanecer, tiene el añadido del momento, del despunte del amanecer en el campo con los olores y sonidos que tan sólo en esta época se sienten en nuestros cazaderos, y con ese
  • 9. frescor que se agradece, con la luz del día arrancando y el espectáculo de estar presente cuando el campo se enciende y la vida arranca de nuevo. Y como añadido, la ilusión por poner a tiro a dos o tres coneje- tes degustando el lance, con calma y volcados a tope en cada instante. La espera es mucho más que apostarse delante de un vivar para disparar a todo conejo que se asome, acerque, mueva o salga La espera es mucho más que apostarse delante de un vivar para disparar a todo conejo que se asome, acerque, mueva o salga, eso es otra cosa; el buen cazador en espera no esquilma
  • 10. vivares fáciles ni arriesga con sus disparos, pues en este esce- nario uno mal tirado -a destiem- po o fuera de su sitio- es conejo que se emboca malherido y es irrecuperable. Tampoco dispara a todos por sistema, es cazador selectivo que observa, decide y abate con soltura a los conejos “que hay que quitar”. Por todo ello, y porque aunque nos gusta cazar ahora al salto o en mano, siempre tenemos la llamada de ir a tal o cual esquina del coto a hacer una espera de amanecida o de tarde -que también tiene su encanto aunque pasemos más calor y tiremos menos-. AVANCE DE LAS FECHAS HÁBILES PARA LA CAZA DEL CONEJO EN VERANO
  • 11.
  • 13. como en plano, así como de las parcelas que se encuentran anejas a estas infraestructuras, y negociar la indemnización a efectuar a la baja, porque en esas zonas no se puede ca- zar. Una medida más drástica sería excluirlas del coto, pero esto puede repercutir en otras parcelas del mismo propietario. La picaresca El otro factor es la picaresca del agricultor, que existe y en ocasiones con dotes de abuso. El agricultor visita más veces el campo que el cazador y sabe perfectamente por dónde y cómo van a evolucionar los daños: en aquella esquina de la parcela que remata en un E mpezamos con un factor que no depende ni del agricultor ni del cazador, las obras de infraestructura civil como medianas, rotondas, vías de servicio de autovías o líneas de ferrocarril. Son auténticos fortines para los conejos, en los que se protegen de los preda- dores y en los que el cazador no puede cazar con arma de fuego y, en ocasiones, tampoco hu- ronear o bichear. Esas infraes- tructuras alojan, como decimos, infinidad de conejos que atravie- san las malla metálicas y pastan en las parcelas contiguas. En este caso se recomienda a los cazadores efectuar un regis- tro de parcelas y delimitación de las mismas, tanto en campo Las obras de infraestructura civil son fortines para los conejos, ahí se protegen de los depredadores y de la presión cinegética, pues en ellas no se puede cazar
  • 14. Titularidad del aprovechamiento En los contratos de aprovechamiento de los recursos cinegéticos y del arrendamiento de los mismos hay modalidades y combinaciones de todos los tipos: titularidad del coto a nombre de la agrupación de propietarios o de los cazadores; cesión de terrenos de los ayuntamientos a las sociedades de cazadores; cotitularidad del coto entre propietarios y cazadores… Dependiendo de quién sea el titular y la legislación vigente en cada comunidad autónoma la situación puede ser más o menos llevadera desde el punto de vista legal y jurídico. barranco o donde se levanta la ladera y bajan del cerro, etc. ¿Qué puede hacer el agricultor? Reducir las condiciones técnicas del cultivo en las zonas que pre- suntamente serán afectadas. ¿Cómo? No dando el laboreo que debiera o disminuyendo la dosis de siembra y abonado. ¿Para qué? Para acusar la no nascencia de las plantas o la disminución del rendimiento agrícola a daños de las espe- cies cinegéticas, cuando esto se puede deber en cambio al no cumplimiento de las condicio- nes técnicas mínimas de cultivo o a una sequía en la primavera, por ejemplo. Cómo se debe hacer la tasación La tasación busca dar un núme- ro lo más preciso y exacto de la producción que existe en el campo después de los daños, la Producción Real Final (PRF), fren- te a la Producción Real Esperada
  • 15. La tasación busca dar un número lo más preciso y exacto de la producción que existe en el campo tras los daños frente a la que hubiera habido sin ellos (PRE), la que hubiera existido si no se hubieran producido da- ños. La debe realizar un ingenie- ro técnico agrícola que domine la materia y conozca el cultivo a tasar, pues tendrá que analizar la calidad agrológica de los suelos, los índices pluviométricos, si se ha producido un “golpe de calor” o ha habido plagas y/o enferme- dades, la fertilidad del suelo, el cultivo anterior, las labores reali- zadas por el agricultor y los pro- ductos fitosanitarios usados, los rendimientos de los diferentes cultivos y/o variedades, observar cómo está de “granado” y denso el cultivo, etc. Para todo ello realizará un segui- miento y posteriores muestreos de las parcelas afectadas con un par de visitas o más por cultivo, una inspección previa en prima- vera y otra lo más cercana posi- ble a la recolección del cultivo. Por otra parte, a la hora de calcu- lar los pagos indemnizatorios se deben considerar tanto el precio del producto en el momento de la fecha de indemnización como el descuento de las labores de no siega y acarreo en parcelas daña- das al cien por cien.
