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Oficina de Acogida a Peregrinos
Archidiócesis de Santiago de Compostela
PRESENTACIÓN

     Te ofrecemos esta sencilla “Guía Espiritual” de la peregrinación a la
Tumba del Apóstol Santiago, siguiendo cualquiera de los “Caminos” que
conducen a ella, para que te sirva de ayuda en tu peregrinar.
        Es verdad que el mismo “Camino” propicia el clima adecuado que
invita a la interiorización, a un itinerario del alma que con frecuencia
facilita el encuentro consigo mismo, con las llamadas de Dios, con los
demás y el descubrir que es posible un cambio de vida, vivir de un modo
más sencillo, más reflexivo, más austero, más generoso...
       Con la finalidad de ayudarte a sacar de ese “viaje interior” el ma-
yor provecho, ponemos en tu mano esta “Guía Espiritual”. En su primera
parte, tienes un elenco de temas para facilitar tu reflexión durante la
peregrinación, y cómo vivir tu llegada a Santiago y tu estancia en la Me-
ta: la Tumba del Apóstol. En la segunda parte, encontrarás las oraciones
de la mañana y de la noche, siguiendo el esquema de la Liturgia de las
Horas.
      Para iniciar ésta tu peregrinación, te sugerimos esta breve oración:




          Oración en el inicio del Camino

       Al comenzar el Camino hacia tu sepulcro me dirijo a ti,
Apóstol Santiago pariente y amigo del Señor Jesús, para pedirte
tu protección y ayuda. Tú escuchaste la llamada de Jesús y le
seguiste, le reconociste como el enviado de Dios, seguiste su Pa-
labra e hiciste de sus enseñanzas el camino de tu vida. Cuando le
oíste decir “seréis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en
Samaria y hasta los confines del orbe”, te adelantaste a todos y
emprendiste el viaje para ser el primero en llegar a aquellos re-


                                    3
motos lugares y dar allí testimonio del hecho más decisivo de la         Te presento a las personas que              Por todos mis olvidos, descui-
historia del género humano. Tu ímpetu apostólico te llevó a ser el   amé, las amistades nuevas, los              dos y silencios, nuevamente te
primero en dar la vida por anunciar a todos que el Señor murió       más cercanos y los más lejanos,             pido perdón.
                                                                     los que me dieron su mano y
por nosotros y resucitó, abriéndonos así la única vía posible para                                                    Hoy te pido la paz y la alegría,
                                                                     aquellos a los que pude ayudar,
que el hombre sea feliz.                                                                                         la fuerza y la prudencia, la claridad
                                                                     con los que compartí el camino, la
                                                                                                                 y la sabiduría.
       Ayúdanos en el Camino que emprendemos, como lo llevas         vida, el trabajo, el dolor y la ale-
                                                                     gría.                                           Quiero vivir cada día con opti-
haciendo desde hace más de mil años a millones de peregrinos
                                                                                                                 mismo y con bondad llevando a
como nosotros, muéstranos a Jesús y haznos comprender el men-            Pero también hoy quiero pedir-
                                                                                                                 todas partes un corazón lleno de
saje de felicidad que de él has recibido. Protégenos de todo peli-   te perdón: perdón por el tiempo
                                                                                                                 comprensión y paz.
gro y haz que lleguemos a postrarnos ante tus restos, hagamos        perdido, por el dinero malgastado,
                                                                     por la palabra inútil y el amor des-             Cierra tú mis oídos a toda fal-
con sinceridad la profesión de nuestra fe y nos fundamos contigo                                                 sedad y mis labios a palabras men-
                                                                     perdiciado.
en un cariñoso abrazo. Ayúdanos, patrono querido, a que el fin                                                   tirosas, egoístas, mordaces o
                                                                         Perdón por las obras vacías y
del Camino sea para nosotros el comienzo de una nueva Vida.                                                      hirientes
                                                                     por el trabajo mal hecho, y perdón
     Amén.                                                           por vivir sin entusiasmo.                       Abre en cambio mi ser a todo
                                                                                                                 lo que es bueno. Que mi espíritu
                                                                         También por la oración que po-
                                                                                                                 se llene no sólo de bendiciones y
                                                                     co a poco fui aplazando y que aho-
                                                                                                                 las derrame a mi paso. (Extraído
                                                                     ra vengo a presentarte.
                                                                                                                 de: Tomás del Valle-Reyes).




                                                                                                            61
                                   4
Lectura breve                               municar el tesoro que has conse-
                                            guido a los demás.
    “Debemos dar continuas gra-
cias a Dios por vosotros, hermanos
amados por el Señor, porque Dios
                                            Padre nuestro…
os escogió como primicias para
salvaros, consagrándoos con el              Antífona
Espíritu y dándoos fe en la verdad.
                                                Sálvanos, Señor, despiertos,
Por eso os llamó por medio del
                                            protégenos mientras dormimos
Evangelio que predicamos, para
                                            para que velemos con Cristo y
que sea vuestra la gloria de nues-
                                            descansemos en paz. Amén.
tro Señor Jesucristo” (2 Ts 2,13-
14).
                                            Cántico de Simeón: Lc 2, 29-32
Reflexión                                       Ahora, Señor, según tu prome-
                                            sa puedes dejar a tu siervo irse en
     Hemos sido elegidos para go-
                                            paz.
zar de las primicias de la salvación
y trasmitirla a otros. Misteriosa-              Porque mis ojos han visto a tu
mente el hombre desde que es                Salvador, a quien has presentado
hombre, vive empeñado en salvar-            ante todos los pueblos:
se. ¿De qué? De su limitación, de               Luz para alumbrar a las nacio-
los obstáculos que le impiden ser           nes, y gloria de tu pueblo Israel.
feliz de forma completa; de una                    Gloria al Padre, y al Hijo, y
cultura por el mismo creada que le          al Espíritu Santo.
conduce inexorablemente al ego-
                                                Como era en el principio, ahora
ísmo y al desamor; de la muerte
                                            y siempre, por los siglos de los
que llega inapelablemente, impi-
                                            siglos. Amén.
diéndonos alcanzar esa felicidad
que buscamos. Jesús nos ha mos-
trado el amor, como único camino            Oración conclusiva
para ser felices y ha vencido a la
                                                 Señor, Dios, dueño del tiempo
muerte como fin definitivo del
                                            y de la eternidad, tuyo es el hoy y
hombre. Como él ha resucitado,
                                            el mañana, el pasado y el futuro.
nosotros también lo haremos. Tras
la muerte alcanzaremos lo que                    Gracias por la visa y el amor,
hayamos buscado y procurado en              por las flores, el aire y el sol, por
nuestra vida. Tu Camino debe ser            la alegría y el dolor, por cuanto fue
                                            posible y por lo que no pudo ser.
un reconocimiento constante de lo
que Jesús ha hecho por ti, y co-                 Te ofrezco cuanto pasó por mis
                                            manos, el trabajo que pude reali-
                                            zar y todo lo que pude construir.


                                       60                                           5
ORACIÓN DE LA NOCHE

                               La noche es tiempo
             Himno             de salvación.
La noche no interrumpe         La noche fue testigo de Cristo
tu historia con el hombre.     en el sepulcro;
La noche es tiempo             la noche vio la gloria
de salvación.                  de su resurrección.
De noche descendía             La noche es tiempo
tu escala misteriosa           de salvación.
hasta la misma piedra          De noche esperaremos
donde Jacob dormía.            tu vuelta repentina,
La noche es tiempo             y encontrarás a punto
de salvación.                  la luz de nuestra lámpara.
De noche celebrabas            La noche es tiempo
la Pascua con tu pueblo,       de salvación. Amén.
mientras en las tinieblas
volaba el exterminio.                      Salmo 23
La noche es tiempo                     (según Pierre Stutz)
de salvación.
                                   Tú, oh Dios, eres el fundamento
Abrahán contaba tribus
                               de mi esperanza. Tú vives como
de estrellas cada noche;
                               misterio profundo en mí.
de noche prolongabas
la voz de la promesa.              Aunque lleguen días de duda,
La noche es tiempo             de incertidumbre, en que muchas
de salvación.                  cosas parezcan una gran mentira,
                               intentaré ir al fondo con confianza.
De noche, por tres veces,
oyó Samuel su nombre;              Porque mediante esa incerti-
de noche eran los sueños       dumbre me conducirás a la fuente
tu lengua más profunda.        de la vida para que la debilidad y
La noche es tiempo             la impotencia puedan vivir en mí.
de salvación.                      Así ya no me faltará nada, y yo
De noche, en un pesebre,       hallaré nueva seguridad en ti.
nacía tu palabra;
de noche lo anunciaron
el ángel y la estrella.
Lectura breve                               Padre nuestro…
     “Escucha, Israel: El Señor,                                                           GUÍA ESPIRITUAL PARA HACER
nuestro Dios, es solamente uno.             Oración
Amarás al Señor, tu Dios, con todo                                                           EL CAMINO DE SANTIAGO
                                            Alfarero del hombre,
el corazón, con toda el alma, con           mano trabajadora,
todas las fuerzas. Las palabras que         de mañana te busco,                I. En busca de ti mismo
hoy te digo quedarán en tu memo-            hecho de luz concreta,
ria, se las repetirás a tus hijos y                                                  1.- Ponte en camino.
                                            de mañana te encuentro,
hablarás de ellas estando en casa           vigor, Origen, Meta                      2.- En busca de lo esencial.
y yendo de camino, acostado y               de los sonoros ríos de la vida.
levantado” (Dt 6,4-7).                                                               3.- Entra en tu interior en el silencio del Camino
                                            El árbol toma cuerpo,
                                            y el agua melodía;                       4.- Las dificultades del Camino.
Reflexión                                   tus manos son recientes                  5.- Ábrete al OTRO: DIOS
    ¡Qué lejos estamos en nuestra           en la rosa;
                                            se espesa la abundancia                  6.- El encuentro con los otros en el Camino
sociedad de vivir así! Hoy, conta-
giados por la indiferencia generali-        del mundo a mediodía,
zada, se prescinde de Dios, se              y estás de corazón en cada cosa.
organiza la vida sin Dios; y esa            No hay brisa, si no alientas,
enseñanza “Amarás al señor, tu              monte, si no estás dentro,
Dios, con todo el corazón, con toda         ni soledad                         Introducción
el alma, con todas las fuerzas”, ni         en que no te hagas fuerte.
es lo que mueve y sostiene la vida          Todo es presencia y gracia.              ¡Despierta y Camina!
de nuestros contemporáneos, ni se           Vivir es este encuentro:                 Vivimos en una cultura de evasión y alienación. La mujer y el hom-
transmite de padres a hijos, ni se          Tú, por la luz,                    bre están siendo adormecidos por una cultura del consumo en la cual se
hablan como si fuera algo supera-           el hombre, por la muerte.          propicia la evasión de uno mismo, que nos aparta de nuestra verdad, y
do e inútil. ¡Ojalá volvamos sobre          ¡Que se acabe el pecado!           nos hace vivir con nosotros mismos como unos extraños.
nuestros pasos y digamos como               ¡Mira, que es desdecirte
San Agustín “Tarde te amé, … tar-           dejar tanta hermosura                    Para vivir de verdad necesitamos viajar al interior de nosotros
de te amé… me lo impedían las               en tanta guerra!                   mismos. Viajar al interior de tu persona es buscar tu identidad que te
cosas que tú creaste para noso-                                                permitirá decir tu palabra auténtica a la vida.
                                            Que el hombre no te obligue, Se-
tros” ¡ Qué el apego a las cosas y
                                            ñor, a arrepentirte                       ¿De qué nos sirve viajar continuamente, y a los lugares más exóti-
la procura del bienestar material
                                            de haberle dado un día             cos, si nunca hemos viajado hacia nosotros mismos?
no descentre nuestro corazón ni
                                            las llaves de la tierra. Amén.
nuestra vida de Dios!
                                                                               Paso 1: ¡Ponte en Camino!
                                                                                     A eso te has decidido; has dejado por unos días tus ocupaciones
                                                                               habituales; tu trabajo; tu familia; tus relaciones diarias para hacer el
                                                                               Camino de Santiago.




                                       58                                                                           7
“Un día pensé en hacer el Camino de Santiago; y mi encuentro
con Siliana, una amiga, me permitió hacer realidad mi proyecto. No lo
pensé más; todo ello nos permitió darnos cuenta de lo que somos. Nunca                                      SÁBADO
olvidaré la amabilidad y la bondad de las gentes a lo largo del Camino
Portugués. Es un momento para vivir” (Peregrino de Bélgica, 25-III-
2001).                                                                                             Oración de la mañana
        “Yavé dijo a Abram: Sal de tu tierra, y de tu patria, y de la casa
de tu padre, a la tierra que yo te mostraré. De ti haré una nación grande                                                   Ensalzaste tu majestad sobre
y te bendeciré. Engrandeceré tu nombre, que será una bendición. Bende-                     Himno                        los cielos.
ciré a quienes te bendigan y maldeciré a quienes te maldigan. Por ti se                                                     De la boca de los niños de pe-
bendecirán todos los linajes de la tierra. Marchó, pues, Abram, como se      Cristo, alegría del mundo,                 cho has sacado una alabanza co-
lo había dicho Yavé, y con él marchó Lot. Tenía Abram 75 años cuando         resplandor de la gloria del Padre.         ntra tus enemigos, para reprimir al
salió de Jarán. Tomó Abram a Saray, su mujer, y a Lot, hijo de su her-       ¡Bendita la mañana que anuncia             adversario y al rebelde.
mano, con todas sus posesiones, y los esclavos que tenía en Jarán, y         tu esplendor al universo!
                                                                                                                            Cuando contemplo el cielo,
salieron para dirigirse a Canaán. Cuando llegaron, Abram atravesó el país    En el día primero,                         obra de tus dedos, la luna y las
hasta el lugar sagrado de Siquem, hasta la encina de Moré” (Gn 12, 1-6).     tu resurrección alegraba                   estrellas que has creado, ¿qué es
                                                                             el corazón del Padre.                      el hombre, para que te acuerdes
      Pistas de reflexión:
                                                                             En el día primero,                         de él, el ser humano, para darle
     a) ¿Qué te ha llevado a emprender el Camino?                            vio que todas las cosas                    poder?
                                                                             eran buenas
     b)       Reflexiona sobre la “Vocación de Abraham”                      porque participaban de tu gloria.              Lo hiciste poco inferior a los
                                                                                                                        ángeles, lo coronaste de gloria y
          -      ¿Qué te sugiere la experiencia de Abraham?                  La mañana celebra                          dignidad, le diste el mando sobre
                                                                             tu resurrección y se alegra                las obras de tus manos, todo lo
          -   ¿Al emprender el Camino estás abierto a todas las “lla-
                                                                             con claridad de Pascua.                    sometiste bajo sus pies: rebaños
          madas” que escucharás durante tu peregrinación?
                                                                             Se levanta la tierra como                  de ovejas y toros, y hasta las bes-
                                                                             un joven discípulo                         tias del campo las aves del cielo,
Paso 2: En busca de lo esencial.                                             en tu busca, sabiendo que el se-           los peces del mar, y todo cuanto
                                                                             pulcro está vacío.                         surca las sendas del mar.
      El viaje interior de uno mismo es verdaderamente arriesgado, tan
arriesgado que nos da miedo. Es tan arriesgado que solemos más fácil-        En la clara mañana,                             ¡Señor, Dios nuestro, qué ad-
mente viajar hacia fuera, hacia los otros, hacia metas ilusorias, disper-    tu sagrada luz se difunde                  mirable es tu nombre en toda la
sándonos por atajos que no llevan a ninguna parte.                           como una gracia nueva.                     tierra!
                                                                             Que nosotros vivamos
       “El camino no empieza en Roncesvalles ni acaba en Santiago.           como hijos de luz y no pequemos
Aprende algo de sus gentes y disfruta de su entorno pero nunca olvides       contra la claridad de tu presencia.        Antífona
que el camino es tu misma vida”. (Un peregrino, 4-XII-2000).
                                                                                                                              Qué admirable es tu nom-
       “Pues ¿de qué le sirve a uno ganar todo el mundo, si pierde su        Salmo 8                                    bre, Señor, en toda la tierra.
       vida?” (Mc 8, 36).
                                                                                 ¡Señor, Dios nuestro, qué ad-
      Pistas de reflexión:                                                   mirable es tu nombre en toda la
                                                                             tierra!
   a) ¿Te has planteado qué rumbo seguir en el camino de tu vida?


