Política tradicional colombiana ¿flagelo nacional?

POLÍTÍCA
TRADÍCÍONAL
COLOMBÍANA
¿FLAGELO NACÍONAL?
Un texto que nace en el marco de las elecciones presidenciales de Colombia,
periodo 2014 – 2018. Se contextualizan cada uno de los candidatos
presidenciales, se exponen sus ideologías y propuestas en busca del
convencimiento del electorado. Propuestas que se fueron diluyendo en un
panorama donde fue la guerra sucia con fines electorales el argumento para
vencer en los comicios. En este texto se expone la posible intención de voto
por parte del electorado, con base en sondeos realizados en el mes de mayo
de 2014, a pocos días de las elecciones. Finalmente se concluye en los doce
años que llevan los liberales en el poder y la gigantesca deuda social que
han dejado en el colectivo colombiano.
¿Es la izquierda
democrática el
camino correcto?

Universidad del Atlántico – Programa de Economía.
Kevin Machado Zapata Página 1
Fabián Ballestas Fernández
Introducción
El derecho al voto, es una decisión individual de cada patriota, decisión que toca
directamente nuestro diario vivir como consecuencia de cada una de las decisiones
que toman los mandatarios, mandatarios que el colectivo colombiano decide
posicionar en el poder. Las elecciones presidenciales, si no es la más importante, es
una de las más importantes decisiones que toma la sociedad colombiana cada
cuatro años. Siendo parte de quizá una teórica democracia participativa y pluralista
como lo establece el Estado Social de Derecho.
Por estos meses y a escasos días de las elecciones, se vive en el país un ambiente de
incertidumbre que tiene como matriz el deseo de conocer con certeza quien regirá
la vida política de los colombianos durante el próximo periodo presidencial, periodo
que data entre los próximos años. Siendo este el panorama nacional, nace este
análisis con la intensión de proporcionar al lector, conocimiento sobre lo que se ha
hecho en los últimos cuatro años de mandato, quizá un poco más allá y el programa
de gobierno que cada uno de los aspirantes a la presidencia dice querer
implementar en un eventual triunfo en los comicios.
Se iniciara este análisis con una clasificación general de los aspirantes a habitar la
Casa de Nariño durante el próximo periodo presidencial. Su composición ideológica
y gestiones publicas serán temas a tratar brevemente, haciendo énfasis en
proyectos que tienen a futuro para el país, en algunos casos, se hacen fuertes
críticas como consecuencia de proyectos planteados anteriormente y no cumplidos
en sus totalidad, algunos no iniciados. En el texto se tocan temas como la
reprochable guerra sucia que ha venido presentando en el marco de estas
elecciones, se toca de manera breve pero concisa los efectos que algunos aspirantes
han querido que provoque el Proceso de Paz que actualmente se lleva a cabo en
Cuba, entre el gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de
Colombia (FARC). Finalmente el texto plantea una serie de encuestas a, parte de la

colectividad colombiana, sondeos referentes a la intención de voto frente a los
posibles escenarios políticos a presentarse.
Este texto basado en investigaciones y sondeos frente a la teoría sociológica urbana,
tiene como finalidad que nuestro lector logre hacerse una idea de lo que
actualmente está pasando en el marco de estas elecciones presidenciales,
igualmente esta entre nuestros objetivos, lograr despertar interés por esta
problemática que toca directamente a cada uno de los colombianos, previniendo la
abstinencia e infantilidad política reflejada en las últimas elecciones legislativas.
Es un texto basado en la diferenciación y contrastes de los actores políticos, dejando
a orden de nuestro lector, la libertad de escoger sin presiones el programa de
gobierno con el cual más se identifica, según a sus aspiraciones y modelo de una
Colombia digna.

Política tradicional colombiana ¿flagelo nacional?
Posterior a convenciones, consultas internas, precandidaturas, pretenciosas y
complejas decisiones, hoy están a disposición del electorado, los cinco candidatos
que tienen como objetivo comandar las fuerzas armadas de la nación y la vida
política social de los colombianos entre 2014 y 2018.
Juan Manuel Santos en representación de la llamada coalición por la paz,
conformada por los partidos oficialistas colombianos: Cambio Radical, Partido
Liberal y Partido Social de Unidad Nacional. Oscar Iván Zuluaga, representa los
intereses del recién conformado, pero no sin menos poder político, el Centro
Democrático. Por otra parte, Marta Lucía Ramírez tiene como insignia la bandera de
un dividido Partido Conservador Colombiano. La doctora Clara López Obregón,
representa al que en teoría es el único partido de izquierda en Colombia, Polo
Democrático Alternativo. Finalmente, Enrique Peñalosa se posicionará en el tarjetón
electoral como representante de la llamada Alianza Verde.
En este orden de ideas el candidato de mayor relevancia es el actual presidente,
Juan Manuel Santos, quien considera estar haciendo historia desde la presidencia
por el buen manejo que le ha dado a su gestión pública. Juan Manuel Santos y su
campaña reeleccionista ha tenido un juego mediático donde han llamado a la
reelección como “el segundo tiempo de la paz”.
Dentro de las propuestas que el candidato presidente presentó, está el fomento del
empleo, queriendo crear 2,5 millones de empleos más de los que ya han creado, la
reducción de la tasa de desempleo a un 3,5%, a esto se le suma un proyecto de crear
el servicio nacional de empleo sin palanca. Se destaca el apoyo a los jóvenes
emprendedores para crear empresas con financiamiento de Bancoldex.