  • 16.
  • 17. PERROSDECAZA Conlosperros, cadacosa asutiempo... Algunas veces, cuanto más leo sobre técnicas de adiestramiento y los recursos que podemos utilizar para alcanzar nuestro objetivo, pienso que a muchos cazadores lo único que se consigue es abrumarlos con ejercicios, normas, correcciones... POR Pepe Durán Fotos: Alberto Aníbal, M. Moreno y Archivo
  • 18. I ncluso creo que a algunos to- das estas circunstancias pue- den llevarles a sentirse frus- trados, porque llegan a pensar que lo que otros consiguen con aparente facilidad, a ellos les parece imposible de lograr. Es por ello que me gustaría dar mi humilde opinión sobre este tema para tranquilizar un poco a todos aquellos aficionados que puedan sentirse reflejados. Personas con habilidades y profesionales Durante muchos años he cono- cido a algunos aficionados que tenían una rara habilidad para hacerse entender por los perros, consiguiendo cosas de la forma más natural y casi sin proponér- selo que para otros suponían ejercicios, repeticiones y más re- peticiones. También es de justicia reconocer que hay profesionales con una carga enorme de prepa- ración y conocimientos. Sin em- bargo, no es menos cierto que algunas veces queremos lograr algunos objetivos que solamente el tiempo y la madurez de nues- Algunos aficionados tienen una rara habilidad para hacerse entender por los perros, consiguiendo cosas de forma natural y casi sin proponérselo
  • 19. tros perros nos irán dando en cada momento. Lo más natural posible No soy muy partidario de los artificios, porque creo que no están al alcance de cualquier aficionado que quiera adiestrar a su único perro, amén de no saber siempre acertar con el uso correcto de todos los artilugios que se han puesto tan de moda. Se recomienda insistente- mente por parte de los profe- sionales que se realice todo el trabajo de la forma más natural posible, enfrentando al cacho- rro con un escenario lo más parecido a la realidad. Por todo ello, entiendo que lo más pare- cido a la realidad es la propia realidad. Considero que el cam- po y las sucesivas temporadas de caza irán poco a poco forjan- do a nuestros compañeros. Ya lo decía el refrán… Bastaría con tirar del refranero para darnos cuenta de que cada cosa tiene su tiempo. Podemos recordar un refrán que, hacien- do referencia a las edades de los perros de caza, decía: “Los pri- meros cuatro años para mi ene- migo, los cuatro siguientes para mí, y los cuatro últimos para un buen amigo”; o aquel otro refrán que señalaba que el primer año el perro caza con una pata, el segundo, con dos, el tercero, con Algunas veces queremos lograr algunos objetivos que solo el tiempo y la madurez de nuestros perros nos irán dando en cada momento
  • 20. tres, y al cuarto año caza con las cuatro patas, o lo que es lo mis- mo, que hasta la cuarta tempora- da el perro no estaba completo. Y si estos refranes pertenecen a tiempos pasados, en los cuales la caza menor era mucho más abundante que ahora -y además no existían tantos impedimentos para que los perros estuvieran en el campo y en contacto con la caza real- y ya entonces se con- sideraba que a los perros había que darles tres o cuatro tempo- radas para que su rendimiento fuese el adecuado, con mucha más razón si los trasladamos a los tiempos actuales, siendo lógi- co que este proceso se alargase. ¡Pues no!, justamente queremos lo contrario, acortarlo. Adiós al desánimo Así las cosas, empezamos a ha- blar de frustración y fracaso Lo más parecido a la realidad es la propia realidad. El campo y las sucesivas temporadas de caza irán poco a poco forjando a nuestros compañeros
