2. Es la disciplina que estudia el signo y aborda la
interpretación y producción del sentido, pero no trata
el significado (que es abordado por la semántica), ni las
denominaciones, incluyendo en estas las verbales y las no
verbales.
Esto es, analiza los fenómenos, objetos y sistemas de
la significación, de los lenguajes y de los discursos y los
procesos a ellos asociados (producción e interpretación).
Toda producción e interpretación del sentido constituye
una práctica significante, un proceso de semiosis que se
vehiculiza mediante signos y se materializa en textos.
3. ELEMENTOS
• Los sistemas simbólicos, las formas en que en una cultura se definen
las relaciones entre algo y aquello que lo representa, constituyen las
bases de la interpretación que cada persona realiza acerca del sentido
de lo que observa, escucha, siente. Por ello, el significado de una
acción (como la artística) requiere poder comprender cómo es que las
culturas definen estas relaciones: qué significado tiene.
4. F U E G O
El fuego corresponde al sur, rojo, al verano y al corazón. Esta última relación es
constante, ya sea que el fuego simbolice las pasiones (especialmente el amor y la
cólera), o el espíritu, símbolo de acción fecundante e iluminadora, de purificación y
regeneración. Los ritos de purificación a través del fuego, son característicos de
culturas agrarias, puesto que simbolizan los incendios de los campos, que luego
vuelven a cubrirse con naturaleza viva. Pero al mismo tiempo, tiene un aspecto
negativo: obscurece y sofoca por su humo; quema, devora, destruye (fuego de las
pasiones, del castigo, de la guerra). Otras cremaciones rituales utilizan el fuego
como vehículo portador de mensajes del mundo de los vivos al de los muertos.
5. A I R E
• Es un elemento activo y masculino,
junto con el fuego, símbolo de la
espiritualización. Está asociado
simbólicamente al viento, al aliento,
es la vía de comunicación entre el
Cielo y la Tierra; la expansión, el
soplo necesario para la subsistencia
de los seres. Es el medio propio del
vuelo, del perfume, del color y de
las vibraciones interplanetarias.
6. T I E R R A
Se opone al cielo como el principio pasivo al
principio activo. Ella soporta, mientras que el
cielo cubre. Todos los seres reciben de ella su
nacimiento, pues es mujer y madre fértil. Ella
da y toma la vida. Cría a todos los seres, los
alimenta y luego de ellos recibe de nuevo el
germen fecundo. La tierra es la substancia
universal, es la matriz que concibe las fuentes,
los minerales y los metales.
7. A G U A
• Sus significados pueden reducirse a tres temas dominantes: fuente
de vida y muerte; medio de purificación; centro de regeneración
corporal y espiritual. Las aguas representan la infinidad de lo
posible, contienen todo lo virtual, lo informal; son el origen, todas
las promesas de desarrollo, pero también las amenazas de
reabsorción. Sumergirse en ellas es retornar a la fuente para extraer
de allí una fuerza nueva. También es símbolo de fertilidad, pureza,
sabiduría, gracia y virtud. El agua corresponde al norte, al frío, al
solsticio de invierno. Cuando desciende es llamada lluvia, una
semilla que viene a fecundar la tierra, por lo que es masculina. La
que nace de ella es femenina. Por otro lado, el agua helada, el
hielo, expresa el estancamiento psíquico, en su más alto grado, la
falta de calor del alma y la ausencia del sentimiento amoroso.