En seguridad ciudadana se propone la apertura del Ministerio de Seguridad,
realmente en seguridad ciudadana se ha venido presentando una notable falta de
credibilidad y desconfianza con respecto al mandato del expresidente Álvaro Uribe
Vélez, donde Juan Manuel Santos se desempeñó como Ministro de Defensa, a esto
se le suma que en el actual mandato se presentó una significativa alza en
extorciones y asesinatos, en este contexto es poco factible que el electorado asuma
esta propuesta como argumento veraz para que el actual presidente continúe
cuatro años más en la Casa de Nariño.
A pesar de que en algunos casos se le ha dado buenos manejos al problemáticas
nacionales, cabe hacerse preocupantes preguntas, ¿Qué pasa en las zonas de
conflicto?, ¿Qué se ha hecho en la lucha contra el narcotráfico?, ¿Y la deuda social?,
¿Cómo vamos con la educación pública?, muy poco es lo que se puede destacar en
importantes puntos de equidad social y actitudes contra grupos subversivos y
bandas criminales.
Para estas campañas electorales es importante lo que se proponga en educación, los
jóvenes hacemos la diferencia a la hora de votar y garantizaremos nuestro futuro
con una buena elección, para eso es necesario saber que hay detrás de las
propuestas de educación y en eventuales casos, planes para reformar la educación
como ocurrió en el año 2011. El presidente planea trabajar en la calidad de la
educación y la gratuidad para los niños que asistan a las escuelas, mejorar las
escuelas rurales está dentro de los objetivos del gobierno, que pretende llamar la
atención en estas zonas, ¿Suena reconfortante no?
Está bien, hablemos un poco de educación, ¿Quién no recuerda los tan vergonzosos
resultados de las pruebas PISA?, ¿Colombia en el último lugar?1
, ¿Realmente así de
mal estamos? El gobierno habla de múltiples inversiones en la educación en un
posible segundo mandato, dice tener muchos proyectos para mejorar la calidad
educativa del país pero, ¿Por qué esperaron más de cuatro años?, si bien este

gobierno y los anteriores de los que hizo parte el presidente Santos le quitaron 35
billones de pesos a la educación en Colombia. Tengamos claro que el tema de la
educación, debió ponerse como prioridad en la agenda pública.
El gobierno, busca otorgar créditos al 0% de interés a través de Icetex y se espera
que para el 2025 sea el país más educado de Latinoamérica, ¿suena un poco utópico
no?, ya veremos qué pasa con esta visionaria y tal vez teórica visión. Analizando esta
propuesta, el único beneficio para la educación superior es el otorgamiento de este
tipo de créditos al 0% de interés, deduciendo que la educación superior terminará
en una inevitable privatización, panorama que blindaría de la vida universitaria a
jóvenes de escasos recursos, siendo ésta opción de la financiación el único recurso
gubernamental para ingresar a programas profesionales. Este tipo de propuestas
egoístas, están detrás de la campaña reeleccionista.
Continuemos indagando un poco sobre la gestión pública del gobierno Santos,
¿Acaso nadie escucho al presidente Santos o bien a Vargas Lleras, su Ministro de
Vivienda hablar sobre 100 mil viviendas gratis?, veamos en que van esas 100
viviendas. El actual ministro de vivienda, Henao, demoro alrededor de cuatro meses
para entregar la cifra sobre la grandiosa meta del presidente Santos, demora que
tenía como finalidad empujar la reelección, posterior a esto se ve obligado a
entregarle esta cifra al senador Robledo, ¿con que nos encontramos?, a finales de
2013, apenas se han entregado entre 6.969 y 12.197 de las 100 mil viviendas gratis
que prometieron Santos y Vargas Lleras2
, el balance para abril de 2014 también es
bastante cuestionable, las entregadas giran alrededor de 11.701 y las estructuradas,
estas cerca de 22.8683
. En definitiva, no cumplieron.
Ni hablar de materia infraestructural y las pésimas, desactualizadas y poco
desarrolladas vías que posee el país. Sin olvidar la oportunista propuesta del
gobierno de vender Isagén4
, quizá, actualmente la empresa más rentable del Estado,
¡vaya!, neoclásica gestión, privando al pueblo de tarifas un poco más asequibles en

