Allers, Schwarz y Frankl: Inicios de la logoterapia
1. RUDOLF ALLERS
OSWALD SCHWARZ Y
VIKTOR FRANKL:
ENCUENTRO Y RELACIÓN EN
EL SURGIMIENTO DEL
ANÁLISIS EXISTENCIAL Y
LOGOTERAPIA
Reseña del libro de F. Miramontes
“Frankl, Allers y Schwarz, encuentro y relación en el
surgimiento del Análisis Existencial y Logoterapia”
Por Marianna Delgado Falcón-Cooper24/10/2010
Presentación y material adicional por Gerardo Viau,
30/6/2013
2. TRES LEGÍTIMOS REPRESENTANTES
DE UNA “TERCERA ESCUELA”
A pesar que algunos reconocen al rostro de Frankl como el
representante de la llamada “Tercera Escuela de Psicoterapia
de Viena”, lo cierto es que sus precursores son tres: Rudolf
Allers, Oswald Schwarz y Viktor Frankl.
Los tres estudiaron en la Facultad de Medicina de Viena,
aunque Frankl ingresaría años más tarde.
Allers y Schwarz se graduan juntos y conformaron una amistad
muy productiva. Los unen sus coincidentes ideas (a veces lo
eran a tal punto que no recordaban a quién se le había ocurrido
primero una cierta idea) y su preparación multidisciplinaria, en
ámbitos como la medicina, la psiquiatría, la psicología, la
filosofía y la antropología.
Frankl los conoce en 1925 en el grupo adleriano de Psicología
Individual. El mismo Frankl dice que “cayó bajo el hechizo” de
dos hombres, que no sólo lo impresionaron como personas,
sino también lo habían influenciado profundamente.
3. TRES LEGÍTIMOS REPRESENTANTES
DE UNA TERCERA ESCUELA
Rudolf Allers y Oswald Schwarz marcaron de manera
esencial la vida de Frankl, no sólo en lo profesional,
sino en su historia personal. Él los consideró sus
respetables maestros y fieles guías.
Pero el impacto fue mutuo. La relación que tuvieron
fue, como diría nuestro autor, la de auténticos
compañeros existenciales, ya que Frankl también los
cautivó por su inteligencia, por su pensamiento
profundo y filosófico y su interés por el ser humano
íntegro. Entonces, se convirtió también para ellos en un
colega “de altura,” quien aportó su coraje e intuiciones
para desarrollar proyectos que captaron el interés y
recibieron el respaldo de sus mentores.
A continuación resaltaremos algunos puntos relevantes
sobre la biografía y legado de Allers y Schwarz.
Mencionaremos algunos aspectos que tienen que ver
con su influencia y relación con Frankl y la Logoterapia.
5. BIOGRAFÍA:
1883: Rudolf Allers nace en Viena, Austria. Su padre era médico y su
madre provenía de una familia de científicos. Estudió medicina y
ciencias. Le gustaba mucho el trabajo de laboratorio y la química.
1906: Recibe su doctorado en la Universidad de Viena. Publicó
varios artículos sobre bioquímica. Sus estudios en esta área le
sirvieron para sus investigaciones neurofisiológicas.
1908: Tuvo como profesor a Sigmund Freud, interesándose por su
línea psicoanalítica. En ese mismo año se unió en matrimonio con
Carola Meitner. Se orientó a la psiquiatría y fue asistente en la
Clínica para Enfermedades Nerviosas y Mentales en Praga. De allí
pasó a la Clínica de enfermedades mentales en Munich, donde se
convirtió en profesor de psiquiatría en 1913. Trabajó junto con el
profesor Emil Krapelin, considerado como el fundador de la
psiquiatría moderna.
1914: El advenimiento de la I Guerra Mundial lo lleva como médico
cirujano al campo de batalla. Recibe la Cruz del Mérito y la medalla
de la Cruz Roja por sus sacrificados servicios en la frontera polaco-
rusa. Fruto de su experiencia con heridas de guerra publica un libro.