                                     8                                                                             57
Como era en el principio,              el camino, ver amigos en cada           b) Nuestras tareas diarias nos absorben, ¿nos satisface eso en nues-
ahora y siempre, por los siglos de        peregrino, sea cual sea su lengua o            tro interior?
los siglos. Amén.                         ideología) transforme mi forma de           c)    ¿Qué es lo verdaderamente fundamental hoy en tu vida?
                                          ver las cosas y pueda seguir vi-
Oración conclusiva                        viendo “en el Camino” aún en me-
                                          dios de la rutina y el trabajo diario.
                                                                                   Paso 3: Entra en tu interior, en el silencio del Camino.
    Gracias por todos los peregri-
                                              Que este camino de Santiago                Vivimos en medio de ruidos que nos aturden y distraen, enfrasca-
nos con los que comparto este
                                          espacio privilegiado para la bús-        dos en un activismo febril que nos impide o dificulta pararnos a pensar
camino, parte de nuestra vida,
                                          queda y el encuentro para sentirte       entrando dentro de nosotros mismos. Disfruta del silencio, caminando
albergue, alguna que otra palabra
                                          acogido, amado de Dios y trans-          solo en busca de lo que hay en tu interior. Puede ayudarte:
y hasta la comida. Por todas las
personas que nos encontramos,             formado me ayude a relativizar
                                          todas mis diferencias con el resto                “Sin darme cuenta la peregrinación a Santiago de Composte-
que nos acogen, que nos desean
buen camino, por todos los gestos         del mundo, a sentir que todo hom-        la se transformó en un viaje a través de mi mismo. He recorrido lu-
de fraternidad que ha vivido.             bre, de todas las culturas, ha sido      gares luminosos y alegres, obscuros y tristes, he visitado rincones de
                                          llamado a caminar por la misma           mi alma siempre con una oración en mente: Dios me mira, Dios me
    Te pido que lo que estoy              senda, para que juntos constru-
aprendiendo en el camino (com-            yamos tu Reino.
                                                                                   cuida, Dios me ama, Dios me escucha. Bendito sea Dios” (C.E.R. de
partir sin esperar vuelta, dar sin                                                 México, 26-III-2004).
pedir interés, ayudar sin exigir                (Revista Misión     Joven    nº
recompensa, desear lo mejor para          328. Mayo 2004)                                   “Llegó, pues, a una ciudad de Samaría llamada Sicar, cerca del
                                                                                            terreno que Jacob dio a su hijo José. Allí estaba el pozo de Jacob.
                                                                                            Jesús, como se había fatigado del camino, estaba sentado junto
                                                                                            al pozo. Era alrededor del mediodía. Llega una mujer de Samaría
                                                                                            a sacar agua. Jesús le dice: Dame de beber. Pues sus discípulos
                                                                                            se habían ido a la ciudad a comprar comida. La mujer samaritana
                                                                                            le dice a Jesús: ¿Cómo tú, siendo judío, me pides de beber a mí,
                                                                                            que soy una mujer samaritana? (Porque los judíos no se tratan
                                                                                            con los samaritanos.) Jesús le respondió: Si conocieras el don de
                                                                                            Dios, y quién es el que te dice: "Dame de beber", tú le habrías
                                                                                            pedido a él, y él te habría dado agua viva. Le dice la mujer: Se-
                                                                                            ñor, no tienes con qué sacarla, y el pozo es hondo; ¿de dónde,
                                                                                            pues, tienes ese agua viva? ¿Es que tú eres más que nuestro pa-
                                                                                            dre Jacob, que nos dio el pozo, y de él bebieron él y sus hijos y
                                                                                            sus ganados? Jesús le respondió: Todo el que beba de este agua,
                                                                                            volverá a tener sed; pero el que beba del agua que yo le dé, no
                                                                                            tendrá sed jamás, sino que el agua que yo le dé se convertirá en
                                                                                            su interior en fuente de agua que brota para vida eterna. Le dice
                                                                                            la mujer: Señor, dame de esa agua, para que no tenga más sed
                                                                                            y no tenga que venir aquí a sacarla” (Jn 4, 5-15).
                                                                                           Pistas de reflexión:



                                     56                                                                                 9
a) En el silencio de tu caminar escucha tu interior. ¿Qué oyes en él?     Arroja en nuestras manos,                   irreprensibles ante Dios, nuestro
       ¿Qué te hace pensar?                                                   tendidas en tu busca,                       Padre” (1 Ts 3, 12-13).
                                                                              las ascuas encendidas del Espíritu;
    b) Medita el pasaje del diálogo de Jesús con la samaritana, ponte en      y limpia, en lo más hondo
       su lugar y entabla tú un diálogo con Él. ¿Qué te dice? ¿Qué le di-     del corazón del hombre,                     Reflexión
       rías?                                                                  tu imagen empañada por la culpa.
                                                                                                                              La forma de presentarse ante
    c)   Jesús hace descubrir a la samaritana que en ella había sed de fe-                                                Dios, nuestro Padre, es aprender a
         licidad más que de agua. ¿Le abrió Jesús ese camino?                 Salmo 1                                     amar y educarnos para amar. En el
                                                                                                                          atardecer de la vida nos examina-
                                                                                  Dichoso el hombre que no si-
                                                                                                                          rán de amor. Es esta la asignatura
Paso 4: Las dificultades del Camino.                                          gue el consejo de los impíos, ni
                                                                                                                          más difícil que tenemos que
                                                                              entra por la senda de los pecado-
       La vida humana es, sin duda, una peregrinación: hay puntos de                                                      aprender en nuestra existencia,
                                                                              res, ni se sienta en la reunión de
partida y llegada, trayectos y dificultades, motivaciones y purificaciones,                                               porque, si esto hacemos, seremos
                                                                              los necios; sino que su gozo es la
alegría al conseguir cualquier meta. La vida es un camino de peregrinos,                                                  capaces de entrar en la felicidad
                                                                              ley del Señor, meditándola día y
un éxodo…                                                                                                                 más absoluta. Porque Dios es amor
                                                                              noche.
                                                                                                                          y estar con Él es ser feliz.
       “El entusiasmo inicial cuando se estaba repleto de expectativas y          Es como un árbol plantado jun-
fortalecido por el propósito, se vio poco a poco disminuido frente a los      to al río: da fruto a su tiempo y no
obstáculos de los primeros días, hasta el punto de llegar a pensar en no      se marchitan sus hojas; todo lo
                                                                                                                          Padre nuestro…
continuar; y solo la convicción, el compromiso y la fuerza interior que       que hace le sale bien.
transmite el Camino, me impulsaron a seguir, no con resignación, sino             No sucede así con los malva-            Antífona
con la seguridad y energía que convierte en placentero lo que antes pro-      dos, pues son como paja que se
ducía molestia, preocupación y desconcierto” (Extracto de “Huellas”1).                                                        Sálvanos, Señor, despiertos,
                                                                              lleva el viento.                            protégenos mientras dormimos
                                                                                  No prevalecerán en el juicio los        para que velemos con Cristo y
         “Después dijo a sus discípulos:
                                                                              malvados Ni los pecadores en la             descansemos en paz. Amén.
    •    Por eso os digo: No andéis preocupados pensando qué comeréis         asamblea de los justos, porque el
         para poder vivir, ni con qué vestido vais a cubrir vuestro cuerpo.   Señor protege el camino de los              Cántico de Simeón: Lc 2, 29-32
         Porque la vida es más importante que la comida, y el cuerpo más      justos,
         que el vestido.                                                          Pero el camino de los impíos                Ahora, Señor, según tu prome-
                Mirad a los cuervos; que ni siembran, ni siegan, ni tienen    lleva a la perdición.                       sa puedes dejar a tu siervo irse en
         despensas, ni graneros, y Dios los alimenta. ¿No valéis vosotros                                                 paz.
         mucho más que las aves? ¿Y quién de vosotros, por más que se         Lectura breve                                   Porque mis ojos han visto a tu
         preocupe, puede alargar su vida una hora?                                                                        Salvador, a quien has presentado
                  Por tanto, si no podéis hacer ni siquiera las cosas más         “Que el Señor os colme y os             ante todos los pueblos: Luz para
         pequeñas, ¿por qué preocuparos de lo demás? Fijaos cómo cre-         haga rebosar de amor mutuo y de             alumbrar a las naciones, y gloria
         cen los lirios; no se afanan ni hilan, pero os digo que ni Salomón   amor a todos, lo mismo que noso-            de tu pueblo Israel.
         con toda su gloria se vistió como uno de ellos.                      tros os amamos. Y que así os for-               Gloria al Padre, y al Hijo, y al
                                                                              talezca internamente, para que,             Espíritu Santo.
                                                                              cuando Jesús, nuestro Señor,
                                                                              vuelva acompañado de todos sus
         1
             Agudelo Mejía, Santiago: Huellas. Montevideo, 2005.              santos, os presentéis santos e


                                       10                                                                            55
nos ir por la crítica fácil o mordaz,                   Y si así viste Dios la hierba, que hoy está en el campo y
    REFLEXIÓN                                ¡ Cómo cambiaría el ambiente y la                 mañana es echada al horno, ¿cuánto más hará por vosotros,
    ¡Qué consejos más sabios!                convivencia social si tomáramos en                hombres de poca fe?
Acostumbrados como estamos a                 serio los consejos del Apóstol Pa-                       Así que vosotros, no andéis buscando qué comeréis, ni
una incontinencia verbal grande, a           blo!                                              qué beberéis; no estéis ansiosos. Por todo eso se afana la gente
decir palabras que destruyen en                                                                del mundo, pero vuestro Padre ya sabe lo que necesitáis. Buscad
vez de construir, a hablar descalifi-        Padre nuestro…                                    más bien su reino, y Él os dará lo demás. No temáis, pequeño re-
cando más que alabando, a dejar-                                                               baño, porque vuestro Padre ha querido daros el reino.
                            Oración conclusiva                                                         Vended lo que poseéis, y dad limosna. Acumulad aquello
                                                                                               que no pierde valor, tesoros inagotables en el cielo, donde ni el
                    ¿Qué tengo yo, que mi amistad procuras?                                    ladrón se acerca, ni polilla roe.
                    ¿Qué interés se te sigue, Jesús mío,                                               Porque donde está vuestro tesoro, allí está vuestro cora-
                    que a mi puerta, cubierto de rocío,                                        zón.” (Lc 12,22-34).
                    pasas las noches del invierno a oscuras?
                    ¡Oh, cuánto fueron mis entrañas duras,                                    Pistas de reflexión:
                    pues no te abrí!; ¡qué extraño desvarío,
                    si de mi ingratitud el hielo frío                                    a) ¿Estás encontrando dificultades en el caminar de tu peregrina-
                    secó las llagas de tus plantas puras!                                   ción? ¿Cómo las afrontas? ¿Qué te está ayudando a superarlas?
                    Cuantas veces el ángel me decía:                                     b) Piensa en el caminar de tu vida diaria. ¿Qué dificultades encuen-
                    "Alma, asómate ahora a la ventana,                                      tras? ¿Qué te ayuda a superarlas?
                    verás con cuanto amor llamar porfía"!
                                                                                         c)    ¿Qué te dice el texto de Lucas sobre tu propia vida?
                    ¡Y cuántas, hermosura soberana:
                    "Mañana le abriremos", respondía,
                    para lo mismo responder mañana!
                                                                                      PASO 5: Ábrete al OTRO: DIOS.
                                                                                            Se viene diciendo en la cultura occidental secularizada que la pala-
                                                                                      bra “Dios” carece ya de significación real, es una voz sin sentido que no
                                                                                      afecta para nada a la mayoría de los ciudadanos en nuestra sociedad.
                         Oración de la Noche
                                                                                            Pero sigue encontrando eco en el vacío existencial del hombre y la
                                                                                      mujer de hoy el pensamiento de San Agustín: “Señor, nos hiciste para Ti,
                                             ¿Cómo sabremos que eres
                                                                                      y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti”.
               Himno                         un hombre entre los hombres,
                                             si no compartes nuestra mesa humilde?          “En un cruce del Camino me encontré con Dorina, una muchacha
Quédate con nosotros,                        Repártenos tu cuerpo,                    joven austriaca muy religiosa, compartimos malestares y curaciones, y
la tarde está cayendo.                       y el gozo irá alejando
                                                                                      después de caminar juntos en silencio durante un buen rato, prefirió la
¿Cómo te encontraremos                       la oscuridad que pesa sobre el hombre.
                                                                                      soledad del camino para encontrarse con Dios” (Extracto de “Huellas”).
al declinar el día,                          Vimos romper el día
si tu camino no es nuestro camino?           sobre tu hermoso rostro,                    •     “Y, mientras oraba, el aspecto de su rostro cambió, y su vestido
Detente con nosotros;                        y al sol abrirse paso por tu frente.              se volvieron de una blancura resplandeciente. De repente dos va-
la mesa está servida,                        Que el viento de la noche                         rones que hablaban con él, eran Moisés y Elías; que apareciendo
caliente el pan y envejecido el vino.        no apague el fuego vivo
                                                                                               con gloria, hablaban de su muerte, que iba a consumar en Jeru-
                                             que nos dejó tu paso en la mañana.


                                        54                                                                                11
salén. Pedro y los que estaban con él, estaban cargados de sue-
        ño, y espabilándose, vieron su gloria y a aquellos dos varones
        que estaban con él.                                                                                    VIERNES
              Cuando éstos se retiraban, Pedro dice a Jesús: Maestro,
        que bien se está aquí. Haremos tres tiendas: una para ti, otra pa-
        ra Moisés y otra para Elías. No sabía lo que decía.
                                                                                                   Oración de la mañana
              Mientras estaba él hablando, vino una nube que los cubrió;
                                                                                                                        Allí están los tribunales de justicia,
        y se asustaron al entrar ellos en la nube. Y vino una voz de la
                                                                                           Himno                        los tribunales de justicia
        nube, que decía: Este es mi Hijo el escogido, escuchadle. Cuando
                                                                                                                        del palacio de David.
        sonó la voz se encontró Jesús solo. Ellos guardaron silencio y, por   En esta luz del nuevo día
        el momento, no dijeron nada a nadie de lo que habían visto” (Lc       que me concedes, oh Señor,                Desead la paz para Jerusalén:
        9, 28-36).                                                            dame mi parte de alegría                  ¡vivan seguros los que te aman!
                                                                              y haz que consiga ser mejor.              haya paz dentro de tus muros,
       Pistas de reflexión:                                                                                             seguridad en tus palacios.
                                                                               Dichoso yo, si al fin del día
                                                                              un odio menos llevo en mí,                Por amor de mis hermanos
   a) ¿La palabra “Dios” te dice algo, significa algo para ti? Muchos han                                               y de mis amigos,
      prescindido de Dios en su vida, ¿te identificas con esta postura?       si una luz más mis pasos guía
                                                                              y si un error más yo extinguí.            quiero decir: ¡La paz contigo!
   b) ¿Dios se te ha hecho presente en algún momento en este cami-                                                      ¡Por la Casa del Señor
                                                                               Que cada tumbo en el sendero             nuestro Dios, te deseo todo bien!
      no? ¿En qué lo notas? ¿Qué te dice y qué le dices?
                                                                              me vaya haciendo conocer
                                                                              cada pedrusco traicionero
Paso 6: El encuentro con los otros en el Camino.                              que mi ojo ruin no supo ver.              Antífona
        Los seres humanos estamos hechos para vivir en relación, para re-      Que ame a los seres este día,                   El Señor guarde tus entradas
lacionarnos con los demás. Por ello, en una sociedad en la que nuestras       que a todo a trance ame la luz,           y salidas.
relaciones con los demás son en su inmensa mayoría “funcionales” y            que ame mi gozo y mi agonía,
“utilitarias”, no es de extrañar que un modo nuevo de encontrarse y rela-     que ame el amor y ame la cruz.            Lectura breve
cionarse con los otros en el Camino deje tan profunda huella en los pere-
grinos.                                                                                  Salmo 121                          “Malas palabras no salgan de
                                                                                                                        vuestra boca; lo que digáis sea
       “Con frecuencia, en las noches, después de la cena, se forman ter-     ¡Qué alegría cuando me dijeron:           bueno, constructivo y oportuno,
tulias en donde se cuentan las incidencias del día, se comparten recuer-      Vamos a la Casa del Señor!                así hará bien a los que lo oyen. No
dos, se relatan anécdotas y se manifiestan las intenciones que motivaron      Ya están pisando nuestros pies            pongáis triste al Espíritu Santo de
a realizar el Camino” (Extracto de “Huellas”).                                tus umbrales, Jerusalén.                  Dios con que Él os ha marcado
   •    “Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria acompañado de           Jerusalén, está construida                para el día de la liberación final.
        todos sus ángeles, entonces se sentará en su trono de gloria. Se-     como ciudad bien compacta,                Desterrad de vosotros la amargu-
        rán congregadas delante de él todas las naciones, y él separará a     allá suben las tribus,                    ra, la ira, los enfados e insultos y
        los unos de los otros, como el pastor separa las ovejas de los ca-    las tribus del Señor.                     toda la maldad. Sed buenos, com-
        britos. Pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su iz-       Según la costumbre de Israel,             prensivos, perdonándoos unos a
        quierda.                                                              a dar gracias al nombre del Señor.        otros como Dios os perdonó en
                                                                                                                        Cristo” (Ef 4,29-32).