materia de energía. Y los peajes de Colombia ¿lo más caros de Latinoamérica?,
siendo este el caso, entonces recordemos a un gran comunicador cordobés
“mientras peor está la carretera, más caro es el peaje”5
, expresó Juan Gossaín, en su
columna del El Tiempo.
En últimas, se dio a conocer la llegada del expresidente Gaviria a la campaña
reeleccionista, quizá pensando más en una segunda vuelta, realmente la primera
vuelta ya está a escasos días. En realidad, la maquinaria esta quieta, los
parlamentarios de la mermelada no están comprometidos con la campaña
reeleccionista, entonces, Juan Manuel Santos, trae una voz autorizada para que le
de altura a la campaña reeleccionista, para que la saque de ese mar de lodo donde
se encuentra y se enfrente de tú a tú con Álvaro Uribe Vélez.
Se califica la llegada de Gaviria como un acto desesperado del presidente Santos.
Haciendo un breve contexto: metió a Vargas Lleras en busca de la reelección y no le
funcionó, intentó con el profesor Mockus, pero tampoco le funcionó, recientemente
entra el alcalde mayor de Bogotá Gustavo Petro y al parecer no funcionará, ya en
últimas llega Gaviria como salvador de la campaña, veremos qué pasa.
El candidato presidente no tiene a sus espaldas el irreprochable poder político de
quién prácticamente lo llevó a la presidencia, Álvaro Uribe Vélez y de su audaz jefe
de publicidad Juan José Rendón, desvinculado de la campaña reeleccionista hace
apenas algunas semanas. Siendo así las cosas, Juan Manuel Santos debe demostrarle
al país que tiene el peso político suficiente para ganar a pulso en las urnas el
derecho de estar cuatro años más en el poder.
Según los sondeos el más duro contrincante del candidato presidente en la puja por
la presidencia, es el aspirante por el Centro Democrático Oscar Iván Zuluaga, el
candidato uribista, se muestra muy decente en sus discursos y opiniones, alguna vez
pronunciándose: “Yo Oscar Iván Zuluaga tengo las ganas, la preparación y el amor

infinito por Colombia para ser el presidente de todos ustedes”, se le nota muy poco
la politiquería y refleja el arte de la política en sus palabras pero, la realidad es que
el expresidente Álvaro Uribe, fundador del Centro Democrático, sacó una lista
cerrada al congreso que lo representa a él y sus intereses económicos, también
logró colocar en el tarjetón electoral un candidato a la presidencia que igualmente lo
representa a él y sus intereses políticos y económicos, intereses que no representan
al colectivo colombiano.
La bandera entre las propuestas de Zuluaga es recuperar la seguridad democrática
implementada en el gobierno de Uribe, recuperar las políticas de seguridad que se
han perdido durante el gobierno Santos, políticas relacionadas con: la lucha contra
el narcotráfico, el terrorismo y delitos que afecten la integridad humana, políticas
que permitan fortalecer la libertad y la vida. Gran parte de los colombianos se
inclinan por estas propuestas de seguridad pensando que necesitamos este
beneficio antes que cualquier otra cosa, olvidando la gigantesca deuda social que le
dejó el gobierno Uribe a todo el país durante sus ocho años de gobierno.
En materia de economía, busca generar confianza inversionista, una política que se
puede rescatar del gobierno actual. Zuluaga busca el desarrollo regional, para que
vaya de la mano de alcaldes y gobernadores, del sector privado, de la academia y se
desarrollen clústeres productivos. También busca promover la inversión de los
recursos de regalías en la infraestructura y los desarrollos de innovación.
Para Zuluaga y su campaña es importante aprovechar el momento que vive el país
en temas como el agro, ya que estas grupos campesinos no tienen confianza en el
actual gobierno, Zuluaga les propone a los campesinos, las asociaciones y
cooperativas agrícolas para que los productores se integren verticalmente
generando procesos de valor agregado y comercialización propia, buscando entre
sus objetivos reducir el costo de intermediarios, Zuluaga busca revivir el transporte
férreo en puntos vitales como la costa atlántica, acompañada de la navegabilidad

