Erik celebra su cumpleaños con sus amigos después de ir al colegio. Juegan con los regalos que le han traído y comen una merienda preparada por sus padres. Más tarde juegan hasta que se hace tarde y los amigos deben irse a casa, aunque Amaya quiere seguir jugando. Erik ayuda a limpiar antes de tropezarse y ensuciarse, por lo que debe bañarse antes de ir a dormir, cansado después de un día estupendo.