1919: Al finalizar el conflicto es llamado como jefe del Departamento
de Psicología Sensorial y Médica, en el Instituto de Psicología de
Viena.
6. BIOGRAFÍA:
1927: Ejerce la psiquiatría. Su vocación de buscador de la
verdad y la necesidad de profundizar los estudios para
ayudar mejor a sus pacientes lo llevaron, por consejo del
padre Agostino Gemelli, a estudiar filosofía en la Universidad
del Sacro Cuore, en Milán.
1934: obtiene el doctorado. La profundización filosófica lo
llevó a identificarse con la “Philosophia perennis”, aunque sin
limitarse a ella, permaneciendo abierto a lo que las nuevas
corrientes de filosofía pudiesen aportar para la mejor
comprensión del ser humano.
1937: Es invitado como profesor de psicología a la
Universidad Católica de América, ya que algunos libros
suyos, (Psicología del carácter (1931), La nueva psicología
(1933), Psicología práctica en el desarrollo del carácter
(1934), llaman mucho la atención en los Estados Unidos por
su novedoso enfoque.
Ante el advenimiento de Hitler en Austria, los Allers —Rudolf,
Carola y su hijo Ulrich— se quedan en Estados Unidos.
7. BIOGRAFÍA:
Período estadounidense de Allers:
1947: Se traslada a la Universidad de Georgetown, esta vez como profesor de
Filosofía. 1955: Realiza una extensa gira por Francia y Austria, durante la cual
pronunció numerosas conferencias.
1958: Recibe una beca de investigación de la Fundación Guggenheim, que lo llevó
nuevamente a Europa. Un año después volvió a Austria para dar una serie de
cursos en el Forum Europeo. Sus artículos y libros se publicaban en América y
Europa.
En su etapa estadounidense, gracias a los logros en la enseñanza, en
publicaciones y por haber escrito una de las más sólidas refutaciones de Freud,
“The successful error (Freudianism)” [“El error exitoso” (Freudianismo)], Allers
recibió la Medalla Santo Tomás de Aquino por sus “prominentes contribuciones a la
Filosofía”; recibió también el Doctorado honoris causa en Leyes por la Universidad
de Georgetown; fue Presidente del Capítulo Filosófico del distrito Maryland-Virginia,
Presidente de la Sociedad Metafísica de América, y miembro de varias academias
como la de arte, la de filosofía, la de pensamiento medieval, la de ciencias de
Nueva York.
Muere a la edad de 80 años. La Misa de exequias fue celebrada el 17 de diciembre
de 1963, en la Iglesia de la Santísima Trinidad, en Georgetown. Sus restos mortales
8. EL “ANTI-FREUD”
Allers fue pionero en reconocer que una sólida base filosófica brindaría
la ayuda necesaria para fundamentar una teoría más humana, a
diferencia de las ideas deterministas, reduccionistas y mecanicistas
acerca del ser humano que yacían detrás del psicoanálisis.
Fueron tales sus críticas al psicoanálisis que se ganó el apodo del “Anti-
Freud”. Llama al psicoanálisis la “psicología de lo profundo” por
centrarse en los fenómenos ocultos, profundos e inconscientes que se
presentan en las personas. A su vez decía que la posición de partida del
psicoanálisis, al ser biológica, era una “mirada desde lo bajo”, pues
identificaba al ser humano y a sus motivaciones con lo instintivo y lo
primitivo.
Contrario a esto introduce el concepto de “psicología de las alturas”
diciendo que para estar a la altura de sus propios deberes, la psicología
se ve forzada a sobrepasar sus límites.
Frankl utilizó esta misma expresión para designar a su Análisis
Existencial y Logoterapia, que tienen el fin de comprender la condición
humana integral (lo que incluye, por supuesto, la parte espiritual)
9. EL “ANTI-
FREUD”
El ser humano siempre fue el centro de sus reflexiones. Se
interesa por la filosofía existencial puesto que le preocupa
el estudio del problema del hombre. Ocupó gran parte de
sus esfuerzos en defender una imagen total de lo que es el
ser humano.