del río magdalena, todo esto para el aprovechamiento de los TLC, tratados que solo
le han traído ruinas e innumerables pérdidas al agro colombiano, ya que según la
balanza de exportaciones e importaciones, en representación de dinero es mucho
más lo que se está importando que lo que se está logrando exportar al resto del
mundo7
. Esto se debe a que para el comerciante o distribuidor es mucho más
rentable adquirir un producto extranjero, el cual lo está negociando a precios muy
inferiores comparado con los productos nacionales.
La globalización es un punto sumamente importante en el marco del desarrollo
económico del país pero es imposible en un panorama nacional donde el agro y la
manufactura colombiana, está en una notable desventaja con respecto a productos
más económicos que están ingresando al país.
Un poco más alejada de las posibilidades de llegar a la presidencia según las
encuestas se encuentra Marta Lucía Ramírez, representante de un dividido Partido
Conservador, donde sus pesos pesados como Efraín Cepeda y Roberto Gerlein, están
actualmente apoyando la campaña reeleccionista con la ayuda de la máxima
autoridad electoral (CNE), declarando viable la doble militancia para favorecer la
reelección, ante este panorama entonces cabe preguntarse, ¿Controla el presidente
en un 100% el Consejo Nacional Electoral?, ¿Dónde está la ideología?, si según la Ley
1435, un militante de un partido puede no hacerle campaña a su candidato,
independientemente de las razones, pero no puede hacerle campaña a un candidato
de otro partido. La ley que votaron los candidatos del partido de la Unidad Nacional,
esto perjudica a los partidos políticos y afecta la democracia.
Pese a todos estos inconvenientes, Ramírez ha promovido su candidatura bajo el
lema: “Presidiré un gobierno que se enfrentará a los corruptos y la corrupción”.
Implementando propuestas sobre seguridad, educación, salud, pleno empleo,
justicia, medio ambiente, infraestructura, emprendimiento, ciencia y tecnología,

competitividad, TIC y un programa anti-corrupción, el cual es la mayor bandera de
su candidatura.
Por su parte la representante del Polo Democrático Alternativo, Clara López
Obregón, en busca de lo que sería una Colombia diferente, promueve su campaña
bajo el lema “Colombia por un buen camino”.
La candidata del Polo, busca convencer al electorado, basándose en un programa de
gobierno donde sus principales objetivos son: cambiar el modelo económico por uno
más justo y equitativo, generar empleo promoviendo la industria nacional, rediseñar
el sistema de salud para que el dinero llegue a los pacientes y no se quede en las
EPS, renegociar los tratados de libre comercio, cambio real y político, reconciliación
nacional y construcción de la paz, los ciudadanos más pobres recibirán gratis el
mínimo de agua y luz necesaria para vivir, construir más y mejores carreteras para
que el país sea competitivo, garantizar educación pública, gratuita y de calidad.
Desde esta perspectiva se ve esta candidatura como una gran opción por un cambio
de cultura política, fuera del lodo y los desdenes de la politiquería. El país necesita
urgentemente un modelo económico justo, con equidad social para tratar de allanar
la deuda social que los gobiernos adquirieron décadas atrás con la sociedad
colombiana.
Todas las candidaturas hablan de equidad y justicia económica pero nadie muestra
resultados tangibles de estas propuestas, el partido de la U, lleva 12 años en el
poder, con tan largo plazo, se le acabó el tiempo para construir equidad para los
colombianos menos favorecidos. El segundo tiempo del presidente Santos se está
viendo bastante, dirían en mi tierra “embolatado”.
Desde este punto de vista, si planteamos una idea clara y realista, se vienen cuatro
años de gobierno donde si resulta victorioso Juan Manuel Santos u Oscar Iván

Zuluaga, seguirá siendo un país gobernado por liberales al fin y al cabo. Lo que no se
hizo en doce años, es prácticamente imposible que se logre en cuatro años con las
mismas ideologías económicas neoclásicas en el poder.
La candidatura del Polo, es la única que habla de promover la industria nacional y de
renegociar los TLC, podemos ser poseedores de grandes obras de infraestructura
pero si la industria nacional no mejora no seremos competitivos ante potencias
económicas industriales.
Al fin y al cabo ¿Qué es un TLC? Remplazar trabajo e industria nacional por
desempleo e industria extranjera. Protejamos nuestra industria, desarrollémosla.
Seamos competitivos con nosotros mismos para luego salir y enfrentarnos a la
globalización de tú a tú con el resto del planeta.
Sin lugar a dudas López Obregón, es una opción viable por una Colombia patriota,
con equidad social en busca del desarrollo económico de la patria que todos
amamos. No seamos más los hijos menores del imperialismo norteamericano.
En el recuento de todas las candidaturas y nuestros criterios frente a cada una de
ellas, llegamos a quien según los más reciente sondeos es quien tiene menos
probabilidad de habitar la Casa de Nariño entre 2014 y 2018. Quizá, según expertos,
ya sepultado en la contienda electoral, Enrique Peñalosa Londoño, candidato por la
Alianza Verde, es ideológicamente difícil de ubicar, pues, en su discurso y gestión le
apuesta como pocos aspirantes a una real propuesta de igualdad social propia de la
centro izquierda, pero por otro lado es un convencido de la necesidad de orden y
seguridad, con una postura más propia de la centro derecha.
Peñalosa basa su propuesta programática a partir de la consigna: “Por el país que
podemos tener” y plantea que si llega a obtener el cargo de primer mandatario se

