Todo el mundo habla de cómo tener éxito a través del trabajo duro y el esfuerzo. ¡Olvídalo! Voy a adoptar un enfoque diferente. Voy a mostrarte cómo perder todo el dinero que tanto te ha costado ganar y fingir tu propia muerte (me refiero al destino), y tener éxito en ello.

1. Finge tu destino con gran éxito
Todo el mundo habla de cómo tener éxito a través del trabajo duro y el
esfuerzo. ¡Olvídalo! Voy a adoptar un enfoque diferente. Voy a mostrarte cómo
perder todo el dinero que tanto te ha costado ganar y fingir tu propia muerte (me
refiero al destino), y tener éxito en ello.
Paso 1: Sé un Mariquita-
Ser marica no tiene nada que ver con la fuerza física y todo que ver con la fuerza
mental. Sé que quieres tener éxito, pero tienes demasiado miedo de
comprometerte con tu sueño. Tienes miedo de correr riesgos. Tienes miedo de
tomar decisiones. Quieres que todo sea perfecto antes de arriesgarte. ¡Sí
claro! Ese día llegará cuando el Infierno y la famosa sopa picante de Sancocho
de mi madre se congelen (nota del autor: mi dinero está en que el Infierno se
congele primero). No obstante, no haga nada hasta que ocurra una de las
siguientes situaciones: todas las estrellas de la constelación se hayan alineado
perfectamente, haya visto un pájaro Dodo que alguna vez se extinguió o alguien
le garantice absolutamente que no fallará. Hasta que una de estas cosas esté en
su lugar, no hagas nada, sé un marica.
Paso 2: escucha a la gente estúpida-
Oh, este es uno de mis favoritos. Hay dos tipos de personas: exitosas y
felices. Por exitoso, me refiero a alguien que tiene una carrera y es
económicamente seguro. Por feliz me refiero a alguien que ha encontrado su
lugar feliz y disfruta donde está en la vida. Este último tiene menos que ver con
el dinero y más con el estilo de vida. Sabiendo esto, aquí está la clave: nunca,
quiero decir NUNCA escuches a personas exitosas o felices. Simplemente te
darán náuseas con sus ideas y estrategias para conseguir lo que quieres de la
vida. En su lugar, escuche a amigos y familiares que están arruinados o
infelices. De esa manera, si fallas, y lo más probable es que lo hagas, como
mínimo los tendrás como compañía. Y sabemos que la miseria ama la
compañía. Además, si no sigues sus consejos, siempre puedes echarles la culpa
(consulta la Regla 9 para obtener más detalles).
Paso 3: Espera la Intervención Divina-
Sí, otra estrategia sobre cómo perder tu dinero y tu falso destino es simplemente
esperar a que la mano invisible del destino pase sobre ti y te bendiga con una
inmensa abundancia. Sí, sigue orando y pídele a Dios (quien sea y lo que sea
que sea para ti) que haga llover sobre ti todo lo que te mereces. Siéntate, no
hagas nada y espera a que suceda algo grandioso. Sí, tus necesidades superan
con creces las de las personas de otros países que mueren a causa del VIH, el
hambre, la violencia, etc. No te sientas culpable. Exígele a Dios y, si así lo
deseas, tal vez quieras darle una fecha límite porque tienes prisa. Pero recuerda,
no muevas un dedo para ayudarte, podrías ofenderlo por ser tan impaciente.