  • 21. PARA SABER MÁS Este artículo completo, así como otros dedicados al perro de caza, su adiestramiento y las competiciones cinófilas podrán encontrarlo en el número de junio de Perros de Caza. cuando solamente ha pasado una temporada de caza, en la que seguramente, y con suerte, nuestro perro habrá mordido una docena de perdices, unos conejos y alguna liebre, justo lo mismo que ese cachorro habría mordido en tiempos pasados en un par de jornadas. Es por ello que les aconsejo que no se crean todas las milongas que escuchen; nuestras perdices han sido, son y serán muy difíciles de mostrar. Si ya antes eran difíciles de tirar a perro puesto, imagínense ahora. Les recomiendo que no se desanimen ni desesperen; posi- blemente sus perros no son tan malos como ustedes piensan o como otros quieren hacerles ver. Tengan paciencia, dedí- quenles todo el tiempo posible y aprovechen cualquier ocasión para trabajar con ellos. Todo lo demás, si el perro tiene condi- ciones y el campo le da las sufi- cientes oportunidades, vendrá con el tiempo. Después de todo, quién no ha escuchado aquello de “cada cosa a su tiempo”. Tengan paciencia, dediquen todo el tiempo posible y aprovechen toda ocasión para trabajar con los perros
  • 22.
  • 24. S on varias las décadas transcurridas desde que se introdujo el arruí en territorio español, hoy consi- derada por muchos cazadores como autóctona del sudeste ibérico. Su aclimatación en los terrenos públicos de Sie- rra Espuña, en la provincia de Murcia, fue un éxito, para pa- sar con posterioridad a fincas privadas. El carnero del Atlas o arruí tiene como área de dispersión natural todo el norte de África, siendo las zonas más áridas y montañosas de Mauritania, Su- dán, Egipto, Libia, Argelia, Túnez La localización encierra un grado de dificultad añadida si los terrenos tienen masas forestales, ya que el arruí las aprovecha para ocultarse
  • 25. y Marruecos donde podemos verlo en su entorno original. Al avistarlo por primera vez observamos que es un animal fuerte en su parte delantera, con mucho pelo o barba que le nace bajo el cuello, formando un cordón hacia las extremida- des y abriéndose en el pecho con forma de “y” invertida has- ta llegar a las rodillas, de tal forma que parece que lleva una antipara. Las hembras y los machos se diferencian por las cuernas y las barbas, puesto que los machos tienen el grosor de las cuernas mayor y la longitud superior, pudiéndose confun- dir fácilmente una vieja hem- Los dos sexos se diferencian por las cuernas y las barbas, puesto que los machos tienen el grosor de las cuernas mayor y la longitud superior que las hembras bra con un macho de mediana edad por la fisonomía de éste en ese momento de su vida. Las astas de los machos llegan a medir más de 30 centímetros en su base, con una longitud de unos 85 centímetros, mientras que las hembras difícilmente pa- san de 45 centímetros de longi-
  • 26. tud, y el perímetro de la base es más reducido. SU CAZA Los grandes machos adultos (diez años) se apartan del grupo y viven en soledad o a lo sumo acompañados de una hembra. La localización de la pieza en- cierra un grado de dificultad añadida si los terrenos donde practicamos su caza contienen masas forestales, ya que el arruí las aprovecha para ocul- tarse. El macho adulto, cuando se siente acosado, permane- ce alejado de sus congéneres, ocultándose durante horas en cuevas y ramblas estrechas que imposibilitan divisarlo y aproxi- marse a él, haciendo gala de una astucia inusual en otros caprinos. Su gran vista le ayuda a ponerse en fuga cuando pre- siente el peligro, adoptando dis- tintas reacciones si se encuen- tra acompañado de machos, de hembras o solo. El rececho Una vez que el arruí se ve acosado, su rececho se convierte en un calvario hasta tenerlo a tiro, por lo que muchas veces deberemos abandonar
  • 27. Los prácticos en el rececho de arruí manifiestan que para llegar a cazar el ejemplar que desee- mos, éste no debe sentirse obje- to de persecución. Una vez que el arruí se ve acosado, su rececho se convierte en un calvario has- ta tenerlo a tiro. Son, por tanto, muchas más las veces en que se desiste de cobrar un determina- do ejemplar, por quedar nuestro acecho burlado reiteradamente, que aquéllas en las que logramos un buen lance al abatirlo. sobre la hembra tiene tanta dificultad como la caza del ma- cho. Las más adultas son, gene- ralmente, las que tienen mejor trofeo y, por supuesto, son también más sabias y expertas en zafarse de nosotros. En la imagen, junto al satisfecho cazador, Paco Yepes, guarda mayor de Sierra Espuña, y los guardas Casimiro y Borrascas, y Pedro Molina, guarda de Puerto Ortiz.