logrará el sueño de “una Colombia más fértil para la realización de nuestro potencial
humano como individuos y nuestra creatividad como sociedad”.
El programa de gobierno de Enrique Peñalosa cuenta con ocho puntos potenciales
en la busca del convencimiento del electorado6
, haciendo énfasis en puntos críticos
tales como: proceso de paz, educación, salud, seguridad urbana, sector agrario,
reforma urbana, industria y una política distinta.
Según Peñalosa la paz es un asunto de Estado y aunque asegura que no es posible
una paz sin impunidad, aclara que tampoco es posible sin generosidad.
En materia de educación, le apuesta a una educación de calidad con maestros muy
bien remunerados y motivados, y aunque hace énfasis en un proyecto sin
precedentes en construcción de colegios, se le puede criticar fuertemente su falta
de propuestas y compromiso para la educación superior nacional.
En el crítico tema de la salud en el país, Peñalosa cree en un sistema de salud mucho
más controlado, donde las EPS no busquen tanto la reducción de costos olvidando la
calidad en salud de los colombianos. Si hablamos de seguridad urbana, (una de sus
propuestas consentidas) el candidato plantea que debe haber prevención con
atención especial a jóvenes en sectores de alto riesgo, cree en las actividades
deportivas y programas de empleo para mejorar la seguridad urbana en nuestras
ciudades.
Para el sector agrario, es ambicioso en la busca de la creación del Ministerio de
Bienestar Rural para que aparentemente actúe como aliado de la gente del campo
en la guerra contra el contrabando de productos agrícolas, incrementación en la
tecnología y apoyo con créditos.

Peñalosa enfatiza en una reforma urbana construyendo no solo viviendas sino
habitas con parques e idóneos sistemas de transporte en busca de una vida
igualitaria y feliz. El candidato verde, ha mostrado gran interés por el
proteccionismo de la industria nacional y asegura que el país ha suscrito 12 TLC, los
cuales han estado faltos de estudios de costo-beneficio por lo tanto asegura no
suscribir nuevos tratados en su eventual mandato.
Peñalosa hace énfasis en que si llega a la Presidencia, lo hará libre de cualquier tipo
de compromisos con la clase política y económica. Cree que el Ejecutivo debe tener
a las personas idóneas y no estar sujeto al dominio de las maquinarias de los
políticos.
En los discursos de Enrique Peñalosa, se le nota el gran amor por Bogotá, cuida con
recelo su interés de trabajar por la capital y hacer de esta una ciudad digna pero ¿y
el resto del país?, el candidato verde ha demostrado ser un excelente mandatario
local desde su paso por la alcaldía bogotana, sin embargo puede llegar a ser
bastante cuestionable su capacidad y tenacidad para lograr llevar las riendas de todo
un país con un hipotético post-conflicto y todas las problemáticas por la deuda social
que han tenido los últimos gobiernos en sus neoclásicas gestiones.
El candidato verde alguna vez en 360 Grados8
se pronunció, “quiero llegar a la
presidencia sin odios, quiero buscar lo que nos une, más que lo que nos separa”.
Finalmente se le puede destacar a Peñalosa que promueve su candidatura
mostrándose como un candidato alejado de las mañas de la politiquería tradicional.
Todo lo anterior nos hace reflexionar una vez más acerca de la gravedad de este
flagelo político nacional, y la importancia de estar conscientes que los colombianos,
debemos estar convencidos que no merecemos candidatos con rencores que en una
eventual llegada al poder, buscarían principalmente sanar sus venganzas personales.
López Obregón y el voto en blanco, son opciones viables para los electores que

buscan salir de las mañas de la politiquería tradicional. El pueblo ignora el
grandísimo poder que posee, castiguemos a los candidatos que han desviado una
campaña presidencial que debería estar sumergida en un mar de ideas, propuestas,
compromisos y proyecciones por una Colombia de igualdad social y desarrollo
económico sostenible.
Paz ¿convicción o festín electoral?
El gobierno santos ha querido asumir irresponsablemente la paz como un tema de
su gobierno y no como un tema de Estado que realmente es la manera como
debería llevarse este proceso, ha querido vender a la opinión pública la idea de que
con Santos cuatro años más en el poder habrá paz, sin Santos otro periodo en el
poder, la paz se evaporara en el frío ambiente de las bombas. Santos y compañía
prefieren hablar de paz para no hablar de temas como infraestructura, justicia,
seguridad urbana, empleo, educación, entre otras. Como alguna vez se le escuchaba
a Peñalosa, “el candidato-presidente, está dedicado hacer política con las
negociaciones y esto es un proceso que va más allá de los gobiernos”, un Peñalosa
prácticamente muerto en la contienda electoral pero acertado en muchas de sus
opiniones.
Siendo esta la real situación, la paz no es de Santos ¡claro que no!, Marta Lucía
Ramírez quiere la paz, Peñalosa quiere la paz, López Obregón quiere la paz y aunque
Zuluaga muy a su manera o a la de Uribe, dice querer la paz, nos encontramos en un
panorama donde la paz que todos anhelamos en Colombia no depende únicamente
de Juan Manuel Santos, es un tema de todos los colombianos que va mucho más allá
de cuatro años de gobierno de cualquier mandatario.
Una voz autorizada para referirse al tema como Álvaro Uribe, se pronunció al
respecto “el país necesita procesos de paz serios, no procesos que sean festines
electorales” sentenció el senador electo Álvaro Uribe Vélez, en Blu Radio Colombia.

