4. Página
Prólogo 7
introducción 9
Presentación 11
Primera Sección: Investigaciones en salud y/o nutrición de la niñez
• La salud infantil en la Región de las Américas: el rol de la estrategia
AIEPI en el contexto del Continuo Materno-Neonatal-Salud Infantil
Yehuda Benguigui 15
• Evaluación de la situación de la lactancia materna y alimentación
complementaria en el Perú – 2001
Nair Carrasco Sanez, Sarah María Vega Sánchez, et al 27
• Avanzando con AIEPI
Héctor Pereyra, et al. 39
• Prevalencia de anemia en niños menores de tres años y en madres
gestantes de las comunidades de Nievería, Jicamarca, Cajamarquilla
y Lomas de Carabayllo
Jorge Eduardo Junco Guillermo, Lady Laura Pillaca Ogosi 45
• Atención Integrada a las Enfermedades Prevalentes de la Infancia en las
direcciones de salud de Chota, Cutervo y Jaén, año 2006
Fanny Trinidad Morán, José Tejada Zavala, Andrés Morán Tello 51
• La salud y nutrición infantil en comunidades indígenas achuares,
urarinas y quichuas de la región Loreto, año 2006
Andrés Morán Tello, Liriola Alayo Miranda, José Rojas Espinoza 61
• Situacion de salud infantil en niños menores de dos años en dos provincias
de Ucayali - Línea de base Proyecto “Bebés sanitos”
Marilú Chiang, Josephine Gilman 73
Segunda sección: investigaciones relacionadas al componente clínico de AIEPI
• Manejo de casos de Infecciones Respiratorias Agudas en
establecimientos del Ministerio de Salud
Miguel Dávila, Jesús Toledo 79
Contenido
5. • Implementación piloto de la estrategia AIEPI en Perú
Eduardo Aguirre, Miguel Dávila 85
• Impacto de la aplicación de la estrategia AIEPI en el uso de
antibióticos para el tratamiento de las Infecciones
Respiratorias Agudas y Enfermedades Diarreicas, en
centros de salud de Lambayeque – Perú
J. L.Ortiz, Ll. Chumacero, M. Dávila 91
• Atención Integrada a las Enfermedades Prevalentes
de la Infancia. Evaluación a servicios de salud del Ministerio de Salud
M. Dávila, J. Toledo, F. Cerna, Z. Rozas y L. Vergara 97
• Evaluación de la atención integral a menores de cinco
años en los servicios de salud de Apurímac, Huancavelica y Cuzco
Teobaldo Espejo N. 107
Tercera sección: investigaciones relacionadas al componente comunitario de AIEPI
• AIEPI Comunitario en el Perú: lecciones aprendidas
Miguel Dávila, Héctor Pereyra 123
• Seguimiento posterior a la capacitación en AIEPI Clínico y Comunitario
en el Perú: lecciones aprendidas
Miguel Dávila, Héctor Pereyra 129
• Perfil de capacitación de madres cuidadoras de Wawa Wasi (WW)
para la atención integral de los problemas de salud y nutrición
P. Tello, M. Dávila 137
• Resultados de la campaña “Juntos podemos salvar a los niños”
M. Dávila, R. Taipe y C. Urbano 143
• Proyecto “Salud y Nutrición” en Centro Poblado
Menor Mi Perú (Ventanilla). Proyecto de Salud y Nutrición Mi Perú
Marilú Chiang, Delia Haustein 151
• Las experiencias de AIEPI Comunitario en Chao (Perú)
y San Luis (Honduras)
Juan Arroyo L. 155
• Proyecto “Amigos de los niños para verlos crecer sanos y felices”
Ana Quijano Calle 165
• Proyecto “Promoción de Prácticas Clave – Provincia de Huancané”
Ana Quijano Calle 175
• Nivel de conocimientos de los padres sobre signos de alarma para
llevar a un niño al servicio de salud, antes y después de la
aplicación de la estrategia AIEPI en el programa Wiñay – Distrito de
Pichanaki, Junín
Marlene Rojas Córdova, Andrés Morán Tello, Nérida Ovalle Mejía,
Nilda Campos Acevedo 187
• Proyecto Regional AIEPI Comunitario: Reporte y análisis de la
evaluación del efecto del Proyecto en los actores sociales y las
Prácticas Clave de salud familiar de áreas rurales y urbano-marginales
de Honduras, El Salvador, Nicaragua, Perú y Bolivia
Aníbal Vásquez 193
6. • Estudio etnográfico focalizado sobre la alimentación, el crecimiento
y el desarrollo del niño en comunidades rurales de Huancavelica
Dulce Morán Anticona, Susana Orellana Gavidia, Andrés Morán Tello 227
Cuarta sección: Otras investigaciones en salud y nutrición de la niñez
• Relación entre estado nutricional materno y peso del recién nacido
en la altura
Nancy López Casapía, Yolanda Baldeón Meza, Yolanda Yupari Sánchez 241
• Importancia de la contaminación alimentaria como causa de
enfermedad diarreica en niños menores de cinco años
Dante Figueroa Quintanilla 257
• Subregistro de muertes fetales y neonatales en registros civiles con
respecto a 11 hospitales de Lima y Callao, año 2003
Luisa Sacieta Carbajo, Nora de las Mercedes Espíritu Salazar,
Lilian Pantoja Sánchez, María Julia Pajares Bocanegra,
Makell Adelma Atachagua Sánchez 265
• Factores sociales y culturales que influyen en el estado nutricional de
los niños menores de tres años de edad en comunidades pobres de
la provincia de Satipo, 2002
Cecilia Izarra Ramos, Marlene Rojas Córdova, Elena Espinoza Cano,
Andrés Morán Tello 273
• La formación médica, AIEPI y la práctica del médico recién graduado
en el Perú. Percepciones de los estudiantes del sexto año de medicina de la
Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Perú - 2007
Andrés H. Morán Tello 279
• Componente Comunitario del programa de Capacitacion Materno Infantil (PCMI)
esan proyecto 2000: lecciones aprendidas
Luis Gutiérrez Alberoni 291
• Perfil de las organizaciones y de los Agentes Comunitarios de Salud que actúan en
los ámbitos de la familia y la comunidad
Luis Gutiérrez Alberoni 313
7.
8. El Perú, en cumplimiento de sus Lineamientos de Política, ha logrado avances importantes en el establecimiento de
normas, políticas, planes y programas que promueven la Atención Integral a la Salud de la niñez peruana tales como
el Plan Nacional de Acción por la Infancia y Adolescencia, que tiene rango de Ley y más recientemente los Progra-
mas Materno Neonatal y el Articulado de Nutrición que tienen financiamiento garantizado a través del Presupuesto
por Resultados y del Seguro Integral de Salud.
Asimismo, el Señor Presidente de la República, Dr. Alan García Pérez, se ha comprometido a reducir en nueve puntos
porcentuales la desnutrición crónica infantil, durante su período de gobierno (2006-2011). Para ello se ha creado la
Estrategia Nacional CRECER, bajo la responsabilidad directa del Presidente del Consejo de Ministros, quien, a través
de la Comisión Interministerial de Asuntos Sociales (CIAS) articula los esfuerzos de los Ministerios de Salud, Educa-
ción, Mujer y Desarrollo, Vivienda, Construcción y Saneamiento, Agricultura, Justicia y Trabajo.
A partir de ello −con el apoyo permanente de la OPS/OMS y del resto de agencias y organizaciones de cooperación
que integran la Iniciativa de Lucha contra la Desnutrición− CRECER ha venido desarrollando un significativo trabajo
de coordinación intersectorial, planteando un abordaje integral de la problemática nutricional, basado en los deter-
minantes, que trasciende el tradicional enfoque meramente alimentario. Paralelamente, ha abogado de manera
permanente para que los gobiernos Regionales y Locales consideren a la lucha contra la desnutrición como el eje
central de la política social y como un pilar fundamental para el logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
En ese marco, “Investigaciones Operativas en Salud y Nutrición de la Niñez en el Perú” ofrece a los trabajadores
de salud y otros actores sociales la recopilación de un conjunto de estudios, cuidadosamente seleccionados y siste-
matizados, sobre los principales problemas que afectan la salud y nutrición de la niñez peruana, así como diferentes
alternativas para su solución.
Esperamos que esta publicación tenga buena acogida y que −a partir de la diseminación de las ricas y variadas ex-
periencias que se desarrollan a lo largo y ancho del país, tanto a nivel de los servicios de salud como a nivel familiar
y comunitario− contribuya al logro de la meta de reducción de la desnutrición crónica en los niños y niñas menores
de cinco años.
Dr. Melitón Arce R.
Vice Ministro de Salud
MINSA
Dr. Manuel Peña
Representante en el Perú
OPS/OMS
Prólogo
9.
10. Hace poco más de una década se inició en nuestro país la implementación de la estrategia Atención Integrada a las
Enfermedades Prevalentes de la Infancia-AIEPI, estrategia exitosa, sobre todo en países en vías de desarrollo como
el nuestro. A propuesta de la OMS/UNICEF y con el apoyo de numerosas instituciones internacionales y nacionales,
ha sido incorporada en el Modelo de Atención Integral de Salud (MAIS) del Ministerio de Salud, y en la Norma Téc-
nica 40 que regula la atención integral al niño y la niña, menores de nueve años, así como en la normatividad de
EsSalud.
AIEPI ha mostrado numerosas evidencias de ser eficaz y de mucho impacto en el costo/beneficio, sobre todo cuan-
do se implementan simultáneamente los tres componentes: clínico, comunitario y de gestión; y también cuando
se integra a los Planes Regionales o Locales de Desarrollo, mediante la acción concertada entre las instituciones del
Estado, incluyendo a los servicios de salud y los otros actores sociales de la sociedad civil.
En el Perú existen numerosos trabajos de investigación —algunos de ellos publicados— acerca de la salud y la nutri-
ción en la niñez o más ampliamente acerca de la salud materno-infantil. Quizás no sean todavía suficientes, dada la
magnitud de experiencias que existen, sobre todo en las Regiones, debido a que no siempre se logra sistematizarlas
o porque no se cuenta con las facilidades para publicar artículos científicos.
Por esta razón, la Organización Panamericana de la Salud ha convocado a los profesionales de la salud para que
remitan sus documentos —previamente publicados o no— para que sean resumidos y sistematizados en el presen-
te trabajo. De los 36 trabajos enviados, han sido elegidos 30, los cuales han sido incluidos en alguna de las cuatro
secciones siguientes:
La primera sección se inicia con un abordaje global de la situación y perspectivas de salud de la niñez en la Región
de las Américas, el rol de la estrategia AIEPI y el continuo materno-neonatal-salud infantil, en el contexto de los
Objetivos del Desarrollo del Milenio (ODM). Se incluyen siete trabajos de investigación relacionados a la situación
de salud y/o nutrición o información basal previa a la intervención, mayoritariamente con la estrategia AIEPI. En la
segunda sección se han incluido cinco documentos relacionados al componente clínico de AIEPI. La tercera sección
—mayoritaria— contiene once trabajos, relacionados al componente comunitario de AIEPI. Mientras que en la
cuarta sección, han sido incorporados siete artículos que conforman diversos aspectos específicos de la salud y/o
nutrición.
El Comité Editorial expresa su reconocimiento a todos los profesionales de la Pediatría y Salud Pública que han
participado en este importante aporte a la literatura nacional y regional, de manera muy especial al Dr. Yehuda
Benguigui, líder indiscutible de AIEPI en la Región de las Américas.
Siendo el Perú un país donde la desnutrición constituye uno de los principales problemas de salud infantil, un libro
como el que tenemos el honor de presentar va ser necesariamente de inmensa utilidad y provecho para el personal
de salud, estudiantes de pre y post grado, así como para los tomadores de decisiones en el sector salud.
Introducción
11.
12. La implementación de la estrategia AIEPI tuvo su inicio en la Región de las Américas en el año 1996, gracias a una
iniciativa de la OPS/OMS y el UNICEF, en coordinación con el Ministerio de Salud del Perú, a través de un taller regio-
nal realizado en Lima en 1996.