                                    12                                                                             53
Reflexión                                                                                      Entonces dirá el Rey a los de su derecha: "Venid, benditos
                                           Cántico de Simeón: Lc 2, 29-32               de mi Padre, recibid la herencia del Reino preparado para voso-
     Como le pasaba a San Pablo,                                                        tros desde la creación del mundo. Porque tuve hambre, y me dis-
nosotros vivimos en medio de un                Ahora, Señor, según tu prome-            teis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; era forastero, y
mundo que no se caracteriza por la         sa puedes dejar a tu siervo irse en          me acogisteis; estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me
capacidad de pensar y la lucidez de        paz.                                         visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a verme.”
juicio. Más bien se vive superfi-              Porque mis ojos han visto a tu                 Entonces los justos le responderán: "Señor, ¿cuándo te vi-
cialmente de frases publicitarias y        Salvador, a quien has presentado             mos hambriento, y te dimos de comer; o sediento, y te dimos de
afirmaciones en el aire. Como ex-          ante todos los pueblos: Luz para             beber? ¿Cuándo te vimos forastero, y te acogimos; o desnudo, y
hortaba a los romanos a compren-           alumbrar a las naciones, y gloria            te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel, y fuimos a
der las debilidades de los influen-        de tu pueblo Israel.                         verte?"
ciados por una cultura pagana, así
                                               Gloria al Padre, y al Hijo, y al                Y el Rey les dirá: "En verdad os digo que cuanto hicisteis a
nos exhorta también a nosotros a
                                           Espíritu Santo.                              unos de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicis-
cargar sobre nuestros hombros las
debilidades de los hermanos, bus-              Como era en el principio, ahora          teis.”
cando ayudarles a que las superen.         y siempre, por los siglos de los
                                                                                              Entonces dirá también a los de su izquierda: "Apartaos de
                                           siglos. Amén.
                                                                                        mí, malditos, id al fuego eterno preparado para el Diablo y sus
Padre nuestro…                                                                          ángeles. Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve
                                           Oración conclusiva                           sed, y no me disteis de beber; era forastero, y no me acogisteis;
                                                                                        estaba desnudo, y no me vestisteis; enfermo y en la cárcel, y no
Antífona                                   Nada te turbe,                               me visitasteis."
                                           nada te espante,
    Sálvanos, Señor, despiertos,           todo se pasa,                                       Entonces dirán también éstos: "Señor, ¿cuándo te vimos
protégenos mientras dormimos               Dios no se muda;                             hambriento o sediento o forastero o desnudo o enfermo o en la
para que velemos con Cristo y              la paciencia                                 cárcel, y no te asistimos?"
descansemos en paz. Amén.                  todo lo alcanza;                                   Y él entonces les responderá: "En verdad os digo que cuan-
                                           quien a Dios tiene                           to dejasteis de hacer con uno de estos más pequeños, también
                                           nada le falta:                               conmigo dejasteis de hacerlo."
                                           sólo Dios basta.
                                                                                              E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna”
                                           Gloria a Dios Padre,
                                                                                        (Mt 25, 31-46).
                                           gloria a Dios Hijo,
                                           igual siempre                               Pistas de reflexión:
                                           gloria al Espíritu. Amén
                                                                                  a) ¿Qué has notado al encontrarte con los otros peregrinos?
                                                                                  b) Este modo de relacionarse con los otros en el camino ¿es posible
                                                                                     vivirlo en tus ambientes de vida normales?
                                                                                  c)    ¿Estás abierto a la amistad? ¿Ofreces tu amistad y aceptas la que
                                                                                        te ofrecen?
                                                                                  d) ¿En qué te hace pensar la parábola del juicio final señalada arri-
                                                                                     ba?


                                      52                                                                            13
dímelo ahora que alzo hacia ti mi           tejido en el vientre de mi madre;
corazón, tú que andas sobre la              te doy gracias porque eres subli-
nieve.                                      me, tus obras son asombrosas.
   Dímelo ahora que tiembla todo                 Tú conoces lo profundo de mi
mi ser en libertad, ahora que brota         ser, nada mío te era desconocido
mi vida y te llamo como nunca.              cuando yo era formado en lo ocul-
Sostenme entre tus manos; sos-              to, y tejiendo en las honduras de
tenme en mi tristeza, tú que andas          la tierra.
sobre la nieve.                                 Tus ojos veían cómo surgía yo,
                                            en tu libro estaba ya inscrito todo;
           Salmo 139                        mis días estaban ya plasmados
                                            antes de que existiera ninguno de
   Señor, tú me sondeas y me                ellos.
conoces; sabes cuando me siento
o me levanto, de lejos penetras                 ¡Oh Dios, qué profundos son
mis pensamientos; distingues mi             tus designios, qué incalculable su
camino y mi descanso, todas mis             conjunto!
sendas te son familiares.                       Si los cuento son más que la
    No ha llegado la palabra a mi           arena, y aunque termine, aún me
lengua, y ya, Señor, te la sabes            quedas tú.
toda. Me envuelves detrás y delan-              Gloria al Padre y al Hijo y al
te, y tus manos me protegen.                Espíritu Santo
   Es un misterio de saber que
me sobrepasa, es sublime, y no lo           Lectura Breve
abarco.
                                                    “Nosotros, los que tenemos
    ¿Adónde iré lejos de tu espíri-         una fe bien formada, debemos
tu, adónde escaparé de tu mirada?           cargar con los achaques de los
Si subo hasta los cielos, allí estás        endebles y no buscar lo que nos
tú; si me acuesto en el abismo, allí        agrada. Procuremos cada uno dar
te encuentro; si vuelo sobre las            satisfacción al prójimo buscando
alas de la aurora, y me instalo en          su bien y su crecimiento en la fe.
el confín del mar, allí me alcanzará        Tampoco Cristo buscó su propia
tu izquierda, y me agarrará tu              satisfacción; al contrario, como
derecha.                                    dice la Escritura: «Las afrentas con
     Aunque diga: "Que la tiniebla          que te afrentaban cayeron sobre
me encubra, y que la luz se haga            mí»” (Rm 15,1-3).
noche en torno a mí”, No es oscura
la tiniebla para ti, pues ante ti la
noche es clara como el día, Pues tú
formaste mis entrañas, me has


                                       51
Antífona                                    ras y nos da consejos llenos de
                                            sabiduría: “Amad a vuestros ene-
      Aclamad    a   Dios,   nuestra        migos y orad por los que os persi-                               IIª: EN BUSCA DE LA FE
fuerza.                                     guen”… “perdonad y seréis perdo-
                                            nados”.                                      1.   En busca de la fe perdida o desencantada
Lectura breve
                                                                                         2.   El despertar de una fe adormecida y olvidada
    “No hagas a otro lo que a ti no
                                            Padre nuestro…
te agrada. Da tu pan al hambriento                                                       3.   Tu encuentro con Jesucristo en el Camino
y tu ropa al desnudo. Pide consejo          Oración                                      4.   El seguimiento de Cristo
al sensato y no desprecies un con-
                                                   Ando por mi camino, pasajero,         5.   Al encuentro de los hermanos en el Camino y en la Comunidad
sejo útil. Bendice al Señor Dios en         y a veces creo que voy sin compañía,
todo momento, y pídele que allane           hasta que siento el paso que me guía,        6.   Meta a la vista: el Sepulcro del Apóstol emana su herencia: Jesús
tus caminos y que te dé éxito en            al compás de mi andar, de otro viajero.           inicia la construcción del Reino con el que hemos de comprometer-
tus empresas y proyectos” (Tb               No lo veo, pero está. Si voy ligero,              nos.
4,15-16.18-19).                             Él apresura el paso; se diría
                                            que quiere ir a mi lado todo el día,
Reflexión                                   invisible y seguro el compañero.
                                            Al llegar a terreno solitario,               Introducción
     Nuestros caminos en la vida a          Él me presta valor para que siga,
menudo son errados, seguimos                y, si descanso, junto a mí se reposa.              A pesar del descreimiento, de la indiferencia religiosa generalizada,
atajos que no llevan a ningún lado,         Y, cuando hay que subir monte                del alejamiento de la Iglesia, del abandono de las prácticas religiosas…
nos cegamos con el orgullo, la              (Calvario lo llama él),                      son muchos los que se acercan al Camino de Santiago en busca de la fe o
codicia, la lujuria, la envidia y el        siento en su mano amiga,                     al menos abiertos a ella. Y es que ninguna sociedad, ni siquiera la nues-
egoísmo nos cierra a los demás, a           que me ayuda, una llaga dolorosa.            tra tan secularizada, puede prescindir absolutamente del Misterio. O co-
vivir en el camino del amor. Jesús          Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu,   mo dice Erich-Fritz Schumacher, que pasó del ateismo al budismo, y de
es la luz que cura nuestras cegue-          por los siglos de los siglos. Amén.          este al catolicismo, en su obra póstuma “Guía para los perplejos” (Deba-
                                                                                         te, Madrid 1981) “El moderno experimento de vivir sin religión ha fraca-
                                                                                         sado”.
                      Oración de la noche
                                                                                               Ojalá al llegar a la Meta del Camino, ante la Tumba del Apóstol
                                                Dime quién eres tú que andas             Santiago, puedas sentir en el corazón que el Cristianismo es una fe que
             Himno                          sobre la nieve; tú que, al tocar las         merece la pena vivir.
                                            estrellas, las haces palidecer de
    Ahora que la noche es tan pu-           hermosura; tú que mueves el                  En busca de la fe perdida o desencantada
ra, y que no hay nadie más que tú,          mundo tan suavemente, que pare-
dime quién eres.                                                                               Es verdad que en nuestras sociedades occidentales la increencia
                                            ce que se me va a derramar el
     Dime quién eres y por qué me                                                        está muy extendida, es patente la indiferencia “resabiada”que muchos
                                            corazón.
visitas, por qué bajas a mí que                                                          tienen contra el cristianismo, y, para colmo, la opulencia material, que
                                                Dime quién eres; ilumina quién           parece satisfacer por sí misma todas las necesidades… son dificultades
estoy tan necesitado y por qué te           eres; dime quién soy también, y
separas sin decirme tu nombre.                                                           grandes que obstaculizan no poco el permanecer en la fe.
                                            por qué la tristeza de ser hombre;


                                       50                                                                                    15
Sin embargo, el cansancio de la vida, el hastío de una sociedad
centrada en lo material, que no da razones para vivir, hace aflorar en no
pocos la nostalgia y añoranza de la fe perdida.                                                                JUEVES
       “Señor: Te doy las gracias y te pido perdón porque después de cin-
co años de sufrimientos en la enfermedad perdí la fe. Pero en este año
2000, me empujaste a dejar mi casa para iniciar el camino de Santiago.
                                                                                                     Oración de la mañana
A lo largo de estos tres meses de caminata desde Suiza, sentí tu presen-
cia, tu fidelidad y tu amor. Me abriste los ojos y el corazón sobre el cami-                                                nuestra fiesta: Porque es una ley
no que tengo que seguir y aprendí a dejarme guiar por ti. Me hiciste                         Himno                          de Israel, un precepto del Dios de
comprender que una vez llegado a Santiago, el Camino empieza y segui-                                                       Jacob, una norma establecida para
rás acompañándome; eso llena mi corazón de alegría y te lo agradeceré           Buenos días, Señor, a ti el primero         José al salir de la tierra de Egipto.
siempre a lo largo de mi vida. Que bendigas a cada persona, a cada pe-          encuentra la mirada                             Oigo un lenguaje desconocido:
regrino que me ayudó a cumplir esta peregrinación porque es también             del corazón, apenas nace el día:            Retiré sus hombros de la carga, y
gracias a ellos que voy a volver sano y salvo entre los míos” (Peregrino        Tú eres la luz y                            sus manos dejaron la espuerta.
de Suiza, 29-IX-2000).                                                          el sol de mi jornada.                           Clamaste en la aflicción, y te
                                                                                Buenos días, Señor, contigo quiero          libré, te respondí oculto entre los
    •   También les dijo: «Un hombre tenía dos hijos; y el menor de                                                         truenos, te puse a prueba junto a
                                                                                andar por la vereda:
        ellos dijo al padre: "Padre, dame la parte de la herencia que me                                                    la fuente de Meribá.
                                                                                Tú, mi camino, mi verdad, mi vida;
        corresponde." Y él les repartió el patrimonio. Pocos días después
                                                                                Tú, la esperanza firme                          Escucha, pueblo mío, doy tes-
        el hijo menor lo reunió todo y se marchó a un país lejano donde
                                                                                que me queda.                               timonio contra ti; ¡ojalá me escu-
        malgastó su fortuna viviendo como un libertino. Cuando hubo
                                                                                Buenos días, Señor, a ti te busco,          chases, Israel!
        gastado todo, sobrevino un hambre extrema en aquel país, y co-
        menzó a pasar necesidad. Entonces, fue a servir a cada de un            levanto a ti las manos                          No tendrás un dios extraño, no
        hombre de aquel país, que le envió a sus fincas a apacentar             y el corazón,                               adorarás un dios extranjero; yo
        puercos. Y deseaba llenar su vientre con las algarrobas que co-         al despertar la aurora:                     soy el Señor, Dios tuyo, que te
                                                                                quiero encontrarte siempre en mis           saqué del país de Egipto; abre la
        mían los puercos, pero nadie se las daba. Y entonces recapacitó y
                                                                                hermanos.                                   boca y te saciaré.
        se dijo: "¡Cuántos jornaleros de mi padre tienen pan en abun-
        dancia, mientras que yo aquí me muero de hambre!                        Buenos días, Señor resucitado,                  Pero mi pueblo no escuchó mi
                                                                                que traes la alegría                        voz, Israel no quiso obedecer: los
              Me levantaré, iré a mi padre y le diré: Padre, he pecado                                                      entregué a su corazón obstinado,
                                                                                al corazón que va por tus caminos
        contra el cielo y contra ti.                                                                                        para que anduviesen según sus
                                                                                ¡vencedor de tu muerte y
                                                                                de la mía!                                  antojos.
              Ya no merezco ser llamado hijo tuyo, trátame como a uno
        de tus jornaleros."                                                                                                     ¡Ojalá me escuchase mi pueblo
                                                                                                                            y caminase Israel por mi camino!:
               Se puso en camino y partió hacia casa de su padre. Estan-                    Salmo 80                        en un momento humillaría a sus
        do él todavía lejos, lo vio su padre y, conmovido, corrió, lo abra-         Aclamad a Dios, nuestra fuer-           enemigos y volvería mi mano co-
        zó y lo besó efusivamente.                                              za; dad vítores al Dios de Jacob!           ntra sus adversarios; los que abo-
                                                                                    Entonad canciones, tocad los            rrecen al Señor te adularían, y su
              El hijo le dijo: "Padre, he pecado contra el cielo y contra ti;                                               suerte quedaría fijada; te alimen-
        ya no merezco ser llamado hijo tuyo."                                   panderos, la dulce cítara y el arpa,
                                                                                tocad la trompeta por la luna nue-          taría con flor de harina, te saciaría
                                                                                va, por la luna llena, el día de            con miel silvestre.



