1. CALIDAD, PRODUCTIVIDAD Y COMPETITIVIDAD
Normalmente se había considerado que la calidad y la productividad tenían una relación negativa
(al aumentar la calidad se reducía la productividad). La explicación que se daba a esto era la
siguiente: para intentar incrementar la calidad aumentaban los paros de la fábrica, para poder
realizarse la inspección se paraba la fábrica, y por lo tanto se reducía la producción.
Sin embargo fue Deming el 1er autor que demostró una relación positiva entre calidad y
productividad. Lo demostró de la siguiente manera: el incremento de la calidad reduce los costes
por una reducción de los fallos, por una reducción de los reprocesos, por una reducción de los
desechos.
Esto es la razón principal: porque la planta oculta que es aquella parte de la capacidad productiva
de la empresa destinada a fabricar productos de baja calidad, ahora se puede utilizar en fabricar
productos de calidad. Esta planta oculta se ha estimado que en las empresas supone entre un 15 y
un 30% de la capacidad productiva de la empresa. Por lo tanto mejorando la calidad podremos
incrementar la producción entre un 15 y un 40%. De esta manera conseguimos que aumente la
productividad. Seming considera que una mejora supone por una parte una reducción de costes
debido a la reducción de los reprocesos, fallos etc. y también un aumento de la producción.
De esta manera supone también un incremento de la productividad. Con este incremento la
empresa podrá lanzar al mercado sus productos a precios más bajos que la competencia. Esto le
supondrá un incremento de su cuota de mercado (de sus ventas) por esa mejora de
competitividad.
La variación de cuota de mercado lo que le permite a la empresa crecer y permanecer a largo
plazo en el mercado.
Otros autores, entre ellos Ross establecieron también la relación positiva entre calidad y
productividad haciendo referencia a las 2 vertientes que habíamos visto en la definición de
calidad: vertiente interna y externa.
2. SISTEMAS DE PRODUCCION CALIDAD PRODUCTIVIDAD Y COMPETITIVIDAD
CALIDAD
La capacidad de producir satisfactores (sean bienes o servicios) que llenen las expectativas de los
usuarios. Por otro lado también significa realizar correctamente cada paso del proceso de
producción para satisfacer a los clientes internos de la organización y evitar satisfactores
defectuosos. Su importancia se basa en que el cliente satisfecho nos vuelve a comprar (en
organizaciones mercantiles) o vota, colabora y paga sus impuestos o donativos con gusto (para
organizaciones de Gobierno o de Servicio Social)
PRODUCTIVIDAD
La capacidad de producir más satisfactores (sean bienes o servicios) con menos recursos. Esto
redunda en un costo bajo que permite precios más bajos (importante para las organizaciones
mercantiles) o presupuestos menores (importante para organizaciones de Gobierno o de Servicio
Social)
COMPETITIVIDAD
La competitividad en el mundo actual se define como la capacidad de generar una mayor
producción al menor costo posible, aun a costa de los derechos humanos de los trabajadores.
PRODUCTIVIDAD Y CALIDAD
Sólo cuando la productividad y la calidad se consideran en forma conjunta es factible alcanzar una
mayor competitividad. Se argumenta que un programa destinado a mejorar la calidad provoca
perturbaciones y retrasos que redundan en una menor producción. Aun cuando esto puede ser
cierto en el corto plazo, en realidad no ocurre así en un lapso de tiempo más largo. Este
argumento no es válido cuando se toman en cuenta los costos asociados a una mala calidad.
Si bien la tecnología es un factor importante en la productividad, sería un error atribuir a esta
como la única respuesta para el mejoramiento de la calidad y la productividad. Lo que se necesita
no es la sustitución de mano de obra, sino el mejoramiento de los procesos. Mucha gente concibe
la tecnología como automatización y mecanización, pero en realidad la tecnología incluye métodos
para mejorar los procesos con el fin de mejorar la relación entre producto e insumos. El hecho de
solo centrar a la tecnología en automatización y en las máquinas implicará requerir de tiempo y
dinero, y estos dos factores son escasos. En cambio, los sistemas de administración consumen
pequeños cantidades de tiempo y dinero y pueden ser igualmente eficaces o aún más. La solución
consiste en mejorar el sistema y el proceso antes de introducir más tecnología.