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  • 30. 1 En la espera, antes de que la luz desaparezca, debe- mos hacer un estudio porme- norizado del entorno, memori- zando cada mata y cada árbol y eligiendo el posible lugar del disparo. La noche cambia la percepción de las cosas y el cálculo de las distancias es sumamente complicado. 2 En los aguardos no hay que adelantar nada, tan sólo debemos colocar el tiro en la caja torácica, siendo estos disparos mortales de necesi- dad. Poco se parece el tiro a un jabalí que raudo atraviesa el cortadero con el disparo a un cochino parado, que es lo habitual en las esperas; lo prin- cipal es no ponerse nervioso a la hora del tiro y hacerlo en las mejores condiciones, sin estar entumecido por el mucho tiem- po de aguardo en condiciones poco cómodas.
  • 31. 3 Agudizando el oído, el aguardista espera a que el viejo macareno entre en plaza, lo deja cumplir, lenta y silencio- samente levanta el rifle y... El jabalí suele estar tranquilo y parado, sin adrenalina y a una distancia corta. Si el cazador tiene experiencia, lo dejará cum- plir, esperando a que le dé la mejor oportunidad, no se preci- pitará y permitirá que el animal se confíe, que entre a la baña o al comedero y le dé el costado. 4 Una cosa que siempre debemos tener en cuenta es que no debemos hacer el más mínimo ruido cuando el lance se aproxime, de modo que tomaremos todas las medi- das necesarias para que esto no ocurra. Quitar la correa portafu- sil -al estar sentados no nos va a servir para nada-, evitar realizar algún ruido cuando nos encare- mos, elegir aquel rifle cuyo se- guro sea más silencioso o cubrir con cinta aislante las partes metálicas que pueden rozar y sonar, son pequeños trucos que a buen seguro nos van ayudar, pues no será la primera vez que al encararnos el arma y quitar el seguro el jabalí nos oye y huye a toda velocidad para no volver a verlo más.
  • 32. 5 En esta modalidad de caza el uso de un buen visor es también imprescindible. En con- tadas ocasiones dispararemos a un jabalí en medio de un rastro- jo iluminado por la luna llena. Lo normal es disparar en noches oscuras sobre animales resabia- dos que aprovechan la espesura y las sombras para ocultarse. Elegir visores con la máxima apertura y luminosidad es lo mejor, siendo los de 56 milíme- tros de objetivo los que nos depararán mejores resultados. 6 En cuanto a los aumentos, lo idóneo es contar con variables, siendo los más reco- mendables aquéllos que se mueven en un abanico de en- tre los 2,5-3x y los 9x. Siempre intentaremos disparar con los mínimos aumentos, pues se- gún se van añadiendo se va perdiendo luminosidad. Una buena opción es contar con retículas iluminadas, ya que nos permitirán realizar una mejor puntería, pero siempre con regulador de intensidad.
