2. La descomposición del material digerido es una de las funciones más
fundamentales dentro del cuerpo. Debido a que los lípidos (también conocidos
como grasas) son uno de los compuestos necesarios, los trastornos
metabólicos pueden tener consecuencias de amplio alcance.
3. Las moléculas genéricamente lípidos presenta una gran variedad estructural, pero
todas tienen en común el hecho de ser moléculas antipáticas esto significa que
contienen grupos polares situados en la cabeza de la molécula, las cuales
presentan afinidad por el agua (hidrófilos), y grupos no polares (hidrófobos), que se
sitúan en la cola de la molécula. De este modo los lípidos resultan solubles en
disolventes orgánicos apolares pero presentan escasa solubilidad en agua.
4. Función de reserva. Son la principal reserva energética del organismo. Un gramo de
grasa produce 9'4 kilocalorías en las reacciones metabólicas de oxidación, mientras
que
proteínas
y
glúcidos
sólo
producen
4'1
kilocaloría/gr.
Función estructural. Forman las bicapas lipídicas de las membranas. Recubren
órganos y le dan consistencia, o protegen mecánicamente como el tejido adiposo de
piés
y
manos.
Función biocatalizadora. En este papel los lípidos favorecen o facilitan las reacciones
químicas que se producen en los seres vivos. Cumplen esta función las vitaminas
lipídicas,
las
hormonas
esteroideas
y
las
prostaglandinas.
Función transportadora. El tranporte de lípidos desde el intestino hasta su lugar de
destino se raliza mediante su emulsión gracias a los ácidos biliares y a los
proteolípidos.
5. Los lípidos se clasifican en dos grupos, atendiendo a que posean en su composición
ácidos grasos (Lípidos saponificables) o no lo posean ( Lípidos insaponificables ).
1. Lípidos saponificables
A. Simples
Acilglicéridos
Céridos
B. Complejos
Fosfolípidos
Glucolípidos
2. Lípidos insaponificables
A. Terpenos
B. Esteroides
C. Prostaglandinas
6. En la mayoría de los animales (humanos incluidos), una buena parte de la
energía ingerida que no van a necesitar se almacena en forma de grasa. Ahora
bien, los principales nutrientes que nos proporcionan energía no son sólo las
grasas. Tenemos que:
- Las proteínas aportan 4 kilocalorías/gramo.
- La glucosa 4 kcal/g.
- El alcohol (etanol) 7 kcal/g.
Los lípidos (grasas, sólidas, y aceites, líquidos) 9 kcal/g.
El organismo es capaz de transformar los 3 primeros en grasa para su
acumulación y uso posterior. Existe además un pequeño almacenamiento de
glucosa en forma de glucógeno (molécula constituida por numerosas unidades
de glucosa) en el hígado.
7. La digestión es el proceso de transformación de los alimentos, previamente
ingeridos, en sustancias más sencillas para ser absorbidos. La digestión ocurre
tanto en los organismos pluricelulares como en las células, (ver digestión
intracelular). En este proceso participan diferentes tipos de enzimas.
El sistema o aparato digestivo, es muy importante en la digestión ya que los
organismos heterótrofos dependen de fuentes externas de materias primas
y energía para crecimiento, mantenimiento y funcionamiento. El alimento se
emplea para generar y reparar tejidos y obtención de energía. Los
organismos autótrofos (las plantas, organismos fotosintéticos), por el
contrario, captan la energía lumínica y la transforman en energía
química, utilizable por los animales.
8. El proceso de digestión de grasas empieza a nivel del estómago. Una pequeña
cantidad de triglicéridos es digerida por la Lipasa Lingual, una enzima
producida en la boca y transportada en la saliva al estómago. Esta se encarga
de la digestión de menos del 10% de toda la grasa ingerida. El siguiente paso
se lleva a cabo en el intestino delgado y es conocido con el nombre de
EMULSIFICACIÓN DE LA GRASA. La grasa no digerida se encuentra a nivel
intestinal como grandes gotas las cuales deben ser fragmentadas en partes
más pequeñas con la finalidad de que enzimas digestivas hidrosolubles
(solubles en agua) puedan actuar sobre las mismas.
En parte, el proceso de emulsificación se realiza por el movimiento del alimento
en el estómago junto con los productos de la digestión gástrica. Pero
indiscutiblemente es bajo la influencia de la BILIS producida a nivel del
hígado, que la emulsificación de la grasa alcanza su objetivo final.
9. El alimento que el organismo necesita para vivir, excepto pequeñas cantidades
de sustancias como las vitaminas y minerales no pueden ser absorbidas en sus
formas naturales por el tubo digestivo. Por tanto no servirían como nutrientes
sin un proceso previo de digestión y posterior absorción.
Las grasas más abundantes dentro de nuestra dieta son las llamadas grasas
neutras, también conocidas como TRIGLICERIDOS. Las grasas neutras son
uno de los mayores constituyentes en los alimentos de procedencia animal. La
presencia de estas grasas es menor en los alimentos vegetales.
Adicionalmente, en la dieta usual encontramos pequeñas cantidades de otros
tipos de grasa como fosfolípidos, colesterol y esteres del colesterol.
10. El agua esta compuesta por un átomo de oxígeno y dos de hidrógeno a su
alrededor, unidos entre sí por un enlace de hidrógeno. El núcleo de oxígeno es
más grande que el del hidrógeno, presentando mayor electronegatividad. Como
los electrones tienen mayor carga negativa, la transacción de un átomo de
oxígeno tiene una carga suficiente como para atraer a los de hidrógeno con
carga opuesta, uniéndose así el hidrógeno y el agua en una estructura
molecular polar.
Por otra parte, los lípidos son largas cadenas de hidrocarburos y pueden
tomar ambas formas: cadenas alifáticas saturadas (un enlace simple entre
diferentes enlaces de carbono) o insaturadas (unidos por enlaces dobles o
triples). Esta estructura molecular es no polar.
11. Los lípidos no pueden movilizarse en los fluidos corporales debido a
su naturaleza hidrofóbica. Por ello, para permitir su transporte en el
organismo, son combinados con proteínas llamadas betaglobulinas para
formar
lipoproteínas.
Una vez que los lípidos han sido absorbidos a través del intestino, se
combinan en el plasma sanguíneo con cadenas de polipéptidos para
producir una familia de lipoproteínas distinta, las que son clasificadas
en función de su densidad, determinada mediante centrifugación. Como
los lípidos son mucho menos densos que las proteínas, se observa una
relación inversa entre el contenido de lípidos y su densidad; por
ejemplo, un alto contenido de lípidos significa partículas de baja densidad.
12. Quilomicrón (QM) y proteína de muy baja densidad («Very Low Density
Lipoproteína o VLDL). Son relativamente bajas en proteínas, fosfolípidos y
colesterol, pero altas en triglicéridos (55 a 95 %). En términos más
amplios, estas partículas son denominadas «lipoproteínas ricas en triglicéridos»
Lipoproteínas de densidad intermedia («Intermediate Density Lipoproteins» o
IDL) y lipoproteínas de baja densidad («Low Density Lipoproteins» o LDL).
Están caracterizadas por elevados niveles de colesterol, principalmente en la
forma de ésteres colesterílicos. La segunda forma de colesterol mencionada
(LDL) es altamente insoluble. En virtud de que hasta el 50 % de la masa de LDL
es colesterol, no resulta sorprendente que el LDL tenga un rol significativo en
el desarrollo de la enfermedad aterosclerótica.
Lipoproteínas de alta densidad («High Density Lipoproteins» o HDL). Los
aspectos notables de estas partículas son su alto contenido de proteína (50 %)
y su relativamente alto contenido de fosfolípidos (30 %). Generalmente, las HDL
son divididas en dos subclases: HDL2 y HDL3. Las HDL2 son grandes y menos
densas; las HDL3 son menores y más densas.
13. La lipoproteína lipasa (LPL)
en la luz de los capilares sanguíneo
azúcares presentes en las paredes endoteliales
con
los que tiene una gran afinidad conocidos como
heparán y dermatán sulfatos. Su función es
degradar
los triacilgliceroles (TAG) que circulan en sangre
asociados a VLDL y Quilomicrones, que son
únicamente lipoproteínas cargadas de lípidos
que se
deben distribuir por todo el organismo
LIPOPROTEÍNAS). De esta manera, la LPL
permite a
los tejidos subyacentes captar los ácidos grasos
resultantes de esta degradación y utilizarlos
como reserva o fuente de energía.
14. Los quilomicrones y las lipoproteínas de muy baja densidad (VLDL) transportan
por el cuerpo los triacilgliceroles provenientes de la comida y los endógenos
(producidos
por
el
organismo).
Las lipoproteínas de baja densidad (LDL) y las de alta densidad (HDL)
transportan el colesterol proveniente de la comida y el endógeno. Las HDL y las
lipoproteínas de muy alta densidad (VHDL) transportan los fosfolípidos
ingeridos
y
los
endógenos.
Las lipoproteínas consisten de un centro de lípidos hidrofóbicos rodeado por
una cubierta de lípidos polares lo que, a su vez, está rodeado por una cubierta
de proteína. Las proteínas que se utilizan en el transporte de los lípidos son
sintetizadas en el hígado y son denominadas «apolipoproteínas» o «apo».
Hasta 8 apolipoproteínas pueden estar involucradas en la formación de
la estructura de una lipoproteína. Las proteínas son llamadas Apo A-1, Apo A2,
Apo
B-48,
Apo
C-3,
etc.
En su conjunto, las lipoproteínas conservan una concentración de lípidos en
sangre de unos 500 mg de lípidos totales en 100 ml de sangre. De estos
500, 120 mg son triacilgliceroles (TAG), 220 mg es colesterol y 160 mg es
fosfolípido.
15. El nivel de los lípidos en el plasma es el indicador clínico más comúnmente usado para
medir el riesgo potencial de alguna enfermedad cardiovascular prematura. Los niveles de
triglicéridos, colesterol y colesterol-HDL post-ayuno también pueden ser usados para
identificar posibles anormalidades. Es característico de las mujeres la menor
concentración de triglicéridos (80 mg/Dl.) respecto de la de los hombres (120 mg/Dl.); las
mujeres también tienen más alto nivel de colesterol-HDL (55mg/Dl. versus 43 mg/Dl. para
los hombres). El bebé recién nacido tiene niveles de triglicéridos y de colesterol total entre
un medio y un tercio de los de un adulto. Los niveles de colesterol-HDL son relativamente
altos en el recién nacido (35 mg/Dl.) en el que la proporción entre colesterol total y
colesterol-HDL es igual a 2; en los adultos esa proporción es de 3,5 para las mujeres y de
4,6 para los hombres. Los niveles de lípidos en los infantes son, quizá, los «ideales»; al
nacimiento, el colesterol total en plasma es bajo mientras que el colesterol-HDL es
relativamente alto. Excepto en el caso de anormalidades genéticas, las paredes
vasculares de los recién nacidos están libres de rastros de grasa. La acumulación de
grasa aparece durante los primeros años de vida, indicando que la ingesta alimentaría y
los factores ambientales probablemente influyen sobre la iniciación y la progresión de la
aterosclerosis. Al nacimiento, no se observan diferencias entre bebés varones o mujeres
ya que las hormonas sexuales tienen, aparentemente, una reducida influencia en esta
etapa.
16.
17. El nivel de colesterol en la sangre está determinado en parte por herencia y en
parte por factores adquiridos tales como dieta, cantidad de calorías y nivel de la
actividad
física.
