El uso transformador del avs (aula virtual sincrónica) en el marco de una pedagogía constructivista y dialógica
1. El uso transformador del AVS (Aula Virtual
Sincrónica) en el marco de una pedagógica
constructivista y dialógica
2. Los supuestos para una incorporación exitosa de las TIC en la
educación
Las TIC, en tanto meros instrumentos, no pueden promover un cambio
de paradigma en la educación, porque las transformaciones sólo
pueden tener lugar a partir del cambio de los objetivos y los métodos
consecuentes y coherentes con ellos.
Si la educación sigue siendo tradicional y bancaria, es lógico que las
TIC no puedan cambiar ese designio.
En este marco las TIC se escolarizan, perdiendo sus posibilidades de
agregar un valor transformador a la práctica educativa.
3. En tanto instrumentos, es claro que las TIC no pueden transformar por
sí solas la educación.
No obstante, en el marco de una práctica pedagógica crítica y dialógica,
pueden entregar un rico valor agregado transformador.
4. La incorporación de las TIC a la educación es una fuente de continuas
discusiones y debates, que nos obliga a tomar una posición teórica clara y
definida. Para entrar al tema voy a señalar dos maneras diferentes,
prácticamente contrapuestas, de incorporarlas: 1) A la pedagogía tradicional
bancaria* y 2) A una pedagogía crítica.
* El concepto de “educación bancaria” es de Paulo Freire, quien en su obra más emblemática,
“Pedagogía del oprimido”, realiza una crítica de la educación tradicional, calificándola de
bancaria por su pedagogía prescriptiva y autoritaria, basada en la transmisión mecánica de
paquetes de contenidos, que se “depositan” en alumnos meramente receptivos y pasivos. Ver
Capítulo II de Pedagogía del oprimido.
5. En lo que sigue vamos a ver una experiencia, que fundamenta nuestra
tesis, de incorporación de las TIC, específicamente del AVS, en una
propuesta pedagógica constructivista dialógica.
Comprobaremos de qué forma la tecnología se potencia y nos permite
mejorar los resultados de una pedagogía asentada en los supuestos
del constructivismo y la dialoguicidad.
6. El uso dialógico y transformador del AVS (Aula Virtual Sincrónica)
Podemos señalar, con argumentos basados en la experiencia, que el AVS
es un magnífico complemento del e-learning asincrónico. Y sabemos que
esta modalidad, fundada en un buen modelo pedagógico y la competencia
de los docentes conforma, sin duda, un valioso instrumento para educar y
capacitar.
El AVS es un complemento ideal de la modalidad del e-learning asincrónico,
en principio, porque nos permite superar los límites de la asincronía.
¿Cómo?
7. Veámoslo a partir de la idea de los valores agregados, que es la clave para
fundamentar la importancia de la “complementariedad” de estas herramientas
para educar y capacitar.
8. En este sentido, el mayor valor agregado
del e-learning asincrónico respecto de la
modalidad tradicional de presencialidad
física, se sostiene en dos pilares:
1) El alcance y la inclusividad, muy
superiores, que posee la modalidad a
distancia
2) La flexibilidad temporal que les permite a
profesores, tutores y alumnos, quienes
pueden adecuar su proceso de enseñanza-aprendizaje
a sus tiempos laborales y
familiares.
Estas son ventajas indiscutibles del e-learning
asincrónico, su principal valor
agregado.
El valor agregado del e-learning
asincrónico
9. El valor agregado del AVS
Ahora bien, ¿cuál es el valor agregado del AVS? Tiene varios
aspectos. Comencemos por la superación de los límites de la
asincronía.
10. En los foros las conversaciones
son, por supuesto, en tiempo
diferido y, por lo tanto, tienen varios
inconvenientes:
➢ Se hacen largas en el tiempo.
➢ No son aptas para explicaciones
e intercambios que requieren
retroalimentación inmediata.
➢ Todo debe ser escrito, lo que
nos obliga a redactar muy bien,
con mucha claridad, precisión y
sencillez.
➢ La importante inversión de
tiempo que lleva la acción de
redactar todo por escrito.
Los límites de la asincronía
11. El valor agregado transformador del AVS
En principio, el AVS nos permite superar
estos problemas, pero cuando lo
incorporamos en el marco de prácticas
pedagógicas constructivistas y dialógicas,
nos entrega, además, un valor agregado
transformador, que merece analizarse.
12. Mis experiencias con la herramienta
A partir de mis experiencias con esta herramienta he descubierto otro valor
agregado, que para mí es notable. Se trata de la potencialidad natural del
instrumento para superar las clases expositivas tradicionales y magistrales.
¿Por qué digo potencialidad natural? Porque esta herramienta nos permite
superar, en forma natural, la impronta centrada en el docente de las clases
tradicionales bancarias, donde el maestro o la profesora asumen un rol
netamente prescriptivo y proactivo y los alumnos uno exclusivamente
reactivo y pasivo.
Para explicarles esta potencialidad, que yo la descubrí, como se descubren
la mayoría de las cosas, en la práctica, voy a recurrir a unas descripciones
previas.