Guerra sucia preelectoral
En el marco de estas elecciones presidenciales, principalmente las campañas de Juan
Manuel Santos y Oscar Iván Zuluaga, se han visto envueltas, en un mar de lodo
donde las propuestas y programas de gobiernos se han ido olvidando detrás de cada
uno de los escándalos que prácticamente a diario saltan a la luz pública.
Este lamentable panorama de guerra sucia, nace en Estados Unidos donde el
narcotraficante actualmente preso en ese país Javier Calle Serna, alias “Comba” dice
a la fiscalía que con tres socios suyos pago en 2011 a Juan José Rendón (J.J. Rendón),
12 millones de dólares por su intermediación ante el gobierno para llegar a un
acuerdo de sometimiento a la justica que al fin no se concretó. En este contexto, el
expresidente Álvaro Uribe en representación de Oscar Iván Zuluaga y el Centro
Democrático se pronuncia en los medios diciendo que le llego información sobre
narcodineros en la campaña Santos, sumándose a esto el ex presidente hace claro
énfasis en que a la campaña de Santos en el 2010, entraron dos millones de dólares
provenientes de un narco-pacto.
Estos hechos que se dieron a solo trece días de las elecciones, pusieron a gran parte
del electorado a dudar, pues, nadie quiere volver a vivir algo como el vergonzoso
proceso 8.000.
Con ese tema de los narcodineros dando vueltas en las cabezas del electorado,
aumentando la mala imagen del presidente, se da lo que tal vez y muy
probablemente quiso ser una cortina de humo, refiriéndonos al caso del famoso
“hacker”, como lo han querido llamar por la connotación que tiene la palabra.
En el norte de Bogotá, el CTI de la fiscalía, allana un edificio donde se encuentra con
una sala de la más alta tecnología dirigida por el señor Andrés Sepúlveda, vinculado
directamente con la campaña “Zuluaga Presidente”. Inmediatamente con lo que al
parecer la fiscalía investigó en tiempo record, el fiscal programa una rueda de

prensa donde irresponsablemente por sus prontas declaraciones da a conocer a la
opinión pública que desde esa sala allanada en el norte de Bogotá, se estaban
haciendo intersecciones ilegales a los negociadores del proceso de paz y al
presidente Juan Manuel Santos, con la finalidad de según el fiscal sabotear las
negociaciones de la Habana.
De todo este proceso de “investigación records” de la Fiscalía y las declaraciones del
fiscal Eduardo Montealegre se puede deducir que el Fiscal General de la Nación, le
hace campaña abiertamente al presidente Santos. El director del máximo ente
acusador del país, está metido en política, se ha declarado guardián de la
democracia y estas finalmente no son sus funciones.
El Tiempo presentó una columna con las pruebas contra Sepúlveda y cabe hacerse la
pregunta ¿Las obtuvo legalmente El Tiempo o las entrego ilegalmente el Fiscal?
Continuando con toda esta avalancha de acusaciones, la Fiscalía cita a Álvaro Uribe
para declarar sus denuncias de la supuesta financiación ilegal de la campaña “Santos
Presidente” de 2010. Uribe decide no presentarse y acude a la segunda citación de
la Fiscalía pero no presenta pruebas por lo que el senador electo ha denominado
falta de garantías. Pues teme que las supuestas pruebas que tiene en su poder y que
serían posteriormente entregadas a la Fiscalía, se filtren en el gobierno y no contar
con un sistema imparcial por parte del ente acusador.
Sin embargo, parece estar claro que Uribe ha utilizado una astuta estrategia dilatoria
porque aun flota en el ambiente preelectoral su afirmación de que a la campaña de
Santos en 2010 le entraron dos millones de dólares provenientes del narcotráfico.
Con este panorama de una acusación sin pruebas, el fiscal Montealegre se
encuentra en un dilema inducido por el expresidente, pues ¿Qué puede hacer el
fiscal?, ¿Acusarlo por injuria y calumnia?, ¿Dictarle orden de comparecencia para