En su teoría de la neurosis explica que no es
necesariamente una enfermedad, sino que puede surgir
por un conflicto existencial. Le acontece al ser humano por
el simple hecho de estar vivo y de existir. Por lo tanto,
también tenía una perspectiva humana y existencial acerca
del tratamiento de las neurosis: tratar lo humano como
humano.
10. EL “ANTI-
FREUD”
Allers tuvo el gran mérito de introducir a Frankl la filosofía de
Max Scheler, importantísima contribución espiritual que le
hace a Frankl, pues promovió un cambio fundamental en la
fase temprana de su carrera científica.
El mismo Frankl expresaría su deuda al decir que: “la
Logoterapia es el resultado de la aplicación de los conceptos
de Max Scheler en psicoterapia.” Este filósofo y fenomenólogo
alemán tuvo un fuerte impacto en la formación y cosmovisión
de Frankl.
Su influencia se descubre en toda su obra, impregna toda su
antropología. Entre muchas otras cosas, toma de él su visión
de la persona como centro de actos espirituales, capaz de ir
en busca de valores, significados y propósitos que le otorguen
sentido a su existencia.
11. Otro factor que fue decisivo para el desarrollo de la
Logoterapia fue la difusión de los libros de Frankl por
parte de Allers en los Estados Unidos. Frankl le enviaba
a Washington cada uno de sus libros y artículos
publicados, detalle que Allers agradecía, y que además
retribuía al discutir, tanto en conferencias como en sus
propios libros, el pensamiento de Frankl en relación con
la psicoterapia.
Por su parte, Allers hacía llegar los escritos de Frankl a
Gordon Allport, el renombrado psicólogo
estadounidense, quien intervendría para que Frankl
viajara por primera vez como profesor invitado a la
Universidad de Harvard. Allport fue quien tradujo “El
Hombre en Busca de Sentido” al idioma inglés, escribió
el prólogo e insistió en que la editorial diera una
oportunidad al libro. Este hecho es trascendental si
consideramos que este libro figura actualmente en la
biblioteca del Congreso de Estados Unidos como uno
de los diez libros que han cambiado el curso de la
13. BIOGRAFÍA:
1883: Oswald Schwarz nace en Brünn, Moravia, Imperio
Austro-húngaro; hoy Brno, república Checa, el 31 de
octubre, hijo de un Abogado.
1908: Tras sus estudios escolares en Brünn, y su servicio
militar, estudia medicina en las Universidades de Viena,
Estrasburgo y Munich
1912: Se especializa en Urología. Trabaja en varias
instituciones médicas universitarias, donde tiene la
oportunidad de ser asistente de muchas de las mayores
personalidades médicas de la época.
1914: al comenzar la primera guerra mundial, es
trasladado como médico al frente ruso y luego al frente
Italiano.
1919: Termina su doctorado en Urología
1920-1932: Como miembro de la Sociedad Alemana de
Urología y la Sociedad Vienesa de estudios físicos,
Schwarz escribe varios ensayos y presentaciones.
1934: Viaja a Inglaterra y se queda a vivir en Londres,
dada la delicada situación política en Austria.
1949: muere el 14 de octubre y es publicado su último
trabajo, “La psicología del sexo”
14. EL “URÓSOFO”
Desde temprana edad, Schwarz tenía gran interés
por la filosofía, de la cual sería estudiante
autodidacta. Tuvo una gran influencia de Husserl y de
la fenomenología y le interesaba la relación de la
teoría médica con la filosofía.
Al unir sus conocimientos filosóficos, psicológicos y
médicos pudo desarrollar y ser precursor de la
Medicina Psicosomática (le daba igual importancia a
la mente y al cuerpo) y fundador de la Medicina
Antropológica.