2. Paso 4: Desarrolle una necesidad de imitar
Desmond Morris escribió un libro fantástico llamado The Human Ape. Si no lo
has leído, te estás privando de una experiencia y un placer primitivos. Morris
habla de la necesidad de los humanos de imitar para sentirse aceptados o más
dignos. Entonces, lo que quiero que hagas para que pierdas tu dinero y finjas tu
destino es mirar a tu alrededor y comprar lo que tus amigos o colegas están
comprando. Pero los coches extravagantes, el museo lujoso (me refiero a la
casa), hacen todos los viajes que quieras a lugares exóticos. ¿Qué pasa con el
dinero? ¡A quién le importa! El punto aquí es que quieres imitar o copiar lo que
hacen los demás. El dinero y las deudas son molestias de las que no deberías
preocuparte. ¿Qué pasa con las compañías de tarjetas de crédito? Entonces lo
que les debes dinero, son ladrones que ya tienen demasiado dinero; ellos no
necesitan el tuyo.
Paso 5: Aproveche las personas-
Aquí hay un gran consejo. Olvídate de ser considerado y al diablo con la regla
de oro. Si puedes usar a alguien, hazlo. Si puedes aprovecharte de una
situación, hazlo. ¡¿Consecuencias?! ¡Bah! ¿Por qué molestarse con ideas tan
tontas; son tan inconvenientes. Por lo que a ti te importa, probablemente nunca
tendrás que volver a tratar con ellos. Y si es en un ambiente de trabajo, mejor,
jodelos como puedas. Probablemente se lo merecen por ser tan ingenuos. La
premisa básica es esta, la próxima vez que estés en condiciones de abusar
realmente de otro ser humano, no lo pienses dos veces, ¡simplemente hazlo!
Paso 6: Inventa tu propia realidad-
Oh, me gusta este. Al diablo con la realidad, crea la tuya propia. Cuando alguien
dice: No estás siendo realista, ignóralo, es un idiota. Cuando alguien intente
advertirle que sus gastos excesivos y sus deudas están aumentando,
simplemente salga y compre un poco más, se sentirá mejor. Recuerde también
que el dinero es la raíz de todos los males y nadie debería tener que ahorrar o
tener nada para un día lluvioso. E, incluso cuando todos te digan que estás
equivocado, ignóralos porque ¡TODOS no pueden tener razón! Y lo más
probable es que simplemente no tengan la misma perspectiva brillante y rosada
de la vida que tú tienes. Despedir a esos tontos.
Paso 7: nunca vuelvas a mantener un compromiso.
La próxima vez que haga una promesa, recuerde que en realidad no es un
compromiso. Una promesa es un acuerdo para hacer algo, pero usted se reserva
el derecho de cambiar de opinión sin notificar a la otra parte (también conocida
como la regla de cuándo es conveniente). Y sí, está bien prometer demasiado y
cumplir poco. La regla conveniente todavía se aplica. Cuando le diga a alguien
que asistiría a una reunión o compromiso, recuerde que está bien cambiar de
opinión, nuevamente, sin necesidad de notificar a la otra parte. Los compromisos
son tan restrictivos que debe permitirse la flexibilidad de cumplirlos o ignorarlos
cuando lo desee. ¿Qué pasa si los demás se quejan? Solo están siendo
insensibles a tu espontaneidad y espíritu libre. Bastardos envidiosos.

3. Paso 8: Échale la culpa al ISM-
La próxima vez que las cosas no salgan como esperabas o te perdiste algún
ascenso o aumento, échale la culpa a un ISM. Hay mucho de donde
escoger. RacISMO, SexISM, AgeISM, etc. Recuerde que nunca es su
responsabilidad crear riqueza y oportunidades. Alguien siempre debe buscarte
porque has sido perjudicado (es decir, con un ISM) por la injusticia de la
sociedad. Alguien también debería hacer las paces y se le debería pagar una
remuneración por sus molestias. No te olvides de quejarte siempre de cómo el
hombre no te permitirá tener éxito. Y siempre culpe su falla a algún tipo
corporativo con un lindo traje y corbata. Siempre son culpables de algo. Son
todos mentirosos y tramposos esperando ser expuestos.
Regla de bonificación:
Paso 9: nunca es tu problema-
No importa lo mal que te desempeñes o no lo hagas en absoluto, no es tu culpa
(Corolario de la Regla 8). Nunca es tu problema. Siempre es el trato de alguien
más. Y si no puedes encontrar un cuerpo cálido al que culpar, usa a alguien que
esté muerto. Los muertos son útiles para culpar a las cosas porque no pueden
descartar la acusación y te sientes mejor porque no es tu culpa. Si no puede
encontrar a ningún muerto a quien culpar, use la última carta de triunfo, el
Universo (o Cosmos). Cualquiera de los dos es lo suficientemente bueno cuando
se trata de culpar. Simplemente culpe su desgracia a alguna extraña vibra
existencial que no se puede definir. Y si alguien no te cree, simplemente está
siendo insensible e ignorante de una existencia en un nivel mucho más alto en
el que no puedes ser responsable.
Sigue estas nueve reglas y te garantizo que perderás tu dinero y falsificarás tu
destino con GRAN ÉXITO.