que la policía proceda?, aunque el fiscal podría analizar la situación y
posteriormente tomar una decisión, paradójicamente cualquiera que sea la
determinación, desembocaría en más apoyo para Uribe, sin lugar a dudas el
colombiano más popular de la última década.
Sea cual sea el desenlace de este episodio de guerra sucia con fines electorales,
Uribe se muestra victorioso. Ha logrado que el país siga en la discusión de una
hipotética narcofinanciación a la campaña de Santos de hace cuatro años, logrando
que incluso el asunto del “hacker” Andrés Fernando Sepúlveda, miembro activo de
la campaña de Zuluaga, pase un poco inadvertido.
Siendo esta la situación Uribe ha logrado mantener en igualdad de condiciones
ambos temas, esto lo confirma como un extraordinario comunicador, capaz de
dictarle la agenda a los medios según sus intereses. Si se llega aclarar que todo este
asunto del ingreso de los dos millones de dólares a la campaña de Santos fue un
invento de Uribe, sería una verdadera ficha ganadora en este rompecabezas de la
guerra sucia con fines electorales.
En esta lucha por la presidencia, los candidatos y sus campañas, se hacen de
cualquier artimaña por muy baja e inescrupulosa que esta sea, para pescar incautos
en un mar de indecisos votantes que a nadie le creen.
Votemos a conciencia basándonos en nuestras ideologías, buscando una Colombia
para todos. Votemos por cual nos resulte el mejor programa de gobierno y no nos
dejemos salpicar del lodo de esta política sucia.
¿Qué dicen las encuestas?
Según sondeos realizados en el mes de mayo por las firmas Gallup9
y Cifras &
Conceptos S.A.10
la intención de voto del electorado en las elecciones presidenciales
seria la siguiente:

Gallup
Primera vuelta
Si las elecciones de Colombia fueran hoy, ¿por cuál de los candidatos votaría?, Así
respondieron las personas encuestas por Gallup entre el 10 y el 13 de mayo de 2014.
 Oscar Ivan Zuluaga: 29,3%. Creció cerca de 9 puntos con respecto al mes
pasado cuando tenía 20,5%.
 Juan Manuel Santos: 29%. Bajó tres puntos, pues en abril tenía un 32%de
intención de voto.
 Marta Lucía Ramírez: 14,4%. Creció 3 puntos en relación con la medición de
abril, donde obtuvo el 11,2%.
 Clara López: 10,9%. Subió casi 4 puntos en comparación con el mes pasado,
época en la que tenía el 7,1%.
 Enrique Peñalosa: 10,6%. Subió 5 décimas, pues en abril tenía el 10.1%
Observando el comportamiento de los resultados de las encuestas en los últimos
meses, se ve que Zuluaga empezó con un 14,6% en noviembre pasado y fue
subiendo hasta duplicar ese porcentaje. El presiente Santos, por su parte, inicio con
un 28% en noviembre y en medio de altibajos hoy tiene solo un punto más, 29%.
Segunda Vuelta
La encuesta también midió la intención de voto para la segunda vuelta entre los
candidatos con resultados, Oscar Iván Zuluaga y Juan Manuel Santos. Estos son los
porcentajes en dicho escenario:
 Oscar Iván Zuluaga: 42,5%
 Juan Manuel Santos: 35,1%

En una eventual segunda vuelta entre Santos y Marta Lucía Ramírez, los resultados
serían:
 Marta Lucía Ramírez: 40,8%
 Juan Manuel Santos: 37, 2%
La encuesta de mayo, realizada por Gallup Colombia, fue financiada por Caracol
Televisión, Blu Radio y periódicos El Espectador, El Colombiano, La Republica, El País,
El Universal y Vanguardia Liberal. Fueron consultadas 1.148 personas y el margen de
error es del 5%
Cifras y Conceptos
Dato 1: Según la Polimétrica de Cifras y Conceptos9, Santos esta sobre Zuluaga en un
27,7% frente a un 23,6%, respectivamente. Sin embargo, según esta misma
encuesta, Zuluaga le ganaría a Santos en segunda vuelta.
Si las encuestas reflejan lo que ocurre en la opinión pública, se habla de grandes
cambios porque hasta hace poco se decía que no había segunda vuelta. En términos
físicos, se puede decir que Zuluaga ha tenido un ascenso uniformemente acelerado,
mientras que Santos, ha presentado un gran descenso, estando los demás
candidatos estancados.
Dato 2: Según la Polimétrica de Cifras y Conceptos, la guerra sucia, ha afectado la
intensión de voto en la opinión pública:
 Si: 27%
 No: 55%
 Ns/Nr: 18%

Afortunadamente según la Polimétrica, más del 70% de la opinión pública es
indiferente a las denuncias que se han hecho actualmente. Los escándalos han
afectado mucho menos a Zuluaga.
Dato 3: Según la Polimétrica de Cifras y Conceptos, la guerra sucia que se vive en el
país es de:
 Juan Manuel Santos: 21%
 Oscar Iván Zuluaga: 17%
 No cree que sea real: 20%
 Ns/Nr: 40%
La opinión pública asimila más la reunión de funcionarios de campaña con narcos
que el asunto de hackers.
Dato 4: Frente al escándalo de la intermediación de dineros de narcos ¿Cree usted
que el presidente tiene responsabilidad?
 Si: 41%
 No: 29%
 Ns/Nr: 30%
Según el sondeo realizado por Cifras Y Conceptos, así se darían los resultados en la
segunda vuelta, estando el candidato-presidente en todos los casos frente a cada
uno de los opositores.
En el escenario de una segunda vuelta se votaría así:
Dato 1:
 Clara López: 29,5%
 Ns/Nr: 39,6%