                                     16                                                                                49
Antífona                                                                                          Pero el padre dijo a sus siervos: "Traed aprisa el mejor
                                            Oración conclusiva                              vestido y ponédselo, ponedle también un anillo en su mano y
    Sálvanos, Señor, despiertos,                                                            unas sandalias en los pies. Traed el ternero cebado, matadlo, y
protégenos mientras dormimos                El trabajo, Señor,                              comamos y celebremos una fiesta, porque este hijo mío estaba
para que velemos con Cristo y               de cada día nos sea                             muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado." Y
descansemos en paz. Amén.                   por tu amor santificado,                        comenzaron la fiesta.
                                            convierte su dolor en alegría
                                            de amor, que para dar                                  Su hijo mayor estaba en el campo y, al volver, cuando se
Cántico de Simeón: Lc 2, 29-32                                                              acercó a la casa, oyó la música y las danzas; y llamando a uno de
                                            tú nos has dado.
    Ahora, Señor, según tu prome-                                                           los criados, le preguntó qué era aquello.
                                            Paciente y larga
sa puedes dejar a tu siervo irse en                                                               Él le dijo: "Ha vuelto tu hermano y tu padre ha matado el
                                            es nuestra tarea
paz.                                                                                        ternero cebado, porque le ha recobrado sano."
                                            en la noche oscura
    Porque mis ojos han visto a tu          del amor que espera;
Salvador, a quien has presentado                                                                   Él se irritó y no quería entrar. Salió su padre, y le suplica-
                                            dulce huésped del alma,
ante todos los pueblos: Luz para                                                            ba.
                                            al que flaquea dale tu luz,
alumbrar a las naciones, y gloria           tu fuerza que aligera.                                 Pero él replicó a su padre: "Hace tantos años que te sirvo,
de tu pueblo Israel.                                                                        y jamás dejé de cumplir una orden tuya, pero nunca me has da-
                                            En el alto gozoso del camino,
    Gloria al Padre, y al Hijo, y al        demos gracias a Dios,                           do un cabrito para tener una fiesta con mis amigos; y ¡ahora que
Espíritu Santo.                             que nos concede                                 ha venido ese hijo tuyo, que ha devorado tu patrimonio con pros-
    Como era en el principio, ahora         la esperanza sin fin del don divino;            titutas, has matado para él el ternero cebado!"
y siempre, por los siglos de los            todo lo puede en Él                                   «Pero él le dijo: "Hijo, tú siempre estás conmigo, y todo lo
siglos. Amén.                               quien nada puede. Amén.                         mío es tuyo; pero convenía celebrar una fiesta y alegrarse, por-
                                                                                            que este hermano tuyo estaba muerto, y ha vuelto a la vida; es-
                                                                                            taba perdido, y ha sido hallado” (Lc 15, 11-32).

                                                                                           Pistas de reflexión:
                                                                                      a) Entra en tu vida, piensa sobre tu vivencia de fe. ¿En qué estado
                                                                                         se encuentra? ¿Ha habido altibajos?
                                                                                      b) Partiendo del testimonio del peregrino, ¿te identificas en algún
                                                                                         aspecto con él desde tu experiencia de la fe?
                                                                                      c)    Lee con atención la parábola y piensa en lo que te sugiere.

                                                                                   El despertar de una fe adormecida y olvidada
                                                                                          Muchos que se dicen creyentes, manifiestan no ser practicantes, no
                                                                                   participar en la Eucaristía dominical y demás celebraciones de la fe. En
                                                                                   suma, van por libre y la fe en su vida ha quedado entre paréntesis, la fe
                                                                                   ha pasado a ser cuestión secundaria.



                                       48                                                                                17
Sin embargo, más allá de su vivir superficial, los acontecimientos y
duros trances de la vida los llevan a entrar en su interior y darse cuenta
que en ellos no se apagó la sed de Dios y su vida languidece lejos de sus                            Oración de la Noche
fuentes.
      “Aquí me he despertado. La vida arde dentro de mí, el amor está                                                       ¿Qué es el ser humano para
en todas partes y yo lo vivo. Gracias a la vida” (Peregrino anónimo, 20-                    Himno                        que TÚ te ocupes de él, el hijo del
XI-2004).                                                                                                                hombre para que Tú te fijes en él?
                                                                              Como una ofrenda de la tarde,
         “Aquel mismo día, al atardecer, les dijo:                            elevamos nuestra oración;                      Misterio de mi humanación,
                                                                              con el alzar de nuestras manos,            vengo siguiendo el rastro de una
                - Pasemos a la otra orilla.
                                                                              levantamos el corazón.                     respuesta.
               Dejaron a la gente y lo llevaron en la barca, tal como esta-   Al declinar la luz del día,
         ba; otras barcas lo acompañaban.                                     que recibimos como don,                    Lectura breve
               En esto, se levantó una fuerte borrasca y las olas irrumpían   con las alas de la plegaria,
                                                                              levantamos el corazón.                            “Sed sobrios, estad alerta,
         en la barca, de suerte que ya se anegaba la barca.
                                                                                                                         que vuestro enemigo, el diablo,
                                                                              Haz que la senda de la vida
              Jesús estaba en popa, durmiendo sobre un cabezal. Lo                                                       como león rugiente, ronda buscan-
                                                                              la recorramos con amor
         despertaron y le dijeron:                                                                                       do a quien devorar; resistidle fir-
                                                                              y, a cada paso del camino,
                                                                                                                         mes en la fe” (1 P 5, 8-9).
               - Maestro, ¿no te importa que perezcamos?                      levantemos el corazón.
                                                                              Cuando sembramos de esperanza,
               El, habiéndose despertado, increpó al viento y dijo al lago:                                              Reflexión
                                                                              cuando regamos con dolor,
               - ¡Calla, enmudece! El viento se calmó y sobrevino una         con las gavillas en las manos,                  El apóstol San Pedro nos ex-
         gran calma.                                                          levantemos el corazón.                     horta a tener cuidado porque por
               Y a ellos les dijo: ¿Por qué tenéis tanto miedo? ¿Cómo no      Gloria a Dios Padre, que nos hizo,         todas partes el desamor institucio-
         tenéis fe?                                                           gloria a Dios Hijo Salvador,               nalizado nos acecha para tragarnos
                                                                              gloria al Espíritu divino:                 en sus propósitos diabólicos de
        Ellos se llenaron de gran temor y se decían unos a otros:             tres Personas y un solo Dios.              impedir el único camino para felici-
                                                                              Amén.                                      dad que tiene el hombre. Nuestra
               - ¿Quién es éste que hasta el viento y el lago le obedecen?”
                                                                                                                         felicidad vendrá de nuestra incor-
         (Mc 4, 35-41).
                                                                                         Salmo 144                       poración al Reino de Dios, un Re-
                                                                                                                         ino cuya ley es el amor y cuya
        Pistas de reflexión:
                                                                                       (Según Pierre Stutz)              esperanza es la Vida que nunca se
   a) ¿Hasta qué punto está influyendo la fe en tu vida? Si influye, ¿se                                                 acaba. Que no nos devore el am-
                                                                                  Lleno de confianza y gratitud
      manifiesta de modo práctico?                                                                                       biente que nos rodea, resistamos
                                                                              por todo lo que hoy se hizo posible
                                                                                                                         firmes porque la fe es la que nos
   b) Ante las dificultades y problemas de la vida ¿has pensado como          en encuentros y acciones que han
                                                                                                                         hará felices.
      los discípulos? ¿Te has sentido abandonado de Dios? ¿En qué te          favorecido la vida, me asombro
      hace pensar la contestación de Jesús a sus discípulos?                  con este agradecimiento al final
                                                                              del día y balbuceo en voz baja:            Padre nuestro…
   c)    Las situaciones duras de la vida ¿te han acercado o alejado de
         Dios?


                                      18                                                                            47
me eche fuera la mano del malva-             Oración                                 Tu encuentro con Jesucristo en el Camino
do.
                                                 Señor Jesús, hoy quiero darte             Constantemente los noticiarios de los medios de comunicación
     Han fracasado los malhecho-
                                             gracias, tan sólo, por estar aquí,      (Radio, Prensa, TV) nos martillean con “malas noticias” violencias, aten-
res; derribados, no se pueden le-
                                             en el Camino, por haberme saca-         tados terroristas, epidemias amenazantes, sangría de muertes en las
vantar.
                                             do de mi casa, por poder experi-        carreteras…) que nos perturban y desazonan, nos desalientan y desespe-
                                             mentar en estos días que puedo          ranzan. Quizá nos suceda como aquellos discípulos de Emaus, que volví-
Antífona                                     ser feliz y libre a un mismo tiem-      an desencantados hacia su aldea por lo ocurrido aquellos días en Jerusa-
          Tu luz, Señor, nos hace ver        po; por darme a vivir esta dicha y      lén.
la luz.                                      serenidad de quien sabe que so-
                                                                                           ¿Qué “mejor noticia” para sus vidas, que encontrarse con Cristo en
                                             mos lo que somos ante Dios y no
                                                                                     el Camino, que les devuelve la alegría y la esperanza?
                                             más.
Lectura breve                                                                               “Muy agradecido a Dios por haber podido hacer el Camino de San-
                                                  Y aquí, lejos de mis bienes, le-
    “Llevad a la práctica la palabra         jos de de mi casa, lejos de la segu-    tiago, por el encuentro permanente con Él en la naturaleza, en los her-
y no os limitéis a escucharla, en-           ridad que da el ser alguien entre       manos de Comunidad y en el esfuerzo de cada día por caminar hacia Él.
gañándoos a vosotros mismos. El              los míos, expuesto a la novedad de      Unidos en el Señor” (Peregrino de Chile, 25-IV-2001).
que se concentra en la palabra               cada amanecer, a la sorpresa de                “Aquel mismo día iban dos de ellos a un pueblo llamado Emaús,
perfecta, la de la libertad, y es            conocer cada día nuevos compañe-               que distaba unos once kilómetros de Jerusalén, y conversaban
constante, no para oír y olvidarse,          ros de camino, viviendo de lleno               entre sí sobre todo lo que había pasado. Y sucedió que, mientras
sino para ponerla por obra, éste             cada instante de tu creación, codo             ellos conversaban y discutían, el mismo Jesús se acercó y siguió
será dichoso al practicarla”                 a codo con la hierba del campo,                con ellos; pero sus ojos estaban ofuscados y no eran capaces de
                                             con el agua fría, con la noche a               reconocerlo. Él les dijo:
          (St 1,22.25).
                                             cielo abierto… …quiero ofrecerte
                                             este trocito de libertad, este cami-                  «¿De qué discutís entre vosotros mientras vais andando?»
Reflexión                                    no andado sin prisas ni penurias,              Ellos se pararon con aire entristecido. Uno de ellos llamado Cleo-
                                             la libertad que descubro viviendo              fás le respondió: «¿Eres tú el único residente en Jerusalén que no
    No es suficiente el recto pen-
                                             al día, sintiendo al sol levantar la           sabe las cosas que estos días han pasado en ella?» Él les dijo:
sar. Al recto pensar ha de seguir el
                                             mañana sobre mi rostro con el                  «¿Qué cosas?» Ellos le dijeron: «Lo de Jesús el Nazareno, que
bien obrar. Y el bien obrar se con-
                                             abrigo y la certeza de saberte a mi            fue un profeta poderoso en obras y palabras delante de Dios y de
creta en la práctica del amor. Je-
                                             lado.                                          todo el pueblo;
sús que es la Palabra nos ha deja-
do su mensaje: “amaos unos a                     Con el cuerpo entregado y el                    ¿No sabes que los sumos sacerdotes y magistrados le con-
otros”, pero de poco sirve escu-             espíritu hambriento, con ampollas              denaron a muerte y lo crucificaron?
charla si no la llevamos a la prácti-        en los pies y las manos vacías, la
                                             mochila sin cerrar y durmiendo en                    Nosotros esperábamos que sería él el que iba a liberar a Is-
ca en obras de amor en nuestra
                                             el suelo, Tu cuerpo y Sangre ofre-             rael; pero, con todas estas cosas, llevamos ya tres días desde
vida.
                                             cidos se reciben de una manera                 que esto pasó.
                                             especial.                                            El caso es que algunas mujeres de las nuestras nos han
Padre nuestro…
                                                Cuando regrese a mi hogar no                sobresaltado, porque fueron de madrugada al sepulcro, y no en-
                                             me dejes olvidar que la vida del               contraron su cuerpo. Hablaban incluso de que se les habían apa-
                                             hombre es un Camino hacia Ti.                  recido unos ángeles que decían que está vivo.
                                             Ayúdame a recorrerlo.


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Fueron también algunos de los nuestros al sepulcro y lo
        hallaron tal como las mujeres habían dicho, pero a él no lo vie-
        ron.                                                                                                MIÉRCOLES
              Él les dijo:
              –«¡Oh insensatos y tardos de corazón para creer todo lo                               Oración de la mañana
        que dijeron los profetas!
              ¿No era necesario que el Mesías padeciera eso y entrara así
        en su gloria?»                                                                      Himno                                       Salmo 35
               Y, empezando por Moisés y continuando por todos los pro-       Señor, el día empieza.                              El malvado escucha en su in-
        fetas, les explicó lo que había sobre él en todas las Escrituras.     Como siempre,                                 terior un oráculo del pecado: «No
                                                                              postrados a tus pies,                         tengo miedo a Dios, ni en su pre-
              Al acercarse al pueblo a donde iban, él hizo ademán de se-
                                                                              la luz del día                                sencia». Porque se hace la ilusión
        guir adelante.
                                                                              queremos esperar.                             de que su culpa no será descubier-
               Pero ellos le forzaron diciéndole: «Quédate con nosotros,      Eres la fuerza que tenemos los                ta ni aborrecida.
        porque atardece y el día ya ha declinado.» Y entró a quedarse         débiles, nosotros.                                 Las palabras de su boca son
        con ellos.                                                            Padre nuestro, que en los cielos              maldad y traición, renuncia a ser
              Y sucedió que, cuando se puso a la mesa con ellos, tomó el      estás, haz a los hombres iguales:             sensato y a obrar bien; acostado
        pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo dio.                   que ninguno se avergüence                     medita el crimen, se obstina en el
                                                                              de los demás;                                 mal camino, no rechaza la maldad.
             Entonces se les abrieron los ojos y lo reconocieron, pero él     que todos                                           Señor, tu misericordia llega
        desapareció de su lado.                                               al que gime den consuelo;                     al cielo, tu fidelidad hasta las nu-
                                                                              que todos, al que sufre                       bes; tu justicia, hasta las altas
              Se dijeron uno a otro: «¿No estaba ardiendo nuestro cora-
                                                                              del hambre la tortura, le regalen             cordilleras, tus sentencias son
        zón dentro de nosotros cuando nos hablaba en el camino y nos
                                                                              en rica mesa de manteles blancos              como el océano inmenso.
        explicaba las Escrituras?»
                                                                              con blanco pan y generoso vino;
                                                                                                                                  Tú socorres a hombres y
              En aquel mismo instante se pusieron en camino, se volvie-       que no luchen jamás; que nunca
                                                                                                                            animales; ¡qué inapreciable es tu
        ron a Jerusalén y encontraron reunidos a los Once y a los que es-     emerjan, entre las áureas mieses
                                                                                                                            misericordia, oh Dios!, los huma-
        taban con ellos, que les dijeron: «¡Es verdad! ¡El Señor ha resuci-   de la historia, sangrientas amapo-
                                                                                                                            nos se acogen a la sombra de tus
        tado y se ha aparecido a Simón!»                                      las, las batallas.
                                                                                                                            alas; se nutren de lo sabroso de tu
             Ellos, por su parte, contaron lo que había pasado en el ca-      Luz, Señor, que ilumine las campi-            casa, les das a beber del torrente
        mino y cómo le habían conocido en la fracción del pan” (Lc 24,        ñas y las ciudades; que a los hom-            de tus delicias, porque en ti está la
        13-29).                                                               bres todos, en sus destellos mági-            fuente viva, y tu luz nos hace ver
                                                                              cos, envuelva luz inmortal;                   la luz.
                                                                              Señor, luz de los cielos,
Pistas de reflexión:                                                                                                              Prolonga tu misericordia a
                                                                              fuente de amor y causa de la vida.
                                                                                                                            quien te reconoce, tu justicia, con
    a) ¿En tu vida has tenido momentos de encuentro personales con            Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espí-        los rectos de corazón; que no me
       Dios?                                                                  ritu Santo. Amén.                             pisotee el pie del soberbio, que no