De esta forma, la experiencia de AIEPI en el Perú es de gran relevancia y se puede caracterizar por diversos factores,
entre los que destaca ser el primer país de la Región de las Américas que comenzó a implementarla; la creación de
una masa crítica importante en todo el país al lograr la formación de capital humano; el compromiso del Ministerio
de Salud en la institucionalización de la AIEPI, así como su incorporación en el Modelo de Atención Integral en Salud
(MAIS); la implementación de acciones a nivel comunitario, a través de los agentes comunitarios en salud; y la par-
ticipación de las facultades de medicina y enfermería en su rol formador de nuevos profesionales de la salud, con
conocimientos de AIEPI. Así, la estrategia tiene más de 10 años de existencia, y ha pasado por diversas etapas: etapa
inicial, etapa de expansión y la etapa actual, y se ha ido adaptando a las necesidades de los países.
La creación de una masa crítica en todo el país se ha logrado a través de diversas capacitaciones a nivel nacional. La
formación de facilitadores nacionales en el componente clínico de la estrategia se inició entre 1996 y 1997. En este
entonces, se comenzaron también a realizar los primeros cursos pilotos en regiones seleccionadas. Asimismo, cabe
destacar que Perú presenta una experiencia significativa: es en este país donde en los últimos años se ha estableci-
do la primera Unidad de Capacitación e Investigación de la Atención Integrada a las Enfermedades Prevalentes de la
Infancia (UCI-AIEPI) en el Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN), la cual fue fundada el 9 de junio de 2005, con
el objetivo de fortalecer el proceso de implementación y expansión de la estrategia AIEPI.
La implementación de la estrategia AIEPI en el país se ha dado gracias al compromiso del Ministerio de Salud. A tra-
vés de su institucionalización e incorporación en MAIS y en coordinación con las universidades es que se ha logrado
generar diversas acciones a nivel de los establecimientos de salud, y desarrollo de acciones en la comunidad. Cabe
destacar, que la salud materno-infantil es considerada una prioridad para el Ministerio de Salud del Perú.
El compromiso de la comunidad a través de los agentes comunitarios, y el rol de las facultades de medicina y enfer-
mería en su rol formador de nuevos profesionales de la salud, ha sido un punto importante en el desarrollo de la es-
trategia. El rol activo de la comunidad es de vital importancia, dado que es en la misma comunidad donde las prácticas
claves son aplicadas por diferentes actores sociales como los padres de familia, cuidadores de niños menores de cinco
años, personal de salud y agentes comunitarios, entre otros.
El Perú es uno de los países en el cual se ha observado una importante reducción en la tasa de mortalidad infantil,
la que ha disminuido de 33 entre 1.000 nacidos vivos en 2000 a 23 entre 1.000 nacidos vivos en 2005. Se ha dado
una gran disminución de las causas de mortalidad por diarrea e infecciones respiratorias agudas, y de las enferme-
dades prevenibles por inmunizaciones. Teniendo en cuenta estos avances, podemos afirmar que cada vez se hace
una realidad el logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio. La perspectiva se muestra promisoria y la estrategia
AIEPI puede seguir aportando a la salud infantil, a través de sus nuevos componentes como el neonatal, abuso y
maltrato infantil, vigilancia del desarrollo infantil, asma y enfermedades bronco-obstructivas, pueblos indígenas,
entre otros.
También es importante resaltar que aún hay muchos desafíos. Uno de estos desafíos es la disminución de la mortali-
dad neonatal, que representa en este momento el más importante grupo de causas que contribuyen a las elevadas
tasas de mortalidad infantil —y de menores de cinco años— La mortalidad neonatal en América Latina y el Caribe
se estima en promedio, de 15 por 1.000 nacidos vivos y representa alrededor del 60% de las defunciones de los
menores de un año y 36% de la mortalidad entre niños menores de cinco años.
Presentación
13. En este contexto, en 2006, durante el 47 Consejo Directivo de OPS, se aprobó la creación de una estrategia en el
contexto materno-recién nacido-salud infantil que asegure la supervivencia y bienestar de madres y niños, y en
junio de 2007 se dio el lanzamiento oficial del Consenso Estratégico Interagencial para la reducción de la morbi
mortalidad neonatal para América Latina y el Caribe.
La presente publicación Investigaciones operativas en salud y nutrición de la niñez en el Perú tiene como
objetivo dar a conocer las investigaciones desarrolladas en el país en el tema de salud y nutrición, conducidas por
profesionales de pediatría y salud pública, entre otros.
A través de cuatro secciones, el presente documento intenta dar un panorama de las diversas intervenciones en
AIEPI en los últimos años. Las secciones están divididas en el componente comunitario y clínico de la estrategia,
así como investigaciones en salud y nutrición. Algunas de las investigaciones presentadas incluyen evaluación de
intervenciones, lecciones aprendidas, resultados de campañas de salud y nutrición infantil, la estrategia AIEPI y la
práctica médica, entre otras relevantes contribuciones.
Estamos seguros que la presente publicación será de gran utilidad para los profesionales que tienen interés en la
salud infantil o trabajan en la estrategia AIEPI en diferentes niveles de los varios países de la Región de las Américas.
Asimismo, este documento ciertamente representa un valioso instrumento para el intercambio de experiencias
sobre la prevención y el control de las enfermedades prevalentes en la infancia conducidas en el Perú en los últimos
10 años.
Dr. Yehuda Benguigui
Jefe de Unidad Salud del Niño y del Adolescente
Salud Familiar y Comunitaria OPS/OMS
Washington, D.C., EE.UU.
16. 15
PrimeraSección
La salud infantil en la Región de las Américas: El rol de la estrategia AIEPI en el
contexto del continuo materno−neonatal−salud infantil
Dr. Yehuda Benguigui. Jefe Unidad de Salud del Niño y del Adolescente. Área Salud de la Familia y
Comunidad.*
El contexto internacional
En los últimos años del Siglo XX y en los primeros del presente siglo, la humanidad fue testigo de asombrosos ade-
lantos en el conocimiento y la comprensión de los factores que determinan la condición de salud de las personas.
Muchos de estos adelantos han resultado en nuevos enfoques en el manejo de las enfermedades y problemas que
afectan la salud, así como en la creación de nuevas respuestas para la prevención y el tratamiento. Como resultado
de este proceso, así como del mejoramiento de las condiciones de vida de la población, la esperanza de vida se ha
prolongado y, en 2004, ya en nueve países ésta ha alcanzado o superado los 80 años de edad1
.
Este importante avance, sin embargo, es aún empañado por la persistencia de enfermedades y problemas de salud
que pueden ser fácilmente evitados o efectivamente tratados, y que continúan amenazando la supervivencia in-
fantil y el crecimiento y desarrollo saludables. También en 2004, en siete países del mundo la esperanza de vida se
encuentra por debajo de los 40 años de edad y, en dos de ellos, por debajo de los 35.
Todos los días el mundo asiste a una irremediable pérdida de vidas humanas, la mayoría de las cuales ocurre en los
países en desarrollo. Cada minuto una mujer muere durante el embarazo o el parto, siete recién nacidos mueren an-
tes de alcanzar el mes de edad y veinte niños no alcanzan su quinto cumpleaños2
. De esta manera, la supervivencia
de la madre y el niño se ha convertido en el mundo en un desafío cotidiano que enfrenta la pérdida anual de más
de medio millón de vidas de mujeres durante el embarazo o el parto, de más de 10 millones de muertes de niños
y niñas antes de los cinco años de edad, entre los cuales cuatro millones ocurren durante las primeras semanas de
vida, y de alrededor de tres millones anuales de mortinatos.
La distribución desigual de estas muertes entre los países pone de manifiesto el importante contraste en la situación
de cada uno de ellos con relación a los indicadores básicos de salud. Más del 95% de las muertes de mujeres durante
el embarazo o el parto ocurren en los países en desarrollo, principalmente en países de África y Asia. A su vez, hacia
el interior de los países, las familias más pobres, las localizadas en el área rural, y los grupos indígenas o étnicamente
minoritarios son los más afectados.
La comparación de las tasas de mortalidad de menores de cinco años muestra que, mientras en algunos países solo
seis o cinco de cada 1.000 nacidos vivos no alcanzan el quinto año de vida, en otros esta cifra es 40 veces mayor
(Figura 1).
*
Organización Panaméricana de la Salud.
1
United Nations Development Program (UNDP). Human Development Report 2006. Beyond Scarcity: Power, Poverty and the Global Water Crisis.
UNDP, New York, 2006.
2
The Partnership for Maternal, Newborn & Child Health. Improving Health, Saving Lives.
17. 16
Investigaciones Operativas en Salud y Nutrición de la Niñez en el Perú
Figura 1
Mortalidad de menores de cinco años en algunos países del
mundo. Tasas por 1.000 nacidos vivos
Fuente: The World Health Report 2005. World Health Organization,
Geneva, 2005.
En los países del continente americano las tasas de mor-
talidad de menores de cinco años se encuentran muy por
debajo de los niveles que alcanzan en algunos de los paí-
ses en desarrollo de África o Asia. Los recién nacidos en
Haití, que es el país con mayor mortalidad de menores de
cinco años del continente americano, tienen un riesgo re-
lativo de morir que es la mitad o menos del que registran
los recién nacidos en Sierra Leona, Afganistán o Liberia.
No obstante, hacia el interior del continente aún persis-
ten grandes contrastes en la situación: el riesgo relativo
de morir de los recién nacidos en Haití es aún veinte
veces superior al que registran los nacidos vivos en Ca-
nadá, y seis veces mayor al que registran los nacidos
vivos en Colombia.
Este contraste en la situación de salud de la infancia persis-
te a pesar de los avances que se han logrado en los últimos
decenios. Entre 1990 y 2000 la Región de las Américas re-
gistró una disminución en un tercio de la mortalidad infantil
y de la mortalidad de menores de cinco años, cumpliendo
de este modo con la meta propuesta en la Cumbre Mun-
dial a favor de la Infancia. Sin embargo, esta meta lograda
globalmente en el continente americano no fue alcanzada
por algunos de los países que lo integran.
El contraste en la evolución de los indicadores de salud
en los diferentes países se observa no solamente en la
Región de las Américas sino en el nivel mundial; y fun-
damenta la importancia asignada por los organismos
internacionales de cooperación técnica a la reducción
de la brecha entre países y no solo al logro de metas
globales de reducción de la mortalidad.
Muchos países del mundo redujeron considerablemente
la mortalidad de menores de cinco años durante el último
quinquenio del Siglo XX y los primeros años del Siglo XXI; y
esta reducción se debió en gran medida a la drástica dis-
minución de la mortalidad por enfermedades infecciosas.
Como resultado, el peso que estas enfermedades repre-
sentaban —como factor de daño para la salud durante los
primeros años de vida— disminuyó notablemente.
No obstante, los países con mayores niveles de morta-
lidad progresaron más lentamente que los países con
menor mortalidad y, en algunos de ellos, la situación de
salud de la niñez permaneció igual o se deterioró aún
más durante los últimos años.
Este contraste en la evolución de la mortalidad de
menores de cinco años en los diferentes países queda
puesto de manifiesto al comparar la diferencia en el rit-
mo de disminución alcanzado en la tasa de mortalidad
en este grupo de edad (Figura 2).
Tres países del mundo con tasas de mortalidad de me-
nores de cinco años superiores 230 por 1.000 nacidos
vivos (Sierra Leona, Afganistán y Liberia) registraron un
leve descenso o una estabilidad en la evolución de este
indicador durante los últimos años del Siglo XX y los pri-
meros del Siglo XXI. En contraste, durante el mismo pe-
ríodo tres países con tasas de mortalidad de seis o menos
por 1.000 nacidos vivos registraron una reducción anual
promedio de dicho indicador del 3% o más, llegando a
alcanzar un 5% de descenso anual en el caso de Bélgica.
La combinación de elevadas tasas de mortalidad duran-
te los primeros cinco años de vida y una baja velocidad
de descenso de la misma es la causa de la persistencia
del elevado riesgo de morir al que están expuestos los
recién nacidos en muchos países en desarrollo. El he-
cho de que, simultáneamente, se registren importantes
ritmos de descenso en los países en los que ya poseen
bajas tasas de mortalidad contribuye a incrementar la
brecha que los separa, resultando en una situación de
cada vez mayor inequidad entre los países.
