La tecnología ha permitido prolongar la vida humana y mejorar la salud pública mediante el desarrollo de métodos más eficientes de producción, distribución de alimentos, manufactura e industria, así como comunicaciones y transporte más rápidos. Además, la tecnología moderna está aumentando la productividad y reduciendo el esfuerzo laboral necesario para satisfacer las necesidades básicas, pero es importante saber manejarla de forma positiva para mejorar la calidad de vida.