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  • 34. Unatrail-cam pequeñaydiscreta PRODUCTOS Con las siembras ya crecidas llega uno de los periodos más esperados por los cazadores. El boom que han experimentado modalidades como el rececho del corzo o las esperas al jabalí han hecho que, a día de hoy, sea en primavera y en verano cuando muchos aficionados desempolvan su arsenal. Texto y fotos: IA Sánchez Bresser Game Camera
  • 35. Y tanto esperistas como aficionados al rececho del corzo cuentan desde hace algunos años con un fiel com- pañero de afición denominado trail-cam, cámara de seguimiento o scouting camera, discreto pero eficaz dispositivo que, debida- mente situado en lugares que- renciosos para los animales, ya sean naturales (encames, por- tillos, rascaderos, trochas…) ya sean artificiales (piedras de sal, bañas, comederos…) nos propor- cionan información fiel y deta- llada de todo cuanto por allí se mueve, en forma de fotografías o vídeos, tanto de día como de no- che. Las primeras eran enormesDurante la noche la Bresser Game Camera hace uso de una batería de 24 leds infrarrojos para iluminar la zona de detección. En la tapa inferior encontramos un pequeño acceso para poder alimentar la cámara con una batería o fuente de alimentación externa. La parte trasera de la Bresser Game Camera es cóncava y está dotada de unos pequeños pinchos que facilitan su fijación a la corteza de cualquier árbol. La calidad de sus fotografías tanto de día como de noche es ciertamente sorprendente y no demasiado eficaces (había que revelar el carrete, su flash blanco asustaba a los animales, consumían una barbaridad…), pero a día de hoy tenemos trail- cams como esta Bresser, que podríamos hasta llevar en el bolsillo de una camisa y que, con cuatro pilas alcalinas AA, nos proporcionará durante meses y meses toda la información que
  • 36. necesitemos sobre el lugar que pretendamos “auditar”. Parte de la clave de la reducción de su tamaño radica en que el control de sus funciones se reali- za mediante un control externo, un pequeño mando del tamaño de un mp3/mp4 que nos permi- te programar todas y cada una de las funciones de esta peque- ña cámara, como puede ser la selección entre foto o vídeo, la calidad de ambos, el número de disparos por detección, el intervalo entre detecciones, la programación de fecha y hora, la sensibilidad de detección et- cétera. Cuesta un poco cogerle el tranquillo al control remoto, pero una vez hecho programar y desprogramar es coser y cantar. Acceso inferior Al tener los controles externos la cámara cuenta tan sólo con una pequeña tapa en su parte inferior que da acceso al depar- tamento de las pilas, al slot para la tarjeta SD (de hasta 8 gigas), al interruptor de encendido/apaga- do, a la salida de TV y al puerto mini-usb en el que se conecta el mando externo. La tapa tiene igualmente un pequeño acceso para poder alimentarla con una batería o fuente externa de seis voltios. La calidad de las fotogra- fías tanto de día como de noche es ciertamente sorprendente, y más teniendo en cuenta que su sensor es de tan sólo 3 mega- pixels (hoy las encontramos de 8, de 12...), pero son más que de sobra para cumplir holgadamen- te el objetivo de fotografiar ani- males y apreciar su calidad. Bajo la tapa inferior encontramos los diferentes puertos y el compartimento de las pilas. PVP recomendado 139 euros Precio en la Tienda de caza.com 99 euros (unidades limitadas) La Tienda de Caza: www.latiendadecaza.com El mando externo de programación no lleva pilas, se alimenta al enchufarlo a la cámara en el puerto mini-usb.
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  • 38. AlcáladeHenares sellenadecantos XIXCampeonato deEspañadeSilvestrismo ACTUALIDAD Este próximo fin de semana la histórica localidad de Alcalá de Henares se convertirá en capital mundial del silvestrismo, pues los mejores pájaros fringílidos de las diversas plumas competirán en el Nacional de Silvestrismo, que alcanza su decimonovena edición en este año 2013. POR R.L.S. Fotos: Shutterstock y RFEC
  • 39. Madrid cuenta con grandes afi- cionados a esta modalidad. Este Campeonato de España de Silvestrismo tendrá como sede el campus universitario de Alcalá de Henares, y más con- cretamente el área conocida como ‘Los Hangares’. Allí, a par- tir de las nueve de la mañana del domingo 2 de junio, los más conocidos silvestristas y los me- jores pájaros del país compe- tirán en las diferentes plumas. Tomarán parte en la compe- tición un total de 193 pájaros, repartidos en 36 jilgueros y 34 mixtos de jilguero, 36 pardillos y 32 mixtos de esta especie, y por último 29 verderones y 26 mixtos de verderones, tras ha- ber superado las distintas prue- bas provinciales y autonómicas. N o es de extrañar que la Comunidad de Madrid haya sido la elegida para organizar esta prueba, pues es una comunidad autónoma en la que las actividades pajariles ocupan un lugar importante en la actividad anual de la Federa- ción Madrileña de Caza, entidad organizadora de este XIX Cam- peonato de España. Además,