Esta situación de contraste que se observa en el nivel
mundial también se observa en el continente america-
no. Entre 1995 y 2003, el país con mayor tasa de mor-
talidad de menores de cinco años (Haití) registró un rit-
mo de descenso anual que fue casi la mitad del que se
registró en el país del continente con menor mortalidad
en menores de cinco años (Canadá). Como resultado,
el riesgo relativo de morir de los recién nacidos en Haití
con respecto a los recién nacidos en Canadá se incre-
mentó considerablemente en ese período.
El contraste entre los países en cuanto a la tendencia
registrada en la mortalidad de menores de cinco años
también se observó entre los países en desarrollo: el rit-
18. 17
Investigaciones en salud y/o nutrición de la niñez
PrimeraSección
mo de descenso registrado en Haití entre 1995 y 2003
fue la mitad del registrado en Bolivia, que es el segundo
país con mayor tasa de mortalidad en menores de cinco
años del continente, después de Haití.
Figura 2
Porcentaje anual de variación en las tasas de mortalidad de
menores de cinco años en algunos países del mundo entre
1995 y 2003
Fuente: The World Health Report 2005. World Health Organization,
Geneva, 2005.
El elevado número de muertes durante la infancia, así
como el alto número de defunciones maternas que aún
se registran en muchos de los países del mundo repre-
sentan una asignatura pendiente, teniendo en cuenta
la existencia de intervenciones y medidas que permiten
prevenir y tratar eficazmente la mayoría de las enferme-
dades y problemas de salud que las causan. La efectividad
de estas medidas ha sido puesta de manifiesto no sola-
mente mediante las evaluaciones realizadas en numerosos
ámbitos y condiciones de trabajo, sino también a través
de los resultados observados en la evolución de las tasas
de mortalidad en muchos de los países del mundo que las
han implementado desde hace varios decenios.
Las últimas estimaciones realizadas por la Organización
Mundial de la Salud (OMS) indican que alrededor de tres de
cada cuatro muertes maternas que ocurren anualmente
en todo el mundo pueden ser evitadas lo cual representa
la posibilidad de salvar aproximadamente 375.000 vidas de
mujeres en edad fértil que todos los años fallecen como
resultado del proceso de la gestación, el parto y el puerpe-
rio. También se estima que alrededor de dos de cada tres
muertes de menores de cinco años que ocurren anual-
mente puede evitarse, lo que significaría evitar 7.000.000
de defunciones anuales de niños que ocurren durante sus
primeros cinco años de vida.
La magnitud de la pérdida anual de vidas que todavía
ocurre en los países, sumada a la desigual distribución
de las mismas —que pone injustamente en mayor ries-
go a las madres y recién nacidos que pertenecen a las
poblaciones más vulnerables y con mayor necesidad de
atención—, pone de manifiesto la importancia de asu-
mir el principal desafío que la comunidad internacional
enfrenta para el Siglo XXI, consistente en poner nues-
tro conocimiento y la tecnología disponible en acción,
a favor de una mejor situación de salud y una mayor
equidad.
La situación regional
En el continente americano, la salud materna, neona-
tal e infantil ha sido una prioridad durante los últimos
decenios y continúa siendo una de las principales líneas
de acción de los gobiernos de todos los países, en el
contexto de los compromisos adoptados como parte
de los Objetivos para el Desarrollo del Milenio.
Los avances registrados han sido destacados y se refle-
jaron en el logro de las metas de la Cumbre Mundial a
favor de la Infancia tanto en lo que refiere a la reduc-
ción de la mortalidad materna como a la disminución
de la mortalidad infantil y en la niñez, en general y por
algunas causas específicas como las enfermedades dia-
rreicas, las infecciones respiratorias agudas y la desnu-
trición. El impacto logrado en la reducción del número
de muertes por estas causas repercutió directamente
en el incremento de la esperanza de vida de la pobla-
ción de la Región de las Américas durante los últimos
veinticinco años, pero los beneficios de esta mayor es-
peranza de vida no se recibieron por igual en la pobla-
ción de todos los países ni hacia su interior.
Todos los años ocurren en el continente americano
22.000 muertes de mujeres en edad fértil por causas
asociadas al embarazo, el parto y el puerperio, que
podrían evitarse mediante la aplicación de medidas
sencillas y efectivas de prevención y de tratamiento
(Figura 3).
Una de cada cuatro muertes maternas se debe a he-
morragias —las que representan la principal causa de
muerte de mujeres por causas asociadas al embarazo y
el parto en el continente americano— junto a la septi-
cemia y a los trastornos hipertensivos. Estas tres causas
dan cuenta de una de cada dos defunciones maternas
en los países de América.
Las complicaciones del aborto son también otra causa
de mortalidad materna importante. Las cifras disponi-
bles en el nivel regional indican que más de 2.500 de-
funciones anuales que se producen en todo el conti-
nente pueden atribuirse al aborto. Sin embargo, esta
cifra puede ser aún mayor si se tiene en cuenta que en
19. 18
Investigaciones Operativas en Salud y Nutrición de la Niñez en el Perú
muchos países existen aspectos legales que afectan el
registro del aborto como una causa básica de la defun-
ción, lo que resulta en un incremento en el número de
muertes debidas a septicemia u otras causas pero que
tienen su origen en un procedimiento abortivo.
Figura 3
22.000 muertes maternas evitables al año
También todos los años alrededor de medio millón de
niños y niñas mueren en el continente americano antes
de alcanzar su quinto año de edad; y una proporción
importante de estas muertes ocurren por causas que
podrían ser evitadas o efectivamente tratadas, si son
detectadas precozmente.
Aunque la mayoría de las muertes de menores de cinco
años ocurre durante el primer año de vida y, en par-
ticular, durante el primer mes de vida, las enferme-
dades infecciosas, las enfermedades respiratorias y la
desnutrición aún eran responsables de por lo menos
una de cada cuatro de las muertes que se registraban
durante los primeros cinco años de vida a inicios del
Siglo XXI (Figura 4). Se estima que anualmente alrede-
dor de 60.000 niños y niñas morían antes de los cinco
años debido a una enfermedad respiratoria y una cifra
prácticamente igual fallecía debido a una enfermedad
diarreica. También anualmente se estima que más de
14.000 niños y niñas morían a causa de la desnutrición,
y esto no incluye las defunciones por otras causas que
son más complicadas de tratar por asociarse a una con-
dición nutricional deficiente, que incrementa el riesgo
de infección y reduce las defensas naturales del orga-
nismos para combatirla, aún cuando se reciban los tra-
tamientos específicos recomendados.
Sin embargo, y aunque este conjunto de enfermeda-
des continúa siendo una causa importante de mortali-
dad durante la niñez, el perfil epidemiológico del conti-
nente americano al inicio del Siglo XXI muestra que los
problemas perinatales son los principales responsables
de la mortalidad, dando cuenta de alrededor de cuatro
de cada diez muertes de menores de cinco años y de
más de la mitad de las muertes que ocurren durante el
primer año de edad. Entre estos problemas, la septice-
mia, el bajo peso y la asfixia al nacer ocasionan durante
los primeros días de vida un número de muertes similar
al que ocasiona la diarrea o las enfermedades respirato-
rias agudas entre el mes y los cinco años de edad.
Figura 4
Principales causas de mortalidad de menores de cinco años
en la Región de las Américas, 2000
Fuente: Estimaciones de la Unidad de Salud del Niño y del Adolescente
(FCH/CA), con base en datos de la Unidad de Análisis de la Situación de
Salud y Tendencias (AIS). Organización Panamericana de la Salud (OPS).
2004.
No obstante, el mayor peso sobre la mortalidad neo-
natal en el continente americano es ocasionado por
los problemas asociados al embarazo y al parto, que
ocasionan la mayoría de las muertes que se registran
durante el primer mes de vida y un número de defun-
ciones superior al conjunto de las que ocasionan las en-
fermedades respiratorias y la desnutrición juntas.
La distribución actual de la mortalidad en los primeros
cinco años de vida en los países del continente ame-
ricano muestra por lo tanto la persistencia de enfer-
medades y problemas de salud típicos de los países en
desarrollo, como las enfermedades infecciosas, las res-
piratorias y la desnutrición, que se asocian a la creciente
importancia que han adquirido los problemas peri-neo-
natales como causa de enfermedad y muerte, siendo
actualmente estos últimos los principales responsables
de la mortalidad durante los primeros años de vida.
20. 19
Investigaciones en salud y/o nutrición de la niñez
PrimeraSección
Este perfil epidemiológico combinado se asocia además
con una marcada desigualdad en la distribución de las
muertes infantiles que hace que los niños y niñas que
nacen en algunos de los países del continente tengan
un riesgo entre cuatro y 16 veces más elevado de morir
que los que nacen en otros (Figura 5).
Figura 5
Tasas de mortalidad infantil en la Región de las Américas
por 1.000 nacidos vivos
Estimaciones de FCH/CA. OMS/OPS, 2005.
Las diferencias en el riesgo de morir durante la prime-
ra infancia no solo se observan entre los países en de-
sarrollo y los países desarrollados, sino también entre
estos últimos. Por lo menos tres países en desarrollo,
Cuba, Chile y Costa Rica, han logrado que su tasa de
mortalidad infantil se ubique por debajo de 10 por
1.000 nacidos vivos en 2005, mientras que siete países
del continente aún registran tasas de mortalidad infan-
til superiores a 30 por 1.000 nacidos vivos, y en dos
de ellos estas tasas superan los 50 por 1.000 nacidos
vivos.
El contraste entre las tasas de mortalidad infantil que se
registran en los distintos países del continente muestra
la desigualdad que aún persiste en la distribución de los
beneficios que los conocimientos y las tecnologías sen-
cillas de prevención y tratamiento pueden brindar para
mejorar la supervivencia infantil. Esta desigualdad tam-
bién se observa hacia el interior de cada país, teniendo
en cuenta que las tasas de mortalidad, al ser promedios
nacionales, ocultan las diferencias existentes entre las
diferentes regiones, provincias, departamentos o gru-
pos humanos.
El análisis de las tasas de mortalidad materna en los dis-
tintos SILAIS (Sistemas Locales de Atención en Salud) de
Nicaragua demuestra que el riesgo de morir de las mu-
jeres en edad fértil asociado a la gestación puede ser
más de veinte veces mayor en algunas áreas del país,
alcanzando tasas de mortalidad materna de más de 500
por 100.000 nacidos vivos (Figura 6). De esta manera,
el promedio nacional oculta la brecha existente entre
los diferentes SILAIS, que pone de manifiesto la falta de
acceso de una parte de la población a los beneficios de
prevención y tratamiento que sí están disponibles para
otra parte de la población.
Figura 6
Razones de mortalidad materna por SILAIS - Nicaragua (por
100.000 n.v.)
Fuente: Sistema de Vigilancia MM, MINSA 2001.
Las diferencias no solo se observan al comparar áreas
hacia el interior de los países sino que también se en-
cuentran cuando se analiza la situación de distintos
grupos de población. En todos los casos los promedios
compensan los valores extremos e impiden visualizar
que, simultáneamente, coexisten valores mucho mayo-
res, indicativos de una situación particularmente grave,
con valores mucho menores que pueden indicar el lo-
gro de avances importantes en la prevención y control
de las enfermedades y problemas de salud que afectan
a la población. Por esta razón, el análisis de la situación
de salud hacia el interior de los países para identificar
las áreas con indicadores más críticos resulta esencial
para orientar la implementación y reforzamiento de las
acciones de control.
Con el énfasis dado en los últimos años al logro de con-
diciones más equitativas en la distribución de los bene-
ficios que se pueden lograr en la salud como resultado
de la aplicación de los conocimientos y tecnologías dis-
ponibles, la identificación de los grupos de población
en condiciones de mayor vulnerabilidad se ha constitui-
do en una prioridad. Esto ha permitido establecer la si-
tuación de particular vulnerabilidad de algunos grupos
poblacionales, tales como las poblaciones indígenas
que habitan los diferentes países del continente, entre
las cuales pueden observarse en general tasas de mor-
bilidad y mortalidad más elevadas a las que se registran
en el promedio de la población.