                                    20                                                                                 45
Lectura breve                                                                            b) Los discípulos de Emaús volvían desencantados de Jerusalén por-
                                                  Porque mis ojos han visto a tu
                                                                                            que el Mesías que esperaban había muerto en la Cruz sin respon-
    “Dios nos ha destinado a obte-            Salvador, a quien has presentado
                                                                                            der a sus expectativas. Se encuentran en el camino con alguien
ner la salvación por medio de                 ante todos los pueblos: Luz para
                                                                                            al que no reconocen que les pregunta sobre su preocupación. ¿Te
nuestro Señor Jesucristo; Él murió            alumbrar a las naciones, y gloria
                                                                                            has sentido también tú desencantado de Jesucristo? Al final los
por nosotros, para que, despiertos            de tu pueblo Israel.
                                                                                            discípulos lo reconocen en la fracción del pan y se dan cuenta de
o dormidos, vivamos con Él” (1Ts                     Gloria al Padre, y al Hijo, y          que el amor de Dios estaba presente en la historia de los hom-
5,9-10).                                      al Espíritu Santo.                            bres en Jesús. ¿Has vivido en el camino de tu vida o de la pere-
                                                                                            grinación algo similar?
                                                     Como era en el principio,
Reflexión                                     ahora y siempre, por los siglos de
    Vivir    con    Cristo   significa        los siglos. Amén.                      El seguimiento de Cristo
aprender a amar con el amor de                                                             ¿Qué significa ser cristiano? ¿Cómo vivir y actuar como cristiano?
Dios. Hemos, pues, de ser los                 ORACIÓN CONCLUSIVA
transformadores de un mundo                                                               El seguimiento de Cristo siempre ha sido difícil, pero más hoy
guiado por el individualismo egoís-               Sólo desde el amor la libertad     cuando se nos brindan valores a vivir tan contrapuestos a los valores del
ta en uno que se rija por el amor.            germina, sólo desde la fe va cre-      Evangelio: el éxito, el poder, el triunfar, la riqueza… para ser felices.
Los valores egoístas deben dejar              ciéndole alas.
                                                                                           Cristo nos habla, en cambio, que lo que nos hace felices es vivir en
su sitio a los derivados del amor. Y              Desde el cimiento mismo del        la sencillez, el desprendimiento, el servicio, la generosidad. (Mt. 5, 1-12)
en esta tarea viviremos con Cristo            corazón despierto, desde la fuente
y Cristo con nosotros.                        clara de las verdades últimas.                Viendo la muchedumbre, subió al monte, se sentó, y sus discípulos
                                                                                     se le acercaron.
                                                  Ver al hombre y al mundo con
Padre nuestro…                                la mirada limpia y el corazón cer-           Y tomando la palabra, les enseñaba diciendo:
                                              cano, desde el solar del alma.
                                                                                           “Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Re-
Antífona                                          Tarea y aventura: entregarme       ino de los Cielos.
                                              del todo,   ofrecer lo que llevo,
    Sálvanos, Señor, despiertos,              gozo y misericordia.                          Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la
protégenos mientras dormimos                                                         tierra. Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.
para que velemos con Cristo y                     Aceite derramado para que el
descansemos en paz. Amén.                     carro ruede sin quejas egoístas,              Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque
                                              chirriando   desajustes.  Soñar,       ellos serán saciados.
                                              amar, servir, y esperar que me
Cántico de Simeón: Lc 2, 29-32                llames, tú, Señor, que me miras,              Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán mise-
                                              tú que sabes mi nombre.                ricordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a
    Ahora, Señor, según tu prome-                                                    Dios.
sa puedes dejar a tu siervo irse en               Gloria al Padre y al Hijo y al
paz.                                          Espíritu Santo. Amén.                         Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán
                                                                                     llamados hijos de Dios. Bienaventurados los perseguidos por causa de la
                                                                                     justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
                                                                                          Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan
                                                                                     con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa.