13. Las características de la clase tradicional bancaria
Comencemos por las características de la clase tradicional.
En las clases tradicionales presenciales, es obvio que los alumnos
presentes no pueden dialogar ni intercambiar nada entre sí, ya que
impedirían la exposición del docente.
De ahí que las exposiciones de los profesores y profesoras, en las clases
tradicionales, tiendan a convertirse en magistrales, ya que inhiben la
participación de los alumnos, que deben limitarse a escuchar
pasivamente, tomar notas y esperar que finalice de hablar el docente para
preguntar.
Y este no es el único problema, porque, como señalamos, tampoco
pueden dialogar entre sí, lo que conforma otro obstáculo para lograr la
dialoguicidad que requiere un proceso educativo realmente constructivista
y democrático.
14. Lo que nos permite el AVS a los educadores y educadoras que valoramos y
practicamos una pedagogía dialógica
Con el AVS las cosas son diferentes, porque los alumnos pueden dialogar e
intercambiar ideas entre sí, sin perturbar en absoluto la clase.
Lo hacen a través del chat, sin ningún tipo de inhibición, mientras la
profesora o el tutor desarrollan su exposición.
Pero, si bien esto es importante porque rompe con la pasividad de alumnos
que sólo cumplen el rol exclusivo de receptores, no son menos valiosos e
importantes estos diálogos e intercambios, sumados a las preguntas
concretas que pueden realizar los alumnos, como retroalimentación para el
expositor o expositora.
Esta dinámica rompe con el modelo bancario, porque convierte a los
alumnos en emisores activos que, no sólo pueden preguntarle al docente
sin interrumpir su clase, sino que, al mismo tiempo, también pueden
intercambiar ideas con sus compañeros.
15. Lo que aprendí con el uso del AVS
A través de la práctica con el AVS “aprendí” a valorar y servirme de las opiniones,
diálogos e intercambios de los alumnos, para modular pedagógicamente, valga la
expresión, mis exposiciones.
De esta manera hace su aparición un elemento clave de la educación colaborativa y
constructivista, la “retroalimentación continua”, sin la cual es imposible hablar de
educación dialógica.
Preparo mi clase, porque sé de qué voy a hablar y cómo, pero mi relato no es
inamovible, sino que se va enriqueciendo y nutriendo de los intercambios entre los
alumnos, de sus opiniones y preguntas.
De esta forma, mi discurso va tomando forma a partir de la retroalimentación
brindada por los alumnos a través del chat.
Mi clase ya no está construida exclusivamente por mí para ellos, sino que
comienza a recorrer los andariveles que ellos van proponiendo.
Los alumnos se convierten, así, en co-autores de la clase.
Entonces, dejan de ser meros receptores pasivos, convidados de piedra del hecho
educativo, y pasan a ser parte constitutiva esencial del proceso formativo.
16. Para finalizar, debo decir que la dinámica
dialógica que describo y propongo aquí
requiere de una cierta práctica y
competencia por parte de los docentes, ya
que hay que haber incorporado
coherentemente la idea de que la clase se
construye con los alumnos, práctica que
no figura en el repertorio de la educación
tradicional bancaria.
Es importante la
competencia dialógica de
los educadores y
educadoras
17. El AVS es una valiosa herramienta para poner en juego el aula dialógica
de Paulo Freire
Este uso del AVS me permitió y me está permitiendo poner en juego las
premisas del aula dialógica que promovía con fervor y entusiasmo Paulo
Freire:
“El aula del educador dialógico no es un aula en el sentido tradicional,
sino un encuentro donde se busca el conocimiento, y no donde se lo
transmite”. (Freire, P., 1973: 91).
18. El AVS es un lugar donde construyo el conocimiento “con” mis alumnos
Puedo decir que mis clases con el AVS son un lugar donde construyo el
conocimiento “con” mis alumnos, como lo señalo en mi último libro
“Educar para cambiar el mundo”:
“La clave para llegar a entender en forma cabal a la educación como
una situación gnoseológica, está en darse cuenta de que los alumnos
deben desarrollar una postura activa y coparticipante, característica
fundamental de quienes conocen. Como decía el filósofo chino
Confucio, es muy difícil enseñar a quienes no tienen deseos de
aprender”. (Lens, J L., 2013: 223).
19. Bibliografía consultada:
FREIRE, P. (1973): ¿Extensión o comunicación? México: Siglo Veintiuno
Ediciones. México. Primera edición en español 1973. Decimotercera edición
en español 1984.
FREIRE, P. (1985): Pedagogía del oprimido. México: Siglo Veintiuno
Ediciones. 32a. Edición.
FREIRE, P. y SHOR, I., (2014) Miedo y osadía. La cotidianidad del docente
que se arriesga a practicar un pedagogía transformadora. Buenos Aires: Siglo
Veintiuno Editores.
LENS, J L., (2013) Educar para cambiar el mundo. Buenos Aires: Editorial VI-DA
Global. Modalidad e-book.