21. 20
Investigaciones Operativas en Salud y Nutrición de la Niñez en el Perú
La comparación de las tasas de mortalidad infantil en
distintos países de América Latina desagregando el pro-
medio nacional según se trate o no de población indí-
gena ha demostrado que estos grupos registran tasas
hasta dos veces más altas que las que se observan en la
población general (Figura 7).
Figura 7
Mortalidad infantil a nivel nacional y en poblaciones
indígenas de países seleccionados de las Américas
Fuente: OPS/OMS 2000.
Estas mayores tasas indican que la supervivencia infan-
til está más amenazada para las poblaciones indígenas,
con el consiguiente efecto negativo que esto tiene para
garantizar la diversidad étnica en el continente. La prin-
cipal amenaza proviene en estos casos de la persistencia
de enfermedades y problemas de salud que pueden ser
en general fácilmente prevenidos o tratados, y que ya
no representan un problema de salud pública de elevada
magnitud en otros grupos de población no indígena.
El análisis del perfil de la mortalidad en los países del con-
tinente americano de acuerdo con el nivel de su tasa de
mortalidad infantil, demuestra que en los países con ele-
vadas tasas, las enfermedades infecciosas y las enferme-
dades respiratorias aún representan una proporción muy
importante de las muertes durante el primer año de edad,
llegando a ocasionar más del 40% de todas las muertes re-
gistradas en ese período de la vida (Figura 8). En contras-
te, en los países en los que la tasa de mortalidad infantil
ha alcanzado niveles más bajos, estas enfermedades no
representan un problema de magnitud importante, sien-
do responsables de menos del 10% de todas las muertes
que ocurren durante el primer año de edad.
El menor peso de las muertes debidas a enfermedades
infecciosas y respiratorias demuestra, además, la facti-
bilidad de reducción de estos problemas y el impacto
que esto tiene en la reducción de la mortalidad global,
tal como se ha observado en el continente americano
durante los últimos veinticinco años, durante los cuales
la reducción de la mortalidad por diarrea y por enfer-
medades respiratorias produjo la mayor contribución al
incremento de la esperanza de vida de la población.
Figura 8
Diferencias en la proporción de muertes debidas a
enfermedades respiratorias e infecciosas en los países de
América según el valor de su tasa de mortalidad infantil.
Estimaciones circa 2003
Fuente: Estimaciones de la Unidad de Salud del Niño y del Adolescente
(FCH/CA), sobre la base de la información disponible en la Unidad de
Análisis de Situación de Salud y Tendencias (AIS). Organización Paname-
ricana de la Salud (OPS). 2004.
Aunque las razones, por las cuales la reducción de es-
tas enfermedades no se extiende al resto de los países
del continente, son diversas; la falta de acceso equita-
tivo a las medidas de prevención y de tratamiento es
considerada una de las principales determinantes de la
persistencia del problema. Por esta razón, la extensión
de la cobertura de aplicación de las intervenciones dis-
ponibles que, por otra parte, ya han mostrado su efec-
tividad en la práctica en diversos países del continente,
se ha transformado en uno de los principales desafíos
para los gobiernos y para la sociedad civil.
A inicios del Siglo XXI todavía existen diferencias en
el acceso, de parte de la población, a las medidas de
prevención y atención básica que pueden garantizar
mejores condiciones de salud. Estudios realizados so-
bre la atención prenatal demuestran que la proporción
de mujeres que tuvieron acceso a por lo menos cuatro
controles del embarazo antes del parto es considera-
blemente más baja entre aquellas que habitan el área
rural en comparación con las que habitan el área urba-
na (Figura 9). En algunos países, esta diferencia es de
dos o más veces, indicando que menos de la mitad de
las mujeres que habitan el área rural ha logrado por lo
menos cuatro visitas prenatales, en comparación con la
proporción de mujeres del área urbana que han tenido
acceso a este número de controles.
22. 21
Investigaciones en salud y/o nutrición de la niñez
PrimeraSección
Figura 9
Atención prenatal según área de residencia: Persisten
grandes diferencias entre mujeres en áreas urbanas y áreas
rurales
Fuente: AbouZahr y Wardlaw, 2002.
Teniendo en cuenta la importancia que tiene el con-
trol precoz, periódico y adecuado del embarazo para
disminuir el riesgo de enfermedades y problemas que
pueden afectar la salud tanto de la madre como del
recién nacido, el menor acceso al control prenatal en
las mujeres del área rural puede considerarse entre los
determinantes más importantes de las mayores tasas
de mortalidad materna y neonatal que se registran en
la población rural en la mayoría de los países.
Esta inequidad en la distribución del acceso a las tec-
nologías disponibles para la prevención y el control se
combina con las diferencias existentes en otros factores
y determinantes clave de la supervivencia materna e in-
fantil y del crecimiento y desarrollo saludables durante
la infancia. Entre estos pueden destacarse la condición
económica de la población y, particularmente, los ele-
vados niveles de pobreza que se registran tanto en el
área rural como urbana y periurbana, el nivel educativo
de los padres y el analfabetismo, especialmente de la
madre o de la persona que tiene a su cargo el cuidado
y atención del los niños y niñas pequeños, la condición
nutricional de la mujer antes del embarazo y a partir del
inicio de la gestación, así como el estado nutricional de
los niños y niñas durante sus primeros años de vida, las
condiciones ambientales en el domicilio, el peridomici-
lio y la comunidad, que determinan la mayor exposición
a riesgos para la salud y para el crecimiento y el desa-
rrollo, que pueden expresarse tanto en la niñez como
en la edad adulta.
Los embarazos no deseados y la falta de acceso a me-
didas culturalmente aceptables destinadas a la salud
reproductiva también representan un factor de impor-
tancia como determinante de las condiciones de salud
de la mujer, la infancia y la familia. Asociados a esto se
encuentran también otros hábitos de vida familiar y co-
munitaria que pueden constituirse en un riesgo presen-
te y futuro para el crecimiento y desarrollo saludables
de los niños y las niñas.
La mayor exposición a riesgos de enfermar y morir resul-
ta en general en una prevalencia e incidencia aumenta-
da de enfermedades y problemas de salud que, en otros
contextos, pueden ser prevenidos o tratados efectiva-
mente siempre que sean precozmente detectados.
Pero las brechas en la situación de salud materna e infan-
til no solo están determinadas por los factores sociales,
económicos y culturales de las familias y las comunida-
des. Contribuye a reducirlas o a profundizarlas la forma
en que se distribuyen e implementan las intervenciones
disponibles para la prevención y el tratamiento. De este
modo, el acceso de la población a servicios de salud
materna, neonatal e infantil, así como de planificación
familiar, de salud familiar y de salud comunitaria son
factores de la mayor importancia que influye en el re-
sultado final que se expresa en las cifras de morbilidad
y mortalidad de este grupo de población. También lo
hace la disponibilidad continua de los suministros bá-
sicos para garantizar que las medidas de prevención y
tratamiento puedan aplicarse efectivamente; la calidad
con la que se brindan dichos servicios de prevención
y tratamiento y el acceso de la población a servicios y
contenidos de información y educación sobre la salud
que sean brindados en forma adecuada, comprensible
y aceptable para la población a la que van destinadas.
Junto a los anteriores también debe destacarse como
un determinante de la mayor o menor equidad en la
distribución de las intervenciones la existencia de sis-
temas de información apropiados que brinden una in-
dicación precoz y oportuna de la condición de salud
de la población, permitiendo la rápida identificación de
situaciones de mayor riesgo que permitan orientar y
reforzar las acciones y actividades de salud de manera
de compensar las diferencias en el acceso a las inter-
venciones y el impacto de las mismas en términos de
la reducción de la morbilidad y la mortalidad materna,
perinatal e infantil.
Encarar en forma simultánea estos y otros determinantes
y factores clave, tanto asociados a las características de
las poblaciones como a la cobertura, calidad y oportuni-
dad de las acciones que se realizan para mejorar la salud
es, actualmente, un importante desafío para los países y,
23. 22
Investigaciones Operativas en Salud y Nutrición de la Niñez en el Perú
de encararlo, depende el éxito que pueda obtenerse en
la búsqueda de menores niveles de morbilidad y mortali-
dad en la población y de una menor brecha entre países,
áreas hacia su interior y grupos de población.
Avances
Durante los últimos años los países del continente americano
han avanzado en el logro del desafío de alcanzar mejores ni-
veles de salud materna e infantil y esto se ha reflejado en el
logro de los compromisos adoptados en la Cumbre Mundial a
favor de la Infancia que proponía, entre otras metas, reducir
en un tercio la mortalidad de menores de cinco años duran-
te el decenio 1990-2000. Este logro se alcanzó gracias a un
incremento en la velocidad de descenso que la tasa de mor-
talidad en este grupo de edad registró durante este período,
cuando se lo compara con el que había registrado durante la
década de los ochenta, y contribuyó a acelerar la caída de la
tasa de mortalidad de menores de cinco años y a salvar un
gran número de vidas en todo el continente.
La continuidad de los esfuerzos nacionales y regiona-
les más allá de 2000 permitió proyectar la importante
tendencia lograda durante el decenio de los noventa
y, hasta 2005, la Región de las Américas acumuló una
caída del 44% en la tasa de mortalidad de menores de
cinco años (Figura 10).
Figura 10
Evolución de la mortalidad estimada de menores de cinco
años. Número de nacimientos y muertes y tasas estimadas
por 1.000 nacidos vivos. 1990-2005
Fuente: Estimaciones de la Unidad de Salud del Niño y del Adolescente,
Área de Salud Familiar y Comunitaria (FCH/CA), con base en “Situación
de salud en las Américas. Indicadores Básicos 2004”. Análisis de Salud y
Sistemas de Información Sanitaria (AS). Organización Panamericana de la
Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), 2005.
Este descenso de la mortalidad redujo el número de
defunciones de menores de cinco años prácticamente
a la mitad entre 1990 y 2005, llevando el riesgo de mo-
rir durante los primeros años de vida de un valor supe-
rior a 40 por 1.000 nacidos vivos a una cifra cercana a
la mitad de ese valor.
A pesar de este importante avance, el ritmo de des-
censo logrado durante los últimos años no resulta su-
ficiente para cumplir con el compromiso adoptado por
los países como parte de los Objetivos para el Desarrollo
del Milenio de llegar, en 2015, a una tasa de mortalidad
en menores de cinco años que sea sólo un tercio de
valor que se registraba en 1990 (Figura 11).
Figura 11
Mortalidad en menores de cinco años en la Región de
las Américas. Tendencia registrada entre 1990 y 2003 y
proyecciones hasta 2015. Número de muertes y tasas por
1.000 nacidos vivos
Fuente: Estimaciones de la Unidad de Salud del Niño y del
Adolescente (FCH/CA), con base en datos de la Unidad de Análisis de
la Situación de Salud y Tendencias (AIS). Organización Panamericana
de la Salud (OPS). 2004.
En los próximos diez años la tasa de mortalidad de me-
nores de cinco años deberá incrementar su ritmo de
descenso hasta alcanzar un 5,2% anual, que es una cifra
48% más alta que la velocidad de descenso que se re-
gistró durante los primeros cinco años del Siglo XXI. De
esta manera, el logro de la reducción comprometida en
los ODM sólo podrá alcanzarse acelerando la velocidad
de disminución de la tasa de mortalidad de menores de
cinco años, lo que requiere no solamente sostener los
esfuerzos realizados hasta la fecha para la implemen-
tación de las intervenciones disponibles de prevención
y tratamiento de enfermedades y problemas de salud
sino también expandir su cobertura para alcanzar a los
grupos de población más vulnerables.
Pero incrementar globalmente la velocidad de descen-
so de la mortalidad en el continente no es el único de-
safío que enfrentan los países para los próximos años,
especialmente si se pretende que el logro de las metas
comprometidas en los ODM contribuya a una simultá-
nea reducción de la brecha entre países y grupos de
24. 23
Investigaciones en salud y/o nutrición de la niñez
PrimeraSección
población para alcanzar de este modo condiciones más
equitativas de salud en el continente.