                                         44                                                                              21
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  • 2.
  • 3. PRESENTACIÓN Te ofrecemos esta sencilla “Guía Espiritual” de la peregrinación a la Tumba del Apóstol Santiago, siguiendo cualquiera de los “Caminos” que conducen a ella, para que te sirva de ayuda en tu peregrinar. Es verdad que el mismo “Camino” propicia el clima adecuado que invita a la interiorización, a un itinerario del alma que con frecuencia facilita el encuentro consigo mismo, con las llamadas de Dios, con los demás y el descubrir que es posible un cambio de vida, vivir de un modo más sencillo, más reflexivo, más austero, más generoso... Con la finalidad de ayudarte a sacar de ese “viaje interior” el ma- yor provecho, ponemos en tu mano esta “Guía Espiritual”. En su primera parte, tienes un elenco de temas para facilitar tu reflexión durante la peregrinación, y cómo vivir tu llegada a Santiago y tu estancia en la Me- ta: la Tumba del Apóstol. En la segunda parte, encontrarás las oraciones de la mañana y de la noche, siguiendo el esquema de la Liturgia de las Horas. Para iniciar ésta tu peregrinación, te sugerimos esta breve oración: Oración en el inicio del Camino Al comenzar el Camino hacia tu sepulcro me dirijo a ti, Apóstol Santiago pariente y amigo del Señor Jesús, para pedirte tu protección y ayuda. Tú escuchaste la llamada de Jesús y le seguiste, le reconociste como el enviado de Dios, seguiste su Pa- labra e hiciste de sus enseñanzas el camino de tu vida. Cuando le oíste decir “seréis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta los confines del orbe”, te adelantaste a todos y emprendiste el viaje para ser el primero en llegar a aquellos re- 3
  • 4. motos lugares y dar allí testimonio del hecho más decisivo de la Te presento a las personas que Por todos mis olvidos, descui- historia del género humano. Tu ímpetu apostólico te llevó a ser el amé, las amistades nuevas, los dos y silencios, nuevamente te primero en dar la vida por anunciar a todos que el Señor murió más cercanos y los más lejanos, pido perdón. los que me dieron su mano y por nosotros y resucitó, abriéndonos así la única vía posible para Hoy te pido la paz y la alegría, aquellos a los que pude ayudar, que el hombre sea feliz. la fuerza y la prudencia, la claridad con los que compartí el camino, la y la sabiduría. Ayúdanos en el Camino que emprendemos, como lo llevas vida, el trabajo, el dolor y la ale- gría. Quiero vivir cada día con opti- haciendo desde hace más de mil años a millones de peregrinos mismo y con bondad llevando a como nosotros, muéstranos a Jesús y haznos comprender el men- Pero también hoy quiero pedir- todas partes un corazón lleno de saje de felicidad que de él has recibido. Protégenos de todo peli- te perdón: perdón por el tiempo comprensión y paz. gro y haz que lleguemos a postrarnos ante tus restos, hagamos perdido, por el dinero malgastado, por la palabra inútil y el amor des- Cierra tú mis oídos a toda fal- con sinceridad la profesión de nuestra fe y nos fundamos contigo sedad y mis labios a palabras men- perdiciado. en un cariñoso abrazo. Ayúdanos, patrono querido, a que el fin tirosas, egoístas, mordaces o Perdón por las obras vacías y del Camino sea para nosotros el comienzo de una nueva Vida. hirientes por el trabajo mal hecho, y perdón Amén. por vivir sin entusiasmo. Abre en cambio mi ser a todo lo que es bueno. Que mi espíritu También por la oración que po- se llene no sólo de bendiciones y co a poco fui aplazando y que aho- las derrame a mi paso. (Extraído ra vengo a presentarte. de: Tomás del Valle-Reyes). 61 4
  • 5. Lectura breve municar el tesoro que has conse- guido a los demás. “Debemos dar continuas gra- cias a Dios por vosotros, hermanos amados por el Señor, porque Dios Padre nuestro… os escogió como primicias para salvaros, consagrándoos con el Antífona Espíritu y dándoos fe en la verdad. Sálvanos, Señor, despiertos, Por eso os llamó por medio del protégenos mientras dormimos Evangelio que predicamos, para para que velemos con Cristo y que sea vuestra la gloria de nues- descansemos en paz. Amén. tro Señor Jesucristo” (2 Ts 2,13- 14). Cántico de Simeón: Lc 2, 29-32 Reflexión Ahora, Señor, según tu prome- sa puedes dejar a tu siervo irse en Hemos sido elegidos para go- paz. zar de las primicias de la salvación y trasmitirla a otros. Misteriosa- Porque mis ojos han visto a tu mente el hombre desde que es Salvador, a quien has presentado hombre, vive empeñado en salvar- ante todos los pueblos: se. ¿De qué? De su limitación, de Luz para alumbrar a las nacio- los obstáculos que le impiden ser nes, y gloria de tu pueblo Israel. feliz de forma completa; de una Gloria al Padre, y al Hijo, y cultura por el mismo creada que le al Espíritu Santo. conduce inexorablemente al ego- Como era en el principio, ahora ísmo y al desamor; de la muerte y siempre, por los siglos de los que llega inapelablemente, impi- siglos. Amén. diéndonos alcanzar esa felicidad que buscamos. Jesús nos ha mos- trado el amor, como único camino Oración conclusiva para ser felices y ha vencido a la Señor, Dios, dueño del tiempo muerte como fin definitivo del y de la eternidad, tuyo es el hoy y hombre. Como él ha resucitado, el mañana, el pasado y el futuro. nosotros también lo haremos. Tras la muerte alcanzaremos lo que Gracias por la visa y el amor, hayamos buscado y procurado en por las flores, el aire y el sol, por nuestra vida. Tu Camino debe ser la alegría y el dolor, por cuanto fue posible y por lo que no pudo ser. un reconocimiento constante de lo que Jesús ha hecho por ti, y co- Te ofrezco cuanto pasó por mis manos, el trabajo que pude reali- zar y todo lo que pude construir. 60 5
  • 6. ORACIÓN DE LA NOCHE La noche es tiempo Himno de salvación. La noche no interrumpe La noche fue testigo de Cristo tu historia con el hombre. en el sepulcro; La noche es tiempo la noche vio la gloria de salvación. de su resurrección. De noche descendía La noche es tiempo tu escala misteriosa de salvación. hasta la misma piedra De noche esperaremos donde Jacob dormía. tu vuelta repentina, La noche es tiempo y encontrarás a punto de salvación. la luz de nuestra lámpara. De noche celebrabas La noche es tiempo la Pascua con tu pueblo, de salvación. Amén. mientras en las tinieblas volaba el exterminio. Salmo 23 La noche es tiempo (según Pierre Stutz) de salvación. Tú, oh Dios, eres el fundamento Abrahán contaba tribus de mi esperanza. Tú vives como de estrellas cada noche; misterio profundo en mí. de noche prolongabas la voz de la promesa. Aunque lleguen días de duda, La noche es tiempo de incertidumbre, en que muchas de salvación. cosas parezcan una gran mentira, intentaré ir al fondo con confianza. De noche, por tres veces, oyó Samuel su nombre; Porque mediante esa incerti- de noche eran los sueños dumbre me conducirás a la fuente tu lengua más profunda. de la vida para que la debilidad y La noche es tiempo la impotencia puedan vivir en mí. de salvación. Así ya no me faltará nada, y yo De noche, en un pesebre, hallaré nueva seguridad en ti. nacía tu palabra; de noche lo anunciaron el ángel y la estrella.
  • 7. Lectura breve Padre nuestro… “Escucha, Israel: El Señor, GUÍA ESPIRITUAL PARA HACER nuestro Dios, es solamente uno. Oración Amarás al Señor, tu Dios, con todo EL CAMINO DE SANTIAGO Alfarero del hombre, el corazón, con toda el alma, con mano trabajadora, todas las fuerzas. Las palabras que de mañana te busco, I. En busca de ti mismo hoy te digo quedarán en tu memo- hecho de luz concreta, ria, se las repetirás a tus hijos y 1.- Ponte en camino. de mañana te encuentro, hablarás de ellas estando en casa vigor, Origen, Meta 2.- En busca de lo esencial. y yendo de camino, acostado y de los sonoros ríos de la vida. levantado” (Dt 6,4-7). 3.- Entra en tu interior en el silencio del Camino El árbol toma cuerpo, y el agua melodía; 4.- Las dificultades del Camino. Reflexión tus manos son recientes 5.- Ábrete al OTRO: DIOS ¡Qué lejos estamos en nuestra en la rosa; se espesa la abundancia 6.- El encuentro con los otros en el Camino sociedad de vivir así! Hoy, conta- giados por la indiferencia generali- del mundo a mediodía, zada, se prescinde de Dios, se y estás de corazón en cada cosa. organiza la vida sin Dios; y esa No hay brisa, si no alientas, enseñanza “Amarás al señor, tu monte, si no estás dentro, Dios, con todo el corazón, con toda ni soledad Introducción el alma, con todas las fuerzas”, ni en que no te hagas fuerte. es lo que mueve y sostiene la vida Todo es presencia y gracia. ¡Despierta y Camina! de nuestros contemporáneos, ni se Vivir es este encuentro: Vivimos en una cultura de evasión y alienación. La mujer y el hom- transmite de padres a hijos, ni se Tú, por la luz, bre están siendo adormecidos por una cultura del consumo en la cual se hablan como si fuera algo supera- el hombre, por la muerte. propicia la evasión de uno mismo, que nos aparta de nuestra verdad, y do e inútil. ¡Ojalá volvamos sobre ¡Que se acabe el pecado! nos hace vivir con nosotros mismos como unos extraños. nuestros pasos y digamos como ¡Mira, que es desdecirte San Agustín “Tarde te amé, … tar- dejar tanta hermosura Para vivir de verdad necesitamos viajar al interior de nosotros de te amé… me lo impedían las en tanta guerra! mismos. Viajar al interior de tu persona es buscar tu identidad que te cosas que tú creaste para noso- permitirá decir tu palabra auténtica a la vida. Que el hombre no te obligue, Se- tros” ¡ Qué el apego a las cosas y ñor, a arrepentirte ¿De qué nos sirve viajar continuamente, y a los lugares más exóti- la procura del bienestar material de haberle dado un día cos, si nunca hemos viajado hacia nosotros mismos? no descentre nuestro corazón ni las llaves de la tierra. Amén. nuestra vida de Dios! Paso 1: ¡Ponte en Camino! A eso te has decidido; has dejado por unos días tus ocupaciones habituales; tu trabajo; tu familia; tus relaciones diarias para hacer el Camino de Santiago. 58 7
  • 8. “Un día pensé en hacer el Camino de Santiago; y mi encuentro con Siliana, una amiga, me permitió hacer realidad mi proyecto. No lo pensé más; todo ello nos permitió darnos cuenta de lo que somos. Nunca SÁBADO olvidaré la amabilidad y la bondad de las gentes a lo largo del Camino Portugués. Es un momento para vivir” (Peregrino de Bélgica, 25-III- 2001). Oración de la mañana “Yavé dijo a Abram: Sal de tu tierra, y de tu patria, y de la casa de tu padre, a la tierra que yo te mostraré. De ti haré una nación grande Ensalzaste tu majestad sobre y te bendeciré. Engrandeceré tu nombre, que será una bendición. Bende- Himno los cielos. ciré a quienes te bendigan y maldeciré a quienes te maldigan. Por ti se De la boca de los niños de pe- bendecirán todos los linajes de la tierra. Marchó, pues, Abram, como se Cristo, alegría del mundo, cho has sacado una alabanza co- lo había dicho Yavé, y con él marchó Lot. Tenía Abram 75 años cuando resplandor de la gloria del Padre. ntra tus enemigos, para reprimir al salió de Jarán. Tomó Abram a Saray, su mujer, y a Lot, hijo de su her- ¡Bendita la mañana que anuncia adversario y al rebelde. mano, con todas sus posesiones, y los esclavos que tenía en Jarán, y tu esplendor al universo! Cuando contemplo el cielo, salieron para dirigirse a Canaán. Cuando llegaron, Abram atravesó el país En el día primero, obra de tus dedos, la luna y las hasta el lugar sagrado de Siquem, hasta la encina de Moré” (Gn 12, 1-6). tu resurrección alegraba estrellas que has creado, ¿qué es el corazón del Padre. el hombre, para que te acuerdes Pistas de reflexión: En el día primero, de él, el ser humano, para darle a) ¿Qué te ha llevado a emprender el Camino? vio que todas las cosas poder? eran buenas b) Reflexiona sobre la “Vocación de Abraham” porque participaban de tu gloria. Lo hiciste poco inferior a los ángeles, lo coronaste de gloria y - ¿Qué te sugiere la experiencia de Abraham? La mañana celebra dignidad, le diste el mando sobre tu resurrección y se alegra las obras de tus manos, todo lo - ¿Al emprender el Camino estás abierto a todas las “lla- con claridad de Pascua. sometiste bajo sus pies: rebaños madas” que escucharás durante tu peregrinación? Se levanta la tierra como de ovejas y toros, y hasta las bes- un joven discípulo tias del campo las aves del cielo, Paso 2: En busca de lo esencial. en tu busca, sabiendo que el se- los peces del mar, y todo cuanto pulcro está vacío. surca las sendas del mar. El viaje interior de uno mismo es verdaderamente arriesgado, tan arriesgado que nos da miedo. Es tan arriesgado que solemos más fácil- En la clara mañana, ¡Señor, Dios nuestro, qué ad- mente viajar hacia fuera, hacia los otros, hacia metas ilusorias, disper- tu sagrada luz se difunde mirable es tu nombre en toda la sándonos por atajos que no llevan a ninguna parte. como una gracia nueva. tierra! Que nosotros vivamos “El camino no empieza en Roncesvalles ni acaba en Santiago. como hijos de luz y no pequemos Aprende algo de sus gentes y disfruta de su entorno pero nunca olvides contra la claridad de tu presencia. Antífona que el camino es tu misma vida”. (Un peregrino, 4-XII-2000). Qué admirable es tu nom- “Pues ¿de qué le sirve a uno ganar todo el mundo, si pierde su Salmo 8 bre, Señor, en toda la tierra. vida?” (Mc 8, 36). ¡Señor, Dios nuestro, qué ad- Pistas de reflexión: mirable es tu nombre en toda la tierra! a) ¿Te has planteado qué rumbo seguir en el camino de tu vida? 8 57
  • 9. Como era en el principio, el camino, ver amigos en cada b) Nuestras tareas diarias nos absorben, ¿nos satisface eso en nues- ahora y siempre, por los siglos de peregrino, sea cual sea su lengua o tro interior? los siglos. Amén. ideología) transforme mi forma de c) ¿Qué es lo verdaderamente fundamental hoy en tu vida? ver las cosas y pueda seguir vi- Oración conclusiva viendo “en el Camino” aún en me- dios de la rutina y el trabajo diario. Paso 3: Entra en tu interior, en el silencio del Camino. Gracias por todos los peregri- Que este camino de Santiago Vivimos en medio de ruidos que nos aturden y distraen, enfrasca- nos con los que comparto este espacio privilegiado para la bús- dos en un activismo febril que nos impide o dificulta pararnos a pensar camino, parte de nuestra vida, queda y el encuentro para sentirte entrando dentro de nosotros mismos. Disfruta del silencio, caminando albergue, alguna que otra palabra acogido, amado de Dios y trans- solo en busca de lo que hay en tu interior. Puede ayudarte: y hasta la comida. Por todas las personas que nos encontramos, formado me ayude a relativizar todas mis diferencias con el resto “Sin darme cuenta la peregrinación a Santiago de Composte- que nos acogen, que nos desean buen camino, por todos los gestos del mundo, a sentir que todo hom- la se transformó en un viaje a través de mi mismo. He recorrido lu- de fraternidad que ha vivido. bre, de todas las culturas, ha sido gares luminosos y alegres, obscuros y tristes, he visitado rincones de llamado a caminar por la misma mi alma siempre con una oración en mente: Dios me mira, Dios me Te pido que lo que estoy senda, para que juntos constru- aprendiendo en el camino (com- yamos tu Reino. cuida, Dios me ama, Dios me escucha. Bendito sea Dios” (C.E.R. de partir sin esperar vuelta, dar sin México, 26-III-2004). pedir interés, ayudar sin exigir (Revista Misión Joven nº recompensa, desear lo mejor para 328. Mayo 2004) “Llegó, pues, a una ciudad de Samaría llamada Sicar, cerca del terreno que Jacob dio a su hijo José. Allí estaba el pozo de Jacob. Jesús, como se había fatigado del camino, estaba sentado junto al pozo. Era alrededor del mediodía. Llega una mujer de Samaría a sacar agua. Jesús le dice: Dame de beber. Pues sus discípulos se habían ido a la ciudad a comprar comida. La mujer samaritana le dice a Jesús: ¿Cómo tú, siendo judío, me pides de beber a mí, que soy una mujer samaritana? (Porque los judíos no se tratan con los samaritanos.) Jesús le respondió: Si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: "Dame de beber", tú le habrías pedido a él, y él te habría dado agua viva. Le dice la mujer: Se- ñor, no tienes con qué sacarla, y el pozo es hondo; ¿de dónde, pues, tienes ese agua viva? ¿Es que tú eres más que nuestro pa- dre Jacob, que nos dio el pozo, y de él bebieron él y sus hijos y sus ganados? Jesús le respondió: Todo el que beba de este agua, volverá a tener sed; pero el que beba del agua que yo le dé, no tendrá sed jamás, sino que el agua que yo le dé se convertirá en su interior en fuente de agua que brota para vida eterna. Le dice la mujer: Señor, dame de esa agua, para que no tenga más sed y no tenga que venir aquí a sacarla” (Jn 4, 5-15). Pistas de reflexión: 56 9
  • 10. a) En el silencio de tu caminar escucha tu interior. ¿Qué oyes en él? Arroja en nuestras manos, irreprensibles ante Dios, nuestro ¿Qué te hace pensar? tendidas en tu busca, Padre” (1 Ts 3, 12-13). las ascuas encendidas del Espíritu; b) Medita el pasaje del diálogo de Jesús con la samaritana, ponte en y limpia, en lo más hondo su lugar y entabla tú un diálogo con Él. ¿Qué te dice? ¿Qué le di- del corazón del hombre, Reflexión rías? tu imagen empañada por la culpa. La forma de presentarse ante c) Jesús hace descubrir a la samaritana que en ella había sed de fe- Dios, nuestro Padre, es aprender a licidad más que de agua. ¿Le abrió Jesús ese camino? Salmo 1 amar y educarnos para amar. En el atardecer de la vida nos examina- Dichoso el hombre que no si- rán de amor. Es esta la asignatura Paso 4: Las dificultades del Camino. gue el consejo de los impíos, ni más difícil que tenemos que entra por la senda de los pecado- La vida humana es, sin duda, una peregrinación: hay puntos de aprender en nuestra existencia, res, ni se sienta en la reunión de partida y llegada, trayectos y dificultades, motivaciones y purificaciones, porque, si esto hacemos, seremos los necios; sino que su gozo es la alegría al conseguir cualquier meta. La vida es un camino de peregrinos, capaces de entrar en la felicidad ley del Señor, meditándola día y un éxodo… más absoluta. Porque Dios es amor noche. y estar con Él es ser feliz. “El entusiasmo inicial cuando se estaba repleto de expectativas y Es como un árbol plantado jun- fortalecido por el propósito, se vio poco a poco disminuido frente a los to al río: da fruto a su tiempo y no obstáculos de los primeros días, hasta el punto de llegar a pensar en no se marchitan sus hojas; todo lo Padre nuestro… continuar; y solo la convicción, el compromiso y la fuerza interior que que hace le sale bien. transmite el Camino, me impulsaron a seguir, no con resignación, sino No sucede así con los malva- Antífona con la seguridad y energía que convierte en placentero lo que antes pro- dos, pues son como paja que se ducía molestia, preocupación y desconcierto” (Extracto de “Huellas”1). Sálvanos, Señor, despiertos, lleva el viento. protégenos mientras dormimos No prevalecerán en el juicio los para que velemos con Cristo y “Después dijo a sus discípulos: malvados Ni los pecadores en la descansemos en paz. Amén. • Por eso os digo: No andéis preocupados pensando qué comeréis asamblea de los justos, porque el para poder vivir, ni con qué vestido vais a cubrir vuestro cuerpo. Señor protege el camino de los Cántico de Simeón: Lc 2, 29-32 Porque la vida es más importante que la comida, y el cuerpo más justos, que el vestido. Pero el camino de los impíos Ahora, Señor, según tu prome- Mirad a los cuervos; que ni siembran, ni siegan, ni tienen lleva a la perdición. sa puedes dejar a tu siervo irse en despensas, ni graneros, y Dios los alimenta. ¿No valéis vosotros paz. mucho más que las aves? ¿Y quién de vosotros, por más que se Lectura breve Porque mis ojos han visto a tu preocupe, puede alargar su vida una hora? Salvador, a quien has presentado Por tanto, si no podéis hacer ni siquiera las cosas más “Que el Señor os colme y os ante todos los pueblos: Luz para pequeñas, ¿por qué preocuparos de lo demás? Fijaos cómo cre- haga rebosar de amor mutuo y de alumbrar a las naciones, y gloria cen los lirios; no se afanan ni hilan, pero os digo que ni Salomón amor a todos, lo mismo que noso- de tu pueblo Israel. con toda su gloria se vistió como uno de ellos. tros os amamos. Y que así os for- Gloria al Padre, y al Hijo, y al talezca internamente, para que, Espíritu Santo. cuando Jesús, nuestro Señor, vuelva acompañado de todos sus 1 Agudelo Mejía, Santiago: Huellas. Montevideo, 2005. santos, os presentéis santos e 10 55
