El documento discute la desigualdad de género entre hombres y mujeres que ha existido desde la época colonial. Argumenta que el género es una construcción social y no biológica, y que históricamente se ha considerado que los hombres y mujeres tienen cualidades inherentemente diferentes. Señala que una de las áreas donde más se evidencia esta desigualdad es en el trabajo, donde las mujeres reciben salarios más bajos y experimentan discriminación por su género.