En los últimos años se ha observado en muchos países
un menor ritmo de descenso de la mortalidad en me-
nores de cinco años. A su vez, no todos los países han
mostrado ritmos de descenso similares de la mortalidad
de menores de cinco años, y no siempre los países que
registraban mayores índices de mortalidad alcanzaron
la mayor velocidad de descenso (Figura 12). Ninguno
de estos hallazgos resulta compatible con el logro de
las metas comprometidas en los ODM y con el logro
de condiciones más equitativas para la infancia en la
Región de las Américas.
Figura 12
Velocidad de descenso anual promedio de la tasa de
mortalidad en menores de cinco años en la Región de las
Américas. Comparación de los valores observados y los
valores propuestos por las Cumbres Internacionales
Fuente: Estimaciones de la Unidad de Salud del Niño y del Adolescente
(FCH/CA), con base en datos de la Unidad de Análisis de la Situación
de Salud y Tendencias (AIS). Organización Panamericana de la Salud
(OPS). 2004.
En el nivel regional el ritmo de descenso registrado du-
rante el primer quinquenio del Siglo XXI debe más que
duplicarse para que se alcance la meta propuesta en los
ODM para el año 2015 y, aunque por lo menos uno de los
países del continente ha registrado un ritmo de descenso
similar al que debe continuar logrando para alcanzar la
meta, en algunos países el incremento que debe lograrse
en los próximos años es entre cinco a siete veces el que se
logró durante el primer quinquenio posterior a 2000.
Esta situación es particularmente comprometida en los
países con mayor tasa de mortalidad en menores de
cinco años que, para reducir la brecha que los separa
del resto de la Región deben incrementar considera-
blemente la velocidad de descenso de la tasa de mor-
talidad en menores de cinco años. Solo de esta manera
se podrá alcanzar las metas propuestas no solamente a
nivel continental sino en cada país, contribuyendo ade-
más a reducir el riesgo relativo de morir de los nacidos
vivos en un país con respecto a los de otro país.
La comparación de lo ocurrido en los países, no obs-
tante, aporta ejemplos concretos con respecto al éxito
que puede lograrse mediante la implementación de
intervenciones de prevención y tratamiento que han
contribuido a lograr descensos de hasta el 5% anual en
algunos países. Aprovechar de estas experiencias para
adecuarlas a las necesidades del resto de los países pue-
de contribuir a acelerar el descenso de la mortalidad
en los próximos años, especialmente en los países de
mayor riesgo.
Desafíos y perspectivas
El renovado compromiso de los países del mundo para
continuar reduciendo la mortalidad materna, perinatal
e infantil reflejado en las metas propuestas para 2015
como parte de los ODM representan en la actualidad
una confirmación de la importancia asignada a la super-
vivencia infantil y al crecimiento y desarrollo saludables.
Esta importancia se refleja también en otros acuerdos y
declaraciones internacionales tales como la Declaración
de Nueva Delhi sobre la salud de la madre, el recién na-
cido y el niño; la Resolución de la Organización Mundial
de la Salud sobre el continuo salud materna – neonatal
e infantil, y la conformación de la Alianza Mundial para
la salud de la madre, del recién nacido y de la niñez (The
Partnership).
En la Región de las Américas estos compromisos fueron
además reforzados mediante la presentación realizada
al Consejo Directivo de la Organización Panamericana
de la Salud de la estrategia regional para reducir la mor-
bi-mortalidad neonatal, la presentación de la estrategia
regional y del plan de acción sobre nutrición y desarro-
llo (SPP 2006) y la concertación regional realizada en
apoyo al componente materno-neonatal e infantil.
Estas iniciativas tanto globales como regionales contri-
buyen no solamente a reforzar la importancia de la salud
materna, perinatal e infantil como parte de la agenda
internacional y nacional, sino a sentar las bases para una
colaboración entre países y organismos internacionales
que acelere la puesta en práctica de planes concretos
de acción que tiendan a llevar a los grupos de población
más vulnerables la información y las medidas de preven-
ción y tratamiento que contribuirán a reducir la inciden-
cia y la gravedad de las enfermedades y problemas de
salud que amenazan la supervivencia infantil.
25. 24
Investigaciones Operativas en Salud y Nutrición de la Niñez en el Perú
La Región de las Américas tiene grandes oportunidades
de alcanzar las metas propuestas, aún cuando su lo-
gro representará en los próximos años un importante
desafío para el conjunto de los países que la integran.
Esta perspectiva favorable para el logro de las metas
se basa en el impulso logrado en la implementación de
intervenciones y estrategias de salud materna e infantil
durante los últimos veinticinco años, que han permiti-
do el logro de las metas de la Cumbre Mundial a favor
de la Infancia, que se habían comprometido en 1990
para ser alcanzadas en 2000. También el fortalecimien-
to de la atención primaria de la salud, como un eje para
la organización del sistema de salud para llegar a los
grupos de población más vulnerables, ha sido adoptado
como enfoque rector por la mayoría de los países en
desarrollo del continente.
El proceso de integración de intervenciones, que ha re-
sultado en el desarrollo de nuevos modelos de atención
que superaron los enfoques dirigidos a la enfermedad
reforzando una visión más orientada a la evaluación de
la condición general de salud, ha permitido hacer un
uso más eficiente de los recursos tanto para la imple-
mentación como para la atención que se brinda en el
primer nivel.
Sobre la base de estas experiencias y desarrollos, y te-
niendo en cuenta el proceso seguido durante la década
de los noventa como parte de la iniciativa regional para el
logro de las Metas de la Cumbre, la mayoría de los países
han desarrollado planes y están diseñando e implemen-
tando políticas nacionales y locales dirigidas a fortalecer
la coordinación intersectorial, fomentar la participación
comunitaria y hacer un uso más eficiente de los recursos
disponibles, especialmente para enfocarlos al logro de
las metas de salud materna e infantil comprometidas en
los Objetivos para el Desarrollo del Milenio.
En este sentido ha sido de gran ayuda la experiencia
acumulada en el proceso de implementación de la
atención integrada a las enfermedades prevalentes de
la infancia, AIEPI, que ha contemplado no solamente el
componente de los servicios de salud, sino también el
componente comunitario y la amplia participación de
diversas instituciones, especialmente aquellas destina-
das a la formación del personal de salud como las Facul-
tades de Medicina y las Escuelas de Enfermería.
La experiencia de AIEPI también ha resultado clave como
un ejemplo del proceso de integración de intervencio-
nes en una única estrategia destinada a hacer que las
mismas lleguen a toda la población. Esto ha incluido
la expansión no solamente de la cobertura geográfica
de la estrategia sino, mediante un proceso continuo de
adaptación a las necesidades y realidades de los países
y de sus áreas prioritarias; de incorporación de nuevos
componentes que, según el perfil epidemiológico exis-
tente, resultaban claves para mejorar la salud infantil, y
de incorporación de la comunidad como un actor clave
del proceso de aplicación, monitoreo y evaluación de
los resultados.
Más recientemente, la estrategia AIEPI también ha am-
pliado y fortalecido su rol como puerta de entrada para
brindar un enfoque basado en el ciclo de vida, que
permita la atención integrada no solamente de la niñez
sino también de la madre, la mujer y la familia. De este
modo también está contribuyendo al diseño e imple-
mentación de un sistema de vigilancia epidemiológica
en salud materna, neonatal e infantil, que contribuirá a
un mayor conocimiento de la situación epidemiológica
local y nacional y, de este modo, permitirá orientar más
eficientemente los recursos disponibles en función de
las mayores necesidades.
Aún en el marco de estas oportunidades clave que la
Región tiene para lograr exitosamente las metas com-
prometidas en los ODM, el camino hacia ellos no está
exento de retos importantes que deben ser enfrenta-
dos.
Es necesario continuar enfatizando la necesidad de
avanzar hacia la acción, trabajando para que los cono-
cimientos y las tecnologías de las que ya se disponen
se pongan al alcance de toda la población y, particular-
mente, de aquellos grupos de población en condicio-
nes de mayor vulnerabilidad.
Para esto se hace cada vez más imperativo contar con
la voluntad política de los gobiernos de todos los paí-
ses tanto en el nivel nacional como en el nivel local, y
lograr que esta voluntad se traduzca en las acciones y
decisiones necesarias para contar con los recursos y la
inversión necesaria para poner a disposición de la po-
blación las intervenciones y estrategias de prevención,
tratamiento y promoción de la salud materna, perinatal
e infantil.
También se debe asegurar el uso de enfoques susten-
tables que garanticen la continuidad de las interven-
ciones y estrategias, más aun teniendo en cuenta que
el logro de las metas comprometidas para mejorar la
salud materna e infantil requiere su más sistemática y
más amplia aplicación para llegar a toda la población.
Esta continuidad también requiere que se garantice la
existencia de recursos humanos calificados para la aten-
ción materna e infantil en todos los niveles, pero parti-
cularmente en el primer nivel de atención y en el nivel
comunitario, teniendo en cuenta que aún una impor-
26. 25
Investigaciones en salud y/o nutrición de la niñez
PrimeraSección
tante proporción de la población de la Región no cuenta
con acceso a los servicios institucionales de salud.
La reorientación de los servicios de salud sobre la base
de la renovación de la Atención Primaria de la Salud
(APS) también constituye un reto para los próximos
años, tratando de expandir la visión del personal y de
los servicios del nivel local para reforzar un enfoque ba-
sado en la salud, que tenga en cuenta sus múltiples de-
terminantes, y que aproveche todas las oportunidades
para la información, el intercambio y conocimiento, la
prevención, la detección precoz y el tratamiento.
Finalmente, es necesario que los gobiernos enfrenten
el reto que representa garantizar a la población la pro-
tección social en salud, que permita a todas las madres
y sus familias gozar de los beneficios que las medidas
de prevención y tratamiento puedan brindarles; pero
también reforzar sus conocimientos y prácticas para
hacerlos actores más activos en la conservación de la
salud y el fomento del desarrollo.
En los próximos años deberá por lo tanto reforzarse
la implementación de las intervenciones y estrategias
efectivas que ya han demostrado su impacto sobre la
salud materna, perinatal e infantil. Orientando el pro-
ceso de expansión de estas estrategias hacia las áreas
geográficas y grupos de población más prioritarios se
podrá lograr el impacto buscado en términos no solo
de la reducción de la mortalidad y la morbilidad, sino de
disminución de la brecha entre grupos de población.
Para sostener este proceso durante el tiempo necesario
para alcanzar las metas comprometidas en los ODM re-
sultará clave que los países logren un consenso intersec-
torial y legislativo que garantice que las políticas de salud
y los recursos necesarios para sostenerlas se constituyan
en políticas públicas de Estado. Esto incluye no solamen-
te la aprobación de planes que puedan sostenerse a lo
largo de las diferentes gestiones de gobierno, sino la in-
corporación de las necesidades de recursos humanos y
materiales para sostenerlos como parte del presupuesto
regular de funcionamiento del sector público.
El uso de enfoques sustentables para mejorar las con-
diciones de salud materna, perinatal e infantil resulta
esencial en este contexto, teniendo en cuenta que
su implementación y expansión constituirá una de las
principales actividades de los planes de acción nacio-
nal para los próximos años. Con base en la experiencia
adquirida en los países y en la región durante la adap-
tación y posterior implementación de la estrategia AIE-
PI, y dada la necesidad de continuar fortaleciendo el
enfoque integrado de la atención, los próximos pasos
deben orientarse hacia el logro de un abordaje basado
en el ciclo de vida, que vincule las diferentes interven-
ciones y estrategias entre sí para brindar una respuestas
continua a las distintas necesidades de cada grupo.
La expansión de la estrategia AIEPI para abordar la aten-
ción de los niños y niñas de cinco a nueve años, y su
vinculación con las estrategias destinadas a la atención
del adolescente y el adulto y del período perinatal brin-
dan una oportunidad para dar una respuesta más in-
tegradora de la atención, especialmente a través de la
atención primaria de la salud (Figura 13).