  • 11. nos ir por la crítica fácil o mordaz, Y si así viste Dios la hierba, que hoy está en el campo y REFLEXIÓN ¡ Cómo cambiaría el ambiente y la mañana es echada al horno, ¿cuánto más hará por vosotros, ¡Qué consejos más sabios! convivencia social si tomáramos en hombres de poca fe? Acostumbrados como estamos a serio los consejos del Apóstol Pa- Así que vosotros, no andéis buscando qué comeréis, ni una incontinencia verbal grande, a blo! qué beberéis; no estéis ansiosos. Por todo eso se afana la gente decir palabras que destruyen en del mundo, pero vuestro Padre ya sabe lo que necesitáis. Buscad vez de construir, a hablar descalifi- Padre nuestro… más bien su reino, y Él os dará lo demás. No temáis, pequeño re- cando más que alabando, a dejar- baño, porque vuestro Padre ha querido daros el reino. Oración conclusiva Vended lo que poseéis, y dad limosna. Acumulad aquello que no pierde valor, tesoros inagotables en el cielo, donde ni el ¿Qué tengo yo, que mi amistad procuras? ladrón se acerca, ni polilla roe. ¿Qué interés se te sigue, Jesús mío, Porque donde está vuestro tesoro, allí está vuestro cora- que a mi puerta, cubierto de rocío, zón.” (Lc 12,22-34). pasas las noches del invierno a oscuras? ¡Oh, cuánto fueron mis entrañas duras, Pistas de reflexión: pues no te abrí!; ¡qué extraño desvarío, si de mi ingratitud el hielo frío a) ¿Estás encontrando dificultades en el caminar de tu peregrina- secó las llagas de tus plantas puras! ción? ¿Cómo las afrontas? ¿Qué te está ayudando a superarlas? Cuantas veces el ángel me decía: b) Piensa en el caminar de tu vida diaria. ¿Qué dificultades encuen- "Alma, asómate ahora a la ventana, tras? ¿Qué te ayuda a superarlas? verás con cuanto amor llamar porfía"! c) ¿Qué te dice el texto de Lucas sobre tu propia vida? ¡Y cuántas, hermosura soberana: "Mañana le abriremos", respondía, para lo mismo responder mañana! PASO 5: Ábrete al OTRO: DIOS. Se viene diciendo en la cultura occidental secularizada que la pala- bra “Dios” carece ya de significación real, es una voz sin sentido que no afecta para nada a la mayoría de los ciudadanos en nuestra sociedad. Oración de la Noche Pero sigue encontrando eco en el vacío existencial del hombre y la mujer de hoy el pensamiento de San Agustín: “Señor, nos hiciste para Ti, ¿Cómo sabremos que eres y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti”. Himno un hombre entre los hombres, si no compartes nuestra mesa humilde? “En un cruce del Camino me encontré con Dorina, una muchacha Quédate con nosotros, Repártenos tu cuerpo, joven austriaca muy religiosa, compartimos malestares y curaciones, y la tarde está cayendo. y el gozo irá alejando después de caminar juntos en silencio durante un buen rato, prefirió la ¿Cómo te encontraremos la oscuridad que pesa sobre el hombre. soledad del camino para encontrarse con Dios” (Extracto de “Huellas”). al declinar el día, Vimos romper el día si tu camino no es nuestro camino? sobre tu hermoso rostro, • “Y, mientras oraba, el aspecto de su rostro cambió, y su vestido Detente con nosotros; y al sol abrirse paso por tu frente. se volvieron de una blancura resplandeciente. De repente dos va- la mesa está servida, Que el viento de la noche rones que hablaban con él, eran Moisés y Elías; que apareciendo caliente el pan y envejecido el vino. no apague el fuego vivo con gloria, hablaban de su muerte, que iba a consumar en Jeru- que nos dejó tu paso en la mañana. 54 11
  • 12. salén. Pedro y los que estaban con él, estaban cargados de sue- ño, y espabilándose, vieron su gloria y a aquellos dos varones que estaban con él. VIERNES Cuando éstos se retiraban, Pedro dice a Jesús: Maestro, que bien se está aquí. Haremos tres tiendas: una para ti, otra pa- ra Moisés y otra para Elías. No sabía lo que decía. Oración de la mañana Mientras estaba él hablando, vino una nube que los cubrió; Allí están los tribunales de justicia, y se asustaron al entrar ellos en la nube. Y vino una voz de la Himno los tribunales de justicia nube, que decía: Este es mi Hijo el escogido, escuchadle. Cuando del palacio de David. sonó la voz se encontró Jesús solo. Ellos guardaron silencio y, por En esta luz del nuevo día el momento, no dijeron nada a nadie de lo que habían visto” (Lc que me concedes, oh Señor, Desead la paz para Jerusalén: 9, 28-36). dame mi parte de alegría ¡vivan seguros los que te aman! y haz que consiga ser mejor. haya paz dentro de tus muros, Pistas de reflexión: seguridad en tus palacios. Dichoso yo, si al fin del día un odio menos llevo en mí, Por amor de mis hermanos a) ¿La palabra “Dios” te dice algo, significa algo para ti? Muchos han y de mis amigos, prescindido de Dios en su vida, ¿te identificas con esta postura? si una luz más mis pasos guía y si un error más yo extinguí. quiero decir: ¡La paz contigo! b) ¿Dios se te ha hecho presente en algún momento en este cami- ¡Por la Casa del Señor Que cada tumbo en el sendero nuestro Dios, te deseo todo bien! no? ¿En qué lo notas? ¿Qué te dice y qué le dices? me vaya haciendo conocer cada pedrusco traicionero Paso 6: El encuentro con los otros en el Camino. que mi ojo ruin no supo ver. Antífona Los seres humanos estamos hechos para vivir en relación, para re- Que ame a los seres este día, El Señor guarde tus entradas lacionarnos con los demás. Por ello, en una sociedad en la que nuestras que a todo a trance ame la luz, y salidas. relaciones con los demás son en su inmensa mayoría “funcionales” y que ame mi gozo y mi agonía, “utilitarias”, no es de extrañar que un modo nuevo de encontrarse y rela- que ame el amor y ame la cruz. Lectura breve cionarse con los otros en el Camino deje tan profunda huella en los pere- grinos. Salmo 121 “Malas palabras no salgan de vuestra boca; lo que digáis sea “Con frecuencia, en las noches, después de la cena, se forman ter- ¡Qué alegría cuando me dijeron: bueno, constructivo y oportuno, tulias en donde se cuentan las incidencias del día, se comparten recuer- Vamos a la Casa del Señor! así hará bien a los que lo oyen. No dos, se relatan anécdotas y se manifiestan las intenciones que motivaron Ya están pisando nuestros pies pongáis triste al Espíritu Santo de a realizar el Camino” (Extracto de “Huellas”). tus umbrales, Jerusalén. Dios con que Él os ha marcado • “Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria acompañado de Jerusalén, está construida para el día de la liberación final. todos sus ángeles, entonces se sentará en su trono de gloria. Se- como ciudad bien compacta, Desterrad de vosotros la amargu- rán congregadas delante de él todas las naciones, y él separará a allá suben las tribus, ra, la ira, los enfados e insultos y los unos de los otros, como el pastor separa las ovejas de los ca- las tribus del Señor. toda la maldad. Sed buenos, com- britos. Pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su iz- Según la costumbre de Israel, prensivos, perdonándoos unos a quierda. a dar gracias al nombre del Señor. otros como Dios os perdonó en Cristo” (Ef 4,29-32). 12 53
  • 13. Reflexión Entonces dirá el Rey a los de su derecha: "Venid, benditos Cántico de Simeón: Lc 2, 29-32 de mi Padre, recibid la herencia del Reino preparado para voso- Como le pasaba a San Pablo, tros desde la creación del mundo. Porque tuve hambre, y me dis- nosotros vivimos en medio de un Ahora, Señor, según tu prome- teis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; era forastero, y mundo que no se caracteriza por la sa puedes dejar a tu siervo irse en me acogisteis; estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me capacidad de pensar y la lucidez de paz. visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a verme.” juicio. Más bien se vive superfi- Porque mis ojos han visto a tu Entonces los justos le responderán: "Señor, ¿cuándo te vi- cialmente de frases publicitarias y Salvador, a quien has presentado mos hambriento, y te dimos de comer; o sediento, y te dimos de afirmaciones en el aire. Como ex- ante todos los pueblos: Luz para beber? ¿Cuándo te vimos forastero, y te acogimos; o desnudo, y hortaba a los romanos a compren- alumbrar a las naciones, y gloria te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel, y fuimos a der las debilidades de los influen- de tu pueblo Israel. verte?" ciados por una cultura pagana, así Gloria al Padre, y al Hijo, y al Y el Rey les dirá: "En verdad os digo que cuanto hicisteis a nos exhorta también a nosotros a Espíritu Santo. unos de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicis- cargar sobre nuestros hombros las debilidades de los hermanos, bus- Como era en el principio, ahora teis.” cando ayudarles a que las superen. y siempre, por los siglos de los Entonces dirá también a los de su izquierda: "Apartaos de siglos. Amén. mí, malditos, id al fuego eterno preparado para el Diablo y sus Padre nuestro… ángeles. Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve Oración conclusiva sed, y no me disteis de beber; era forastero, y no me acogisteis; estaba desnudo, y no me vestisteis; enfermo y en la cárcel, y no Antífona Nada te turbe, me visitasteis." nada te espante, Sálvanos, Señor, despiertos, todo se pasa, Entonces dirán también éstos: "Señor, ¿cuándo te vimos protégenos mientras dormimos Dios no se muda; hambriento o sediento o forastero o desnudo o enfermo o en la para que velemos con Cristo y la paciencia cárcel, y no te asistimos?" descansemos en paz. Amén. todo lo alcanza; Y él entonces les responderá: "En verdad os digo que cuan- quien a Dios tiene to dejasteis de hacer con uno de estos más pequeños, también nada le falta: conmigo dejasteis de hacerlo." sólo Dios basta. E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna” Gloria a Dios Padre, (Mt 25, 31-46). gloria a Dios Hijo, igual siempre Pistas de reflexión: gloria al Espíritu. Amén a) ¿Qué has notado al encontrarte con los otros peregrinos? b) Este modo de relacionarse con los otros en el camino ¿es posible vivirlo en tus ambientes de vida normales? c) ¿Estás abierto a la amistad? ¿Ofreces tu amistad y aceptas la que te ofrecen? d) ¿En qué te hace pensar la parábola del juicio final señalada arri- ba? 52 13
  • 14. dímelo ahora que alzo hacia ti mi tejido en el vientre de mi madre; corazón, tú que andas sobre la te doy gracias porque eres subli- nieve. me, tus obras son asombrosas. Dímelo ahora que tiembla todo Tú conoces lo profundo de mi mi ser en libertad, ahora que brota ser, nada mío te era desconocido mi vida y te llamo como nunca. cuando yo era formado en lo ocul- Sostenme entre tus manos; sos- to, y tejiendo en las honduras de tenme en mi tristeza, tú que andas la tierra. sobre la nieve. Tus ojos veían cómo surgía yo, en tu libro estaba ya inscrito todo; Salmo 139 mis días estaban ya plasmados antes de que existiera ninguno de Señor, tú me sondeas y me ellos. conoces; sabes cuando me siento o me levanto, de lejos penetras ¡Oh Dios, qué profundos son mis pensamientos; distingues mi tus designios, qué incalculable su camino y mi descanso, todas mis conjunto! sendas te son familiares. Si los cuento son más que la No ha llegado la palabra a mi arena, y aunque termine, aún me lengua, y ya, Señor, te la sabes quedas tú. toda. Me envuelves detrás y delan- Gloria al Padre y al Hijo y al te, y tus manos me protegen. Espíritu Santo Es un misterio de saber que me sobrepasa, es sublime, y no lo Lectura Breve abarco. “Nosotros, los que tenemos ¿Adónde iré lejos de tu espíri- una fe bien formada, debemos tu, adónde escaparé de tu mirada? cargar con los achaques de los Si subo hasta los cielos, allí estás endebles y no buscar lo que nos tú; si me acuesto en el abismo, allí agrada. Procuremos cada uno dar te encuentro; si vuelo sobre las satisfacción al prójimo buscando alas de la aurora, y me instalo en su bien y su crecimiento en la fe. el confín del mar, allí me alcanzará Tampoco Cristo buscó su propia tu izquierda, y me agarrará tu satisfacción; al contrario, como derecha. dice la Escritura: «Las afrentas con Aunque diga: "Que la tiniebla que te afrentaban cayeron sobre me encubra, y que la luz se haga mí»” (Rm 15,1-3). noche en torno a mí”, No es oscura la tiniebla para ti, pues ante ti la noche es clara como el día, Pues tú formaste mis entrañas, me has 51
  • 15. Antífona ras y nos da consejos llenos de sabiduría: “Amad a vuestros ene- Aclamad a Dios, nuestra migos y orad por los que os persi- IIª: EN BUSCA DE LA FE fuerza. guen”… “perdonad y seréis perdo- nados”. 1. En busca de la fe perdida o desencantada Lectura breve 2. El despertar de una fe adormecida y olvidada “No hagas a otro lo que a ti no Padre nuestro… te agrada. Da tu pan al hambriento 3. Tu encuentro con Jesucristo en el Camino y tu ropa al desnudo. Pide consejo Oración 4. El seguimiento de Cristo al sensato y no desprecies un con- Ando por mi camino, pasajero, 5. Al encuentro de los hermanos en el Camino y en la Comunidad sejo útil. Bendice al Señor Dios en y a veces creo que voy sin compañía, todo momento, y pídele que allane hasta que siento el paso que me guía, 6. Meta a la vista: el Sepulcro del Apóstol emana su herencia: Jesús tus caminos y que te dé éxito en al compás de mi andar, de otro viajero. inicia la construcción del Reino con el que hemos de comprometer- tus empresas y proyectos” (Tb No lo veo, pero está. Si voy ligero, nos. 4,15-16.18-19). Él apresura el paso; se diría que quiere ir a mi lado todo el día, Reflexión invisible y seguro el compañero. Al llegar a terreno solitario, Introducción Nuestros caminos en la vida a Él me presta valor para que siga, menudo son errados, seguimos y, si descanso, junto a mí se reposa. A pesar del descreimiento, de la indiferencia religiosa generalizada, atajos que no llevan a ningún lado, Y, cuando hay que subir monte del alejamiento de la Iglesia, del abandono de las prácticas religiosas… nos cegamos con el orgullo, la (Calvario lo llama él), son muchos los que se acercan al Camino de Santiago en busca de la fe o codicia, la lujuria, la envidia y el siento en su mano amiga, al menos abiertos a ella. Y es que ninguna sociedad, ni siquiera la nues- egoísmo nos cierra a los demás, a que me ayuda, una llaga dolorosa. tra tan secularizada, puede prescindir absolutamente del Misterio. O co- vivir en el camino del amor. Jesús Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu, mo dice Erich-Fritz Schumacher, que pasó del ateismo al budismo, y de es la luz que cura nuestras cegue- por los siglos de los siglos. Amén. este al catolicismo, en su obra póstuma “Guía para los perplejos” (Deba- te, Madrid 1981) “El moderno experimento de vivir sin religión ha fraca- sado”. Oración de la noche Ojalá al llegar a la Meta del Camino, ante la Tumba del Apóstol Dime quién eres tú que andas Santiago, puedas sentir en el corazón que el Cristianismo es una fe que Himno sobre la nieve; tú que, al tocar las merece la pena vivir. estrellas, las haces palidecer de Ahora que la noche es tan pu- hermosura; tú que mueves el En busca de la fe perdida o desencantada ra, y que no hay nadie más que tú, mundo tan suavemente, que pare- dime quién eres. Es verdad que en nuestras sociedades occidentales la increencia ce que se me va a derramar el Dime quién eres y por qué me está muy extendida, es patente la indiferencia “resabiada”que muchos corazón. visitas, por qué bajas a mí que tienen contra el cristianismo, y, para colmo, la opulencia material, que Dime quién eres; ilumina quién parece satisfacer por sí misma todas las necesidades… son dificultades estoy tan necesitado y por qué te eres; dime quién soy también, y separas sin decirme tu nombre. grandes que obstaculizan no poco el permanecer en la fe. por qué la tristeza de ser hombre; 50 15