Siempre, en su labor como urólogo, colocó la
atención en los problemas psicológicos que
afectaban a sus pacientes.Además de desempeñarse
como médico urólogo, daba clases de lo mismo en la
Universidad de Viena. Gracias a su inclinación por la
15. EL “URÓSOFO”
Dejó plasmada en su obra la lucha de tantos años por humanizar
la medicina, la sexología y la psicoterapia.En su teoría sobre las
neurosis explica que éstas “se hallan en la génesis de numerosas
dolencias físicas que arrancan de un punto de partida moral…”
Como nos señala el autor, esta idea es el germen de lo que Frankl
llamaría después las neurosis noógenas, pues son crisis que
tienen su origen en la dimensión espiritual y una expresión física o
psicológica.
Cuando Frankl, en 1927, escribe un texto en el que esclarecía la
relación entre filosofía y psicoterapia, Oswald Schwarz alabó esta
obra y en el prólogo que él mismo escribió comentó que las
afirmaciones de Frankl “tendrían para la psicoterapia la misma
importancia que la que había tenido para la filosofía la Crítica a la
Razón Pura de Kant.” En aquél primer libro inédito, Frankl
planteaba algo contra lo que luchó toda su vida: la superación de
los reduccionismos. Proponía una visión integral del hombre (su
ontología dimensional), y cambiaba el paradigma de la medicina y
16. Como se había mencionado anteriormente, Allers y Schwarz coinciden
con Frankl en el grupo adleriano de Psicología Individual.
Aquí serán cofundadores de una revista en la que se divulgan las ideas
de la Psicología Individual, así como sus propias aportaciones al campo
de la psicoterapia.
Frankl junto, con sus dos maestros, también inician centros de consulta
para atender a jóvenes afectados por los efectos de la primera guerra
mundial.
El trabajo que realizaron les llevó a acercarse más íntimamente y a
cultivar una profunda amistad. Los unía la inquietud de hacer llegar sus
investigaciones y servicio a la gente más necesitada.
Schwarz estimula a Frankl a escribir sus conclusiones y teorías, pues le
parece muy interesante el acento que hace de la problemática del sentido
de vida de los pacientes, y la necesidad de aclarar la relación entre la
filosofía y la psicoterapia.
Es claro que Schwarz aprecia y valora las ideas de Frankl, quien
también desde una temprana edad se había interesado por cuestiones
filosóficas, y acosaba a familiares y amigos con preguntas, ganándose
así el apodo de “El Pensador.”
(Tuvo intuiciones precoces, si consideramos que a la tierna edad de
dieciséis años disertó acerca del sentido de la vida, exponiendo que no
somos nosotros quienes debemos preguntar por el sentido de la vida,
EL ÉXODO DE LA ESCUELA
ADLERIANA
17. La Segunda Escuela fundamenta y cataliza algunas de las propuestas
realizadas por Allers, Schwarz y Frankl. Sin embargo, los tres científicos
con marcados intereses filosóficos, preocupados por una perspectiva que
abordara las cuestiones humanas, constituyeron un subgrupo,
descontentos con la poca apertura de Adler hacia una visión del hombre
antropológica, integral, abierta a la trascendencia.
Pretendieron corregir y complementar el psicologismo de Adler, desde
dentro de la psicología individual; sin embargo se les impidió llevar a cabo
esta tarea.
Es así como las dos cabezas más importantes de la escuela de Adler
hasta entonces (Allers y Schwarz) se vieron obligados a retirarse de la
Asociación de Psicología del Individuo. Frankl intenta mediar entre Allers,
Schwarz y Adler, pero el resultado es infructuoso. Queda excluido del
círculo adleriano por defender tanto a sus maestros como a sus ideas. Y
así Frankl sale de la inmanencia (un aspecto que se le criticaba a la visión
de la segunda escuela) en busca de la trascendencia.
Después de esto Frankl y pasó por unos años de “aprendizaje y
peregrinaje”, pues perdió por un tiempo el ambiente científico en el cual
pensaba seguir desarrollando sus ideas. Sin embargo siguió leyendo a
Scheler, y no dejó de pensar en el cambio de paradigma (la superación del
psicologismo) que necesitaba ocurrir en el campo de la psicoterapia.
18. Se puede decir, entonces, que el llamado tercer movimiento psicoterapéutico de
Viena queda conformado oficialmente en 1927 cuando Allers, Schwarz y Frankl
salen del grupo de Adler, lo que les permite desarrollar sus propuestas terapéuticas
de manera independiente y con un sólido fundamento de antropología y filosofía.
Dentro de la Tercera Escuela conjuntaron sus esfuerzos aproximadamente durante
siete años (1927-1934). Después Schwarz parte hacia Londres, en donde continúa
practicando la urología y psicología.
Por su parte, Allers también deja Viena y va a Italia a estudiar el doctorado en
Filosofía, para posteriormente residir en Washington, Estados Unidos. Aquí, Allers
se apartó de la práctica psicoterapéutica y dedicó los últimos años de su vida al
estudio y enseñanza de la filosofía.
Por su parte, Frankl tiene una sombría (aunque también esencial) cita con el
destino cuando en 1942 es deportado al primero de los cuatro campos de
concentración por los que transitó en tres años de reclusión. En este tiempo asume
su sufrimiento, se propone ser activo en su situación, y vive la experiencia
“poniendo atención.” Vive en carne propia la intensidad de las situaciones límite y
los valores de experiencia, creación y actitud para hallarle el sentido a cada
momento. Otra de las razones a las que le debe su sobrevivencia fue a la decisión
de reconstruir el manuscrito que contenía los fundamentos de la Logoterapia.
La colaboración entre ellos continuó en forma de cartas hasta las postrimerías de
su vida.
LA “TERCERA ESCUELA” Y LA
LOGOTERAPIA
19. Frankl fue el único miembro de este
grupo en sistematizar sus ideas y
disponerlas para la psicoterapia.
El desarrollo de sus ideas personales
que buscaron luchar contra todos los
reduccionismos anteriores, e incluir la
dimensión específicamente humana de
la espiritualidad, tuvieron un fuerte
impacto y éxito.
Frankl fue una persona quien realmente
vivió su unicidad, hizo realidad su
misión y trascendió. Por esto se puede
decir que la Tercera Escuela cobijó a la
Logoterapia, pero ésta después
subsistió por sí sola.
20. Es así como el Análisis Existencial y la
Logoterapia de Frankl quedan sustentados por
tres aspectos igualmente importantes:
1. La Antropología Filosófica: La práctica
terapéutica de Frankl está marcadamente
influenciada por la filosofía y por una visión de
la persona abierta a la trascendencia y a lo
espiritual.
2. La Filosofía Existencial, incluida en la
teoría y práctica terapéuticas.
3. La Fenomenología: cuyos principios
absorbió de Husserl, pero quizás sobre todo de
Max Scheler. (el giro fenomenológico que
aparece en las terapéuticas orientadas
existencialmente, y que aparece por supuesto
en la Logoterapia, implica adentrarse en la
relación terapéutica para escuchar y aprender
del paciente).
21. FREUD Y ADLER COMO
INFLUENCIAS:
Frankl muestra un lado muy humano y
humilde, reconociendo en todo momento
a quienes le influyeron y ayudaron en el
camino.
Aunque hubo desacuerdos, Frankl
siempre mostró y guardó respeto por
Freud y por Adler, por sus aportaciones,
y por ello reconoce que era “un enano
parado en los hombros de un gigante”.
Su intención no era generar una tercera
escuela, sino corregir y complementar las
anteriores incluyendo la dimensión
espiritual del hombre, la cual permitía
hablar de valores, sentido y conciencia,
entre otras cosas.
22. RECONOCIMIENTO A ALLERS Y
SCHWARZ:
Frankl le dedica su libro “Teoría y
Terapia de las Neurosis” a su maestro
Schwarz, quien aportó mucho sobre el
tema.
Cuando fallece Allers, Frankl
pronuncia un discurso – homenaje en
la Sociedad Austriaca de Médicos
para la Psicoterapia, con el título
“Rudolf Allers como filósofo y
psiquiatra”.
Cuatro años después le dedicó su
libro “Psicoterapia y Existencialismo:
escritos selectos sobre logoterapia”.
23. RELACIÓN EPISTOLAR:
El último capítulo de “Frankl, Allers y Schwarz, encuentro y relación
en el surgimiento del Análisis Existencial y Logoterapia” de F.
Miramontes pone ante nuestros ojos la correspondencia inédita entre
Frankl y Schwarz (en los años 1946-1947) y entre Frankl y Allers (en
el periodo de 1952-1957).
Estas cartas reflejan la comunicación que restablecieron entre ellos
después de que Frankl fuera liberado del campo de concentración y
retornara a Viena, intentando reconectarse con sus amigos y con el
mundo terapéutico.
Estas cartas evidencian su influencia mutua y el cariño y respeto que
había entre ellos: se enviaban el material que estaban desarrollando
para ponerlo a consideración de los otros, para pedirse consejos con
respecto a libros o autores, discutían temas, se pedían favores tanto
personales como profesionales, etc…
Además las cartas nos dan testimonio interesante sobre algunos
detalles de la época. Por ejemplo: las condiciones de vida precarias
en la Viena de la posguerra, la falta de interés que había tanto en
Inglaterra como en Estados Unidos para crear una psicoterapia
orientada hacia la existencia, etc., así como las propias limitaciones y
24. LA FILOSOFÍA:
Es un ingrediente clave para una psicoterapia humana y existencial
Es muy revelador e interesante, cómo un católico expreso (Allers), un
agnóstico (Schwarz) y un judío (Frankl) pudieron colaborar en perfecta
armonía y coincidir en tantas ideas fundamentales.
Lo podemos atribuir a su visión integral del hombre (lo cual incluye su
dimensión espiritual) y a los principios que adoptan de la “filosofía
perenne”, que es el conjunto universal de verdades y valores comunes a
todos los pueblos y culturas.
Reflejo de esto es que en 1995, la Iglesia Católica presenta una
declaración sin antecedentes, estableciendo que la Logoterapia es la
psicoterapia privilegiada en virtud del elevado sentido ético que
manifiesta y el respeto por la persona humana en su integridad.
Por esto no debe de sorprendernos que la Logoterapia sea tan humana,
incluyente, universal y atemporal.
A pesar de que surgió en un momento histórico en el que era “necesaria”,
creo que sus principios y aplicaciones siempre serán vigentes. Nos
atrevemos a llamarla entonces “la psicoterapia perenne.” Los que la
conocemos sabemos que hemos encontrado algo bueno, valioso y
verdadero.
25. LA FILOSOFÍA:
Esto se lo debemos a los esfuerzos que ellos hicieron por incluir la
disciplina filosófica en la perspectiva terapéutica, y no es difícil
comprender por qué:
El estudio del hombre quedaría incompleto sin los fundamentos de
una antropología filosófica que permita contemplar y hacer una
reflexión profunda y coherente sobre su naturaleza. La antropología
filosófica goza de una certeza eminente, (es tan”cierta” y “verdadera”
como lo presumen ser las ciencias) puesto que sus verdades las
podemos experimentar directamente en nosotros mismos y en los
demás. Está a disposición de la vida humana.
El enfoque existencialista considera a la persona humana concreta,
no a un sujeto epistemológico abstracto. Lo considera bajo un aspecto
particular: como un sujeto libre que se crea a sí mismo y se
trasciende. En pocas palabras, lo que éste hombre devenga depende
de su libertad, de sus elecciones.
El existencialismo es un intento de hacer filosofía desde el punto de
vista del actor, en lugar de hacerlo, como ha sido costumbre, desde el
punto de vista del espectador. El espectador podría ser el hombre de
ciencia, quien adopta la impersonal posición de un analista.
26. LA FILOSOFÍA:
Mientras que las teorías psicoterapéuticas anteriores intentaban hacer encajar o
encasillar al individuo dentro de una serie de características medibles y
generalizadas, el enfoque humano y existencial de la Logoterapia pone su énfasis
precisamente en lo que hace único a cada individuo y se enfoca en ayudarlo a
tener el coraje de hacerse cargo de su existencia única, en la que su misión es
llegar a ser él mismo.
Hay cuestiones que sobrepasan las neurosis y son las paradojas, dilemas y crisis
de la existencia humana en sí, las del “hombre de carne y hueso”, como diría
Unamuno, más que los indicadores de “salud” o “enfermedad”.
Detrás de varios “problemas humanos” están la angustia existencial, el temor a la
muerte, la soledad, el estar “condenados” a la libertad con responsabilidad y las
renuncias o pérdidas existenciales que vienen con cada elección, en esta vida
inevitablemente finita.
Ante esto, la actitud del terapeuta es fundamental para hacer de su de terapia un
auténtico acompañamiento existencial, en el que no hay jerarquías, en la que hay
dos sujetos, y en la que el encuentro y la empatía forman parte fundamental del
proceso.
La psicoterapia existencial y humana intenta penetrar la significación de
cuestiones humanas como el amor o la angustia dentro de la experiencia misma,
en lugar de tratarla desde un punto de vista distanciado y objetivo. Con esto, se
27. Uno de los objetivos de la terapia con enfoque existencial es clarificar y aumentar
la comprensión de la existencia a los ojos de la persona misma que la vive, y
ayudarla a reconciliarse con la vida y aceptarla tal y como es, con todas sus
inherentes contradicciones. En lugar de promover una “adecuada” o “correcta”
forma de vivir, proporciona un marco para reflexionar y hacernos preguntas que
amplíen nuestra perspectiva. Así, en lugar de ayudar al paciente a no vivir más
angustia, se trata de ayudarle a descubrir formas de utilizarla en su beneficio,
tomado en cuenta esa parte espiritual, que nos habla de conciencia, de valores y
de sentido.
La Logoterapia está impregnada de una fuerte influencia de la filosofía
existencialista. Esto me lleva a pensar en el “padre del existencialismo”, Soren
Kierkegaard, quien hace filosofía en función de sus problemas personales. Su
filosofía va del brazo de la biografía en el sentido de que la primera brota como
respuesta a los problemas personales en los que se encuentra implicado, y que
son resueltos por elección, en el plano existencial y no en el plano abstracto y
teórico. Es bien sabido que, también en el caso de Frankl, su biografía influyó de
manera esencial en su teoría psicoterapéutica. Muchos nos sentimos implicados e
identificados con la problemática por ellos planteada y encontramos en estos
pensadores pistas muy fecundas para comprender la existencia humana propia y
ajena.
Para el logoterapeuta debería ser obligación volvernos pensadores filosóficos y
existenciales. La misma vida induce a filosofar, entonces hay que vivir filosofando
y filosofar viviendo con toda intensidad. Conocer al hombre es conocerme a mí
mismo, y conocerme es conocer lo humano. Sólo así podremos ser verdaderos
28. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
ARTÍCULOS ELECTRÓNICOS:
Frankl, Allers y Schwarz, encuentro y relación en el surgimiento del
Análisis Existencial y Logoterapia.
Reseña del libro de F. Miramontes
Por Marianna Delgado Falcón-Cooper 24/10/2010
http://logoforo.com/frankl-allers-y-schwarz-encuentro-y-relacion-en-el-
surgimiento-del-analisis-existencial-y-logoterapia/#sthash.2yjOS0Ag.dpuf
http://logoterapia.com.mx/publicaciones/libros/encuentro-relación-frankl-
allers-schwarz
Un pensador inexplicablemente olvidado: Reaparece el Dr. Allers
por Luis Fernando Figari
http://www.rudolfallers.info/figari2.html
30/6/2013 Presentación electrónica por Gerardo Viau. Guatemala.