Figura 13
Enfoque sustentable y estrategias integradas a lo largo del
Ciclo de Vida: una respuesta a los nuevos desafíos
Adaptación del módulo introductorio sobre salud de la niñez y la adoles-
cencia. Unidad de Salud del Niño y del Adolescente, Área de Salud Fa-
miliar y Comunitaria (FICH/CA). Organización Panamericana de la Salud
(OPS). 2004 (en prensa).
Este conjunto de estrategias integradas permitirán a su
vez fortalecer las acciones de los servicios de salud y
en la comunidad destinadas a la familia, haciendo que
la atención de cada etapa de la vida se constituya en
un espacio para la promoción de la salud y para ex-
plorar la presencia de posibles signos de enfermedades
o problemas que puedan afectar la supervivencia y el
crecimiento y desarrollo saludable.
La implementación de estas estrategias y de las inter-
venciones que las integran, contemplará además la in-
tervención de los diferentes niveles tanto en las institu-
ciones de salud como en la comunidad y en la familia,
brindando de esta manera la oportunidad de una activa
participación intersectorial y comunitaria. Esto contri-
buirá a fortalecer el papel de cada uno de los integran-
tes de la familia y de la comunidad en el cuidado y en
la protección de la salud, y a brindarle la información, el
conocimiento y las prácticas necesarias para que pue-
dan tomar decisiones fundamentadas sobre su propia
salud y sobre la salud de sus familiares, que contribuyan
27. 26
Investigaciones Operativas en Salud y Nutrición de la Niñez en el Perú
a mejorar el crecimiento y el desarrollo y a reducir el
riesgo de enfermedad.
En los próximos años se continuará ampliando el hori-
zonte de los logros que podrán alcanzarse y de la forma
en que se pueda llegar a ellos, contemplando no sola-
mente la búsqueda de mejores y más equitativas con-
diciones de salud materna-perinatal, infantil y familiar,
sino alcanzando las mismas gracias a la activa participa-
ción de la propia familia y de la comunidad.
Se estará contribuyendo a reforzar las bases de una
participación más activa y democrática de la población
en la salud, en el marco de la concepción de la salud
como un derecho humano fundamental adoptando es-
trategias integradas para la atención que cubran todo
el ciclo de vida, promoviendo su más amplia adaptación
nacional y local para adecuarlas a las diferentes necesi-
dades de cada lugar, garantizando que las mismas lle-
guen a los grupos de población que más las necesitan
y garantizando el seguimiento, supervisión y evaluación
de sus resultados.
Bibliografía
1. United Nations Development Program
(UNDP).(2006) Human Development Report 2006.
Beyond Scarcity: Power, Poverty and the Global
Water Crisis. UNDP, New York.
2. World Health Organization. The World Health Re-
port (2006): working together for health. World
Health Organization, Geneva, Switzerland.
3. Lawn JO, Cousens S, Zupan J. (2005)4 million neo-
natal deaths: When? Where? Way. The Lancet Se-
ries on Neonatal Survival. March 2005.
4. Darmstadt GL, Bhutta, ZA, Cousens S, Adam T,
Walker N, de Bernis L.(2005) Evidence-based, cost-
effective interventions how many lives of newborn
babies can we save? The Lancet Series on Neonatal
Survival, March 2005.
5. Black R, Morris S, and Bryce J. Where and why are
10 million children dying every year? The Lancet,
Child Survival Series., Lancet 2003; 362: 65-71.
6. Pan American Health Organization (2003), Health
Statistics from the Americas, 2003 Edition. PAHO,
Washington DC, USA.
7. Organización Panamericana de la Salud (2002), Las
condiciones de salud en las Américas. Edición de
2002. OPS/OMS, Washington DC, USA, 2002.
8. UNICEF (2005). The State of the World’s Children
2005. Childhood under Threat. UNICEF, New York,
USA, December 2004.
9. Organización Panamericana de la Salud (2004). Ex-
clusión en salud en países de América Latina y el
Caribe. OPS/OMS, Washington, D.C., U. S. A., 2004.
10. OPS/OMS (2004). Los objetivos de desarrollo del
milenio y las metas de salud. 45º Consejo Directivo,
CD45/8. Washington, DC, septiembre de 2004.
11. AbouZahr C, Wardlaw T.(2001) Maternal mortal-
ity at the end of a decade: signs of progress? Bull
World Health Organ vol.79, no.6, Genebra, 2001.
12. Donoso S E, Oyarzún E E (2004). Análisis compar-
ativo de la mortalidad materna en Chile, Cuba y
Estados Unidos de Norteamérica. Rev. Chil Obstet
Ginecol 2004; 69(1): 14-18.
13. Rodríguez García J (2007). Desigualdades socio-
económicas entre departamentos y su asociación
con indicadores de mortalidad en Colombia en 2000.
Rev. Panam. Salud Pública. 2007;21(2/3):111-124.
14. Gattini C, Sanderson C, Castillo-Salgado C (2002).
Variación de los indicadores de mortalidad evitable
entre comunas chilenas como aproximación a las
desigualdades de salud. Rev. Panam. Salud Pública.
2002;12(6):454-461.
15. O’Rourke K,1 Howard-Grabman L, Seoane G (1998).
2 Impact of community organization of women on
perinatal outcomes in rural Bolivia. Revista Pana-
mericana de Salud Pública, vol. 3, no. 1, Washing-
ton, Jan. 1998.
16. WHO (2004) The importance of caregiver-child inter-
actions for the survival and healthy development of
young children. A review. WHO, Geneva, 2004.
17. United Nations (2006). The Millennium Develop-
ment Goals Report 2006. UN, New York, USA, 2006.
18. UNICEF (2006). A World Fit for Children. UNICEF,
New York, 2006.
19. Mason E. (2005) Child survival: time to match com-
mitments with action. The Lancet, Volume 365, Is-
sue 9467, Pages 1286-1288. The Lancet, 2005.
20. PAHO, UNFPA, UNIFEM. Gender (2006), Health and
Development in the Americas. Basic Indicators,
Washington, D. C., 2006.
21. Organización Mundial de la Salud (2000). Un en-
foque de la salud que abarca todo el ciclo vital.
Repercusiones para la capacitación. WHO/NMH/
HPS/00.2. OMS, Geneva, 2000.
22. Hill Z. (2004) Family and community practices that
promote child survival, growth and development:
A review of the evidence. WHO, Geneva, 2004.
28. 27
PrimeraSección
Nair Carrasco Sanez 1
, Sarah María Vega Sánchez2
, et al.
Objetivo: Recopilar y analizar información sobre la Lactancia Materna (LM) y Alimentación
Complementaria (AC) en el Perú, integrándola en un documento dirigido a orientar y sus-
tentar la convalidación, reformulación y/o formulación de políticas, estrategias y programas
enfocados a mejorar las prácticas de LM y AC, y contribuir a reducir la morbilidad, mortalidad
y malnutrición de lo niños en el Perú, sirviendo como línea de base para la implementación
del Plan de Acción de la Red Peruana de Lactancia Materna. Materiales y Métodos: El estu-
dio ha sido desarrollado en enero del 2001, tiene alcance nacional, revisándose una extensa
bibliografía,y entrevistas y encuestas a profesionales, informantes clave, madres embara-
zadas, puérperas y madres con hijos entre los seis meses y los dos años de edad, en Lima,
Arequipa, Cuzco, Iquitos y Chiclayo, y en 35 establecimientos de salud. También fueron
entrevistadas autoridades de gobierno, de universidades y de organizaciones no guberna-
mentales. Resultados: Lactancia Materna sigue siendo la forma preferida de alimentar a los
recién nacidos (97,8%); uno de cada dos niños contra uno de cada cinco en el año 1992 ini-
cia lactancia materna en la primera hora de vida. La prevalencia de lactancia materna exclu-
siva (LME) en menores de cuatro meses se ha incrementado de 40,3% a 72,5. El porcentaje
de niños de seis a nueve meses que reciben algún tipo de comida semisólida en las 24 horas
previas a la encuesta se ha incrementado de 62,4 % a 79,4%, aunque la alimentación com-
plementaria inadecuada sigue siendo el problema prioritario de la alimentación infantil en el
Perú. El calostro es más valorado y en general, la LM es a libre demanda. El conocimiento de
las madres acerca de la adecuada alimentación de sus bebes, no se expresa en su práctica,
influyendo negativamente el personal de salud y familiares. Conclusiones: El personal de
salud desconoce el Código de Comercialización de Sucedáneos, y en el Sector Privado las
violaciones del Código son numerosas. Respecto a 1992, la legislación laboral de protección
a la maternidad y la lactancia sufrió un importante retroceso. Entre 1994 y 1997 acreditaron
90 Hospitales Amigos de la Madre y de los 17 Hospitales evaluados, solo el Hospital Dos de
Mayo cumple con los diez pasos de esta iniciativa, y la mayoría (15/17) muestran retroceso
en particular con el paso 5 (sobre la enseñanza a las madres de cómo amamantar y cómo
mantener la producción de leche aun en casos en que sean separadas de sus hijos) . La currí-
cula universitaria de las Facultades de Medicina, Enfermería y Obstetricia han incrementado
su carga horaria en los temas e LM y AC, pero continúan siendo insuficientes. Existen ONG
que capacitan a promotores de salud y parteras tradicionales. Predominan los materiales de
comunicación producidos en Lima, principalmente folletos y afiches, en cantidad siempre
insuficiente. Se ha puesto énfasis en la distribución de alimentos, con nulo o escaso com-
ponente de educación nutricional. La mayor parte de esfuerzos de los Proyectos de ONG se
han orientado a LM más que a AC. En enero de 2001, el gobierno peruano ha nombrado una
Comisión multisectorial de Alimentación y Nutrición, que se espera, aborde integralmente
esta problemática.
Evaluación lactancia materna, alimentación complementaria.
1
Lic. Nut., IBCLC, Directora del Proyecto.
2
MD, Dr. Med. IBCLC, Asesora Técnica del estudio - Editora.
Evaluación de la situación de la lactancia materna y alimentación complementaria
en el Perú - 2001
Palabras Clave
Introducción
En el mundo moderno, las orga-
nizaciones internacionales reco-
nocen, cada vez más, la impor-
tancia de la nutrición como el eje
fundamental del desarrollo de las
naciones. En tal sentido, numero-
sos estudios han demostrado que
la lactancia materna y la alimenta-
ción en general, en los primeros
años de la vida del ser humano, re-
sultan esenciales para posibilitar el
óptimo desarrollo de los individuos
y por ende contribuir a la elevación
de los niveles y calidad de vida de
las personas en las sociedades a las
cuales pertenecen.
En el Perú, con una mortalidad
infantil de 33 x 1.000 nacidos vi-
vos y una tasa de malnutrición
crónica del 25%, se han realizado
numerosas investigaciones e im-
plementado diversas estrategias y
programas, destacando por su es-
caso número, las correspondientes
evaluaciones sobre los resultados e
impacto de los mismos. Al respec-
to, cabe mencionar que en 1992 se
realizó una investigación apoyada
por AID, cuyos resultados fueron
publicados en el documento “Eva-
luación de la Lactancia Materna y
Ablactancia en el Perú”.
Resumen
29. 28
Investigaciones Operativas en Salud y Nutrición de la Niñez en el Perú
Con el lanzamiento de la IHAMN por OMS y el UNICEF, a
partir del mismo año el Gobierno Peruano con el apoyo
de USAID/Perú, UNICEF y OPS/OMS, dio, por aproxima-
damente cinco años, un gran impulso a la implemen-
tación de estrategias dirigidas a mejorar y /o fortalecer
las prácticas idóneas de lactancia materna y alimenta-
ción infantil. En este contexto se considera pertinente
evidenciar los cambios producidos en la situación de la
lactancia materna en el Perú, en relación a la evaluación
que se efectuó en 1992 por AID/ Wellstart, con la finali-
dad de difundir los nuevos resultados para su utilización
en la implementación de políticas y estrategias costo-
efectivas, que contribuyan a elevar los niveles de salud
de los niños peruanos.
La presente investigación ha reunido y analizado informa-
ción sobre la situación de la LM y AC en el Perú. Asimismo
se ha buscado identificar factores que apoyan u obsta-
culizan su práctica idónea, con la finalidad de orientar y
sustentar la convalidación, reformulación y/o formulación
de políticas, estrategias y programas dirigidos a mejorar
las prácticas de lactancia materna y alimentación infantil,
contribuyendo de esta manera a reducir la morbilidad,
mortalidad y la malnutrición en el Perú.
De otro lado, el estudio representa un importante es-
fuerzo para evidenciar la interrelación entre las actitu-
des, el comportamiento y las necesidades de los distin-
tos actores sociales, gobierno, proveedores públicos y
privados, las/los usuarios y ciudadanos, los organismos
internacionales y la sociedad civil para generar una pro-
puesta capaz de conjugar y potenciar acciones dirigidas
a mejorar y dar sostenibilidad a los logros alcanzados.
Por tanto servirá también como excelente línea de base
para la implementación del Plan de Acción de la Red
Peruana de Lactancia Materna, organización concebida
desde la sociedad civil para contribuir a mejorar los ni-
veles y calidad de vida de los peruanos en especial de
los niños.
Materiales y métodos
Se trata de un estudio de carácter cuali-cuantitativo de
tipo descriptivo y analítico, de corte transversal, que
utilizó como marco de referencia para fines de respal-
dar el análisis comparativo, la investigación realizada en
1992 por Wellstart /USAID, sobre la Evaluación de la Lac-
tancia y Ablactancia en el Perú.
Con fines de recopilar la información necesaria para
el presente reporte se utilizaron diversos métodos. Se
convocó a un equipo de investigadores peruanos de
experiencia y reconocido prestigio profesional quienes
utilizaron dos tipos de fuentes de información:
Fuentes de información primarias, a través de entrevis-
tas a los proveedores de los servicios materno infantil, a
investigadores y coordinadores de programas relaciona-
dos con actividades de alimentación infantil, entrevistas
a informantes clave con trayectoria de trabajo en diver-
sos tópicos de estudio, visitas de observación sobre las
prácticas de lactancia materna en los servicios materno
infantiles y programas de salud y nutrición.
Fuentes de información secundarias, a través de la revi-
sión de información de datos publicados o por publicar
relativos a la Lactancia Materna y Alimentación Comple-
mentaria obtenidos a través de encuestas, estudios e
investigaciones. Se ha incluido una recopilación de in-
formación epidemiológica de publicaciones relevantes
(INEI, CUANTO, PRISMA, CENAN, y otras de similar nivel)
y revisión de bibliografía existente en relación a los te-
mas planteados.
Equipo de Investigación: Estuvo conformado por profe-
sionales de la salud de diversas disciplinas, incluyéndose
pediatras, nutricionistas, enfermeras, comunicadores y
especialistas en Epidemiología y Salud Pública. La gran
mayoría de miembros del equipo han participado acti-
vamente en la implementación de la Iniciativa de Hospi-
tales Amigos de las Madres y Niños en el Perú. Todos los
investigadores tienen un sólido prestigio por su trayec-
toria de compromiso con las acciones de promoción y
fomento de la lactancia materna y nutrición infantil en
el Perú. En el equipo hubo cinco Consultoras Internacio-
nales Certificadas en Lactancia Materna (IBCLC) y cinco
Asociados de Wellstart.
Cabe destacar que para el presente estudio se convocó y
se obtuvo la inmediata participación de la gran mayoría de
investigadores responsables de la Evaluación de la Lactan-
cia Materna y Ablactancia realizada en 1992 por Wellstart/
AID. Esta es una evidente demostración de cómo el com-
promiso e identificación de las personas son esenciales
para dar sostenibilidad e impulsar los cambios positivos,
siempre y cuando los organismos internacionales, como
en el caso de USAID/Perú, respondan a las iniciativas, que
como ésta tienen el propósito de contribuir, desde la
perspectiva del logro de una mejor salud, al bienestar y
desarrollo óptimo del país.
Visitas locales y entrevistas: El estudio tuvo alcance na-
cional. La investigación de campo se ejecutó en Lima,
y en Arequipa, Cuzco, Chiclayo e Iquitos, que son las
correspondientes capitales de cuatro departamentos:
Arequipa y Cuzco localizados en la sierra, Loreto en la
selva y Lambayeque en la costa. Se incluyó a Chiclayo,
capital de Lambayeque (no considerado en 1992), por
ser la ciudad más poblada de la costa norte del Perú.
30. 29
Investigaciones en salud y/o nutrición de la niñez
PrimeraSección
Con fines de comparar los hallazgos de 1992, el criterio
de selección para los establecimientos de salud, fue el
de incluir a todos los visitados en esa oportunidad y
adicionalmente a los hospitales −con mayor número de
partos−, centros y puestos de salud correspondientes
a MINSA y EsSALUD de Chiclayo. Se abarcó institucio-
nes públicas y privadas: Ministerio de Salud, Seguridad
Social (EsSALUD), Empresas Prestadoras de Salud, Clíni-
cas Particulares, Organizaciones No Gubernamentales,
facultades de: Medicina, Enfermería, Obstetricia y Nu-
trición, Organismos Internacionales, organizaciones co-
munales y otras instituciones de la sociedad civil.
Durante la primera semana de enero de 2001, se realizó
una encuesta en Arequipa, Iquitos, Cusco y Chiclayo, así
como en establecimientos de de Lima, donde se pudo
recoger información sobre el cumplimiento del Código
Internacional de Comercialización de Sucedáneos y del
Código y el Reglamento Peruano.
Se realizaron entrevistas con representantes de siete
facultades de Medicina, siete facultades de Enfermería,
cinco facultades de Obstetricia y cinco facultades de
Nutrición, pertenecientes a Universidades de Lima (4) y
del interior del país (8). Estos docentes eran principal-
mente docentes de los cursos con mayor carga hora-
ria en la temática de Lactancia Materna y Alimentación
Complementaria. En todos los casos se solicitó el Sylla-
bus de los cursos correspondientes para contrastar la
información y se especificó en los casos en que no se
logró obtener este documento
Resultados
Cuadro 1
Porcentaje de niños menores de cinco años que alguna vez
lactó
% de niños menores de
cinco años que alguna
vez lactó
ENDES
II
1991/92
ENDES
III
1996
ENDES
IV
2000
Lima 95,4 96,8 97,9
Urbana Costa 94,9 96,4 97,6
Urbana Selva 96,5 97,5 96,8
Urbana Sierra 97,1 96,5 98,3
Rural Costa 93,8 97,1 96,0
Rural Selva 98,1 97,0 98,5
Rural Siera 98,1 97,2 98,3
Total Nacional 96,5 96,8 97,8
Nº de niños menores de
cinco años
6.934 15.639 12.222
Fuentes: 1) Baioccchi et al. Evaluacion de la Lactancia Materna y Ablac-
tancia en el Perú. 1992. 2) Análisis propio de la ENDES III y ENDES IV.
La Lactancia Materna sigue siendo la forma preferida
de alimentar a los recién nacidos en el el Perú (97,8%).
En la actualidad, uno de cada dos niños contra uno de
cada cinco en el año 1992 inicia la lactancia materna
en la primera hora de vida. La prevalencia de lactancia
materna exclusiva (LME) en menores de cuatro meses
se ha incrementado de 40,3% a 72,5%, y en menores
de seis meses aumentó de 52,7% a 67,2%. La duración
mediana de LM casi se ha duplicado, de 2,5 meses a 4,1
meses. La tasa de continuación de LM al año de edad se
ha incrementado de 69% a 79%.
Cuadro 2
Porcentaje de niños amamantados de seis a nueve meses
con lactancia materna y alimentación complementaria de
cualquier comida semisólida en las últimas 24 horas
% de niños de seis a
nueve meses con lactancia
materna y alimentación
complementaria adecuada en
las últimas 24 horas
ENDES
II
1991/92
ENDES
III
1996
ENDES
IV
2000
Lima 57,4 81,2 81,0
Urbana Costa 62,9 82,6 77,0
Urbana Selva 61,1 82,0 78,3
Urbana Sierra 60,1 79,1 81,5
Rural Costa 60,6 77,0 91,1
Rural Selva 70,0 87,6 68,5
Rural Sierra 64,6 83,7 82,2
Total Nacional 62,4 82,7 79,3
Nº de niños menores de cinco
años
591 942 706
Fuente: Altobelli, L. Consolidación e Integración de la Nutrición en el sector
del Perú. Informe presentado a la Unidad de Modernización del Sub-sector
Público de Salud. Marzo 1999.
El porcentaje de niños de seis a nueve meses que recibe
algún tipo de comida semisólida en las 24 horas previas
a la encuesta ha mejorado de 62,4 % a 79,4%, pero hay
limitaciones para obtener esta información pues la en-
cuesta ENDES no especifica la cantidad, frecuencia ni
espesor de la comida recibida.
Cuadro 3
Conocimiento del Código Internacional y del Reglamento
Peruano
Código Internacional Reglamento Peruano
Arequipa:
Conoce
No conoce
6
19
2
22
Iquitos:
Conoce
No conoce
3
8
3
9
Tomando como referencia las preguntas realizadas en
Arequipa e Iquitos, se observa que la mayoría no co-
noce ni el Código Internacional ni el Reglamento Pe-
ruano.
31. 30
Investigaciones Operativas en Salud y Nutrición de la Niñez en el Perú
Cuadro 4
Hospitales evaluados según cumplimiento de los Diez Pasos hacia una Lactancia Exitosa*. Enero 2001
Establecimiento de Salud Cumple No Cumple
Total de Pasos
cumplidos
H. Cayetano Heredia 1,2,3,5,6,7,8,9 10 9
H. Santa Rosa 1,2,3,5,6,7,8,9 10 9
I. Materno Perinatal 1,2,3,7,8,9 4,5,6,10 6
H. San Bartolomé 1,2,3,4,6,7,8,9 5,10 8
H. Arzobispo Loayza 1,2,3,6,8,9 4,5,7,10 6
H. Dos de Mayo 1,2,3,5,6,7,8,9,10 0 10
H. Sergio Bernales 1,6,7,8,9 2,3,4,5,10 5
H. Guillermo Almenara 1,2,3,4,6,7,8,9,10 5 9
H. Edgardo Rebagliatti 1,3,10 2,4,5,6,7,8,9 3
H. Honorio Delgado 1,2,7,8,9 3,4,5,6,10 5
Hospital del Sur - EsSALUD 2,3,6,9,10 1,4,5,7,8, 5
Hospital Regional del Cusco 1,2,7,9 3,4,5,6,8,10 4
Hospital Lorena 1,4,6,7,8,9 2,3,5,510 6
Hospital Sur Este 1,6,7,8,9 2,3,4,5,10 5
Hospital Regional de Loreto 1,7,8,9 2,3,4,5,6,10 4
Hospital de Apoyo Iquitos 1,2,7,9 3,4,5,6,8,10 4
Hospital EsSALUD Iquitos 1,2,4,7 3,5,6,8,9,10 4
Hospital Regional Las Mercedes 1,3,6,7,8,9,10 2,4,5 7
Clínica Maison de Santé 3 1,2,4,5,6 1
Clínica Hogar de la Madre Ninguno Todos 0
*Los Diez Pasos para una Lactancia Exitosa son:
1. Disponer de una política relativa a la Lactancia Ma-
terna que sistemáticamente sea puesta en práctica
y conocida por todo el personal.
2. Capacitar a todo el personal que atiende madres y
niños.
3. Informar a todas las embarazadas acerca de los be-
neficios y manejo de la Lactancia.
4. Ayudar a las madres a que inicien la Lactancia den-
tro de la primera media hora después del parto.
5. Enseñar a las madres cómo amamantar y cómo
mantener su producción de leche aun en caso de
que sean separadas de sus hijos.
6. Dar a los Recién Nacidos únicamente Leche Materna
y ningún otro alimento o bebida a menos que sean
indicados médicamente.
7. Practicar el alojamiento conjunto para permitir a las
madres y sus bebés estar juntos las 24 horas.
8. Fomentar el amamantamiento a libre demanda.
9. No dar chupones ni biberones a los bebés amaman-
tados.
10. Ayudar al establecimiento de grupos de apoyo de
amamantamiento y canalizar o referir a las madres
a ellos al darse de alta del hospital o clínica.
Se observa que sólo un 6% cumplen los Diez Pasos ha-
cia una Lactancia Exitosa, un 24% cumple entre ocho y
nueve pasos, en tanto que la gran mayoría está entre
los cuatro y cinco pasos: 65%. Un 94% mantiene la apli-
cación del primer paso y un 71% del segundo paso.
32. 31
Investigaciones en salud y/o nutrición de la niñez
PrimeraSección
Cuadro 5
Horas de enseñanza de Lactancia Materna en facultades de Medicina
Universidad Horas Teóricas
Horas
Prácticas
Curso Principal Gineco Obstetricia Observaciones
Universidad Nacional Mayor de San
Marcos – UNMSM, Lima
– – Pediatría Gineco Obstetricia **
Universidad Peruana Cayetano
Heredia, Lima
4 4 Pediatría Anatomía Histofisiología **
Universidad Nacional Federico Villarreal
– UNFV, Lima
2.5 2.5 Pediatría Gineco Obstetricia **
Universidad San Martín de Porres,
Lima
12 * Pediatría Gineco Obstetricia **
Universidad Pedro Ruiz Gallo, Chiclayo 4 * Pediatría I Pediatría II **
UNAP, Iquitos 6.5 * Pediatría **
Universidad Nacional San Agustín,
Arequipa
* * Nutrición Básica **
* En el Syllabus no se especifica la carga horaria
** Horas prácticas integradas en la atención de pacientes
En el Cuadro 5 se observa que la enseñanza de LM y AC
se concentra en el curso de Pediatría (sexto año), pero
también se da algún contenido en los cursos de Gineco
Obstetricia, Anatomía e Histofisiología.
Cuadro 6
Horas de enseñanza de Lactancia Materna en facultades de Enfermería
Universidad Horas Teóricas
Horas
Prácticas
Curso Principal Otros cursos Observaciones
Universidad Peruana Cayetano
Heredia, Lima
8.5 *
Crecimiento y
Desarrollo (3º año)
Módulo de Enfermería **
Universidad Nacional Federico
Villarreal – UNFV, Lima
7.5 7.5
Crecimiento y
Desarrollo (3º año)
Educación Sanitaria
Pediatría Comunidad
**
Universidad Pedro Ruiz Gallo, Chiclayo
* (aprox.
11 horas)
*
Crecimiento y
Desarrollo (3º año)
Materno Perinatal
Pediatría
**
UNAP, Iquitos * *
Valoración del
Crecimiento y
Desarrollo Humano
Atención del Niño y el
Adolescente
Atención en Salud
Reproductiva
Nutrición y Dietética
**
Universidad Nacional San Antonio
Abad, Cusco
* *
Salud del Niño y el
Adolescente
Nutrición y Dietoterapia
Enfermería Pediátrica
Salud Reproductiva
**
Universidad Católica Santa María,
Arequipa
3 10
Crecimiento y
Desarrollo
Salud de la Madre y del
Recién Nacido
Salud Pública
**
* En el Syllabus no se especifica la carga horaria
** Horas prácticas integradas en la atención de pacientes
En las facultades de Enfermería (Cuadro 6), la enseñan-
za en LM se concentra en la asignatura de Crecimiento
y Desarrollo, pero también se dan en otras asignaturas a
lo largo de los años de estudios. En algunas universida-
des como la Universidad Pedro Ruiz Gallo y en la UNAP
no se pudo precisar en los syllabus la carga horaria teó-
rica ni práctica.
33. 32
Investigaciones Operativas en Salud y Nutrición de la Niñez en el Perú
Los cursos en los cuales se realiza la enseñanza de LM y
de AC son aquellos relacionados con la salud de la madre
y del niño: Atención Integral de la mujer, Neonatología,
Puericultura, Pediatría, Gineco Obstetricia.
Cuadro 8
Horas de enseñanza de Lactancia Materna en facultades de Nutrición
Universidad
Horas
Teóricas
Horas
Prácticas
Curso
Principal
Otros cursos Observaciones
Universidad Nacional Mayor
de San Marcos, Lima
* *
Dietética
Seminario
de Nutrición
Avanzada
Nutrición Básica
Crecimiento y Desarrollo
Consideran insuficiente para LM
Universidad Nacional
Federico Villarreal, Lima
* *
Dietética
Crecimiento y
Desarrollo
Bioquímica de la Nutrición
Duración Alimentaria y
Nutricional
No existe orden en los contenidos
en LM, los temas se repiten
UNIFE, Lima 10 15
Dietética
Crecimiento y
Desarrollo
Nutrición Básica
Educación Alimentaria
Los temas se repiten
Currículo en revisión
UP de Chiclayo * *
Crecimiento y
Desarrollo
Nutrición Materno Infantil
Tecnología Educativa
No presentaron Syllabus
Universidad San Agustín,
Arequipa
12 * Nutrición II
Dietoterapia del Niño
Salud Materno Infantil
* En el Syllabus no se especifica la carga horaria
Los cursos principales para abordar los temas de LM y AC son: Dietética, Nutrición y Crecimiento y Desarrollo, según se aprecia en el Cuadro 8.
Cuadro 7
Horas de enseñanza de Lactancia Materna en facultades de Obstetricia
Universidad
Horas
Teóricas
Horas
Prácticas
Curso Principal Otros cursos Observaciones
Universidad Nacional Mayor
de San Marcos, Lima
11 2 Obstetricia I, II, III
Atención Integral de la Mujer
Nutrición y Dietética
Neonatología
**
Universidad Particular de
Chiclayo
8 * Nutrición y Dietética
Neonatología
Puericultura
Pediatría
**
UPI de Iquitos 6 4 Obstetricia I y II **
UP Andina del Cuzco 4 10 Puericultura I Obstetricia II Más práctica clínica
Universidad Católica Santa
María, Arequipa
12 18
Puericultura I
(%º año)
Anatomía
Gineco Obstetricia
Obstetricia Fisiología
Materno Infantil
Más práctica clínica
* En el Syllabus no se especifica la carga horaria
** Horas prácticas integradas en la atención de pacientes
Discusión
a. Prácticas de alimentación infantil: Lactancia
materna y alimentación complementaria
Fuente de Información: ENDES I, II y III.
Lactancia materna: Se ha tenido avances significativos
en los indicadores de la lactancia materna que utiliza la
Organización Mundial de la Salud. La lactancia materna
sigue siendo la forma preferida, (97,9%) de alimentar a
los recién nacidos en el Perú. En la actualidad, aproxi-
madamente uno de cada dos niños contra uno de cada
cinco en 1992, inician la lactancia materna dentro de la
primera hora de vida.
La prevalencia de lactancia materna exclusiva (LME) en
menores de cuatro meses se ha incrementado de 40,3%
en 1992 a 72,5% en la ENDES 2000. La prevalencia de
LME en menores de seis meses se incrementó de 52,7%
en 1996 a 67,2% en el año 2000, según ENDES, la du-
ración mediana de la LM casi se ha duplicado pensando
en 2,15 meses a 4,1 meses en el 2000. La tasa de con-
tinuación de la LM al año de edad se ha incrementado
del 69 al 79.
34. 33
Investigaciones en salud y/o nutrición de la niñez
PrimeraSección
Alimentación complementaria: El porcentaje de niños de
seis a nueve meses que según ENDES recibieron algún
tipo de comida semisólida en las 24 horas previas a la en-
cuesta, ha mejorado de 62,4% en 1992 a 79,4% en la EN-
DES 2000, mostrando un discreto descenso con respecto
a ENDES 96, en que se reportó un 82,3%. Sin embargo,
es importante destacar que existen limitaciones en esta
información pues la ENDES no especifica la cantidad, fre-
cuencia ni espesor de la comida recibida, y en los párrafos
siguientes apreciaremos que las sopas y alimentos dilui-
dos siguen siendo, como en 1992, los preferidos por las
madres para ofrecer a sus pequeños hijos.
b. Conocimientos, creencias y prácticas sobre la
alimentación infantil
Aunque la actitud y conducta de las madres frente a la
alimentación de los niños es más positiva que en 1992,
la alimentación complementaria inadecuada sigue sien-
do el problema prioritario de la alimentación infantil en
el Perú. El calostro es más valorado y en general la lac-
tancia materna es a libre demanda. Los beneficios de la
lactancia materna son percibidos predominantemente
desde la perspectiva del bebé.
Las madres poseen conocimientos sobre la adecuada
alimentación complementaria, sin embargo estos no
se reflejan en sus prácticas. Saben que lo correcto es
iniciar con mazamorras y purés pero deciden empezar
con “sopas” para que el niño “no se atore”.
Las decisiones de las madres sobre la alimentación in-
fantil resultan de un proceso complementario en el
cual intervienen las recomendaciones del personal de
salud para la adopción de prácticas positivas pero tam-
bién influyen notablemente los consejos de la familia,
principalmente madres y suegras, que manejan un con-
junto de creencias erróneas, profundamente arraigadas
en nuestra cultura, que interfieren negativamente.
La introducción temprana de agüitas e infusiones con-
tinúa amenazando la exclusividad de la lactancia. La
ingestión de abundantes líquidos para favorecer la pro-
ducción de lecha es otra creencia difícil de erradicar. La
“preparación de los pezones” durante el embarazo es
aún percibida por las mujeres y ciertos profesionales de
salud como necesaria para facilitar la lactancia.
c. Políticas sobre lactancia materna y alimentación
complementaria
Fuente: Monitoreo en los años 1999 y 2000 y Trabajo de
Investigación 2001.
La propuesta de revisión de las normas de promoción
de la lactancia materna hecha en 1991 por el Ministerio
de Salud no se ratificó e incluso, durante el segundo
quinquenio de los 90, el Reglamento de 1982, intentó
ser derogado por presiones de las compañías comer-
cializadoras afortunadamente contrarrestadas por la
sociedad civil e internacional.
En 1992 el Ministerio de Salud a través del Subprograma
de Crecimiento y Desarrollo adopta la decisión de imple-
mentar la iniciativa de Hospitales Amigos de la Madre y
el Niño en el Perú; selecciona cuatro hospitales (Hospital
Nacional Cayetano Heredia, Hospital San Bartolomé, Ins-
tituto Materno Perinatal del MINSA y Hospital Nacional
Guillermo Almenara de EsSalud) reconociéndolos por su
larga y exitosa trayectoria a favor de la lactancia mater-
na en nuestro país. Instaura, asimismo la Celebración de
la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que en la
actualidad esta institucionalizada a nivel nacional.
A partir de 1993 y hasta 1996 se lleva a cabo la capa-
citación intensiva de profesionales de salud a través de
dos grandes proyectos, uno del MINSA auspiciado por
UNICEF y OPS / OMS y otro, el PROCAME de la UPCH
financiado por USAID / Perú.
En 1997, se promulga la Ley General de Salud la cual no
promociona explícitamente la lactancia materna en nin-
guno de sus artículos. De otro lado los monitoreos del
Código de Comercialización de Sucedáneos llevados a
cabo en 1999 y 2000 y los datos recogidos en la evalua-
ción 2001, muestran que las donaciones e infracciones
al Código en la mayoría de establecimientos de MINSA y
EsSalud, han disminuido de modo significativo.
Sin embargo, en provincias existe aún, por parte del
personal de salud, bastante desconocimiento del Códi-
go. En el Sector Privado las violaciones del mismo son
numerosas.
d. Legislación y trabajo de la mujer
Fuente: Encuesta Nacional de Hogares (1995- III Trimes-
tre, 1998-II trimestre, 1999 – III Trimestre.
Respecto a 1992, la legislación laboral de protección a
la maternidad y la lactancia sufrió un importante re-
troceso con la derogación de algunas leyes como la
que otorgaba una hora de lactancia hasta que el hijo
cumpliese un año de edad. La obligatoriedad de las em-
presas de contar con guarderías, ya no existe. Debido
a la presión de la sociedad civil en alianza con algunos
legisladores se han restablecido algunos de estos dere-
chos, como, por ejemplo, la hora diaria de lactancia, en
enero del 2001.
Las condiciones de trabajo de las mujeres respecto a
1992, han empeorado debido a la fuerte recesión, al