  • 40. Este Campeonato de España servirá, también, como un acto de defensa de una actividad que, pese a contar con no pocas dificultades de todo tipo para llevarse a cabo, “no puede ser más respetuosa con las especies con las que se concursa, y es una verdadera pasión anclada en la tradición de nuestro pue- blo”, destacan desde la Federa- ción Madrileña de Caza. El sil- vestrismo es una actividad ética y deportiva que tiene como base primero la captura y luego el cuidado de los pájaros -jilgueros, pardillos, verderones y mixtos- para el canto y su demostración práctica. Desde la organización se invita a todos aquellos que lo deseen a acercarse a la localidad complutense “y comprobar en directo la gran pasión que rodea a estos silvestristas”. “El silvestrismo no puede ser más respetuoso con las especies con las que se concursa”
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  • 42. PUNTOFINAL Llegamos a junio, viene el buen tiempo y se abren múltiples opciones cinegéticas para el cazador español. Por ello, en el número 27 de El Coto de Caza, su revista digital semanal, les tenemos reservados los reportajes más atractivos al hilo de la actualidad venatoria. Así, el conejo sigue siendo el protagonista en la caza menor, mientras que el corzo, cada vez más circunscrito en sus desplazamientos a las masas forestales, a lo más espeso del monte, como se ve en la fotografía de esta página, le da el relevo al jabalí, ya que entramos en una buena época para las esperas cochineras estivales. También podrán encontrar en nuestras páginas las habituales secciones de perros de caza, gestión, pruebas, productos, actualidad… Así que ya sabe, el próximo lunes tiene una nueva cita en la Red con El Coto de Caza. Bájesela, disfrute de sus fotos y vídeos exclusivos y recuerde que es accesible de una forma fácil y gratuita desde sus móviles, ordenadores personales y tabletas. Editor: Martín Gabilondo Viqueira | Director financiero: Juan Manuel Martín-Moreno | Director Comercial: Ángel Luis Fernández-Palacios | Director de Expansión: Rafael Morillo | Director de Producción: Andrés Valladolid | Director de Publicaciones: Juan Francisco Calle | DIRECTORA DE Administración y contabilidad: Mar Molpeceres | Directora de Control de Gestión: María Pérez Acín | Director de Marketing: Ignacio Bustamante | Dirección de arte: Javier Corral | Redacción, publicidad y suscripciones: Grupo V. C/ Valportillo Primera 11, 2a Teléfono: 91 6622137. Fax: 91 6622654 28108 Alcobendas (Madrid) Suscripciones: suscripciones@grupov.es Web: www.grupov.es E-mail: elcotodecaza@grupov.es Director DEL ÁREA DE CAZA Y EL COTO DE CAZA DIGITAL: Luis F. Blanco | ADJUNTOS A LA DIRECCIÓN: José María García y Alberto Aníbal-Álvarez | REDACTOR JEFE: Ramiro Lapeña | Redacción: Margarita Cavadas | COLABORAN: Miguel Soler, Ramiro Lapeña, Miguel Á. Romero, Fernando Cruz, Marga Cavadas, José María García, Andrés López, Rafael Centenera, Alberto Aníbal-Álvarez, IA. Sánchez, Cristóbal de Gregorio, Santiago Segovia, Julio Abad, Iván G. Calleja, Ricardo V. Corredera y Pepe Durán | MAQUETACIÓN: Sara Casco | Fotografía: Alberto Aníbal-Álvarez, Eduardo Ruiz Baltanás, Werner Nagel, Jesús del Barrio y Shutterstock | PUBLICIDAD: Rafael Morillo (rmorillo@grupov.es), Cristina Pelayo Antón (cpelayo@grupov.es), Rosa Mª Arribas (rmarribas@grupov.es)
  • 43. CONSIGUE TU SUEÑO SWAROVSKI OPTIK TE LLEVA DE CAZA Por la compra de un instrumento de Swarovski Optik –visor, binoculares, telescopio o guía láser–, no sólo conseguirás una calidad óptica insuperable, sino que puedes cumplir tu sueño de cazar un macho montés. SEE THE UNSEEN WWW.SWAROVSKIOPTIK.COM Tel. 936 724 510 - Fax 936 724 511 info@esteller.com - www.esteller.com Consulte las bases en www.esteller.com/ibexengredos Por cada instrumento óptico comprado entre el 28 de febrero y el 31 de diciembre de 2013 puedes obtener uno de los siguientes premios: 1er premio rececho de un macho montés en la sierra de Gredos 2º premio unos binoculares EL Range 3er premio un visor Z4i a elección del ganador Del 4º al 20º un reloj Swarovski Optik Organización y coordinación de la cacería: Distribuidor en España: