1. Profesorado de Nivel Inicial.
Cátedra: Literatura y su Didáctica I
Profesora: Viviana Correa
Estudiante: Laura Calúa
Trabajo práctico: Análisis del texto “La Plapla” de M. E Walsh en relación a las
características de literalidad.
Teniendo en cuenta y considerando que la literatura infantil nos permite una plena
situación comunicativa en la medida que el receptor participe activamente del proceso
creativo, apropiándose de sus significaciones, disfrutando estéticamente la obra literaria,
se puede afirmar, en primer lugar, que la obra lleva a los niños a pensar otros mundos
alternativos, con una clara finalidad estética y placentera , donde el receptor, por
ejemplo, puede imaginarse un juego de rayuela, algo real, pero entre letras y renglones
dentro de un cuaderno, permitiendo la interpretación y apropiación subjetiva de cada
niño. Esto también se puede observar en la figura central del cuento que es el personaje
de la “la Plapla” donde el receptor le atribuirá un significado personal a esta creación
imaginaria.
Desde la perspectiva de multiplicidad de significado, se puede caracterizar como un
texto polisémico, donde desde la figura central cada receptor le dará por un significado
propio al contenido del texto, por ejemplo, en la parte final por qué cada maestra
guarda en una caja a “la Plapla” o la idea de que las letras no fueron hechas para bailar.
Además, se observa que el texto tiene un contenido donde ser narra una historia con
distintos personajes: Felipito, “la Plapla”, la maestra y los compañeros de la escuela
que, por tratarse de un texto literario infantil, establecen constantemente relaciones
entre la realidad y la fantasía.
También se plantea un lenguaje ambiguo, opaco y connotativo. El primero, se nota con
claridad sobre el final del texto, donde se dice que por el bochinche que causó en la
escuela “la Plapla” no figura en el abecedario. Esto, que es expresado de una sola
manera, puede llevar a distintitas interpretaciones de los receptores. Las dos últimas,
opacidad y connotación, se observa en la comunicación de sensaciones y sentimientos
que se expresan en el texto, por ejemplo: “cerró el cuaderno asustado”; “gritando
entusiasmado” “y siguió patinando sobre el cuaderno mientras cantaba un vals con su
voz chiquita y de tinta”. Estos ejemplos se emplean de manera simbólica y figurada y le
2. dan un plus a lo que se quiere contar y desde la sugerencia permite la variedad de
lecturas.
En cuanto a los tiempos verbales se puede afirmar que la narración transcurre en
pasado, es decir en pretérito perfecto simple, ya que se relata: “Felipito Tacatún estaba
haciendo los deberes (…)” o “ (…)La maestra creyó que Felipito se había vuelto
loco(…)”. Por otra parte, se observa que en la narración se aporta información
complementaria y descripciones: “(…)- ¿Qué es esto?, se preguntó Felipito, que era un
poco miope (…)”. De esta forma el pretérito imperfecto simple es acompañado por un
modo indicativo. Se observa también el pretérito pluscuamperfecto cuando se
menciona, por ejemplo: “(…) una de las letras que había escrito (…)”, ya que expresa el
pasado de todos los pasados. Además sobre el final del texto se encuentra la
conjunción en pretérito perfecto compuesto: “(…) las letras no han sido hechas para
bailar (…)”
En el aspecto de la figura del narrador, este se caracteriza por ser omnisciente, porque
actúa, en tercera persona, como si conociera todas las circunstancias del relato, hasta el
punto de saber qué es lo que sienten y piensan los personajes. La subjetividad del
narrador se puede observar concretamente en la descripción sobre el sentimiento de la
maestra cuando Felipito le enseña lo que había encontrado en su cuaderno.
Por último, se encuentra en todo el texto, un pacto ficcional, donde se supone que el
lector suspende sus juicios frente a los hechos que se le narran; es decir, no es válido
preguntarse si es cierto, si paso o no; es decir que el lector debe aceptar que lo contado
en el texto son hechos imaginarios, pero no necesariamente mentiras. En este caso el
lector aceptará que “la Plapla” baile, hable y cante, pero también que sea una letra que
se escribe y se dibuja en los cuadernos igual que cualquier otra letra.