Los factores que afectan al colesterol en sangre comprenden edad, sexo, peso
corporal, dieta, consumo de alcohol y tabaco, ejercicio físico, factores
genéticos, antecedentes familiares, medicamentos, situación menopausia, el
uso de una terapia de reemplazo hormonal y desórdenes crónicos tales como
hipotiroidismo, enfermedad obstructiva del hígado, enfermedad pancreática
(inclusive diabetes) y enfermedad renal. En muchas personas, un elevado nivel
de colesterol sanguíneo constituye un alto riesgo de desarrollo de una
enfermedad en las arterias coronarias. Los niveles sanguíneos de colesterol
total y varias fracciones de colesterol, en especial el colesterol-LDL y el
colesterol-HDL son útiles en la evaluación y el monitoreo del tratamiento de
pacientes con enfermedades cardiovasculares y otras relacionadas. Los niveles
sanguíneos de los mencionados componentes del colesterol, inclusive los
triglicéridos, han sido separados en las categorías «deseable», «al límite» y
«alto riesgo» por el Instituto Nacional de los Pulmones, el Corazón y la Sangre
de los Estados Unidos, en su informe del año 1993. Estas categorías
conforman una base útil para la evaluación y el tratamiento de los pacientes
con hiperlipidemia (niveles de lípidos por encima de lo normal).
18. El colesterol es un esterol (lípido) que se encuentra en los tejidos corporales y
en el plasma sanguíneo de los vertebrados. Se presenta en altas
concentraciones en el hígado, médula espinal, páncreas y cerebro. Pese a
tener consecuencias perjudiciales en altas concentraciones, es esencial para
crear la membrana plasmática que regula la entrada y salida de sustancias que
atraviesan la célula.
El nombre de «colesterol» procede del griego KOLE ( bilis) y ESTEREOS
(solido), por haberse identificado por primera vez en los cálculos de la vesícula
biliar por Michel Eugène Chevreul quien le dio el nombre de
«colesterina», término que solamente se conservó en el alemán (Cholesterin).
Abundan en las grasas de origen animal.
21. Tomando en cuenta que los lípidos no pueden ser trasportados de manera
tan simple en los fluidos corporales debido a su naturaleza hidrofobica se
conjugar con una proteina y de ahi se forman las lipoproteinas
Las LDL Y HDL Son lipoproteinas ( proteinas ) que circulan en la sangre
estas se forman al unirse a los trigliceridos estas particulas de lipoproteinas
tambien se unen al colesterol y se encargan de movilizar y el colesterol , es
decir
es
el
trasporte
del
colesterol
,
las de baja densidad trasportan mucho colesterol y lo depositan en las
paredes de las arterias , y las de alta densidad lo contrario , ayudan por
decirlo hacia barrer este exceso
HDL : lipoproteina de alta densidad ( colesterol bueno).
LDL : lipoproteina de baja densidad ( colesterol malo ).
22. La homeostasis del colesterol es cualquier mecanismo que contribuye
al proceso de mantener un estado de equilibrio interno el colesterol
bueno y el el colesterol malo dentro de un organismo vivo. El
colesterol, una molécula biológica esencial en el sistema del cuerpo
humano, realiza varias funciones fisiológicas, tales como actuar como
un precursor para la producción de ácidos biliares, vitamina D y
hormonas esteroides.
También funciona como un elemento crítico estructural en la membrana
celular de todas las células presentes en el cuerpo. A pesar de las
funciones beneficiosas y necesarias de colesterol, una alteración en la
homeostasis del colesterol puede provocar un aumento del riesgo de
enfermedades del corazón, así como alterar otros sistemas de
retroalimentación homeostática asociadas con el metabolismo, teniendo
una relación directa con el colesterol y diabetes.
23.
24. Un perfil lipídico, también denominado lipidograma y perfil de riesgo
coronario, es un grupo de pruebas o exámenes diagnósticos
de laboratorio clínico, solicitadas generalmente de manera conjunta,
para determinar el estado del metabolismo de los lípidos corporales,
comúnmente en suero sanguíneo.
El médico utiliza la información para evaluar, junto con otros signos
y síntomas, el riesgo de una dislipidemia y sus complicaciones, como
un infarto cardíaco o una apoplejía, provocados por obstrucción de
los vasos sanguíneos, causados por ateromas o placas de colesterol,
es decir para valorar el riesgo cardiovascular de la persona e instituir
así un régimen adecuado de prevención y tratamiento.