3. COSTOS DE NO CALIDAD
Denominados también costes de disconformidad o de fallo. En general, se considera que el coste
de no calidad es la diferencia entre lo que cuesta producir un producto o servicio y lo que costaría
si no hubiera fallos. En general ésta es la categoría que supone la mayoría de los costes de calidad,
y por lo tanto en la que la mejora puede ser más notoria.
CLASIFICACIÓN DE LOS COSTOS DE MALA CALIDAD
Los costes de la mala calidad pueden clasificarse en costes de fallo internos y externos.
COSTOS DE FALLO INTERNOS
Se incurre en costes de fallo internos cuando los productos de mala calidad se descubren antes de
ser entregados a los clientes. Entre ellos se pueden señalar:
Costes de desperdicio: costes de los productos de mala calidad que deben ser
descartados, incluido trabajo, material y costes indirectos.
Costes de reparación: derivados de enmendar los productos que no cumplen las
especificaciones de calidad.
Costes de fallo del proceso: que surgen de la necesidad de determinar por qué el proceso
está creando productos de mala calidad.
Costes de ruptura del proceso: derivados de la interrupción del proceso productivo para
reparar el equipo, etc.
Costes de disminución de precios: costes de descuentos en los productos de baja calidad,
que se venden como de segunda categoría.
COSTOS DE FALLO EXTERNOS
Los costes de fallo externos son los que se producen después de que el cliente haya recibido el
producto, y se relacionan fundamentalmente con el servicio al cliente.
Se puede señalar de entre ellos:
Costes de quejas del consumidor: costes de investigar y responder satisfactoriamente a las
quejas de los clientes por la deficiente calidad.
Costes de retirada del producto: el coste de retirar y reemplazar los productos de baja
calidad devueltos por el cliente.
Costes de garantía: derivados de la obligación de cumplir con la garantía de los productos.
Costes de responsabilidad por el producto: resultantes de la litigación por la
responsabilidad del producto y los daños a los clientes.
Coste de ventas perdidas: en el que se incurre porque los consumidores insatisfechos con
la baja calidad del producto no hacen compras adicionales.
4. QUE SE HACE POR LA CALIDAD (CONTROL DE LA CALIDAD)
CONTROL DE CALIDAD
El control de calidad consiste en monitorear el proceso productivo o del servicio, para identificar,
examinar y eliminar las causas de comportamientos no conformes, para lograr cumplir los
requisitos de calidad.
No hay industria actual, ni negocio, que pueda aspirar a ser exitoso sin un buen sistema de control
de calidad. A pesar de lo que pudiera parecer, éste no busca que todos los productos o servicios
que se ofrecen tengan la mejor calidad, sino garantizar que todos tendrán la misma calidad. Es
decir, que esta última, buena o mala, será confiable y reproducible.
¿CUAL ES EL NUEVO IMPACTO DE LA CALIDAD?
Es la calidad tanto como el precio lo que vende hoy y la calidad lo que trae de regreso a los
clientes.
El principal reto que ha surgido de productos más complejos para el cliente con mayores funciones
y requisitos de ejecución está siendo enfrentado con eficiencia creciente; la calidad y seguridad del
producto han por tanto, llegado a ser de importancia primordial para el gobierno y una fuerza
política que se debe de reconocer ¨ en contra del fabricante”. Hoy es un determinante
fundamental la calidad de productos y servicios para el cliente.
La calidad es el factor principal en el desarrollo e implementación exitosa de los programas
administrativos y de ingeniería para la realización de las metas principales de los negocios.
¿QUE ES EL CONTROL TOTAL DE LA CALIDAD Y CUAL ES SU PROPÓSITO?
La calidad total es un concepto dinámico. Las definiciones de control de calidad total, denominada
comúnmente como calidad total, han ido evolucionando rápidamente en los últimos 40 años en
función de los cambios requeridos por las necesidades de los sistemas productivos y empresariales
para poder competir, crecer, adaptarse y satisfacer a un mercado, y sus miembros, los clientes.
Suministrar un producto o servicio en el cual su calidad haya sido diseñada, producida y sostenida
a un costo económico y que satisfaga por entero al consumidor.
El control total de la calidad es un sistema efectivo de los esfuerzos de varios grupos en una
empresa para la integración del desarrollo del mantenimiento y de la superación de la calidad con
el fin de hacer posibles mercadotecnia, ingeniería, fabricación y servicio, a satisfacción total del
consumidor y al costo más económico.