Dato 2:
 Oscar Iván Zuluaga: 34,2%
 Ns/Nr: 32,2%
Dato 3:
 Juan Manuel Santos 31,4%
 Enrique Peñalosa: 29,4%
 Ns/Nr: 38,7%
Dato 4:
 Marta Lucia Ramírez: 30,8%
 Ns/Nr: 37,4%
Todos estos son datos teóricos, al fin y al cabo como lo dijo alguna vez el
expresidente Turbay “solo se debe creer en las encuestas que se hacen el día de las
elecciones en las urnas”.
Finalmente se especula que Santos resultará victorioso igual que en las legislativas
de marzo, pero se debe tener en cuenta que las legislativas y las presidenciales, son
muy diferentes, en las presidenciales no hay compra de votos y hay más maquinaria.
En la costa en las presidenciales se incrementa la abstinencia, mientras que en el
interior baja la abstinencia.
En la práctica, hay más voto de opinión en las presidenciales que en las legislativas,
el voto en las presidenciales, es mucho más libre.
Es la planteación de un problema que a muchos nos preocupa, un problema que
data de muchos años atrás; y en lugar conseguirse soluciones, profundizamos cada
vez más en el mismo, y nos hundimos poco apoco en un problema de difícil solución.

Todo lo anterior nos hace reflexionar una vez más acerca de la gravedad de este
flagelo político nacional, y la importancia de estar conscientes de que los
colombianos, debemos estar convencidos que no merecemos candidatos con
rencores, que en una eventual llegada al poder, buscarían principalmente sanar sus
venganzas personales. Con base en lo leído, podemos analizar los distintos caminos
en un panorama de teóricamente cinco opciones pero realmente solo un par con
visiones distintas.
En este texto, se evalúa a cada uno de los candidatos, se critica y resalta, lo inviable
y notable respectivamente. López Obregón y el voto en blanco, son opciones viables
para los electores que buscan salir de las mañas de la politiquería tradicional.
López Obregón se muestra como una candidata interesada en la industria nacional,
teniendo como finalidad el desarrollo económico del país, a esto se le suma su
interés de renegociar los mal negociados tratados de libre comercio que tanto han
afectado la materia prima colombiana, por ende causando miseria, pobreza y alta
necesidad en nuestros campesinos. Claramente también está interesada en la paz,
con muchos proyectos viables en un eventual posconflicto.
El pueblo ignora el grandísimo poder que posee, disciplinemos a los candidatos que
han desviado una campaña presidencial que debería estar sumergida en un mar de
ideas, propuestas, compromisos y proyecciones por una Colombia de igualdad social
y desarrollo económico sostenible.
Si eres actualmente miembro de ese grupo que tienen pensamientos como: “no me
gusta la política”, “todos los políticos son iguales”, “no me interesa la política”, etc.
Déjame decirte querido amigo colombiano que la política si está muy interesada en
ti y te toca a diario, a ti y a tu familia. A todos nos afectan las decisiones que toman
los mandatarios que nosotros mismos posicionamos en el poder.

Ve a las urnas, vota, participa en nuestra democracia. Intentemos mover del poder a
los tradicionalistas y egoístas políticos Liberales que llevan décadas dirigiendo
Colombia. Tu voto es el cambio, podemos construir una Colombia digna desde las
urnas.

1. http://www.semana.com/nacion/articulo/colombia-en-el-ultimo-lugar-de-las-pruebas-pisa/382250-3
2. http://robledoprensa.blogspot.com/2014/05/boletin-de-prensa-de-las-100-mil.html?m=1
3. http://bit.ly1kMxARJ
4. Empresa colombiana de servicios públicos mixta, dedicada a la producción y comercialización de energía.
5. http://www.eltiempo.com/colombia/otras-ciudades/los-altos-costos-de-los-peajes-en-colombia-y-el-mal-estado-
de-las-carreteras/13985233
6. http://www.eltiempo.com/elecciones-2014/presidencia/las-diez-propuestas-claves-que-tiene-enrique-
pealosa/13939682
7. http://robledoprensa.blogspot.com/2014/05/cifras-del-tlc-con-ee-uu-confirman-su.html?m=1
8. Programa de entrevistas y debates políticos, presentado vía, http://www.cablenoticias.tv
9. http://www.noticiascaracol.com/nacion/articulo-323629-vea-los-resultados-de-la-encuesta-gallup-de-mayo-sobre-
elecciones-presidenciales
10. http://cifrasyconceptos.com/images/descargas/polimetrica/Polimetrica_resultadosMayo_15.pdf

Política tradicional colombiana ¿flagelo nacional?

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