  • 16. Sin embargo, el cansancio de la vida, el hastío de una sociedad centrada en lo material, que no da razones para vivir, hace aflorar en no pocos la nostalgia y añoranza de la fe perdida. JUEVES “Señor: Te doy las gracias y te pido perdón porque después de cin- co años de sufrimientos en la enfermedad perdí la fe. Pero en este año 2000, me empujaste a dejar mi casa para iniciar el camino de Santiago. Oración de la mañana A lo largo de estos tres meses de caminata desde Suiza, sentí tu presen- cia, tu fidelidad y tu amor. Me abriste los ojos y el corazón sobre el cami- nuestra fiesta: Porque es una ley no que tengo que seguir y aprendí a dejarme guiar por ti. Me hiciste Himno de Israel, un precepto del Dios de comprender que una vez llegado a Santiago, el Camino empieza y segui- Jacob, una norma establecida para rás acompañándome; eso llena mi corazón de alegría y te lo agradeceré Buenos días, Señor, a ti el primero José al salir de la tierra de Egipto. siempre a lo largo de mi vida. Que bendigas a cada persona, a cada pe- encuentra la mirada Oigo un lenguaje desconocido: regrino que me ayudó a cumplir esta peregrinación porque es también del corazón, apenas nace el día: Retiré sus hombros de la carga, y gracias a ellos que voy a volver sano y salvo entre los míos” (Peregrino Tú eres la luz y sus manos dejaron la espuerta. de Suiza, 29-IX-2000). el sol de mi jornada. Clamaste en la aflicción, y te Buenos días, Señor, contigo quiero libré, te respondí oculto entre los • También les dijo: «Un hombre tenía dos hijos; y el menor de truenos, te puse a prueba junto a andar por la vereda: ellos dijo al padre: "Padre, dame la parte de la herencia que me la fuente de Meribá. Tú, mi camino, mi verdad, mi vida; corresponde." Y él les repartió el patrimonio. Pocos días después Tú, la esperanza firme Escucha, pueblo mío, doy tes- el hijo menor lo reunió todo y se marchó a un país lejano donde que me queda. timonio contra ti; ¡ojalá me escu- malgastó su fortuna viviendo como un libertino. Cuando hubo Buenos días, Señor, a ti te busco, chases, Israel! gastado todo, sobrevino un hambre extrema en aquel país, y co- menzó a pasar necesidad. Entonces, fue a servir a cada de un levanto a ti las manos No tendrás un dios extraño, no hombre de aquel país, que le envió a sus fincas a apacentar y el corazón, adorarás un dios extranjero; yo puercos. Y deseaba llenar su vientre con las algarrobas que co- al despertar la aurora: soy el Señor, Dios tuyo, que te quiero encontrarte siempre en mis saqué del país de Egipto; abre la mían los puercos, pero nadie se las daba. Y entonces recapacitó y hermanos. boca y te saciaré. se dijo: "¡Cuántos jornaleros de mi padre tienen pan en abun- dancia, mientras que yo aquí me muero de hambre! Buenos días, Señor resucitado, Pero mi pueblo no escuchó mi que traes la alegría voz, Israel no quiso obedecer: los Me levantaré, iré a mi padre y le diré: Padre, he pecado entregué a su corazón obstinado, al corazón que va por tus caminos contra el cielo y contra ti. para que anduviesen según sus ¡vencedor de tu muerte y de la mía! antojos. Ya no merezco ser llamado hijo tuyo, trátame como a uno de tus jornaleros." ¡Ojalá me escuchase mi pueblo y caminase Israel por mi camino!: Se puso en camino y partió hacia casa de su padre. Estan- Salmo 80 en un momento humillaría a sus do él todavía lejos, lo vio su padre y, conmovido, corrió, lo abra- Aclamad a Dios, nuestra fuer- enemigos y volvería mi mano co- zó y lo besó efusivamente. za; dad vítores al Dios de Jacob! ntra sus adversarios; los que abo- Entonad canciones, tocad los rrecen al Señor te adularían, y su El hijo le dijo: "Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; suerte quedaría fijada; te alimen- ya no merezco ser llamado hijo tuyo." panderos, la dulce cítara y el arpa, tocad la trompeta por la luna nue- taría con flor de harina, te saciaría va, por la luna llena, el día de con miel silvestre. 16 49
  • 17. Antífona Pero el padre dijo a sus siervos: "Traed aprisa el mejor Oración conclusiva vestido y ponédselo, ponedle también un anillo en su mano y Sálvanos, Señor, despiertos, unas sandalias en los pies. Traed el ternero cebado, matadlo, y protégenos mientras dormimos El trabajo, Señor, comamos y celebremos una fiesta, porque este hijo mío estaba para que velemos con Cristo y de cada día nos sea muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado." Y descansemos en paz. Amén. por tu amor santificado, comenzaron la fiesta. convierte su dolor en alegría de amor, que para dar Su hijo mayor estaba en el campo y, al volver, cuando se Cántico de Simeón: Lc 2, 29-32 acercó a la casa, oyó la música y las danzas; y llamando a uno de tú nos has dado. Ahora, Señor, según tu prome- los criados, le preguntó qué era aquello. Paciente y larga sa puedes dejar a tu siervo irse en Él le dijo: "Ha vuelto tu hermano y tu padre ha matado el es nuestra tarea paz. ternero cebado, porque le ha recobrado sano." en la noche oscura Porque mis ojos han visto a tu del amor que espera; Salvador, a quien has presentado Él se irritó y no quería entrar. Salió su padre, y le suplica- dulce huésped del alma, ante todos los pueblos: Luz para ba. al que flaquea dale tu luz, alumbrar a las naciones, y gloria tu fuerza que aligera. Pero él replicó a su padre: "Hace tantos años que te sirvo, de tu pueblo Israel. y jamás dejé de cumplir una orden tuya, pero nunca me has da- En el alto gozoso del camino, Gloria al Padre, y al Hijo, y al demos gracias a Dios, do un cabrito para tener una fiesta con mis amigos; y ¡ahora que Espíritu Santo. que nos concede ha venido ese hijo tuyo, que ha devorado tu patrimonio con pros- Como era en el principio, ahora la esperanza sin fin del don divino; titutas, has matado para él el ternero cebado!" y siempre, por los siglos de los todo lo puede en Él «Pero él le dijo: "Hijo, tú siempre estás conmigo, y todo lo siglos. Amén. quien nada puede. Amén. mío es tuyo; pero convenía celebrar una fiesta y alegrarse, por- que este hermano tuyo estaba muerto, y ha vuelto a la vida; es- taba perdido, y ha sido hallado” (Lc 15, 11-32). Pistas de reflexión: a) Entra en tu vida, piensa sobre tu vivencia de fe. ¿En qué estado se encuentra? ¿Ha habido altibajos? b) Partiendo del testimonio del peregrino, ¿te identificas en algún aspecto con él desde tu experiencia de la fe? c) Lee con atención la parábola y piensa en lo que te sugiere. El despertar de una fe adormecida y olvidada Muchos que se dicen creyentes, manifiestan no ser practicantes, no participar en la Eucaristía dominical y demás celebraciones de la fe. En suma, van por libre y la fe en su vida ha quedado entre paréntesis, la fe ha pasado a ser cuestión secundaria. 48 17
  • 18. Sin embargo, más allá de su vivir superficial, los acontecimientos y duros trances de la vida los llevan a entrar en su interior y darse cuenta que en ellos no se apagó la sed de Dios y su vida languidece lejos de sus Oración de la Noche fuentes. “Aquí me he despertado. La vida arde dentro de mí, el amor está ¿Qué es el ser humano para en todas partes y yo lo vivo. Gracias a la vida” (Peregrino anónimo, 20- Himno que TÚ te ocupes de él, el hijo del XI-2004). hombre para que Tú te fijes en él? Como una ofrenda de la tarde, “Aquel mismo día, al atardecer, les dijo: elevamos nuestra oración; Misterio de mi humanación, con el alzar de nuestras manos, vengo siguiendo el rastro de una - Pasemos a la otra orilla. levantamos el corazón. respuesta. Dejaron a la gente y lo llevaron en la barca, tal como esta- Al declinar la luz del día, ba; otras barcas lo acompañaban. que recibimos como don, Lectura breve En esto, se levantó una fuerte borrasca y las olas irrumpían con las alas de la plegaria, levantamos el corazón. “Sed sobrios, estad alerta, en la barca, de suerte que ya se anegaba la barca. que vuestro enemigo, el diablo, Haz que la senda de la vida Jesús estaba en popa, durmiendo sobre un cabezal. Lo como león rugiente, ronda buscan- la recorramos con amor despertaron y le dijeron: do a quien devorar; resistidle fir- y, a cada paso del camino, mes en la fe” (1 P 5, 8-9). - Maestro, ¿no te importa que perezcamos? levantemos el corazón. Cuando sembramos de esperanza, El, habiéndose despertado, increpó al viento y dijo al lago: Reflexión cuando regamos con dolor, - ¡Calla, enmudece! El viento se calmó y sobrevino una con las gavillas en las manos, El apóstol San Pedro nos ex- gran calma. levantemos el corazón. horta a tener cuidado porque por Y a ellos les dijo: ¿Por qué tenéis tanto miedo? ¿Cómo no Gloria a Dios Padre, que nos hizo, todas partes el desamor institucio- tenéis fe? gloria a Dios Hijo Salvador, nalizado nos acecha para tragarnos gloria al Espíritu divino: en sus propósitos diabólicos de Ellos se llenaron de gran temor y se decían unos a otros: tres Personas y un solo Dios. impedir el único camino para felici- Amén. dad que tiene el hombre. Nuestra - ¿Quién es éste que hasta el viento y el lago le obedecen?” felicidad vendrá de nuestra incor- (Mc 4, 35-41). Salmo 144 poración al Reino de Dios, un Re- ino cuya ley es el amor y cuya Pistas de reflexión: (Según Pierre Stutz) esperanza es la Vida que nunca se a) ¿Hasta qué punto está influyendo la fe en tu vida? Si influye, ¿se acaba. Que no nos devore el am- Lleno de confianza y gratitud manifiesta de modo práctico? biente que nos rodea, resistamos por todo lo que hoy se hizo posible firmes porque la fe es la que nos b) Ante las dificultades y problemas de la vida ¿has pensado como en encuentros y acciones que han hará felices. los discípulos? ¿Te has sentido abandonado de Dios? ¿En qué te favorecido la vida, me asombro hace pensar la contestación de Jesús a sus discípulos? con este agradecimiento al final del día y balbuceo en voz baja: Padre nuestro… c) Las situaciones duras de la vida ¿te han acercado o alejado de Dios? 18 47
  • 19. me eche fuera la mano del malva- Oración Tu encuentro con Jesucristo en el Camino do. Señor Jesús, hoy quiero darte Constantemente los noticiarios de los medios de comunicación Han fracasado los malhecho- gracias, tan sólo, por estar aquí, (Radio, Prensa, TV) nos martillean con “malas noticias” violencias, aten- res; derribados, no se pueden le- en el Camino, por haberme saca- tados terroristas, epidemias amenazantes, sangría de muertes en las vantar. do de mi casa, por poder experi- carreteras…) que nos perturban y desazonan, nos desalientan y desespe- mentar en estos días que puedo ranzan. Quizá nos suceda como aquellos discípulos de Emaus, que volví- Antífona ser feliz y libre a un mismo tiem- an desencantados hacia su aldea por lo ocurrido aquellos días en Jerusa- Tu luz, Señor, nos hace ver po; por darme a vivir esta dicha y lén. la luz. serenidad de quien sabe que so- ¿Qué “mejor noticia” para sus vidas, que encontrarse con Cristo en mos lo que somos ante Dios y no el Camino, que les devuelve la alegría y la esperanza? más. Lectura breve “Muy agradecido a Dios por haber podido hacer el Camino de San- Y aquí, lejos de mis bienes, le- “Llevad a la práctica la palabra jos de de mi casa, lejos de la segu- tiago, por el encuentro permanente con Él en la naturaleza, en los her- y no os limitéis a escucharla, en- ridad que da el ser alguien entre manos de Comunidad y en el esfuerzo de cada día por caminar hacia Él. gañándoos a vosotros mismos. El los míos, expuesto a la novedad de Unidos en el Señor” (Peregrino de Chile, 25-IV-2001). que se concentra en la palabra cada amanecer, a la sorpresa de “Aquel mismo día iban dos de ellos a un pueblo llamado Emaús, perfecta, la de la libertad, y es conocer cada día nuevos compañe- que distaba unos once kilómetros de Jerusalén, y conversaban constante, no para oír y olvidarse, ros de camino, viviendo de lleno entre sí sobre todo lo que había pasado. Y sucedió que, mientras sino para ponerla por obra, éste cada instante de tu creación, codo ellos conversaban y discutían, el mismo Jesús se acercó y siguió será dichoso al practicarla” a codo con la hierba del campo, con ellos; pero sus ojos estaban ofuscados y no eran capaces de con el agua fría, con la noche a reconocerlo. Él les dijo: (St 1,22.25). cielo abierto… …quiero ofrecerte este trocito de libertad, este cami- «¿De qué discutís entre vosotros mientras vais andando?» Reflexión no andado sin prisas ni penurias, Ellos se pararon con aire entristecido. Uno de ellos llamado Cleo- la libertad que descubro viviendo fás le respondió: «¿Eres tú el único residente en Jerusalén que no No es suficiente el recto pen- al día, sintiendo al sol levantar la sabe las cosas que estos días han pasado en ella?» Él les dijo: sar. Al recto pensar ha de seguir el mañana sobre mi rostro con el «¿Qué cosas?» Ellos le dijeron: «Lo de Jesús el Nazareno, que bien obrar. Y el bien obrar se con- abrigo y la certeza de saberte a mi fue un profeta poderoso en obras y palabras delante de Dios y de creta en la práctica del amor. Je- lado. todo el pueblo; sús que es la Palabra nos ha deja- do su mensaje: “amaos unos a Con el cuerpo entregado y el ¿No sabes que los sumos sacerdotes y magistrados le con- otros”, pero de poco sirve escu- espíritu hambriento, con ampollas denaron a muerte y lo crucificaron? charla si no la llevamos a la prácti- en los pies y las manos vacías, la mochila sin cerrar y durmiendo en Nosotros esperábamos que sería él el que iba a liberar a Is- ca en obras de amor en nuestra el suelo, Tu cuerpo y Sangre ofre- rael; pero, con todas estas cosas, llevamos ya tres días desde vida. cidos se reciben de una manera que esto pasó. especial. El caso es que algunas mujeres de las nuestras nos han Padre nuestro… Cuando regrese a mi hogar no sobresaltado, porque fueron de madrugada al sepulcro, y no en- me dejes olvidar que la vida del contraron su cuerpo. Hablaban incluso de que se les habían apa- hombre es un Camino hacia Ti. recido unos ángeles que decían que está vivo. Ayúdame a recorrerlo. 46 19
  • 20. Fueron también algunos de los nuestros al sepulcro y lo hallaron tal como las mujeres habían dicho, pero a él no lo vie- ron. MIÉRCOLES Él les dijo: –«¡Oh insensatos y tardos de corazón para creer todo lo Oración de la mañana que dijeron los profetas! ¿No era necesario que el Mesías padeciera eso y entrara así en su gloria?» Himno Salmo 35 Y, empezando por Moisés y continuando por todos los pro- Señor, el día empieza. El malvado escucha en su in- fetas, les explicó lo que había sobre él en todas las Escrituras. Como siempre, terior un oráculo del pecado: «No postrados a tus pies, tengo miedo a Dios, ni en su pre- Al acercarse al pueblo a donde iban, él hizo ademán de se- la luz del día sencia». Porque se hace la ilusión guir adelante. queremos esperar. de que su culpa no será descubier- Pero ellos le forzaron diciéndole: «Quédate con nosotros, Eres la fuerza que tenemos los ta ni aborrecida. porque atardece y el día ya ha declinado.» Y entró a quedarse débiles, nosotros. Las palabras de su boca son con ellos. Padre nuestro, que en los cielos maldad y traición, renuncia a ser Y sucedió que, cuando se puso a la mesa con ellos, tomó el estás, haz a los hombres iguales: sensato y a obrar bien; acostado pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo dio. que ninguno se avergüence medita el crimen, se obstina en el de los demás; mal camino, no rechaza la maldad. Entonces se les abrieron los ojos y lo reconocieron, pero él que todos Señor, tu misericordia llega desapareció de su lado. al que gime den consuelo; al cielo, tu fidelidad hasta las nu- que todos, al que sufre bes; tu justicia, hasta las altas Se dijeron uno a otro: «¿No estaba ardiendo nuestro cora- del hambre la tortura, le regalen cordilleras, tus sentencias son zón dentro de nosotros cuando nos hablaba en el camino y nos en rica mesa de manteles blancos como el océano inmenso. explicaba las Escrituras?» con blanco pan y generoso vino; Tú socorres a hombres y En aquel mismo instante se pusieron en camino, se volvie- que no luchen jamás; que nunca animales; ¡qué inapreciable es tu ron a Jerusalén y encontraron reunidos a los Once y a los que es- emerjan, entre las áureas mieses misericordia, oh Dios!, los huma- taban con ellos, que les dijeron: «¡Es verdad! ¡El Señor ha resuci- de la historia, sangrientas amapo- nos se acogen a la sombra de tus tado y se ha aparecido a Simón!» las, las batallas. alas; se nutren de lo sabroso de tu Ellos, por su parte, contaron lo que había pasado en el ca- Luz, Señor, que ilumine las campi- casa, les das a beber del torrente mino y cómo le habían conocido en la fracción del pan” (Lc 24, ñas y las ciudades; que a los hom- de tus delicias, porque en ti está la 13-29). bres todos, en sus destellos mági- fuente viva, y tu luz nos hace ver cos, envuelva luz inmortal; la luz. Señor, luz de los cielos, Pistas de reflexión: Prolonga tu misericordia a fuente de amor y causa de la vida. quien te reconoce, tu justicia, con a) ¿En tu vida has tenido momentos de encuentro personales con Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espí- los rectos de corazón; que no me Dios? ritu Santo. Amén. pisotee el pie del soberbio, que no 20 45
  • 21. Lectura breve b) Los discípulos de Emaús volvían desencantados de Jerusalén por- Porque mis ojos han visto a tu que el Mesías que esperaban había muerto en la Cruz sin respon- “Dios nos ha destinado a obte- Salvador, a quien has presentado der a sus expectativas. Se encuentran en el camino con alguien ner la salvación por medio de ante todos los pueblos: Luz para al que no reconocen que les pregunta sobre su preocupación. ¿Te nuestro Señor Jesucristo; Él murió alumbrar a las naciones, y gloria has sentido también tú desencantado de Jesucristo? Al final los por nosotros, para que, despiertos de tu pueblo Israel. discípulos lo reconocen en la fracción del pan y se dan cuenta de o dormidos, vivamos con Él” (1Ts Gloria al Padre, y al Hijo, y que el amor de Dios estaba presente en la historia de los hom- 5,9-10). al Espíritu Santo. bres en Jesús. ¿Has vivido en el camino de tu vida o de la pere- grinación algo similar? Como era en el principio, Reflexión ahora y siempre, por los siglos de Vivir con Cristo significa los siglos. Amén. El seguimiento de Cristo aprender a amar con el amor de ¿Qué significa ser cristiano? ¿Cómo vivir y actuar como cristiano? Dios. Hemos, pues, de ser los ORACIÓN CONCLUSIVA transformadores de un mundo El seguimiento de Cristo siempre ha sido difícil, pero más hoy guiado por el individualismo egoís- Sólo desde el amor la libertad cuando se nos brindan valores a vivir tan contrapuestos a los valores del ta en uno que se rija por el amor. germina, sólo desde la fe va cre- Evangelio: el éxito, el poder, el triunfar, la riqueza… para ser felices. Los valores egoístas deben dejar ciéndole alas. Cristo nos habla, en cambio, que lo que nos hace felices es vivir en su sitio a los derivados del amor. Y Desde el cimiento mismo del la sencillez, el desprendimiento, el servicio, la generosidad. (Mt. 5, 1-12) en esta tarea viviremos con Cristo corazón despierto, desde la fuente y Cristo con nosotros. clara de las verdades últimas. Viendo la muchedumbre, subió al monte, se sentó, y sus discípulos se le acercaron. Ver al hombre y al mundo con Padre nuestro… la mirada limpia y el corazón cer- Y tomando la palabra, les enseñaba diciendo: cano, desde el solar del alma. “Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Re- Antífona Tarea y aventura: entregarme ino de los Cielos. del todo, ofrecer lo que llevo, Sálvanos, Señor, despiertos, gozo y misericordia. Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la protégenos mientras dormimos tierra. Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. para que velemos con Cristo y Aceite derramado para que el descansemos en paz. Amén. carro ruede sin quejas egoístas, Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque chirriando desajustes. Soñar, ellos serán saciados. amar, servir, y esperar que me Cántico de Simeón: Lc 2, 29-32 llames, tú, Señor, que me miras, Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán mise- tú que sabes mi nombre. ricordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Ahora, Señor, según tu prome- Dios. sa puedes dejar a tu siervo irse en Gloria al Padre y al Hijo y al paz. Espíritu Santo. Amén. Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa. 44 21